Cuando mi cuñado se caso con mi hermana, fueron a vivir a mi casa, ya que no tenían donde convivir. Yo era muy pequeña aun, era muy inocente y era virgen totalmente en todos los aspectos. Jamas me habían tocado ni nunca había tocado a alguien. No conocía esa sensación de calentura, de excitación.
La primera vez que sucedió pensé que era fruto de mi imaginación, pero para la segunda vez, me puse nerviosa. El estaba justo ahí, espiándome, masturbándose con mi ropa interior. Me asuste y me puse mas nerviosa cuando vi el tamaño de su pene, era enorme, nunca había presenciado algo igual. No sabia como reaccionar en esos momentos.
Una noche cualquiera, se metió en mi cuarto mientras trataba de dormir. Me puse muy nerviosa, pensé que si me hacia la dormida no pasaría nada. Pero me equivoque, empezó a tocarme, yo no sabia que hacer, como reaccionar. Me preguntaba porque lo hacia, hasta que supo como tocarme, como acariciarme y en ese momento mi cuerpo reacciono, hizo que mi cuerpo despertara sexualmente. Para la tercer noche, comenzó a meter sus dedos en mi vagina, se tocaba su pene y me metía los dedos en la boca. Desde ese día comencé a tener sueños húmedos.
Todo esto continuo un par de noches mas, hasta que mi cuñado y mi hermana decidieron mudarse. Por fin esto acabaría, pensé, ya que nunca le había dicho nada a nadie. Fueron varios meses los que habían pasado ya, hasta que me toco asistir a una fiesta cerca de su casa. Mi madre sugirió que fuera a la casa de mi hermana a visitarla y que luego fuera a la fiesta. Yo fui tranquila, ya que habían pasado varios meses y pensé que todo había pasado.
Llegue a su casa entre eso de las 10 y 10:30. Al llegar me atendió mi cuñado, EL, mi cuñado me dijo que mi hermana había salido a hacer compras, que entrara y la esperara. Mientras tanto me dio una limonada para que tomara. El estaba serio y normal así que no sospeche nada.
Luego, EL, prendió la televisión y comenzamos a conversar sentados en el sofá. Hasta que se empezó a acercar lentamente hacia mi. Finalmente quedo a mi lado, muy pegados, me tenia acorralada. Coloco su mano sobre mi rodilla y comenzó a acariciar mi pierna lentamente.
YO, me hice a un lado, pero EL nuevamente se acerco para tocarme, pero esta vez fue mas allá. Se abalanzo sobre mi, acostándome en el sofá. Lo tenia encima mio, con una mano me tomo de las muñecas y puso mis manos sobre mi cabeza. Con su otra mano, comenzó a acariciarme nuevamente las piernas.
Intente resistirme pero EL era muy grande y musculoso, yo era pequeña. No había nada que pudiera hacer, trataba de pedirle que me dejara pero solo volvieron mis nervios. Empece a sentir como levantaba la falda que llevaba y me acariciaba el resorte de la tanga.
Me seguía resistiendo, mientras EL besaba mi cuello y con su mano recorría mi cintura para llegar a mis senos. Mi cuerpo con sus caricias y besos empezó a aflojar, mis manos ya no hacían fuerza, así que me soltó. Llego a mis senos y los empezó a acariciar, con su otra mano acariciaba mi culo por encima de mi tanga.
YO pedía que pare, pero mas que suplicas eran gemidos. Hasta que se lanzo para darme un beso. El control fue de EL, yo era inexperta totalmente, solo al besarlo le agarre la cabeza como abrazándolo. El se movió y dijo: Al fin cumpliré mi sueño de hace años!
Estaba sin aliento, no sabia que decir, mi cuerpo ya no me pertenecía, le pertenecía a EL. Estaba caliente, temblando y sentía en mi tanga humedad. EL se levanto, dejándome tumbada en el sillón, se arrodillo, me abrió las piernas, movió suavemente mi tanga y comenzó a chupar mi virgen vagina.
Empece a sentir esa electricidad en mi cuerpo, nunca había experimentado esa sensación, me gustaba. Abrí mis piernas mucho mas y agarre la cabeza de EL para que no salga de donde estaba. Sentía tanta corriente en mi cuerpo, que empece a sentir que quería hacer pis. Se lo comente a mi cuñado, pero EL no paro y aumento el ritmo. No pude aguantar mas y desahogue todo en su boca.
Quede exhausta, con mi respiración entrecortada, hasta que le dije:
YO: No podemos hacer esto, sos el esposo de mi hermana y yo...
EL se paro y respondió: Deseaba tu cuerpo desde la primera vez que te vi, hoy voy a ser mi sueño realidad, mañana sera otro día...
Estaba loca, quería para esto, estaba muy mal lo que estaba haciendo, pero quería mas.
Estaba sentada en el sofá cuando me dijo: "Se que lo has visto muchas veces, pero esta vez lo vas a probar!". Se bajo el cierre de su pantalón y saco afuera su enorme pene. Olía muy rico porque el siempre fue muy aseado y limpio. Era grande, muy grande y grueso, vaya que si. Nunca había visto uno tan de cerca, estaba sorprendida y asustada porque sabia que eso nunca podría entrar en mi. Pensé: "Esto me va a doler mucho"
Empezó a enseñarme como darle placer. Tomo mi mano y dijo: "Agárralo, tu cuerpo se amoldara a el". Lo tome entre mis manos y empece a acariciarlo, EL me decía: "Así nena, así.." . Luego me tomo de la cabeza y me dijo: "Abrí la boca bien grande". Lo hice, abrí la boca lo mas grande posible, cuando EL, clavo su enorme pene hasta el fondo de mi garganta. Hice arcadas pero EL me dijo: "Chupalo como si fuera un helado". Y así lo hice, sabia muy rico, era grande y palpitaba mucho. Yo estaba muy caliente, muy húmeda, ya no me importaba nada.
Mientras chupaba su enorme pene como podía, lo miraba con cara de deseo y miedo. Hasta que EL dijo: "Para o me vas hacer acabar". Me levanto, me saco la blusa que llevaba puesta, el sostén de mis tetas y la tanga de mi virgen vagina. Me dejo solo la falda que llevaba puesta. EL, estaba de pie y se comenzó a desnudar completamente.
Se recostó sobre la alfombra de la sala y me dijo: "Veni, sentate encima mio" . Fui y me senté sobre su abdomen, con una pierda de cada lado. Mi vagina sentía su torso y mis nalgas su miembro bien parado. Estaba totalmente entregada, no había marcha atrás, era suya completamente y EL finalmente lo iba a hacer. Recuerdo que me dijo:
EL: Te voy a coger como nunca lo volverán a hacer en tu vida pequeña, recordaras toda tu vida como perdiste tu virginidad.
YO: Mi hermana debe estar por regresar, paremos por favor.
EL: Ella no vendrá hasta mañana, se fue de viaje con sus amigas. Te dije eso para que entraras a casa.
Me levanto un poco de la cintura, colocándome debajo de su pene, sentía sus bolas en mi vagina. Me dijo: "Levántate un poco por favor". Lo hice, me coloco encima de EL, con la punta de su pene en la entrada de mi vagina. Sentía su cabeza rozarme, mis líquidos votaban encima de EL, haciendo que se pene se mojara.
Estaba muy caliente y feliz. Mi hermana no vendría hasta mañana y no se enteraría de nada. Iba a perder mi virginidad, lo miraba a los ojos emocionada, le dije:
YO: Quiero perder la virginidad con vos...
EL: Eso quería escuchar mi pequeña...
Coloco nuevamente la punta de su enorme pene en la entrada de mi virgen vagina. Cuando ya la tenia bien dura y sujetada con su mano, de un solo bajón me la hundió hasta el fondo.
Grite: "Ahhhhhhhh". Me dolió mucho. Sentía como su enorme pene rozaba con mi interior. Me seguía doliendo, vi y sentí como un hilo de sangre salia de mi cuerpo y lo manchaba a EL. EL gimió y me dijo: "Que apretadita que estas, que rico"
Cuando el dolor paso, volvió a levantarme nuevamente. Me saco su pene y lo volvió a meter. Tres veces mas, hasta que dijo: "Cabalgame mi amor". Y lo hice. El dolor pasaba y venia el placer, estaba gimiendo y mucho.
Luego, EL me tomo en sus brazos, me levanto y me acostó sobre el sofá. Abrió mis piernas llevándolas sobre sus hombros y me penetro fuerte con su enorme pene. Sus embestidas eran fuertes, letales, hasta el fondo. Me hacia el amor como nunca lo creí y yo soportaba como podía, me gustaba.
Durante unos largos minutos me siguió penetrando. Luego me paro y me llevo contra la pared, me penetro apoyada en ella. No resistí mas y me saco mi segundo orgasmo. EL también finalmente acabo, llenando mi cuerpo con toda su leche.
Me quede rendida, me tumbe en su cuerpo y me llevo al sofá a recostarme. Me trajo una limonada y me dijo:
EL: Si que sos deliciosa, que rico polvo...
YO: Me encanto, mi cuerpo me duele mucho, pero que placer sentí...
EL: Así sera cada vez que quieras bebe, porque desde este día seras mi amante. Tu cuerpo me encanta y con el tiempo se pondrá mas bueno, no te dejare ir.
Continuara....
La primera vez que sucedió pensé que era fruto de mi imaginación, pero para la segunda vez, me puse nerviosa. El estaba justo ahí, espiándome, masturbándose con mi ropa interior. Me asuste y me puse mas nerviosa cuando vi el tamaño de su pene, era enorme, nunca había presenciado algo igual. No sabia como reaccionar en esos momentos.
Una noche cualquiera, se metió en mi cuarto mientras trataba de dormir. Me puse muy nerviosa, pensé que si me hacia la dormida no pasaría nada. Pero me equivoque, empezó a tocarme, yo no sabia que hacer, como reaccionar. Me preguntaba porque lo hacia, hasta que supo como tocarme, como acariciarme y en ese momento mi cuerpo reacciono, hizo que mi cuerpo despertara sexualmente. Para la tercer noche, comenzó a meter sus dedos en mi vagina, se tocaba su pene y me metía los dedos en la boca. Desde ese día comencé a tener sueños húmedos.
Todo esto continuo un par de noches mas, hasta que mi cuñado y mi hermana decidieron mudarse. Por fin esto acabaría, pensé, ya que nunca le había dicho nada a nadie. Fueron varios meses los que habían pasado ya, hasta que me toco asistir a una fiesta cerca de su casa. Mi madre sugirió que fuera a la casa de mi hermana a visitarla y que luego fuera a la fiesta. Yo fui tranquila, ya que habían pasado varios meses y pensé que todo había pasado.
Llegue a su casa entre eso de las 10 y 10:30. Al llegar me atendió mi cuñado, EL, mi cuñado me dijo que mi hermana había salido a hacer compras, que entrara y la esperara. Mientras tanto me dio una limonada para que tomara. El estaba serio y normal así que no sospeche nada.
Luego, EL, prendió la televisión y comenzamos a conversar sentados en el sofá. Hasta que se empezó a acercar lentamente hacia mi. Finalmente quedo a mi lado, muy pegados, me tenia acorralada. Coloco su mano sobre mi rodilla y comenzó a acariciar mi pierna lentamente.
YO, me hice a un lado, pero EL nuevamente se acerco para tocarme, pero esta vez fue mas allá. Se abalanzo sobre mi, acostándome en el sofá. Lo tenia encima mio, con una mano me tomo de las muñecas y puso mis manos sobre mi cabeza. Con su otra mano, comenzó a acariciarme nuevamente las piernas.
Intente resistirme pero EL era muy grande y musculoso, yo era pequeña. No había nada que pudiera hacer, trataba de pedirle que me dejara pero solo volvieron mis nervios. Empece a sentir como levantaba la falda que llevaba y me acariciaba el resorte de la tanga.
Me seguía resistiendo, mientras EL besaba mi cuello y con su mano recorría mi cintura para llegar a mis senos. Mi cuerpo con sus caricias y besos empezó a aflojar, mis manos ya no hacían fuerza, así que me soltó. Llego a mis senos y los empezó a acariciar, con su otra mano acariciaba mi culo por encima de mi tanga.
YO pedía que pare, pero mas que suplicas eran gemidos. Hasta que se lanzo para darme un beso. El control fue de EL, yo era inexperta totalmente, solo al besarlo le agarre la cabeza como abrazándolo. El se movió y dijo: Al fin cumpliré mi sueño de hace años!
Estaba sin aliento, no sabia que decir, mi cuerpo ya no me pertenecía, le pertenecía a EL. Estaba caliente, temblando y sentía en mi tanga humedad. EL se levanto, dejándome tumbada en el sillón, se arrodillo, me abrió las piernas, movió suavemente mi tanga y comenzó a chupar mi virgen vagina.
Empece a sentir esa electricidad en mi cuerpo, nunca había experimentado esa sensación, me gustaba. Abrí mis piernas mucho mas y agarre la cabeza de EL para que no salga de donde estaba. Sentía tanta corriente en mi cuerpo, que empece a sentir que quería hacer pis. Se lo comente a mi cuñado, pero EL no paro y aumento el ritmo. No pude aguantar mas y desahogue todo en su boca.
Quede exhausta, con mi respiración entrecortada, hasta que le dije:
YO: No podemos hacer esto, sos el esposo de mi hermana y yo...
EL se paro y respondió: Deseaba tu cuerpo desde la primera vez que te vi, hoy voy a ser mi sueño realidad, mañana sera otro día...
Estaba loca, quería para esto, estaba muy mal lo que estaba haciendo, pero quería mas.
Estaba sentada en el sofá cuando me dijo: "Se que lo has visto muchas veces, pero esta vez lo vas a probar!". Se bajo el cierre de su pantalón y saco afuera su enorme pene. Olía muy rico porque el siempre fue muy aseado y limpio. Era grande, muy grande y grueso, vaya que si. Nunca había visto uno tan de cerca, estaba sorprendida y asustada porque sabia que eso nunca podría entrar en mi. Pensé: "Esto me va a doler mucho"
Empezó a enseñarme como darle placer. Tomo mi mano y dijo: "Agárralo, tu cuerpo se amoldara a el". Lo tome entre mis manos y empece a acariciarlo, EL me decía: "Así nena, así.." . Luego me tomo de la cabeza y me dijo: "Abrí la boca bien grande". Lo hice, abrí la boca lo mas grande posible, cuando EL, clavo su enorme pene hasta el fondo de mi garganta. Hice arcadas pero EL me dijo: "Chupalo como si fuera un helado". Y así lo hice, sabia muy rico, era grande y palpitaba mucho. Yo estaba muy caliente, muy húmeda, ya no me importaba nada.
Mientras chupaba su enorme pene como podía, lo miraba con cara de deseo y miedo. Hasta que EL dijo: "Para o me vas hacer acabar". Me levanto, me saco la blusa que llevaba puesta, el sostén de mis tetas y la tanga de mi virgen vagina. Me dejo solo la falda que llevaba puesta. EL, estaba de pie y se comenzó a desnudar completamente.
Se recostó sobre la alfombra de la sala y me dijo: "Veni, sentate encima mio" . Fui y me senté sobre su abdomen, con una pierda de cada lado. Mi vagina sentía su torso y mis nalgas su miembro bien parado. Estaba totalmente entregada, no había marcha atrás, era suya completamente y EL finalmente lo iba a hacer. Recuerdo que me dijo:
EL: Te voy a coger como nunca lo volverán a hacer en tu vida pequeña, recordaras toda tu vida como perdiste tu virginidad.
YO: Mi hermana debe estar por regresar, paremos por favor.
EL: Ella no vendrá hasta mañana, se fue de viaje con sus amigas. Te dije eso para que entraras a casa.
Me levanto un poco de la cintura, colocándome debajo de su pene, sentía sus bolas en mi vagina. Me dijo: "Levántate un poco por favor". Lo hice, me coloco encima de EL, con la punta de su pene en la entrada de mi vagina. Sentía su cabeza rozarme, mis líquidos votaban encima de EL, haciendo que se pene se mojara.
Estaba muy caliente y feliz. Mi hermana no vendría hasta mañana y no se enteraría de nada. Iba a perder mi virginidad, lo miraba a los ojos emocionada, le dije:
YO: Quiero perder la virginidad con vos...
EL: Eso quería escuchar mi pequeña...
Coloco nuevamente la punta de su enorme pene en la entrada de mi virgen vagina. Cuando ya la tenia bien dura y sujetada con su mano, de un solo bajón me la hundió hasta el fondo.
Grite: "Ahhhhhhhh". Me dolió mucho. Sentía como su enorme pene rozaba con mi interior. Me seguía doliendo, vi y sentí como un hilo de sangre salia de mi cuerpo y lo manchaba a EL. EL gimió y me dijo: "Que apretadita que estas, que rico"
Cuando el dolor paso, volvió a levantarme nuevamente. Me saco su pene y lo volvió a meter. Tres veces mas, hasta que dijo: "Cabalgame mi amor". Y lo hice. El dolor pasaba y venia el placer, estaba gimiendo y mucho.
Luego, EL me tomo en sus brazos, me levanto y me acostó sobre el sofá. Abrió mis piernas llevándolas sobre sus hombros y me penetro fuerte con su enorme pene. Sus embestidas eran fuertes, letales, hasta el fondo. Me hacia el amor como nunca lo creí y yo soportaba como podía, me gustaba.
Durante unos largos minutos me siguió penetrando. Luego me paro y me llevo contra la pared, me penetro apoyada en ella. No resistí mas y me saco mi segundo orgasmo. EL también finalmente acabo, llenando mi cuerpo con toda su leche.
Me quede rendida, me tumbe en su cuerpo y me llevo al sofá a recostarme. Me trajo una limonada y me dijo:
EL: Si que sos deliciosa, que rico polvo...
YO: Me encanto, mi cuerpo me duele mucho, pero que placer sentí...
EL: Así sera cada vez que quieras bebe, porque desde este día seras mi amante. Tu cuerpo me encanta y con el tiempo se pondrá mas bueno, no te dejare ir.
Continuara....
1 comentarios - Incestos de Michelle: Mi cuñado me desvirga