Un sábado como tantos otros, nos fuimos con mis amigas para el boliche. Era el grupito de siempre, entre ellas mi mejor amiga Agustina. En una de las rondas que hacíamos con Agus, nos encontramos con su primito.
Hacía como 4 años que no lo veía y en ese momento estaba por terminar el colegio (nosotras ya lo habíamos terminado hace 2 años) y había crecido... bastante! Encima jugaba al basquet, medía como 1.90m y se notaba que había desarrollado los músculos muy bien. Yo me quedé media embobada mirándolo mientras ella saludaba a los amigos y charlaba un rato con ellos.
Cuando se van, agarro del brazo a Agus:
- Ey... volvamos a buscar a tu primo, boluda!! está re bueno!
- Pará loca!! es un pendejo!!
- No te vengas a poner en prima celosa querés! vamos a buscarlo!
- Nooo... que después me tengo que bancar a los pajeros de los amigos. Me rompen las bolas, son re pesados, están todos re calientes
- Daaaaaaaaaaleee!!!- le hacía pucherito mientras la zamarreaba un rato haciéndole un escena de caprichosa
- Nooooooooooo!
- Agustina, vos te garchás a mi hermano!!!!!!!!! hija de puta me lo debés! estaríamos a mano! - (ese episodio, fue uno de mis primeros relatos)
- Qué tiene que ver tu hermano????
Me di vuelta y me fui enojada. Fui a la barra, compré un trago y empecé a dar vueltas sola. Hasta que lo encontré. Me hice la boluda, y le pregunté si había visto a Agus que me había perdido. Empezamos a hablar. Ahí me contó que había empezado basquet. Yo soy petisa, y aun con tacos se tenía que agachar a hablarme. Solita lo fui llevando hacia un rincón. Me apoyé en la pared y seguimos hablando.
Pero el pendejo no avanzaba, así que lo tuve que avivar un poquito. En medio de la charla, le agarré la cabeza y le comí la boca. Se notaba la inexperiencia en sus besos. De a poquito fui educando su lengua para que hiciera lo que yo quisiera. Metí la mano por abajo de su camisa, tocando su espalda trabajada y durita. Eso me ponía a mil. Pero él era muy educado, sus manos solo se quedaban en mi cintura.
Dejé de besarlo para mirarlo a la cara...
- Qué pasa?- me dijo - lo hago mal?
- No!!! porqué decís eso!- le dije dándole un beso
- Pasa que... estuve con muy pocas pibas, entonces no se si lo hago bien o mal... que se yo. Soy medio boludo todavía! Y vos sos más grande.
- En serio??? pero con el lomazo que tenés!!!
- Si, que se yo. Soy medio quedado, no se... encima este año me voy a Bariloche y... - se quedó callado, aunque me imaginé que frase seguía.
- .... Nunca?
- No.- me dijo, agachando la cabeza. Levanté su cara y lo seguí besando.
- No pasa nada. Hoy vas a aprender algunas cosas.
Lo agarré de la mano y lo llevé afuera. "Donde vamos?" me preguntó. No respondí. Salimos y cruzamos la calle. En frente del boliche, había (hay todavía) un telo. Entramos. La carita de miedo y sorpresa aun hoy la recuerdo.
Entramos a la habitación. El pendejo miraba todo. Como juguete nuevo, se puso a tocar los controles de las luces. Mientras yo, de conchuda, le mandaba un mensaje a mi amiga: "Me fui en frente con tu primo. Nos vemos a la salida". Nos teníamos que ver a la salida, porque nos volvíamos juntas (me iba a quedar a dormir en su casa).
Lo senté en el borde de la cama. Le saqué la camisa y trepándome arriba le acaricié todo el cuerpo mientras lo besaba apasionadamente. Bajé con mis manos hasta el cinto. Lo desabroché despacio y le abrí el pantalón. Me arrodillé en el piso, y y terminé de sacarle todo el jean.
Su pija aún estaba dormida, tal vez por los nervios. Por mi, mejor, me encanta la idea de pararla y sentir como crece en mi boca mientras la chupo. Y eso hice. La agarré de la base y me la metí en la boca. La pajeaba mientras con mi lengua recorría su cabeza.
De a poco empezó a crecer. Más sorprendida quedé, cuando su pija estaba ya a un tamaño importante, pero aún no estaba dura (o sea, le faltaba crecer más). Seguí chupando con más ganas, para ver hasta donde era capaz de crecer esa pija. Y seguía creciendo! "Boludo, no termina más de crecer esto??" dije sorprendida... "hasta los 21 cm crece" me dijo el pendejo que ya estaba casi acostado en la cama con la cabeza tirada para atrás disfrutando su primer pete. Por poquito y no supera la pija más grande que me había comido hasta ese momento pensaba.
Después de mucho trabajo, calculo que los nervios jugaron un poco en contra, la pija del pendejo quedó totalmente tiesa, lista para ser usada. Las ganas que tenía de treparme arriba y cabalgar, eran impresionantes, pero como era su primera vez, seguro me movía 2 veces y me acababa pobrecito. Así que me acosté, me saqué el vestido que tenía y quedé totalmente desnuda para él.
Se subió arriba mío, y con sus manos empezó a recorrer mi cuerpo. "Tocame ahí" le dije, llevándole la mano a mi conchita, totalmente mojada y hasta dilatada, esperando su pija. Con miedo empezó a mover su mano. Yo fui guiándolo al principio y después lo dejé que siguiera, para ocuparme de mis tetas.
"Cogeme ya" le ordené. Con torpeza apuntó su pija y fue metiéndola de a poco. La carita de felicidad, sorpresa, emoción que tenía era impresionante! "mmmm ay si movete daleee" le decía. Me encantaba la sensación de ser la primera. Con miedo empezó a moverse despacio. Lo dejé que se acostumbrara a lo nuevo.
Sacaba todo el largo de su pija y la volvía a meter entera. No terminaba más de entrar!! me encantaba. Aunque seguía moviéndose despacio, no tardó en decirme "no aguanto más.. voy a terminar". Lo hice sentar sobre mi panza, con la pija apuntando a mis tetas, la movió un poco y enseguida salieron chorros de leche para todos lados que me mojaron mis tetas, mi cara, mi pelo... todo.
Agarré su pija y la limpié con la lengua. Seguía saliendo leche todavía. Mientras me desparramaba su semen por todo mi cuerpo, seguí chupando su verga hasta dejarla limpia, pero aún seguía durísima.
"Te bancás otro?" le dije. "Si.. creo que si". No terminó de decirlo, que lo tiré en la cama y me senté arriba de su pija. Empecé a moverme, pero esta vez, al ritmo que me gusta a mi. El pibe tenía una cara de miedo. yo le clavé la mirada mordiéndome los labios. Me veía mover salvajemente, gritar, tocarme... estaba desatadísima y él asustado. Estaba siendo protagonista de su propia peli porno.
Me tenía agarrada del culo. Yo me movía con su pijón totalmente enterrado en mi concha. Con cada sentada, lo sentía hasta el estómago más o menos. Me detuve y me puse en 4 en la cama. Era su turno.
Abrí bien las piernas y paré bien la cola. El pibe se puso atrás mío. Y de a poco la enterró. "Dame sin piedad, ok?" le dije. Levanté mi cabeza. En la cabecera de la cama había un espejo. Pude ver mi cara cubierta con mis pelos totalmente despeinados. Mi cola parada. Y el nene atrás, que empezaba a moverse torpemente. Lo hice parar, y empecé a moverme yo.
Se quedó quietito, dejando que mi cola fuera para adelante y atrás clavándose su pija. No despegaba sus ojos del espectáculo que le brindaba. Yo seguía mirando al pibito todo marcado atrás mío y me mojaba aún más. Me temblaron las piernas y me rendí acostada en la cama para disfrutar terrible orgasmo.
Haciendo fuerzas con las rodillas, levanté mis caderas. "Ponela" le dije. Me clavó la verga, yo había dejado las piernas cerradas así que el roce con mi concha ahora era mucho mayor. "Ahora si movete vos dale!" le gritaba. Se movía un poco... "MAS FUERTE PENDEJO DALE!" le pegué un grito que retumbó en toda la habitación y lo hizo detener. "Daleeee haceme mierda daleee" seguía gritando, mientras golpeaba la almohada. El pendejo agarró un ritmo feroz enterrando su verga y golpeando su cuerpo contra el mío cada vez más violentamente.
Cuando enganchó el ritmo, toda su energía y fuerza se concentraron en romperme la concha. Me tuve que agarrar de las sábanas para que no moverme tanto y salir disparada contra la pared. "siii dale seguí asiii rompeme pendejo daleee!". Ahora se lo notaba totalmente compenetrado con el garche. Me sentía realizada y disfrutaba a pleno de toda esa energía adolescente destruirme sin piedad.
Empezó a gemir y yo no lo dudé: "acabame en la cola", le supliqué. Dicho esto, sacó su pija y largó otro gran chorro de leche caliente en mi espalda. "Desparramame la lechita por la espalda" le dije, mientras apoyaba mi cabeza en la almohada. Dudó un poco, hasta que se animo y con sus manos me masajeó la espalda distribuyendo su abundante acabada. Me di vuelta y lo acosté en la cama. Quedó mirando el cielo con una carita de feliz cumple inolvidable. "Descansá un poquito, que en un ratito seguimos..."
Cuando agarré el celular, tenía un mensaje de Agustina puteándome y diciéndome que se volvía sola. Ya no me importaba nada. Después me enteré, que los amigos del primo la encontraron y le preguntaron por él. Y no se los pudo sacar más de encima y se los tuvo que chapar (no se si a uno o a todos.. nunca me lo contó y tampoco me animé a preguntar).
Garchamos una vez más, hice que me chupara la concha (fundamental jaja), y se terminó el turno. No nos vimos hasta que volvió de Bariloche. Tal como un alumno le va a contar a su profesora particular que lo preparó para un examen, me vino a contar sus experiencias en el viaje.
Le fue muy bien, pero las pibas eran muy "tiernitas", según él. A una le quiso hacer lo mismo que me hizo a mi, de acabar en el cuerpo y desaparramarle la leche; y la pendeja lo re puteó y lo sacó cagando (pobre jaja). Como premio, le regalé varias noches más (con fines académicos, solamente para evaluar su progreso)
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Hacía como 4 años que no lo veía y en ese momento estaba por terminar el colegio (nosotras ya lo habíamos terminado hace 2 años) y había crecido... bastante! Encima jugaba al basquet, medía como 1.90m y se notaba que había desarrollado los músculos muy bien. Yo me quedé media embobada mirándolo mientras ella saludaba a los amigos y charlaba un rato con ellos.
Cuando se van, agarro del brazo a Agus:
- Ey... volvamos a buscar a tu primo, boluda!! está re bueno!
- Pará loca!! es un pendejo!!
- No te vengas a poner en prima celosa querés! vamos a buscarlo!
- Nooo... que después me tengo que bancar a los pajeros de los amigos. Me rompen las bolas, son re pesados, están todos re calientes
- Daaaaaaaaaaleee!!!- le hacía pucherito mientras la zamarreaba un rato haciéndole un escena de caprichosa
- Nooooooooooo!
- Agustina, vos te garchás a mi hermano!!!!!!!!! hija de puta me lo debés! estaríamos a mano! - (ese episodio, fue uno de mis primeros relatos)
- Qué tiene que ver tu hermano????
Me di vuelta y me fui enojada. Fui a la barra, compré un trago y empecé a dar vueltas sola. Hasta que lo encontré. Me hice la boluda, y le pregunté si había visto a Agus que me había perdido. Empezamos a hablar. Ahí me contó que había empezado basquet. Yo soy petisa, y aun con tacos se tenía que agachar a hablarme. Solita lo fui llevando hacia un rincón. Me apoyé en la pared y seguimos hablando.
Pero el pendejo no avanzaba, así que lo tuve que avivar un poquito. En medio de la charla, le agarré la cabeza y le comí la boca. Se notaba la inexperiencia en sus besos. De a poquito fui educando su lengua para que hiciera lo que yo quisiera. Metí la mano por abajo de su camisa, tocando su espalda trabajada y durita. Eso me ponía a mil. Pero él era muy educado, sus manos solo se quedaban en mi cintura.
Dejé de besarlo para mirarlo a la cara...
- Qué pasa?- me dijo - lo hago mal?
- No!!! porqué decís eso!- le dije dándole un beso
- Pasa que... estuve con muy pocas pibas, entonces no se si lo hago bien o mal... que se yo. Soy medio boludo todavía! Y vos sos más grande.
- En serio??? pero con el lomazo que tenés!!!
- Si, que se yo. Soy medio quedado, no se... encima este año me voy a Bariloche y... - se quedó callado, aunque me imaginé que frase seguía.
- .... Nunca?
- No.- me dijo, agachando la cabeza. Levanté su cara y lo seguí besando.
- No pasa nada. Hoy vas a aprender algunas cosas.
Lo agarré de la mano y lo llevé afuera. "Donde vamos?" me preguntó. No respondí. Salimos y cruzamos la calle. En frente del boliche, había (hay todavía) un telo. Entramos. La carita de miedo y sorpresa aun hoy la recuerdo.
Entramos a la habitación. El pendejo miraba todo. Como juguete nuevo, se puso a tocar los controles de las luces. Mientras yo, de conchuda, le mandaba un mensaje a mi amiga: "Me fui en frente con tu primo. Nos vemos a la salida". Nos teníamos que ver a la salida, porque nos volvíamos juntas (me iba a quedar a dormir en su casa).
Lo senté en el borde de la cama. Le saqué la camisa y trepándome arriba le acaricié todo el cuerpo mientras lo besaba apasionadamente. Bajé con mis manos hasta el cinto. Lo desabroché despacio y le abrí el pantalón. Me arrodillé en el piso, y y terminé de sacarle todo el jean.
Su pija aún estaba dormida, tal vez por los nervios. Por mi, mejor, me encanta la idea de pararla y sentir como crece en mi boca mientras la chupo. Y eso hice. La agarré de la base y me la metí en la boca. La pajeaba mientras con mi lengua recorría su cabeza.
De a poco empezó a crecer. Más sorprendida quedé, cuando su pija estaba ya a un tamaño importante, pero aún no estaba dura (o sea, le faltaba crecer más). Seguí chupando con más ganas, para ver hasta donde era capaz de crecer esa pija. Y seguía creciendo! "Boludo, no termina más de crecer esto??" dije sorprendida... "hasta los 21 cm crece" me dijo el pendejo que ya estaba casi acostado en la cama con la cabeza tirada para atrás disfrutando su primer pete. Por poquito y no supera la pija más grande que me había comido hasta ese momento pensaba.
Después de mucho trabajo, calculo que los nervios jugaron un poco en contra, la pija del pendejo quedó totalmente tiesa, lista para ser usada. Las ganas que tenía de treparme arriba y cabalgar, eran impresionantes, pero como era su primera vez, seguro me movía 2 veces y me acababa pobrecito. Así que me acosté, me saqué el vestido que tenía y quedé totalmente desnuda para él.
Se subió arriba mío, y con sus manos empezó a recorrer mi cuerpo. "Tocame ahí" le dije, llevándole la mano a mi conchita, totalmente mojada y hasta dilatada, esperando su pija. Con miedo empezó a mover su mano. Yo fui guiándolo al principio y después lo dejé que siguiera, para ocuparme de mis tetas.
"Cogeme ya" le ordené. Con torpeza apuntó su pija y fue metiéndola de a poco. La carita de felicidad, sorpresa, emoción que tenía era impresionante! "mmmm ay si movete daleee" le decía. Me encantaba la sensación de ser la primera. Con miedo empezó a moverse despacio. Lo dejé que se acostumbrara a lo nuevo.
Sacaba todo el largo de su pija y la volvía a meter entera. No terminaba más de entrar!! me encantaba. Aunque seguía moviéndose despacio, no tardó en decirme "no aguanto más.. voy a terminar". Lo hice sentar sobre mi panza, con la pija apuntando a mis tetas, la movió un poco y enseguida salieron chorros de leche para todos lados que me mojaron mis tetas, mi cara, mi pelo... todo.
Agarré su pija y la limpié con la lengua. Seguía saliendo leche todavía. Mientras me desparramaba su semen por todo mi cuerpo, seguí chupando su verga hasta dejarla limpia, pero aún seguía durísima.
"Te bancás otro?" le dije. "Si.. creo que si". No terminó de decirlo, que lo tiré en la cama y me senté arriba de su pija. Empecé a moverme, pero esta vez, al ritmo que me gusta a mi. El pibe tenía una cara de miedo. yo le clavé la mirada mordiéndome los labios. Me veía mover salvajemente, gritar, tocarme... estaba desatadísima y él asustado. Estaba siendo protagonista de su propia peli porno.
Me tenía agarrada del culo. Yo me movía con su pijón totalmente enterrado en mi concha. Con cada sentada, lo sentía hasta el estómago más o menos. Me detuve y me puse en 4 en la cama. Era su turno.
Abrí bien las piernas y paré bien la cola. El pibe se puso atrás mío. Y de a poco la enterró. "Dame sin piedad, ok?" le dije. Levanté mi cabeza. En la cabecera de la cama había un espejo. Pude ver mi cara cubierta con mis pelos totalmente despeinados. Mi cola parada. Y el nene atrás, que empezaba a moverse torpemente. Lo hice parar, y empecé a moverme yo.
Se quedó quietito, dejando que mi cola fuera para adelante y atrás clavándose su pija. No despegaba sus ojos del espectáculo que le brindaba. Yo seguía mirando al pibito todo marcado atrás mío y me mojaba aún más. Me temblaron las piernas y me rendí acostada en la cama para disfrutar terrible orgasmo.
Haciendo fuerzas con las rodillas, levanté mis caderas. "Ponela" le dije. Me clavó la verga, yo había dejado las piernas cerradas así que el roce con mi concha ahora era mucho mayor. "Ahora si movete vos dale!" le gritaba. Se movía un poco... "MAS FUERTE PENDEJO DALE!" le pegué un grito que retumbó en toda la habitación y lo hizo detener. "Daleeee haceme mierda daleee" seguía gritando, mientras golpeaba la almohada. El pendejo agarró un ritmo feroz enterrando su verga y golpeando su cuerpo contra el mío cada vez más violentamente.
Cuando enganchó el ritmo, toda su energía y fuerza se concentraron en romperme la concha. Me tuve que agarrar de las sábanas para que no moverme tanto y salir disparada contra la pared. "siii dale seguí asiii rompeme pendejo daleee!". Ahora se lo notaba totalmente compenetrado con el garche. Me sentía realizada y disfrutaba a pleno de toda esa energía adolescente destruirme sin piedad.
Empezó a gemir y yo no lo dudé: "acabame en la cola", le supliqué. Dicho esto, sacó su pija y largó otro gran chorro de leche caliente en mi espalda. "Desparramame la lechita por la espalda" le dije, mientras apoyaba mi cabeza en la almohada. Dudó un poco, hasta que se animo y con sus manos me masajeó la espalda distribuyendo su abundante acabada. Me di vuelta y lo acosté en la cama. Quedó mirando el cielo con una carita de feliz cumple inolvidable. "Descansá un poquito, que en un ratito seguimos..."
Cuando agarré el celular, tenía un mensaje de Agustina puteándome y diciéndome que se volvía sola. Ya no me importaba nada. Después me enteré, que los amigos del primo la encontraron y le preguntaron por él. Y no se los pudo sacar más de encima y se los tuvo que chapar (no se si a uno o a todos.. nunca me lo contó y tampoco me animé a preguntar).
Garchamos una vez más, hice que me chupara la concha (fundamental jaja), y se terminó el turno. No nos vimos hasta que volvió de Bariloche. Tal como un alumno le va a contar a su profesora particular que lo preparó para un examen, me vino a contar sus experiencias en el viaje.
Le fue muy bien, pero las pibas eran muy "tiernitas", según él. A una le quiso hacer lo mismo que me hizo a mi, de acabar en el cuerpo y desaparramarle la leche; y la pendeja lo re puteó y lo sacó cagando (pobre jaja). Como premio, le regalé varias noches más (con fines académicos, solamente para evaluar su progreso)
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52 comentarios - Mi venganza con el primo de mi amiga
No se olvida mas!!!
Excelente relato!!
Gracias por compartir
gracias por comentar!
😞
gracias por comentar!
gracias por comentar! 😉
Impagable !
besos
- http://www.poringa.net/posts/relatos/2469672/En-la-previa-desvirgue-a-un-pibito.html
- http://www.poringa.net/posts/relatos/2491870/Estallo-el-verano-en-Funes-Dia-1-El-vecino.html
- http://www.poringa.net/posts/relatos/2510935/Mi-primo-cumplia-anos-pero-la-fiesta-la-tuvo-su-amigo.html
que los disfrutes!
22cm y si era gruesa es un muy buen tamaño.
si queres, te ayudo con la teoria, y vas a practicar con tus amigas 😛 para eso estan!
Ya empiezo a visitar a mis primas... quiero encontar si tiene una amiga como vos y que me enseña.
Van puntos para la Profesex.
Avisame cuando vuelvas a impartir clases, haber si intercambiamos conocimientos y te enseno sobre el arte del culeo x el anexo!
Besitos!
👏 👏 👏 👏