Mi nombre es Laura, tengo 36 años, estoy separada y esta es mi la historia de mi primer trío.
A Pablo lo conozco desde la escuela primaria, somos amigos desde que yo tenía 12 años y el 13. Nos hicimos muy amigos a pesar que él iba un año más adelante que yo, lo que pasa es que tanto él como yo tenemos hermanas más chicas que también iban al colegio juntas. Por lo tanto nuestros padres se hicieron muy amigos y compartíamos reuniones, vacaciones, viajes, etc.
La cosa es que desde chicos siempre tuvimos atracción sexual, nunca nos enamoramos ni nada por el estilo, pero sí siembre hubo tensión entre nosotros.
La cosa es que los años pasaron, yo me casé, él se casó y entre las parejas nos hicimos muy amigos; yo me hice súper amiga de su esposa Mariela. Eramos las dos parejas inseparables, cenábamos, salíamos juntos, nos íbamos de vacaciones, etc.
Después de un tiempo de casada me separé y ellos me acompañaron mucho durante esté período. Una noche me invitaron a cenar a su casa... Nada extraño, siempre lo hacía; Pablo cocinó para las dos y acompañamos la cena con bastante vino tinto, y champaña... La cosa es que todos estábamos un poco tomados y en la sobremesa, mientras comíamos algo de postre empezamos a charlar sobre sexo, sobre fantasías... No se ni en que momento empezamos a hablar de tríos... Yo decía que de hacerlo lo haría con dos hombres, y a lo sumo si era con otra mujer no la tocaba. Mariela también decía que le gustaría hacerlo con dos hombres, pero también fantaseaba con otra mujer... Obvio que Pablo soñaba con hacerlo con dos mujeres, y entre joda de la noche nos decía que lo hagamos los tres. Siempre en tono de joda, pero si le salía le salía, empezó a tocarle las tetas a Mariela y a decirme: "Mirá que par de tetas tiene, ¿no te tientan?" La verdad que Mariela tenía un par de gomas impresionante, operadas, pero divinas. Yo por mi parte tengo tetas chicas, lindas, pero un culo bien grande, bastante parado. Soy petisita, flaca y con lindas piernas y con buenas caderas para acompañar la cola. La cosa que en la joda fui y le toque las tetas a Mariela, nada, como en joda y le decía a Pablo: ¿te calienta? y él me respondía obvio! Entre esta joda de tocarle las tetas a Mariela me di cuenta que los pezones se le habían puesto duros, eso no se porque me empezó a excitar... En el juego erótico ella me empezó a tocar los pechos a mí... Y yo también me calenté... No lo pude evitar, nunca había pensado estar realmente con una mujer... La cosa que entre manos van manos vienen, empezamos a manosearnos mal... Ya mi respiración se notaba agitada... Mariela de repente se me acercó y me plantó un beso en la boca, al cual yo correspondí... De repente nos paramos frente a la mesa, nos estábamos transando, ella había puesto sus manos en mi culo y yo deslicé mi mano por debajo de su remera y le toqué una teta (ella no usaba corpiño nunca después de la operación)... Me estremecí, no podía creer estar tocándole una teta a una mujer y mucho menos a mi amiga... Ella me agarraba con fuerza la cola, nos pegamos los cuerpos... En eso siento que Pablo me apoya por detrás... Uff.. que calentura... Estabamos por acabar con la tensión sexual acumulada tantos años. Yo sentí su pija durísima apoyada en mi culo y de repente sus manos comenzaron a acariciar mis tetas. No podía más, estaba prendida fuego, sus manos comenzaron a tocar mis pezones parados. Yo instintivamente le saqué la remera a Mariela, la deje en tetas... Para ese momento Pablo se había ido detrás de su mujer, le sostenía los pechos con sus manos y me dijo: "Chupáselos" De repente estaba con mi boca en una de sus tetas, chupando un pezón duro y excitado. Pablo le tomó una mano a mariela y se la colocó en mi conchita, sobre mi jean. Ella me empezó a frotar, como haciéndome una paja por arriba del pantalón. Sin darme cuenta lo tenía a Pablo chupandome las tetas a mí y desabrochandome el jean. No aguanté más y yo empecé a tocarle la pija, le desabroché el pantalón y metí mi mano para tocar esa pija dura. Mariela me había contado que la tenía grande, más bien gorda, ancha más que larga, aunque no era corta, por el contrario, tenía un tamaño increíble.
Nada, la cosa es que de repente estábamos los tres en su cuarto, Pablo tirado en la cama y Mariela y yo a su lado, en tetas, yo todavía con la tanga y ella sin nada. Las dos de rodillas, una frente a la otra, ella agarró mi mano y se la puso en su concha, empecé a masturbarla, estaba toda mojada, no podía más con mi calentura. Pablo empezó a tocarme el culo, a meterme los dedos, a pajearme, yo separé las piernas y él se puso debajo para empezar a chuparme la concha. Estaba que explotaba, pajeando a mi amiga, mi mejor amigo comiéndome el clítoris y tocándome el culo. A la vez que jugueteaba con mi ano... Mariela se recostó y yo me abalancé para chuparle la conchita, la tenía toda depilada... Por primera vez sentí el sabor de una mujer, estaba re caliente, gimiendo yo y ella. Pablo con su chupada me hizo acabar como una perra, me dejó en cuatro, se puso atrás y me la empezó a meter. ¡Qué pija por dios! Que caliente que estaba, en eso dejé de darle bola a Mariela, quería cogerme a Pablo a full, quería sentirlo. Me estaba taladrando, yo gritaba de placer. Mariela se había puesto al lado y se pajeaba mirándonos. Yo la miraba a ella, me gustaba ver como se tocaba la concha y se agarraba una teta.
Me cogió hasta que acabé como una puta. Cambiamos de posición y el se acostó, yo lo monté y empecé a cabalgarlo. Me metía la pija hasta el fondo, Pablo me tocaba las tetas y el orto. Me tocaba mucho el orto, me tenía ganas y yo lo sabía... Me lo abría y metía un dedo... Por dios, como estábamos... Mientras lo tenía abajo metiéndome la pija me pajeaba como una puta, me encanta tocarme mientras me penetran, quería acabar de nuevo, me tiré para adelante, recostandome en su pecho. En esa posición siento que Mariela viene por detrás y empieza a chuparme el culo, me lo abría y me metía la lengua por el ojete. Como me gusta que me chupen bien el orto, me encanta... A ella también le gustaba chuparmelo, estaba como loca, me cogía con la lengua. Tenía la pija entrando y saliendo de mi concha, mi mano pajeandome y Mariela comiendo mi culo... Acabé de nuevo como una trola... Y sabía lo que venía... Pablo me dice: "te quiero coger el culo", "muero por hacerte la cola Laura" Yo le dije que sí, me puse en cuatro para recibir su pija dura, pero el como que me levanto el torso, quedé algo como arrodillada... Mariela se puso delante mío, yo me sostuve con una mano en el hombro de ella y con la otra le empecé a tocar una teta... Pablo acercó su pija a mi orto ensalivado por Mariela y mis jugos... Me la empezó a meter, despacio, dejando que mi culo le coma la pija... Por dios, que gorda y cabezona la tenía, me estaba partiendo al medio, pero me encantaba... Empece a gemir, empecé a comerle la boca a Mariela y saqué la mano que tenía en su teta y la empecé a pajear... Ella hizo lo mismo conmigo, me empezó a pajear y yo me dilaté más... Mi culo estaba totalmente abierto, la pija dura y gorda de Pablo me penetraba la cola como nadie me la había cogido nunca... Estaba en las nubes, empecé a gritar de dolor y placer... El me dijo: "que ganas tenía de cogerte hija de puta, que ganas de metertela en este orto enorme" "Cómo me pajie pensando en este culo" Y me la metía cada vez más fuerte y más rápido, yo le decía: "Mirá como me estas cogiendo la cola, mirá!!!!" "Me estás rompiendo el culo, dame, dame, dame hijo de puta" Estaba sacada, con la pija a fondo, la concha mojada y la mano de Mariela pajeandome. Ella me decía: "Que puta sos amiga, que puta" "Como te gusta que te hagan el orto" Yo la pajeaba a ella, Pablo en ese momento me agacho, Mariela se acostó, abrió las piernas y le empecé a chupar otra vez la concha, se acomodó, se puso debajo de mi concha y mientras Pablo me hacía el orto, Mariela me chupaba la concha y yo a ella. Además le empecé a meter los dedos por el culo a ella... Nuevamente acabe como una puta en celo, ella también y Pablo mientras la tenía adentro de mi orto me preguntó si quería que me acabara en la cola... Le dije que sí, ¡que hijo de puta, se le puso más dura! Me lleno el orto de leche, sentí como me acababa adentro... Sacó despacio la pija de mi culo destrozado a esta altura... Me chorreo la leche...
Desde aquella vez, todavía no volvimos a coger, pero no puedo dejar de pajearme pensando en esa noche, en la pija de Pablo cogiendome, en la experiencia lésbica con Mariela...
A Pablo lo conozco desde la escuela primaria, somos amigos desde que yo tenía 12 años y el 13. Nos hicimos muy amigos a pesar que él iba un año más adelante que yo, lo que pasa es que tanto él como yo tenemos hermanas más chicas que también iban al colegio juntas. Por lo tanto nuestros padres se hicieron muy amigos y compartíamos reuniones, vacaciones, viajes, etc.
La cosa es que desde chicos siempre tuvimos atracción sexual, nunca nos enamoramos ni nada por el estilo, pero sí siembre hubo tensión entre nosotros.
La cosa es que los años pasaron, yo me casé, él se casó y entre las parejas nos hicimos muy amigos; yo me hice súper amiga de su esposa Mariela. Eramos las dos parejas inseparables, cenábamos, salíamos juntos, nos íbamos de vacaciones, etc.
Después de un tiempo de casada me separé y ellos me acompañaron mucho durante esté período. Una noche me invitaron a cenar a su casa... Nada extraño, siempre lo hacía; Pablo cocinó para las dos y acompañamos la cena con bastante vino tinto, y champaña... La cosa es que todos estábamos un poco tomados y en la sobremesa, mientras comíamos algo de postre empezamos a charlar sobre sexo, sobre fantasías... No se ni en que momento empezamos a hablar de tríos... Yo decía que de hacerlo lo haría con dos hombres, y a lo sumo si era con otra mujer no la tocaba. Mariela también decía que le gustaría hacerlo con dos hombres, pero también fantaseaba con otra mujer... Obvio que Pablo soñaba con hacerlo con dos mujeres, y entre joda de la noche nos decía que lo hagamos los tres. Siempre en tono de joda, pero si le salía le salía, empezó a tocarle las tetas a Mariela y a decirme: "Mirá que par de tetas tiene, ¿no te tientan?" La verdad que Mariela tenía un par de gomas impresionante, operadas, pero divinas. Yo por mi parte tengo tetas chicas, lindas, pero un culo bien grande, bastante parado. Soy petisita, flaca y con lindas piernas y con buenas caderas para acompañar la cola. La cosa que en la joda fui y le toque las tetas a Mariela, nada, como en joda y le decía a Pablo: ¿te calienta? y él me respondía obvio! Entre esta joda de tocarle las tetas a Mariela me di cuenta que los pezones se le habían puesto duros, eso no se porque me empezó a excitar... En el juego erótico ella me empezó a tocar los pechos a mí... Y yo también me calenté... No lo pude evitar, nunca había pensado estar realmente con una mujer... La cosa que entre manos van manos vienen, empezamos a manosearnos mal... Ya mi respiración se notaba agitada... Mariela de repente se me acercó y me plantó un beso en la boca, al cual yo correspondí... De repente nos paramos frente a la mesa, nos estábamos transando, ella había puesto sus manos en mi culo y yo deslicé mi mano por debajo de su remera y le toqué una teta (ella no usaba corpiño nunca después de la operación)... Me estremecí, no podía creer estar tocándole una teta a una mujer y mucho menos a mi amiga... Ella me agarraba con fuerza la cola, nos pegamos los cuerpos... En eso siento que Pablo me apoya por detrás... Uff.. que calentura... Estabamos por acabar con la tensión sexual acumulada tantos años. Yo sentí su pija durísima apoyada en mi culo y de repente sus manos comenzaron a acariciar mis tetas. No podía más, estaba prendida fuego, sus manos comenzaron a tocar mis pezones parados. Yo instintivamente le saqué la remera a Mariela, la deje en tetas... Para ese momento Pablo se había ido detrás de su mujer, le sostenía los pechos con sus manos y me dijo: "Chupáselos" De repente estaba con mi boca en una de sus tetas, chupando un pezón duro y excitado. Pablo le tomó una mano a mariela y se la colocó en mi conchita, sobre mi jean. Ella me empezó a frotar, como haciéndome una paja por arriba del pantalón. Sin darme cuenta lo tenía a Pablo chupandome las tetas a mí y desabrochandome el jean. No aguanté más y yo empecé a tocarle la pija, le desabroché el pantalón y metí mi mano para tocar esa pija dura. Mariela me había contado que la tenía grande, más bien gorda, ancha más que larga, aunque no era corta, por el contrario, tenía un tamaño increíble.
Nada, la cosa es que de repente estábamos los tres en su cuarto, Pablo tirado en la cama y Mariela y yo a su lado, en tetas, yo todavía con la tanga y ella sin nada. Las dos de rodillas, una frente a la otra, ella agarró mi mano y se la puso en su concha, empecé a masturbarla, estaba toda mojada, no podía más con mi calentura. Pablo empezó a tocarme el culo, a meterme los dedos, a pajearme, yo separé las piernas y él se puso debajo para empezar a chuparme la concha. Estaba que explotaba, pajeando a mi amiga, mi mejor amigo comiéndome el clítoris y tocándome el culo. A la vez que jugueteaba con mi ano... Mariela se recostó y yo me abalancé para chuparle la conchita, la tenía toda depilada... Por primera vez sentí el sabor de una mujer, estaba re caliente, gimiendo yo y ella. Pablo con su chupada me hizo acabar como una perra, me dejó en cuatro, se puso atrás y me la empezó a meter. ¡Qué pija por dios! Que caliente que estaba, en eso dejé de darle bola a Mariela, quería cogerme a Pablo a full, quería sentirlo. Me estaba taladrando, yo gritaba de placer. Mariela se había puesto al lado y se pajeaba mirándonos. Yo la miraba a ella, me gustaba ver como se tocaba la concha y se agarraba una teta.
Me cogió hasta que acabé como una puta. Cambiamos de posición y el se acostó, yo lo monté y empecé a cabalgarlo. Me metía la pija hasta el fondo, Pablo me tocaba las tetas y el orto. Me tocaba mucho el orto, me tenía ganas y yo lo sabía... Me lo abría y metía un dedo... Por dios, como estábamos... Mientras lo tenía abajo metiéndome la pija me pajeaba como una puta, me encanta tocarme mientras me penetran, quería acabar de nuevo, me tiré para adelante, recostandome en su pecho. En esa posición siento que Mariela viene por detrás y empieza a chuparme el culo, me lo abría y me metía la lengua por el ojete. Como me gusta que me chupen bien el orto, me encanta... A ella también le gustaba chuparmelo, estaba como loca, me cogía con la lengua. Tenía la pija entrando y saliendo de mi concha, mi mano pajeandome y Mariela comiendo mi culo... Acabé de nuevo como una trola... Y sabía lo que venía... Pablo me dice: "te quiero coger el culo", "muero por hacerte la cola Laura" Yo le dije que sí, me puse en cuatro para recibir su pija dura, pero el como que me levanto el torso, quedé algo como arrodillada... Mariela se puso delante mío, yo me sostuve con una mano en el hombro de ella y con la otra le empecé a tocar una teta... Pablo acercó su pija a mi orto ensalivado por Mariela y mis jugos... Me la empezó a meter, despacio, dejando que mi culo le coma la pija... Por dios, que gorda y cabezona la tenía, me estaba partiendo al medio, pero me encantaba... Empece a gemir, empecé a comerle la boca a Mariela y saqué la mano que tenía en su teta y la empecé a pajear... Ella hizo lo mismo conmigo, me empezó a pajear y yo me dilaté más... Mi culo estaba totalmente abierto, la pija dura y gorda de Pablo me penetraba la cola como nadie me la había cogido nunca... Estaba en las nubes, empecé a gritar de dolor y placer... El me dijo: "que ganas tenía de cogerte hija de puta, que ganas de metertela en este orto enorme" "Cómo me pajie pensando en este culo" Y me la metía cada vez más fuerte y más rápido, yo le decía: "Mirá como me estas cogiendo la cola, mirá!!!!" "Me estás rompiendo el culo, dame, dame, dame hijo de puta" Estaba sacada, con la pija a fondo, la concha mojada y la mano de Mariela pajeandome. Ella me decía: "Que puta sos amiga, que puta" "Como te gusta que te hagan el orto" Yo la pajeaba a ella, Pablo en ese momento me agacho, Mariela se acostó, abrió las piernas y le empecé a chupar otra vez la concha, se acomodó, se puso debajo de mi concha y mientras Pablo me hacía el orto, Mariela me chupaba la concha y yo a ella. Además le empecé a meter los dedos por el culo a ella... Nuevamente acabe como una puta en celo, ella también y Pablo mientras la tenía adentro de mi orto me preguntó si quería que me acabara en la cola... Le dije que sí, ¡que hijo de puta, se le puso más dura! Me lleno el orto de leche, sentí como me acababa adentro... Sacó despacio la pija de mi culo destrozado a esta altura... Me chorreo la leche...
Desde aquella vez, todavía no volvimos a coger, pero no puedo dejar de pajearme pensando en esa noche, en la pija de Pablo cogiendome, en la experiencia lésbica con Mariela...
4 comentarios - Historia real de mi primer trio con mi mejor amigo y su espo