Mi madre descubre mis fantasías sexuales 2

Después de masturbarme varias veces pensando en como cogían a mi madre y en que estaría haciendo con los negros, regresé a mi cuarto y me dormí pues el trabajo escolar y la sorpresa de mi madre me dejaron muy agotado, al otro día me despertó una palmada en el rostro, era mi madre, con voz alta y algo enfadada me dijo: -son más de las 10 de la mañana holgazan, levántate ya, haz algo de provecho-, lucía radiante con unos jeans sin bolsas ajustados y un top ombliguero rojo sumamente abierto del escote, me miró muy altiva, no sabía a que horas había llegado, le dije: -mamá perdóname por lo que has leído anteriormente, estoy muy apenado, discúlpame por favor-, -No pidas ahora disculpas, te pajeabas pensando en como me follaban, pues ya lo has visto ¿no? ¿verdad que te ha gustado? ¡contéstame!-, -mamá ya discúlpame por favor, no lo haré más, por favor-, -ahh, no, eso si no, te vuelve loco ver como me follan pues te daré motivos para que te pajees, ahora te aguantas por escribir tus cochinadas, ahora cámbiate y baja a desayunar que vamos a salir-, después mi madre salió azotando la puerta. La actitud de mi madre me tenía desconcertado, pero un poco a la vez seguía excitado recordando la cogida que le habían dado los 3 negros anoche, pero no sabía de que otras cosas sería capaz de hacer mi madre.

Me bañé y bajé a desayunar, ella no estaba abajo, pero vi que en la mesa había un sobre, lo abrí y encontré una nota que decía: “Hazte una buena paja" vacié el contenido y eran fotos de mi madre follando con los tipos de anoche, eran cerca de 80 fotos, al parecer tomadas en un hotel de paso, mi madre aparecía besando esas 3 grandes pollas, una a una lamiéndolas, chupándolas, era una excitación tremenda ver en fotos a mi hermosa madre mamando esas pollas negras, en otras salía con las 3 sobre su rostro, había fotos donde salían follando su culazo, otras en una paja cubana a cada negro, en otras follada a 4 patas, unas más con su ano dilatado después de follarla, por ultimo unas con su cara cubierta de semen y sonriendo, tenia yo mucha excitación y una firme erección pero dejé las fotos y desayuné rápido, cuando terminé tomé las fotos y me empecé a sobar sobre el pantalón, en eso escuché la voz de mi madre: -vaya, veo que te gustaron mucho mis fotos, ¿verdad, cabrón?-, - mamá, yo, yo no-, me jaló del brazo y me subió a mi recamara, se tornó enfadada, pero me sorprendió lo que me dijo: -ahora si cabrón, ahora si pajeate, pajeate delante de mi, mirando las fotos-, -no, no puedo mamá, discúlpame-, -¡te digo que lo hagas carajo! hazlo viendo las fotos-, me dijo mientras con sus manos sujetaba y apretaba mis mejillas, en eso mi madre me bajó el pantalón y me puso en la mano una foto donde salía mamando esas pollas negras y puso mi otra mano en mi polla, -¡hazlo carajo!, te mueres de ganas por hacerlo-, esa situación poco a poco me empezaba a excitar, empecé a ver sus enormes senos en ese sensual top rojo que traía y la foto misma, me empecé a pajear, duro y rápido, no aguanté mucho y me vine, mi madre que se había sentado frente a mi me miraba con mucho enojo y seriedad, de pronto irónicamente sonrió y se levantó y enojada dijo: -que pervertido me saliste, voy a cambiarme, ¡arréglate que saldremos y apúrate!-, estaba muy confundido pero también excitado, me limpié y me cambié como dijo, luego bajé a la sala.

Después de 15 minutos bajó mi madre, se veía despampanante: se había vestido con una minifalda muy corta color rojo, con medias negras unos zapatos negros altísimos, la blusa era sin mangas color negra con el escote mas abierto que le haya visto, lucía maquillada y bien peinada, tomó su bolso y con la mano me indicó que saliera, subí al carro, en el camino le pregunté a donde iríamos, -lo veras en su momento, ahora cállate-, mi madre siguió conduciendo, hasta que llegamos a una conocida zona de prostitución de la ciudad, lo sabía porque lo había visto en las noticias, donde había muchos hoteles de paso y en las afueras había decenas de mujeres con prendas mínimas y muy sensuales esperando clientes, estacionó la camioneta en ese lugar -mamá ¿que hacemos en este lugar, porqué venimos aquí?-, en eso mi madre sacó de su bolsa un papel y lo aventó a mi cara, -por esto cabrón, conque fantaseabas escribiendo que yo me prostituía en una zona así ¿no?, pues ahora se te va a hacer, voy a ser una prostituta y tu me veras como lo hago-, me había aventado un relato mío que escribí imaginándola como aquellas putas, -mamá por favor, olvida todo y volvamos a casa, por favor-, -¡ahora te aguantas carajo!, tu querías verme así, pues se te hizo, soy una puta que busca clientes- acto seguido tomó su bolso y se bajó de la camioneta, vi que caminó a lo largo de la acera moviendo sus nalgotas de forma obscena, muy provocadora y se paró a unos 15 metros del carro, la verdad ninguna de las demás mujeres se veía tan buena ni sexy como ella.

Las mujeres de ese lugar la vieron como una más, vi que no pasaron ni 2 minutos y un hombre se acercó a mi madre, tendría como 50 años algo Calvo y no muy agraciado, hablaron poco tiempo y después de eso caminaron juntos a uno de los varios hoteles de esa zona, sentí que el corazón me palpitaba a mil, de lejos vi como el tipo le empezó a tocar el culo obscenamente, en eso mi madre volteó a donde estaba la camioneta y me sonrió descaradamente, entraron a ese hotel y los perdí de vista. No sabía que hacer ni que pensar, nunca pensé en que mi madre fuese a descubrir mis relatos y mucho menos a llevarlos a la practica, por momentos me sentía mal y por otros una enorme excitación que me llevaba a masturbarme frenéticamente. En ese momento imaginé a mi madre follando con ese tipejo y me excité muchísimo, saqué mi polla y me empecé a pajear en el carro. Cuando terminé me recliné en el asiento, al cabo de casi una hora salieron, el tipo se veía más que sonriente, mi madre igual pero constantemente volteaba y me sonreía irónicamente, el tipo se fue y mi madre volvió a ponerse donde estaba, en eso a los 5 minutos otros 2 hombres llegaron con ella, tenían como 35 años, mi madre habló con ellos y de nueva cuenta entraron los 3 al hotel, igual mi madre me miró al entrar, estaba excitadísimo, de imaginar a mi madre en ese trío me calenté muchísimo y volví a masturbarme, a la hora salieron los 3 juntos, mi madre los despidió de beso y se fueron, apenas salió mi madre la arribó otro cliente de unos 45 años, hablaron y entraron al hotel, mi madre parecía ya una completa prostituta.

Pasó otra hora y salieron, los 2 sonrientes, a los 5 minutos de nueva cuenta un cliente llegó con mi madre, un tipo de unos 50 años, ella volvió a aceptar y el tipo entrando al hotel le empezó a agarrar el culo como el primero, de igual forma pasó una hora y salieron, mi madre caminó hacia el carro, se subió y dijo: -¿te gustó ver como me prostituyo?, ¿te gusta tener una madre así? -, -mamá ya para esto, perdón-, -yo soy la que decide cuando acaba todo entendido escuincle-, después de eso se metió la mano a su escote y sacó unos billetes, me los dio y dijo -este dinero es tu gasto para la escuela, producto de mi prostitución, de aquí saldrá el dinero que te daré-, esto se me salía de control, me estaba entregando el dinero que había ganado prostituyéndose, pero ¿seria capaz de seguirlo haciendo?, no sabía que pensar, ella empezó a conducir, volvimos a casa casi era de noche, cada quien cenó por su lado, después me fui a dormir, mi madre se bañó y se recostó en su cama, se veía agotada, la verdad no sabía si de verdad había disfrutado acostarse con esos 5 hombres, lo único que tenía claro era el enojo de mi madre hacia mi, ella hacia eso para darme una lección por lo que había leído en mis relatos escritos, entonces todo era para hacerme sentir mal y recapacitar mi conducta, pero la verdad aunque me desconcertaba esa actitud y acciones tan fuertes, en mi había más excitación que molestia, pero si lo percibía ella quizá el jueguito acabaría, aunque percibía que quizá para dar la lección convertiría todos los relatos en realidades, lo cual faltaban varios para terminar, llegué a la conclusión de hacerle creer que me molestaba su actitud pues ella quería hacerme sentir mal no darme placer.

Aun no podía conciliar el sueño, pues mi excitación aun no se iba, menos tras vivir la enorme excitación de verla como toda una prostituta, en ese momento vi, las fotos de mi madre con los tipos negros que ella me había dejado en un sobre en la mañana en el comedor, que se habían quedado ahí en mi cuarto, las tomé y me empecé a masturbar viéndolas, que sexy se veía mi madre chupando pollas, que sexy se veía en cuatro siendo follada analmente, que tremendo culo se veía en esa posición, que morbo ver su hermoso rostro lleno de semen de esos 3 tipos, en eso se me ocurrió algo, como mi madre estaba dormida me dieron ganas de ir a su cuarto y masturbarme frente a ella, el corazón casi se me salía de excitación, tomé las fotos, salí de mi cuarto y abrí despacio el suyo, que con el cansancio nisiquiera lo cerró bien, tenía prendida la luz, mi madre dormía profundamente estaba realmente agotada, como se había bañado vestía solo un camisón delgado y una tanga ambos blancos, se veía tremenda, estaba recostada de lado, por lo que su culo estaba al descubierto, me saqué la polla ahí mismo y me empecé a masturbar mirándole sus nalgotas, no duré mucho y terminé, lo hice una vez más esta vez acercándome a sus nalgas observando lo grandes y redondas que eran y viendo su tanga perderse en ese increíble culo, decidí que era suficiente y podría despertar por lo que salí con precaución y me fui a dormir ya pues al día siguiente tenía que ir a la escuela.

Al día siguiente estando en la escuela recibí una llamada, vi el celular era mi madre, contesté y empecé a escuchar gemidos, eran fuertes sin duda era ella follando, pero ¿con quien, en el trabajo? Después empezó a hablar: -mmmmm que rico, fóllame más fuerte, empuja más duro, cógeme bien, uuuhhhh, aaaahhh, uuuuuufffffff, aaaaahhhhhhhhhhhh, chupame las tetas, oohh si, oooooohhhhh si-, en ese momento me metí a los baños y me empecé a masturbar mientras escuchaba los jadeos de mi madre, a los 4 minutos se cortó, no sabía con quien follaba, ¿estaría en su trabajo en la empresa?, el resto del día no pensé más que en mi madre y en como jadeaba al teléfono, se notaba que verdaderamente estaba excitada y disfrutando la cogida, me puso demasiado cachondo. En el trayecto a casa recibí un mensaje de mi madre incluía una foto decía: “hijito hoy mamá no vendrá temprano, pide comida fuera, tengo junta “privada" con Samuel mi compañero Dominicano, que creo lo conociste el otro día en casa, te envío una foto de como trabajamos besitos", la imagen mostraba a mi madre en su oficina besando una polla negra que casi abarcaba su rostro completo, mediría unos 20 cm por 5 de ancho, mi madre en la autofoto aparecía con la mitad del glande dentro de sus rojos labios con una mirada entre seria y muy cachonda, al recibir esto mi excitación creció, nadamás llegar a la casa me masturbé varias veces imaginando a mi madre follando como una loca. Pedí comida por teléfono, como a las 9:40 pm mi madre llegó, se sentó en la sala altiva con una sonrisa irónica y con la mirada fija me preguntó si me gustó la llamada y la foto, me subí a mi cuarto sin contestar, de todos modos no sabía ni que decirle.

El resto de la semana pasó sin mayor novedad, mi madre seguía fría y altiva conmigo, cada quien desayunaba y comía por su lado, hasta el sábado en la tarde después de comer mi madre me dijo que saldríamos en un rato más y que no quería preguntas de ningún tipo, la obedecí y cerca de las 8 estaba listo ya en la sala, cuando la vi bajar arreglada, se me cayó la baba, se veía increíblemente cogible, vestía una minifalda roja demasiado ajustada, sin medias, también una blusa sin mangas color negro con escote amplio en V, con un maquillaje intenso y muy sensual, tomó un pequeño bolso y me ordenó subir al carro, tras unos 15 minutos de conducir llegamos a una zona de bares, estacionó el auto, mi madre me ordenó que bajara, verla tan sexy y en ese lugar hizo que me excitara demasiado, ella bajó y me ordenó que camináramos, todas las miradas se dirigían a mi despampanante madre, veía las miradas de los hombres clavarse en sus nalgotas, llegamos un lugar que se llamaba “Dueñas de la noche", mi madre habló con el portero: -este chico es mayor de edad, respondo por el, dejelo entrar-, entramos los 2, era un lugar grande con un escenario al centro y un tubo, estábamos en un table dance, había muchos hombres los cuales no dejaban de ver a mi madre, le dije molesto: -¿que hacemos aquí, que es todo esto?-, - pues venimos a cumplirte tu fantasía de ver a tu madre bailando sensualmente en el tubo, te dije que te ibas a aguantar-, al escuchar eso me prendí muchísimo, mi madre pidió 2 cervezas, ella tomó solo unos tragos, me dijo: -me voy, disfruta el espectáculo que tu madre le va a dar a todos-, vi que subió unas escaleras y entró a una habitación, en el escenario una chica bailaba, era linda pero en nada se igualaba a mi madre, estaba excitado y nervioso.

Después de unos 20 minutos, una voz anunció a una mujer - ¡señores, tengo el honor de presentar a una mujer con un cuerpo y belleza inigualable con ustedes la sensualísima: Andrea!-, la música inició el escenario se alumbró y mi madre apareció cambiada ahora vestida como una sexy ejecutiva con un traje negro muy provocativo, caminó sensualmente hasta el tubo, todos los hombres chiflaron, al llegar al tubo mi madre lo agarró y empezó a mover sensualmente sus caderas, con sus manos poco a poco se quitó el saco y lo lanzó al público, ella bailaba al ritmo de la música, con armonía y sintonía con la música de deshacía de sus prendas, la forma en que movía sus caderas y su culo era de tal sensualidad que aprovechando la oscuridad me empecé a pajear, mi madre solo se encontraba en brassier y tanga en eso bajó del escenario y empezó a bailarle a los hombres más cercanos, mientras les bailaba les ponía cerca sus enormes pechos, algunos le ponían billetes en su tanga o mi madre les bailó a cada uno, luego subió al escenario, la música cambio de ritmo y en eso mi madre se despojó de su brassier, los chiflidos se incrementaron, mi madre se tomó los senos y los empezó a lamer, mientras seguía contoneando sus sensuales caderas, se agarró del tubo y se movía alrededor de el, lo llegó a lamer sensualmente, en eso se colocó de espaldas, se agachó y bajó su tanga, los hombres quedaron extasiados, la lanzó y vi que el tipo que la tomó la olió como loco, mi madre completamente desnuda siguió bailando al ritmo de la música, recorría con sus manos todas sus formas con una sensualidad tremenda, no aguanté más y me vine, nadie se daba cuenta de que me masturbaba pues no perdían detalle de la sensual mujer que bailaba.

Siguió bailando un poco más, cuando se retiró todos aplaudieron, estaban deseosos de mi madre, tenía la boca seca y me acabé las 2 cervezas, como a los 15 minutos recibí in mensaje: “Sal y ven al carro o me voy sin ti", como ella ya había pagado las cervezas salí sin ningún problema, en el carro mi madre me esperaba fumando y con el estéreo encendido vestía la misma ropa con la que había venido, le dije: -¿cuando terminara esto mamá?-, ella arrogante y tajante me dijo: -eso lo decido yo jovencito, tu madre va a gozar mucho y decidiré que haré no me digas que no te gustó si te vi pajeandote, a mi no me haces pendeja-, en eso arrancó, al llegar me volví a hacer una paja, en mi cuarto, no podía creer que lo que había escrito en esos relatos se hacia realidad, mi madre hacia lo que fantaseaba, ni más ni menos, cuando ya me disponía a dormir escuché voces abajo, me cercioré y vi a uno de los negros del otro día en la sala con mi madre, al parecer se preparaba para divertirse mucho.