Me desperté el domingo, mire el reloj, 12 y 30, Dai dormía despatarrada y boca abajo al lado mío, estabamos solos, los pensamientos se arremolinaron de nuevo en mi cabeza, me habia garchado a mi hija, en que me habia convertido.
Tenia culpa, habia tenido epocas de descontrol con mi señora, eramos novios de pendejos y habiamos hecho de todo, hasta frecuentamos Anchorena ya casados, pero esto me superaba. Con el corre de las horas me di cuenta de que ya no podia dar vuelta atrás, ya estaba hecho.
Me levante he hize las compras, pase por lo un cliente a cobrar un laburo y volvi a casa, Dai ya estaba levantada, tomando mate.
Fue raro ese momento, me acerque a la mesa, apoye las bolsas de las compras y ella se acerco a mi, me abrazo por la cintura y apoyo su cabeza en mi pecho.
- Yo provoque todo esto, papa, me tendria que sentir mal, pero estoy bien y me encanto.- dijo ella para luego levantar la mirada hacia mi, la abraze y le acaricie la cabeza como siempre, se puso en puntas de pie y me beso en los labios, entendi que yo no estaba solo en esta locura y me afloje.
Tomamos mate, miramos el tc juntos, como siempre y nos pusimos a acomodar un poco la casa.
Por la tarde le sono el celular a Dai, yo estaba en el jardin cortando el pasto, 10 minutos mas tarde me conto quien la habia llamado, era mi sobrina Gimena avisando que venia al dia siguiente, hacia un año y pico que no se veian, siempre hablaban por Skipe o por celular, desde la epoca en que me pelee con mi hermano Raul.
Como estabamos al pedo le dije que la llamara y le dijera que la pasabamos a buscar a la noche, asi no se venia sola el dia siguiente.
Le propuse a Dai salir en un rato, pasear por capital y después buscar a mi sobrina, cerramos todo, sacamos el auto y nos fuimos para el centro.
Caminamos por el shoping de Florida, me tomaba de la mano o me abrazaba, parecia mi novia.
Nunca hago grandes gastos y laburo como perro, hice mierda la tarjeta comprandole cosas a Dai, ropa, maquillaje, perfume, unos conjuntos de ropa interior hermosos y nos fuimos.
Comimos algo en el MC Donald y nos fuimos a Caballito a buscar a mi sobrina, en el camino Dai me mimaba y me daba picos, me acariciaba el cuello.
En un momento me empezo a tocar la pija sonriendo.
- Hay tiempo, papi.- me dijo.
Como yo naci y me crie en Caballito la lleve al telo que mejor conocia, Riglos y Directorio.
Pedi la habitación, la mejor, al entrar se me prendio a la boca mientras yo le acariciaba las nalgas, la tiere en la cama y la desvesti, cuando la vi en bolas me le tire encima y la bese por todo el cuerpo, lami cada rinconsito de su piel blanca y suave.
Chupe sus tetas carnosas y sus pezones duros, baje por su panza, perfecta, lami su escazo bello pubico y me adentre en su conchita hambrienta, la mire extaciado, coloradita de labios finos, acerque mi nariz para aspirar el aroma que salia de su vagina, perfume de juventud, le abri un poco los labios, su clitoria abultado y duro y el brillo de su flujo saliendo de la entrada de su concha, la lami desde ahí, me lleve su flujo a la boca para saborearlo, lancetee su clítoris con la punta de la lengua, Dai gemia, se incorporo sobre sus codos y me miraba colorada, mordiendose los labios.
Le levante mas las piernas y quedo a la vista su marroncito, hermoso ojete para hacerle de todo, se lo chupe con ganas, le meti la lengua y se abrió, le moví la lengua adentro del culo un rato y después volví a su conchita, me llene la boca de flujo y me regalo un hermoso orgasmo, cuando se sentó me abrazo y me beso con calentura, hizo que me parara al pie de la cama, me bajo el pantalón y comenzó a jugar con sus manos por encima de mi boxer.
Saco mi pija afuera y abriendo grande la boca me la chupo divinamente, con ganas, gimiendo con la boca llena de verga.
Dai se paro y me termino de sacar la ropa, me acariciaba el pecho y me lamió las tetillas
Cosa que me puso loco, me soltó y se subió a la cama poniéndose en cuatro.
- Cogeme que no aguanto mas, papi.-
Me le puse detrás y la enterré toda, gimió fuerte, eso era música.
La cogi tranquilo, disfrutándola, deleitándome con sus gemidos y con lo que me decía, su orgasmo llego en ese momento, acabo gritando, el mío estaba cerca, se la saque y la hice sentar al borde de la cama, la tome de la nuca y pajeandome le llene la cara y la lengua de leche calentita y espesa.
Se tiro en la cama relamiéndose la leche de los labios, me reí cuando agarro su celular y se saco una foto, después me la mando al mío y la guarde.
Llegamos a la casa de mi hermano, una casa linda en la zona residencial, Dai toco timbre mientras yo esperaba en el auto, salio mi cuñada con mi sobrina, que linda se había puesto la pendeja, buenas tetas, buen culo hermosas piernas, su cabello era rubio sus ojos verdes.
Hable con mi cuñada, con ella siempre me lleve bien, las chicas subieron al auto y nos fuimos.
Llegamos a casa y nos pusimos a mirar tele, la pendeja era jodona y abierta se reía a cada rato, tomamos, nos acordamos de cosas, fue divertido, mi sobrina era muy franca y bastanmte directa para hablar.
En un momento Dai se fue al baño y me quede solo con Gimena.
- Como esta tu padre?- le pregunte.
- Esta bien, siempre trabajando y sin tiempo para nada, ya parece cincuenton.- Gime sonrio mirandome con sus ojazos – y eso que es dos años mayor que vos- agrego.-
- Siempre fue asi Raul, le gusta mucho la plata.- le dije yo recordando que nos peleamos porque vendio propiedades de mi viejo que me correspondian.
- Vos estas lindo, tio.- dijo ella mirandome de arriba abajo.- Vas al gimnacio?-
- Si ,dia por medio y me cuido en las comidas.-
- Andas con alguien?- pregunto curiosa.- con la facha que tenes dudo que estes solo.- yo solo sonrei, tenia ganas de decirle “me garcho a tu prima y a las amigas”
- Si, Gime, estoy solo.- termine diciendo.
- No te creo, tio, vos debes tus cositas por ahí, estas barbaro.- me decia mirandome.
Dai salio del baño y nos miro.
- No chamuya, boluda, tengo un par de amigas que estan recalientes con el, no les da bola.- Dai armo la historia a velocidad luz, era terrible la guacha.
- No sabes lo que te perdes, tio, las pendejas somos terribles, y muchas quisieramos tener un madurito lindo para que nos muestre la experiencias en la vida. Que lastima que soy tu sobrina……..
Nos reimos y Dai fingio estar sorprendida.
Yo mire a mi sobrina con mi mejor cara de langa.
- Que lastima?- pregunte mirandola fijo.-Te imaginas si me olvido?.
Que grande que era mi hija tirando la honda, Gime entro como yegua y yo la acorrale…..
Tenia culpa, habia tenido epocas de descontrol con mi señora, eramos novios de pendejos y habiamos hecho de todo, hasta frecuentamos Anchorena ya casados, pero esto me superaba. Con el corre de las horas me di cuenta de que ya no podia dar vuelta atrás, ya estaba hecho.
Me levante he hize las compras, pase por lo un cliente a cobrar un laburo y volvi a casa, Dai ya estaba levantada, tomando mate.
Fue raro ese momento, me acerque a la mesa, apoye las bolsas de las compras y ella se acerco a mi, me abrazo por la cintura y apoyo su cabeza en mi pecho.
- Yo provoque todo esto, papa, me tendria que sentir mal, pero estoy bien y me encanto.- dijo ella para luego levantar la mirada hacia mi, la abraze y le acaricie la cabeza como siempre, se puso en puntas de pie y me beso en los labios, entendi que yo no estaba solo en esta locura y me afloje.
Tomamos mate, miramos el tc juntos, como siempre y nos pusimos a acomodar un poco la casa.
Por la tarde le sono el celular a Dai, yo estaba en el jardin cortando el pasto, 10 minutos mas tarde me conto quien la habia llamado, era mi sobrina Gimena avisando que venia al dia siguiente, hacia un año y pico que no se veian, siempre hablaban por Skipe o por celular, desde la epoca en que me pelee con mi hermano Raul.
Como estabamos al pedo le dije que la llamara y le dijera que la pasabamos a buscar a la noche, asi no se venia sola el dia siguiente.
Le propuse a Dai salir en un rato, pasear por capital y después buscar a mi sobrina, cerramos todo, sacamos el auto y nos fuimos para el centro.
Caminamos por el shoping de Florida, me tomaba de la mano o me abrazaba, parecia mi novia.
Nunca hago grandes gastos y laburo como perro, hice mierda la tarjeta comprandole cosas a Dai, ropa, maquillaje, perfume, unos conjuntos de ropa interior hermosos y nos fuimos.
Comimos algo en el MC Donald y nos fuimos a Caballito a buscar a mi sobrina, en el camino Dai me mimaba y me daba picos, me acariciaba el cuello.
En un momento me empezo a tocar la pija sonriendo.
- Hay tiempo, papi.- me dijo.
Como yo naci y me crie en Caballito la lleve al telo que mejor conocia, Riglos y Directorio.
Pedi la habitación, la mejor, al entrar se me prendio a la boca mientras yo le acariciaba las nalgas, la tiere en la cama y la desvesti, cuando la vi en bolas me le tire encima y la bese por todo el cuerpo, lami cada rinconsito de su piel blanca y suave.
Chupe sus tetas carnosas y sus pezones duros, baje por su panza, perfecta, lami su escazo bello pubico y me adentre en su conchita hambrienta, la mire extaciado, coloradita de labios finos, acerque mi nariz para aspirar el aroma que salia de su vagina, perfume de juventud, le abri un poco los labios, su clitoria abultado y duro y el brillo de su flujo saliendo de la entrada de su concha, la lami desde ahí, me lleve su flujo a la boca para saborearlo, lancetee su clítoris con la punta de la lengua, Dai gemia, se incorporo sobre sus codos y me miraba colorada, mordiendose los labios.
Le levante mas las piernas y quedo a la vista su marroncito, hermoso ojete para hacerle de todo, se lo chupe con ganas, le meti la lengua y se abrió, le moví la lengua adentro del culo un rato y después volví a su conchita, me llene la boca de flujo y me regalo un hermoso orgasmo, cuando se sentó me abrazo y me beso con calentura, hizo que me parara al pie de la cama, me bajo el pantalón y comenzó a jugar con sus manos por encima de mi boxer.
Saco mi pija afuera y abriendo grande la boca me la chupo divinamente, con ganas, gimiendo con la boca llena de verga.
Dai se paro y me termino de sacar la ropa, me acariciaba el pecho y me lamió las tetillas
Cosa que me puso loco, me soltó y se subió a la cama poniéndose en cuatro.
- Cogeme que no aguanto mas, papi.-
Me le puse detrás y la enterré toda, gimió fuerte, eso era música.
La cogi tranquilo, disfrutándola, deleitándome con sus gemidos y con lo que me decía, su orgasmo llego en ese momento, acabo gritando, el mío estaba cerca, se la saque y la hice sentar al borde de la cama, la tome de la nuca y pajeandome le llene la cara y la lengua de leche calentita y espesa.
Se tiro en la cama relamiéndose la leche de los labios, me reí cuando agarro su celular y se saco una foto, después me la mando al mío y la guarde.
Llegamos a la casa de mi hermano, una casa linda en la zona residencial, Dai toco timbre mientras yo esperaba en el auto, salio mi cuñada con mi sobrina, que linda se había puesto la pendeja, buenas tetas, buen culo hermosas piernas, su cabello era rubio sus ojos verdes.
Hable con mi cuñada, con ella siempre me lleve bien, las chicas subieron al auto y nos fuimos.
Llegamos a casa y nos pusimos a mirar tele, la pendeja era jodona y abierta se reía a cada rato, tomamos, nos acordamos de cosas, fue divertido, mi sobrina era muy franca y bastanmte directa para hablar.
En un momento Dai se fue al baño y me quede solo con Gimena.
- Como esta tu padre?- le pregunte.
- Esta bien, siempre trabajando y sin tiempo para nada, ya parece cincuenton.- Gime sonrio mirandome con sus ojazos – y eso que es dos años mayor que vos- agrego.-
- Siempre fue asi Raul, le gusta mucho la plata.- le dije yo recordando que nos peleamos porque vendio propiedades de mi viejo que me correspondian.
- Vos estas lindo, tio.- dijo ella mirandome de arriba abajo.- Vas al gimnacio?-
- Si ,dia por medio y me cuido en las comidas.-
- Andas con alguien?- pregunto curiosa.- con la facha que tenes dudo que estes solo.- yo solo sonrei, tenia ganas de decirle “me garcho a tu prima y a las amigas”
- Si, Gime, estoy solo.- termine diciendo.
- No te creo, tio, vos debes tus cositas por ahí, estas barbaro.- me decia mirandome.
Dai salio del baño y nos miro.
- No chamuya, boluda, tengo un par de amigas que estan recalientes con el, no les da bola.- Dai armo la historia a velocidad luz, era terrible la guacha.
- No sabes lo que te perdes, tio, las pendejas somos terribles, y muchas quisieramos tener un madurito lindo para que nos muestre la experiencias en la vida. Que lastima que soy tu sobrina……..
Nos reimos y Dai fingio estar sorprendida.
Yo mire a mi sobrina con mi mejor cara de langa.
- Que lastima?- pregunte mirandola fijo.-Te imaginas si me olvido?.
Que grande que era mi hija tirando la honda, Gime entro como yegua y yo la acorrale…..
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