Entrega final

Hola a todos, este es mi primer relato y espero les guste:

Pablo abrió la puerta de su casa y se asombro al verla ahí parada.

- Me vas a dejar entrar. - dijo Carla.
- Pasa... pasa. - Dijo titubeando Pablo.

Pablo conocía a Carla desde hace 2 años, iban a la misma universidad y a la misma carrera, compartían mucho y hacían los trabajos juntos, pero Pablo veía a carla como mas que una amiga, la deseaba, sobre todo por su trasero, un levantado y curvilíneo trasero que siempre era cubierto por unas perfectas calzas, todos los días distintas con diseños y colores.

Caminaron hasta el dormitorio de Pablo para comenzar el trabajo final de la universidad, era una habitación simple pero con todo lo necesario, un poco amueblada y con la computadora portátil para ahorrar espacio, se sentaron ambos en la cama a conversar de la entrega final.

- Y bien... ¿Qué hacemos? - Repuso Carla.
- Creo que tu idea de la otra vez, la idea de cambiarlo a última hora ya sin tiempo es pésima. - Dijo Pablo.
- Muy bien, te explicare entonces. - Dijo ella.

Carla se asomo al escritorio de Pablo y comenzó a sacar su cuaderno con los apuntes, pero Pablo solo se concentraba en el redondo trasero de Carla, alzado al buscar entre sus cosas, el solo deseaba que se quedara así por mas tiempo, pero su voz le interrumpió.

- ¿Puedes ayudarme un poco?. Se atasco esta cosa en la mochila - Dijo Carla.
- Voy. - Dijo Pablo sin dejar de mirar el trasero de Carla.
- <Como lamería y mordería ese culo>. - Pensó Pablo.

Lentamente Pablo se acerco a ella sin dejar de observarla, Pablo se mordía los labios y poco a poco se acercó mas y mas. Pablo quedo detrás de ella a unos centímetros de su cuerpo, hasta que Carla interrumpió sus fantasías diciéndole:

- ¿Me ayudas o no? - Dijo carla enojada.
- Ok, ok tómalo con calma. - Dijo Pablo.

Pablo se acercó hasta que la rozaba, la rodeo con sus brazos y la ayudo a buscar, cada vez acercándose mas y mas a ella hasta que su entrepierna toco sus glúteos y Pablo gozaba ese momento.

Poco a poco la cara de Carla cambiaba, entrecerró los ojos mientras Pablo pasaba su entrepierna en sus glúteos y empezó a perder el control, comenzó a subir sus brazos a los hombros de Carla y los masajeaba lentamente, luego sus manos llegaron a sus caderas y Pablo empezó a besar el cuello de su musa hasta que llego a los lóbulos de sus orejas y los mordió lentamente.

Poco a poco sus manos llegaron a sus senos, y sin dejar de besar su cuello, jugaba con los senos de Carla, luego comenzó a besar sus hombros y darle pequeños mordiscos mientras sus manos se movían solas y bajaban a su trasero, la parte que tanto anhelaba Pablo estaba ahí, para él y ella no se negaba.

Comenzó a palpar su trasero de a poco, Carla giró su cabeza y buscó la lengua de Pablo a lo que él no se negó, Pablo se dio cuenta del gozo que sentía Carla cuando masajeaba sus curvas y abría y separaba sus glúteos hasta que el dijo:

- Carla... yo... - Dijo Pablo.
- No digas nada, ahh, solo lo arruinaras. - Interrumpió Carla, esta volvió a besarlo y lo empujo hasta su cama.

- Carla lo lanzo a la cama boca arriba y esta se tiró sobre él, sus lenguas cocaban entre si y se mordían los labios como desenfrenados, pero siempre con un toque suave al final. Rápidamente ella le arrebató la polera a Pablo y beso su cuerpo, ella se desabrocho 3 botones de su blusa y esta voló por los aires. Carla bo aguanto mas, los besos no eran suficientes para ella, luego de masajear la entrepierna de Pablo desabrocho su botón y bajo su cierre lentamente, mientras lo miraba y sonreía maliciosamente,de la nada, el pene de Pablo salió disparado de su pantalón y Carla lo observó asombrada.

- Que gran sorpresa tenías tu escondido, me gusta. - Le dijo Carla al oído de Pablo y paso su lengua por su mejilla.

- Carla se agacho y comenzó a acercarse al pene de Pablo, uso su lengua para dejar su glande totalmente al descubierto y comenzó a lamer por completo su pene mientras Carlos enloquecía de placer, poco a poco Carla metió el pene de Pablo en su boca y lo comenzó a chupar mientras jugaba con sus testículos, Pablo no aguantó mas y descargó todo en la boca de Carla, esta se paro y bebió todo el semen de Pablo mientras le caían gotas por el costado de su boca. Pablo tomó a Carla por sus caderas y la tiró a la cama con suavidad, le arrebato el sujetador y rompió sus calzas de un solo tirón, la observo con cuidado y bajo su diminuta tanga que lo separaba del sexo de carla. Pablo comenzó a besar las piernas de Carla y lentamente se acerco a su vagina, Su lengua busco sus labios, los repasaba y los separaba, la cara de Carla reflejaba un placer total y esto hacía que Pablo se esforzara mas y mas, lentamente la pasó en su clítoris y luego la introdujo en ella moviendola todo lo que pudo hasta que el escalofrío de Carla se sintió y se corrió en la boca de Pablo, este subió hasta su boca y la beso fuertemente.
Pablo estaba erecto a mas no poder, y sin previo aviso acerco las caderas de Carla y la comenzó a penetrar sin dejar de besarla, carla gemía y mordía sus dedos de placer mientras Pablo la embestía, Pablo dejó su boca y bajo a sus senos, comenzó a lamer los pesones de Carla y a morderlos suavemente, Carla estaba en éxtasis, y Pablo comenzó a sentir que su cuerpo no aguantaría mas, tomó a Carla y la puso en posición de perritos, le agarró los brazos y siguió embistiéndola con todo su ser, sus respiraciones eran fuertes y rápidas, sus gemidos casi sonaban al unisono, y tomo un poco mas de tiempo para que Pablo se corriera con todo dentro de Carla, esta callo cansada boca abajo y Pablo se aparto un poco de ella, hasta, que en ese preciso momento Pablo lo vio, su majestuoso trasero a su alcance, Pablo se acerco a el mientras Carla seguía jadeando y lo comenzó a manosear.

Carla no decía nada, solo cerro sus ojos y jadeaba mas lento cada vez, Pablo abrió sus glúteos y admiro su ano, no parecía penetrado con anterioridad y esto sobreexcitó a Pablo, el ser el primero en probarlo, este se acerco y empezó a pasar su lengua alrededor de el, Carla solo emitió un suave gemido y al ver que no oponía resistencia, Pablo empezó a palpar con su lengus su ano, y de a poco la fue introduciendo dentro de ella, suavemente mientras Carla cada vez aumentaba sus gemidos y se mordía los labios, Pablo notó la excitación de Carla y comenzó a hacerlo mas fuerte, hasta que metió su dedo anular en la boca de Carla, ella lo lamió suavemente y Pablo lo introdujo en su ano, Carla saltó de súbito y Pablo le dijo:

- Relájate, o tu esfinter se apretara. - Dijo Pablo.

Carla asintió con su cabeza sin dejar de morderse los labios y nuevamente se agacho, Pablo metió su dedo de nuevo lentamente hasta que Carla sentía mas placer que dolor, la dilatación comenzó y Pablo fue cambiando de dedo, por el índice, luego el dedo medio, hasta que le dijo:

- Ya no aguanto mas, aquí voy. - Le dijo Pablo y acto seguido la besó y mordió su lengua.

Pablo se acomodo y agarro su pene, usó los glúteos de Carla para masturbarse un poco y posó su pene en el anillo de su ano, lo comenzó a introducir de a poco mientras carla se abria sus nalgas con sus manos, poco a poco tomo fuerza y carla gemía como nunca antes, el placer y el toque de dolor la volvía loca mientras Pablo usaba sus manos para jugar con los labios de su vagina y su clítoris. Pablo le daba con todo lo que podía hasta que finalmente su cuerpo llego al límite y lleno el ano de Carla con sus fluidos. Carla gritó de placer y se corrió cuando sintió el calor en su ano.

Ambos cuerpos cayeron exhaustos por la experiencia y solo jadeaban, luego de un rato ambos de acostaron el la cama y se besaron hasta quedarse dormidos, al día siguiente carla abrió sus ojos y lo primero que vio fue a Pablo al lado de ella, ella lo abrazaba y le gustaba la escena y el momento, luego de un rato Pablo despertó mientras Carla se vestía, a lo que ella objetó:

- Gracias... por todo, lo pase excelente. - Dijo Carla.
- Cuando quieras . - Dijo Pablo.

Carla paró de vestirse y de la nada le dijo a Pablo:
- ¿Me prestas unos jeans?. Ayer rompiste los míos... - Dijo carla mientras miraba sus calzas rotas en el piso.

- Toma los que quieras... pero me los tienes que traer de vuelta. - Repuso Pablo.

Carla sonrió, se vistió y se fue de esa casa no sin antes besar a Pablo en su mejilla y decirle que volvería pronto, muy pronto.