Lucas era un chico de apariencia común, algo tímido y no muy popular en el colegio. Solo tenía unos pocos amigos de los cuales muchos solo estaban interesados en su plata ya que la familia de Lucas era bastante bien acomodada. Por eso fue que cuando decidió festejar su cumpleaños número dieciocho a todo trapo, en su casa una tarde de diciembre muy pocos nos presentamos.
Éramos un curso de casi cuarenta alumnos, sin embargo solo fuimos uno 8 chicos (y la verdad no por apreciarlo demasiado si no por su increíble casa quinta). Entre ellos estaba Juan, Seba, Nico, Leo, Mati, Sergio, quien les habla y Violeta.
Viole era la típica piba del colegio que todos se quieren coger, con fama de trola y repleta de rumores que nunca se pueden comprobar. Era la típica piba de 1.65 metros de altura, bajita con una cola increíble y unos pechos no tan grandes pero si bien paraditos. El piercing en la nariz y el ombligo eran infaltables y el pelo lacio y teñido de rojo la hacían lucir despampanante. Violeta era la clásica chica que le gustaba estar rodeada de chicos e histeriquearles por lo cual esa tarde de diciembre fue sin dudas el día soñado para ella. Rodeada de chicos que habían optado por ir al cumple años de un compañero al que apenas se bancaban con el único fin de ver mujeres en bikini tomando sol y mojadas en la pileta enorme de la quinta de Lucas. Por eso es que cuando Violeta se apareció todos nosotros nos sentimos aliviados al no ser “puro huevo” y al mismo tiempo Viole tendría toda la atención y el histeriqueo que quisiera.
Al llegar Lucas nos dio la bienvenida y enseguida entramos a la quinta. Esta era enorme y lo mejor, ningún adulto cerca para controlarnos. Aparentemente el padre estaba de viaje de negocios y la madre muy ocupada engañando al marido como para aparecerse por la fiesta de su Hijo. Algo de pena me daba, pero la actitud creída y pedante de Lucas hacían que la lastima casi desapareciera.
La primera en entrar a la pileta fue Violeta quien sin dudarlo se saco su mini short y su remera de AC/DC. Ella lucia una bikini negra tan diminuta que fácilmente pasaría como una tanga. Ella dejaba ver sus tatuajes en el cuello (Un ojo egipcio) y en la parte inferior de la espalda (una especie de enredadera con flores)
Tirándose de cabeza nos invito a todos a meternos pero la erección de cada uno de nosotros nos impedía desvestirnos. Yo fui el primero en animarse, dejando que mi pija se marcara bien sobre mi maya azul. Vi a violeta sonreír y me di cuenta de que estaba muy satisfecha con el resultado que había logrado.
Con el tiempo todos entraron al agua y jugueteamos con Viole. Agarrándola y tirándola al agua (siempre manoteando algo cuando se podía) sin embargo cuando alguien intentaba algo un poco más atrevido ella comenzaba sus típicos histeriqueos y se alejaba.
Al parecer ella solamente se dejaría toquetear y manosear y nosotros realmente estábamos demasiado calientes para dejarlo todo ahí.
Entonces fue cuando Lucas empezó a ganarse nuestro respeto lentamente:
-Lucas: chicos, miren lo que traje-grito mientras arrastraba una heladera repleta de cerveza y Dr. Lemon.
Mientras todos nos servíamos y bebíamos, notamos como Violeta cada vez más empezaba a desinhibirse al punto de empezar a bailar de manera sexy cuando sonaba AC/DC muy inteligentemente puesta por Leo quien vio su remera y su fanatismo. Tal era la excitación y la emoción de ella que el baile se transformo en un franeleo sobre la Pija de Seba quien le manoseaba los pechos mientras ella seguía el ritmo de la música. Todo parecía ir muy bien gracias al Alcohol, sin embargo cuando alguien intentaba besarla o pasar por sobre su bikini ella se alejaba protestando. Parecía que nada iba a funcionar.
Así pasaron varias horas y todos comenzamos a resignarnos. Ella seguía tomando y se notaba que estaba bastante alegre sin embargo, pese a sacarse el corpiño y tirarse boca abajo a tomar sol, su histeriqueo parecía no acabar.
-Viole: ¿alguien me pasa crema? Pero por la espalda tarado, no me voy a dar vuelta no seas pajero!!
Luego de ese comentario hacia Mati todos nos dimos cuenta de que hasta allí llegaría el asunto y decidimos hacer lo que cualquier chico con una playstation 3 haría. Jugar un torneo de Pes.
Todos entonces nos alejamos de la pileta y fuimos al plasma de 45 pulgadas a elegir los equipos un tanto decepcionados y con un dolor en los huevos que era casi intolerante.
Pero entonces se hizo la luz, éramos tan jóvenes que no nos dimos cuenta hasta ese momento. A Una histérica no tenes que darle bola, ignórala, no te veas desesperado, esa lección la aprendimos aquel día cuando violeta se vio rodeada de nadie…sola y semi desnuda y sin nadie que le preste atención algo realmente inconcebible. En aquel momento descubrimos que todos los rumores y todos los mitos sobre ella eran ciertos. Violeta solía ser una histérica, pero cuando lo quería era Bien puta.
-Viole: ¿que hacen chicos? Dijo violeta imitando a una niña curiosa desde el umbral de la puerta de vidrio que daba a la pileta. Ella solo lucia su tanguita negra y cubría sus pechos con una mano.
-Lucas: ahhh bueno!!
-Mati: nada, un torneíto de Pro evolution, ¿queres jugar? Vas a tener que usar las dos manos
Violeta sonrió ante la picardía de Seba y dejo caer sus brazos a los costados rebelando unos pezones bien parados, producto de su excitación.
-Viole: ¿que les parece si lo hacemos más interesante? Ella ya tenía toda nuestra atención, solo queríamos tirarnos encima y cogérnosla lo que quedaba del día pero sabíamos que el asunto no funcionaba así.
Jueguen su torneíto-dijo Viole-El ganador me puede coger, así como lo escucharon. Segundo premio la chupada de pija de su vida y el tercer premio una paja inigualable!
Cuando dijo eso hubo un silencio de unos segundos. Nadie esperaba esto, sin embargo fui yo el primero en hablar: -si te la bancas, ya tenemos armado los grupos, si esperas un rato arrancamos el torneo. No quería mostrar demasiado interés, quería que ella sintiera que le hacíamos un favor, que aceptábamos su jueguito pero que tampoco se sintiera tan especial. Ella pareció entender el mensaje porque su expresión cambio. Se sentía rara, como rechazada eso no era normal en nosotros. Todos entendimos que para cogernos a Violeta teníamos que ser mostrar el menor interés y ella iría cada vez más y mas lejos
-Viole: más vale que me la banco nene, arranquen que me aburro!
Y asi sin más empezó el torneo: Juan vs Lucas, Sebas vs quien les habla, Nico vs Leo, Mati vs Sergio.
Lucas fue el primero en perder, luego Nico y Sergio. Finalmente los finalistas éramos Juan, Leo, Mati y yo. Los partidos fueron de 5 minutos y muy tensionados. Viole seguía semi desnuda y cuando alguien iba ganando ella ponía la mano en la pierna del ganador o hacia pequeños gemidos para distraerlo y darle chances al que perdía. Finalmente Salí ganador, seguido por Leo y Mati.
-Juan: nooo, quede cuarto, me quiero matar!!
-Viole: tranquilo lindo, todavía tenes un premio consuelo.
Al decir esto Viole se arrodillo, bajo el pantalón de juan y beso la punta de su pija.
-Besito consuelo agrego luego con una sonrisa
La excitación de todos era demasiada, ya no podíamos aguantar más.
-Viole: felicidades a los ganadores, ahora se viene la entrega de premios.
I así sin mas Mati se sentó en el sillón mientras Viole se arrodillaba delante de él y con su mano hábil acariciaba sus bolas lentamente, luego agarrándole la pija, Violeta empezó a pajearlo magníficamente. Primero lento, luego rápido y alternando los ritmos. Siempre sus ojos verdes posados en los de Mati quien se la comía con los ojos.
-Viole: que pija más grande amor, no me alcanza la mano
-Leo cuando te comas esta no te va a alcanzar la boca putita!- Viole gimió mientras se arqueaba imaginando lo que se venía.
Luego de varios minutos Mati acabo llenándole de leche tibia las manos a violeta quien se las lamia tragándose cada gota.
-Viole: Bueno, ahora Leo anda sentándote que te toca-dijo, sin embargo su frase se vio interrumpida por la pija de Leo quien parado frente a ella le introdujo su miembro
-Viole: gggmmmm- se escuchaba mientras unas lagrimas caían de sus ojos.
Sacándose la pija de la boca, exhalo fuertemente al casi quedarse sin aire, luego sonrió y comenzó a chuparla lentamente, de rodillas y mirando hacia arriba, mientras Leo le acariciaba la cabeza. El resto de nosotros estaba alrededor, mirando y masajeándonos la pija por sobre el pantalón. Los perdedores estaban decepcionados pero también muy conformes por estar ahí para presenciar tal espectáculo.
Cuando Leo acabo lo hizo sin avisar por lo que la leche tibia entro en la boca de Viole sin previo aviso, sin embargo ella no parecía enojada.
Sosteniendo todavía la pija casi flácida en una mano, Violeta dejo que la leche chorreara por sus labios mientras sonreía como una putita satisfecha. Luego con su lengua y sus dedos volvió a introducirse todo el contenido y se lo trago
-Viole: taran-dijo mientras extendía las manos y abría la boca bien grande mostrando que no había quedado nada.
El resto aplaudía y la trataba de puta, cosa que a ella le encantaba y la volvía loca.
Finalmente me tocaba a mí. Viole me miraba con la cara brillosa debido a la leche y la baba que todavía la cubrían. Ella esperaba sonriente sin decir una palabra, como una perrita esperando su premio. Entonces, bajándome los pantalones quede desnudo frente a ella quien sin dudarlo tomo mi pija y comenzó a chuparla, lo hizo durante varios minutos hasta que por sí misma se levanto y se puso en cuatro sobre el sillón. Su culo bien paradito y perfecto y esa curvatura que se formaba en su cintura tatuada eran una invitación muy difícil de rechazar. Corriéndole la tanguita negra bien húmeda la penetre sin dudarlo. El gemido que hizo fue increíble. Estaba tan excitada que no me costó llevarla al orgasmo. Cuando gritaba y pedía pija como una puta yo me sentía un semental. Todos miraban como me la cogía y como a ella le encantaba. A veces le daba estocadas tan fuertes que ella parecía perder el equilibrio, pero siempre se recuperaba y quedaba firme para que me la cogiera.
Cuando acabo se arqueo de tal forma que me Salí de su interior. Pero Viole, rápida como ella sola cambio de posición y me tiro contra el sillón. Ahora ella me montaba. Yo agarraba su culo y lo apretaba mientras subía y bajaba. Sus pechos rozaban mi cara y no pude resistirme a colocarme uno en mi boca
Viole: si, cógeme, si Dios
Finalmente acabe llenándola de leche. Ella se tiro a un costado gimiendo mientras el resto se acercaba pajeandose y acabándole en los pechos.
Fue una tarde increíble en la que nos hicimos grandes amigos de Lucas. Violeta siguió haciéndose la histérica con los compañeros de colegio, pero ya no con nosotros. Nosotros éramos sus nuevos amiguitos, aquellos a los que chuparles la pija en el baño del colegio o con quien coger cuando tenía ganas. Nos habíamos ganado el cielo, y este no era azul si no violeta
Éramos un curso de casi cuarenta alumnos, sin embargo solo fuimos uno 8 chicos (y la verdad no por apreciarlo demasiado si no por su increíble casa quinta). Entre ellos estaba Juan, Seba, Nico, Leo, Mati, Sergio, quien les habla y Violeta.
Viole era la típica piba del colegio que todos se quieren coger, con fama de trola y repleta de rumores que nunca se pueden comprobar. Era la típica piba de 1.65 metros de altura, bajita con una cola increíble y unos pechos no tan grandes pero si bien paraditos. El piercing en la nariz y el ombligo eran infaltables y el pelo lacio y teñido de rojo la hacían lucir despampanante. Violeta era la clásica chica que le gustaba estar rodeada de chicos e histeriquearles por lo cual esa tarde de diciembre fue sin dudas el día soñado para ella. Rodeada de chicos que habían optado por ir al cumple años de un compañero al que apenas se bancaban con el único fin de ver mujeres en bikini tomando sol y mojadas en la pileta enorme de la quinta de Lucas. Por eso es que cuando Violeta se apareció todos nosotros nos sentimos aliviados al no ser “puro huevo” y al mismo tiempo Viole tendría toda la atención y el histeriqueo que quisiera.
Al llegar Lucas nos dio la bienvenida y enseguida entramos a la quinta. Esta era enorme y lo mejor, ningún adulto cerca para controlarnos. Aparentemente el padre estaba de viaje de negocios y la madre muy ocupada engañando al marido como para aparecerse por la fiesta de su Hijo. Algo de pena me daba, pero la actitud creída y pedante de Lucas hacían que la lastima casi desapareciera.
La primera en entrar a la pileta fue Violeta quien sin dudarlo se saco su mini short y su remera de AC/DC. Ella lucia una bikini negra tan diminuta que fácilmente pasaría como una tanga. Ella dejaba ver sus tatuajes en el cuello (Un ojo egipcio) y en la parte inferior de la espalda (una especie de enredadera con flores)
Tirándose de cabeza nos invito a todos a meternos pero la erección de cada uno de nosotros nos impedía desvestirnos. Yo fui el primero en animarse, dejando que mi pija se marcara bien sobre mi maya azul. Vi a violeta sonreír y me di cuenta de que estaba muy satisfecha con el resultado que había logrado.
Con el tiempo todos entraron al agua y jugueteamos con Viole. Agarrándola y tirándola al agua (siempre manoteando algo cuando se podía) sin embargo cuando alguien intentaba algo un poco más atrevido ella comenzaba sus típicos histeriqueos y se alejaba.
Al parecer ella solamente se dejaría toquetear y manosear y nosotros realmente estábamos demasiado calientes para dejarlo todo ahí.
Entonces fue cuando Lucas empezó a ganarse nuestro respeto lentamente:
-Lucas: chicos, miren lo que traje-grito mientras arrastraba una heladera repleta de cerveza y Dr. Lemon.
Mientras todos nos servíamos y bebíamos, notamos como Violeta cada vez más empezaba a desinhibirse al punto de empezar a bailar de manera sexy cuando sonaba AC/DC muy inteligentemente puesta por Leo quien vio su remera y su fanatismo. Tal era la excitación y la emoción de ella que el baile se transformo en un franeleo sobre la Pija de Seba quien le manoseaba los pechos mientras ella seguía el ritmo de la música. Todo parecía ir muy bien gracias al Alcohol, sin embargo cuando alguien intentaba besarla o pasar por sobre su bikini ella se alejaba protestando. Parecía que nada iba a funcionar.
Así pasaron varias horas y todos comenzamos a resignarnos. Ella seguía tomando y se notaba que estaba bastante alegre sin embargo, pese a sacarse el corpiño y tirarse boca abajo a tomar sol, su histeriqueo parecía no acabar.
-Viole: ¿alguien me pasa crema? Pero por la espalda tarado, no me voy a dar vuelta no seas pajero!!
Luego de ese comentario hacia Mati todos nos dimos cuenta de que hasta allí llegaría el asunto y decidimos hacer lo que cualquier chico con una playstation 3 haría. Jugar un torneo de Pes.
Todos entonces nos alejamos de la pileta y fuimos al plasma de 45 pulgadas a elegir los equipos un tanto decepcionados y con un dolor en los huevos que era casi intolerante.
Pero entonces se hizo la luz, éramos tan jóvenes que no nos dimos cuenta hasta ese momento. A Una histérica no tenes que darle bola, ignórala, no te veas desesperado, esa lección la aprendimos aquel día cuando violeta se vio rodeada de nadie…sola y semi desnuda y sin nadie que le preste atención algo realmente inconcebible. En aquel momento descubrimos que todos los rumores y todos los mitos sobre ella eran ciertos. Violeta solía ser una histérica, pero cuando lo quería era Bien puta.
-Viole: ¿que hacen chicos? Dijo violeta imitando a una niña curiosa desde el umbral de la puerta de vidrio que daba a la pileta. Ella solo lucia su tanguita negra y cubría sus pechos con una mano.
-Lucas: ahhh bueno!!
-Mati: nada, un torneíto de Pro evolution, ¿queres jugar? Vas a tener que usar las dos manos
Violeta sonrió ante la picardía de Seba y dejo caer sus brazos a los costados rebelando unos pezones bien parados, producto de su excitación.
-Viole: ¿que les parece si lo hacemos más interesante? Ella ya tenía toda nuestra atención, solo queríamos tirarnos encima y cogérnosla lo que quedaba del día pero sabíamos que el asunto no funcionaba así.
Jueguen su torneíto-dijo Viole-El ganador me puede coger, así como lo escucharon. Segundo premio la chupada de pija de su vida y el tercer premio una paja inigualable!
Cuando dijo eso hubo un silencio de unos segundos. Nadie esperaba esto, sin embargo fui yo el primero en hablar: -si te la bancas, ya tenemos armado los grupos, si esperas un rato arrancamos el torneo. No quería mostrar demasiado interés, quería que ella sintiera que le hacíamos un favor, que aceptábamos su jueguito pero que tampoco se sintiera tan especial. Ella pareció entender el mensaje porque su expresión cambio. Se sentía rara, como rechazada eso no era normal en nosotros. Todos entendimos que para cogernos a Violeta teníamos que ser mostrar el menor interés y ella iría cada vez más y mas lejos
-Viole: más vale que me la banco nene, arranquen que me aburro!
Y asi sin más empezó el torneo: Juan vs Lucas, Sebas vs quien les habla, Nico vs Leo, Mati vs Sergio.
Lucas fue el primero en perder, luego Nico y Sergio. Finalmente los finalistas éramos Juan, Leo, Mati y yo. Los partidos fueron de 5 minutos y muy tensionados. Viole seguía semi desnuda y cuando alguien iba ganando ella ponía la mano en la pierna del ganador o hacia pequeños gemidos para distraerlo y darle chances al que perdía. Finalmente Salí ganador, seguido por Leo y Mati.
-Juan: nooo, quede cuarto, me quiero matar!!
-Viole: tranquilo lindo, todavía tenes un premio consuelo.
Al decir esto Viole se arrodillo, bajo el pantalón de juan y beso la punta de su pija.
-Besito consuelo agrego luego con una sonrisa
La excitación de todos era demasiada, ya no podíamos aguantar más.
-Viole: felicidades a los ganadores, ahora se viene la entrega de premios.
I así sin mas Mati se sentó en el sillón mientras Viole se arrodillaba delante de él y con su mano hábil acariciaba sus bolas lentamente, luego agarrándole la pija, Violeta empezó a pajearlo magníficamente. Primero lento, luego rápido y alternando los ritmos. Siempre sus ojos verdes posados en los de Mati quien se la comía con los ojos.
-Viole: que pija más grande amor, no me alcanza la mano
-Leo cuando te comas esta no te va a alcanzar la boca putita!- Viole gimió mientras se arqueaba imaginando lo que se venía.
Luego de varios minutos Mati acabo llenándole de leche tibia las manos a violeta quien se las lamia tragándose cada gota.
-Viole: Bueno, ahora Leo anda sentándote que te toca-dijo, sin embargo su frase se vio interrumpida por la pija de Leo quien parado frente a ella le introdujo su miembro
-Viole: gggmmmm- se escuchaba mientras unas lagrimas caían de sus ojos.
Sacándose la pija de la boca, exhalo fuertemente al casi quedarse sin aire, luego sonrió y comenzó a chuparla lentamente, de rodillas y mirando hacia arriba, mientras Leo le acariciaba la cabeza. El resto de nosotros estaba alrededor, mirando y masajeándonos la pija por sobre el pantalón. Los perdedores estaban decepcionados pero también muy conformes por estar ahí para presenciar tal espectáculo.
Cuando Leo acabo lo hizo sin avisar por lo que la leche tibia entro en la boca de Viole sin previo aviso, sin embargo ella no parecía enojada.
Sosteniendo todavía la pija casi flácida en una mano, Violeta dejo que la leche chorreara por sus labios mientras sonreía como una putita satisfecha. Luego con su lengua y sus dedos volvió a introducirse todo el contenido y se lo trago
-Viole: taran-dijo mientras extendía las manos y abría la boca bien grande mostrando que no había quedado nada.
El resto aplaudía y la trataba de puta, cosa que a ella le encantaba y la volvía loca.
Finalmente me tocaba a mí. Viole me miraba con la cara brillosa debido a la leche y la baba que todavía la cubrían. Ella esperaba sonriente sin decir una palabra, como una perrita esperando su premio. Entonces, bajándome los pantalones quede desnudo frente a ella quien sin dudarlo tomo mi pija y comenzó a chuparla, lo hizo durante varios minutos hasta que por sí misma se levanto y se puso en cuatro sobre el sillón. Su culo bien paradito y perfecto y esa curvatura que se formaba en su cintura tatuada eran una invitación muy difícil de rechazar. Corriéndole la tanguita negra bien húmeda la penetre sin dudarlo. El gemido que hizo fue increíble. Estaba tan excitada que no me costó llevarla al orgasmo. Cuando gritaba y pedía pija como una puta yo me sentía un semental. Todos miraban como me la cogía y como a ella le encantaba. A veces le daba estocadas tan fuertes que ella parecía perder el equilibrio, pero siempre se recuperaba y quedaba firme para que me la cogiera.
Cuando acabo se arqueo de tal forma que me Salí de su interior. Pero Viole, rápida como ella sola cambio de posición y me tiro contra el sillón. Ahora ella me montaba. Yo agarraba su culo y lo apretaba mientras subía y bajaba. Sus pechos rozaban mi cara y no pude resistirme a colocarme uno en mi boca
Viole: si, cógeme, si Dios
Finalmente acabe llenándola de leche. Ella se tiro a un costado gimiendo mientras el resto se acercaba pajeandose y acabándole en los pechos.
Fue una tarde increíble en la que nos hicimos grandes amigos de Lucas. Violeta siguió haciéndose la histérica con los compañeros de colegio, pero ya no con nosotros. Nosotros éramos sus nuevos amiguitos, aquellos a los que chuparles la pija en el baño del colegio o con quien coger cuando tenía ganas. Nos habíamos ganado el cielo, y este no era azul si no violeta
2 comentarios - Tarde de pile y play con Viole (primer relato)