La fiesta, era una más…
Mis pensamientos estaban en otro lado. No esperaba nada de esa noche…
La banda sonaba de fondo y yo me encontraba con amigos en el patio del lugar.
Fumando. Tomando cerveza. Riéndonos de anécdotas de otra vida.
Te vi. Me miraste. Nos conocíamos. Pero no te ibas a acercar. Estabas con otros. Y yo rodeada de los míos.
Aun así, te las ingeniaste para sacarme del grupo de gente.
Para atraparme con una conversación sobre las cosas que nos gustaban. Creamos nuestra burbuja. Y el mundo se deshizo detrás de nosotros.
Solo nuestras voces y la conversación.
Hicimos planes…miles… los dos queríamos eso. Lo anhelábamos. Lo deseábamos. Jugábamos a rozarnos provocándonos escalofríos en la piel.
Pude notarlo, comprobarlo.
Hiciste lo mismo y esbozaste una sonrisa de esas hermosas que tenés.
Cordialmente, sugeriste irnos del lugar. Acepte.
Mi casa no quedaba tan lejos. Te invite.
Subimos al taxi. Indiqué la dirección. Te mire y una vez más esa risita desarmo mi mirada.
Te acercaste y derretiste mi boca.
Esta boca que supo besar a otras. Ahora, quería besar por última vez, a un extraño. Necesitaba saber que solo existían esos labios y nada más.
No tardamos en llegar.
Entre risas y mimos subimos al ascensor. Solo eran pocos pisos. No podíamos hacer travesuras. Ya las haríamos.
Entraste a mi casa y nuestra ropa nos desenfundó.
Torpemente nos caímos en la cama. Besos. Caricias. Todas disgregadas por la cama.
Mi piel un fuego. Tu boca el agua que podía apagarla.
Mis manos hacían perfecta sincronía con tus caderas. Acariciaban mi objeto de deseo. No paso mucho tiempo para que se encuentre con mi boca. Quien recorría cada cm de él. Lo degustaba. Se fundía en el sin dejar lugar por recorrer.
Me sacaste de mi postura. Me pusiste boca debajo en la cama. Lamiste mi espalda. Besaste cada porción de ella. Me cuerpo se arquea acompañando a tu boca.
"Te deseo desde hace mucho tiempo" supiste susurrar. A lo que le correspondí una mirada acompañada de una gesto de aceptación.
Seguía boca abajo. Tu peso en mi espalda. Tu boca tenia apresada mi cuello. No quería ni iba a escapar...
...
Mis dientes presionaban tu cuello, dejándolo casi morado... un tatuaje personal para el recuerdo.
Los dedos hacían los garabatos más espectaculares que jamás sentiste en tu espalda desnuda... la saliva hacía el intento por enfriar temporalmente la densidad de la situación.
Mientras la luna llena que se escurría por los huecos de la ventana y nos bañaba con su resplandor... la melodía de tus gemidos era todo lo que oía como banda sonora...
Tus manos estrujaban las sabanas... con el descender de mis labios por tu columna, un quejido y el estallar de una sonrisa.
Dulcemente un templo me aguardaba por conocer, entre dos montes firmes que se abrieron paso ante la insolencia de mi atrevida lengua; allí, labios embadurnados de licores exóticos me aguardaban...
Con gestos de caballerosidad di la bienvenida y besé cada porción de tus delicados labios... Al parecer ésto te producía mezcla de cosquillas con placer, hasta que un intenso grito tuyo desgarró tu cuerpo y desató temblores en todos tus músculos.
Comprendí que debía continuar con la convicción de encontrar tu centro de placer... me despedí de tus muslos y luego de tus pantorrillas...
Encontré refugio a mi desesperación en el cruce de vías que formaban tu cuerpo... decidí ocultarme allí. Penetré lentamente tu guarida... exquisita, húmeda y brotando de las paredes, néctar de tus entrañas.
Abrí paso por tus piernas ya duro, lentamente, para hacerte desear... gemías, entre dolor placentero y éxtasis sin saciar... siempre me gusto jugar así con las mujeres pero vos, sos especial. Una vez dentro por completo, me rogaste que no contuviera nada de lo que sentíamos, de todo lo que nos habíamos prometido y habíamos fantaseado
Aceleramos la marcha, involuntariamente nuestros cuerpos nos lo exigían, con cada estocada se liberaba un frenesí de locura y pasión, de deseo y lujuria... Mis respiraciones agitadas hacían eco las tuyas, tus súplicas eran cada vez más imperativas
Tus pechos se mecían al compás de nuestros cuerpos, que se tornaba cada vez más en una escena de bestias poseídas a punto de desfallecer... ardían voluptuosamente.
Te advertí que estaba por verter mi elixir preciado entre tus piernas y que desbordarías... al oírme decir eso, tu perversión se disparó... te apartaste de mí, diste la vuelta y me desplazaste sobre la cama...
Los ojos llenos de desenfreno me miraron... la mueca de tu sonrisa malévola fue un gesto de tranquilidad.
Si decir que tus labios no me hicieron perder en la demencia completa sería mentira, que tu lengua hizo de manto de placer, es poco... A medida que replicabas con la boca y las manos lo que hacías con tu sexo, arrojabas tus miradas punzantes
Ante el ultimátum de advertencia, introdujiste absolutamente todo hasta tu garganta... y viendo mis ojos perdidos en la nebulosa, recibías ese licor que tanto ansiabas...
Mis pensamientos estaban en otro lado. No esperaba nada de esa noche…
La banda sonaba de fondo y yo me encontraba con amigos en el patio del lugar.
Fumando. Tomando cerveza. Riéndonos de anécdotas de otra vida.
Te vi. Me miraste. Nos conocíamos. Pero no te ibas a acercar. Estabas con otros. Y yo rodeada de los míos.
Aun así, te las ingeniaste para sacarme del grupo de gente.
Para atraparme con una conversación sobre las cosas que nos gustaban. Creamos nuestra burbuja. Y el mundo se deshizo detrás de nosotros.
Solo nuestras voces y la conversación.
Hicimos planes…miles… los dos queríamos eso. Lo anhelábamos. Lo deseábamos. Jugábamos a rozarnos provocándonos escalofríos en la piel.
Pude notarlo, comprobarlo.
Hiciste lo mismo y esbozaste una sonrisa de esas hermosas que tenés.
Cordialmente, sugeriste irnos del lugar. Acepte.
Mi casa no quedaba tan lejos. Te invite.
Subimos al taxi. Indiqué la dirección. Te mire y una vez más esa risita desarmo mi mirada.
Te acercaste y derretiste mi boca.
Esta boca que supo besar a otras. Ahora, quería besar por última vez, a un extraño. Necesitaba saber que solo existían esos labios y nada más.
No tardamos en llegar.
Entre risas y mimos subimos al ascensor. Solo eran pocos pisos. No podíamos hacer travesuras. Ya las haríamos.
Entraste a mi casa y nuestra ropa nos desenfundó.
Torpemente nos caímos en la cama. Besos. Caricias. Todas disgregadas por la cama.
Mi piel un fuego. Tu boca el agua que podía apagarla.
Mis manos hacían perfecta sincronía con tus caderas. Acariciaban mi objeto de deseo. No paso mucho tiempo para que se encuentre con mi boca. Quien recorría cada cm de él. Lo degustaba. Se fundía en el sin dejar lugar por recorrer.
Me sacaste de mi postura. Me pusiste boca debajo en la cama. Lamiste mi espalda. Besaste cada porción de ella. Me cuerpo se arquea acompañando a tu boca.
"Te deseo desde hace mucho tiempo" supiste susurrar. A lo que le correspondí una mirada acompañada de una gesto de aceptación.
Seguía boca abajo. Tu peso en mi espalda. Tu boca tenia apresada mi cuello. No quería ni iba a escapar...
...
Mis dientes presionaban tu cuello, dejándolo casi morado... un tatuaje personal para el recuerdo.
Los dedos hacían los garabatos más espectaculares que jamás sentiste en tu espalda desnuda... la saliva hacía el intento por enfriar temporalmente la densidad de la situación.
Mientras la luna llena que se escurría por los huecos de la ventana y nos bañaba con su resplandor... la melodía de tus gemidos era todo lo que oía como banda sonora...
Tus manos estrujaban las sabanas... con el descender de mis labios por tu columna, un quejido y el estallar de una sonrisa.
Dulcemente un templo me aguardaba por conocer, entre dos montes firmes que se abrieron paso ante la insolencia de mi atrevida lengua; allí, labios embadurnados de licores exóticos me aguardaban...
Con gestos de caballerosidad di la bienvenida y besé cada porción de tus delicados labios... Al parecer ésto te producía mezcla de cosquillas con placer, hasta que un intenso grito tuyo desgarró tu cuerpo y desató temblores en todos tus músculos.
Comprendí que debía continuar con la convicción de encontrar tu centro de placer... me despedí de tus muslos y luego de tus pantorrillas...
Encontré refugio a mi desesperación en el cruce de vías que formaban tu cuerpo... decidí ocultarme allí. Penetré lentamente tu guarida... exquisita, húmeda y brotando de las paredes, néctar de tus entrañas.
Abrí paso por tus piernas ya duro, lentamente, para hacerte desear... gemías, entre dolor placentero y éxtasis sin saciar... siempre me gusto jugar así con las mujeres pero vos, sos especial. Una vez dentro por completo, me rogaste que no contuviera nada de lo que sentíamos, de todo lo que nos habíamos prometido y habíamos fantaseado
Aceleramos la marcha, involuntariamente nuestros cuerpos nos lo exigían, con cada estocada se liberaba un frenesí de locura y pasión, de deseo y lujuria... Mis respiraciones agitadas hacían eco las tuyas, tus súplicas eran cada vez más imperativas
Tus pechos se mecían al compás de nuestros cuerpos, que se tornaba cada vez más en una escena de bestias poseídas a punto de desfallecer... ardían voluptuosamente.
Te advertí que estaba por verter mi elixir preciado entre tus piernas y que desbordarías... al oírme decir eso, tu perversión se disparó... te apartaste de mí, diste la vuelta y me desplazaste sobre la cama...
Los ojos llenos de desenfreno me miraron... la mueca de tu sonrisa malévola fue un gesto de tranquilidad.
Si decir que tus labios no me hicieron perder en la demencia completa sería mentira, que tu lengua hizo de manto de placer, es poco... A medida que replicabas con la boca y las manos lo que hacías con tu sexo, arrojabas tus miradas punzantes
Ante el ultimátum de advertencia, introdujiste absolutamente todo hasta tu garganta... y viendo mis ojos perdidos en la nebulosa, recibías ese licor que tanto ansiabas...
29 comentarios - Puntos de vista
Ooh, entre más consigo de ti, más extraño se siente sí
Ahora que tu rosa está floreciendo
Una luz llega a la penumbra en el campo 🎶 🎶
(Kiss from a rose ; Seal )
en unos minutos vuelvo con puntos , por ahora te dejo un beso (ya se que es poco 😃 )
gracias 🙂
Me pusiste boca debajo en la cama. Lamiste mi espalda. Besaste cada porción de ella. Me cuerpo se arquea acompañando a tu boca
👏 👏 👏 👏 😈
Hubo ciertas modificaciones en algunos puntos, no?
Gracias por escribir conmigo 🙂
Dio la casualidad que tocó en un momento muuuuuuuuy complicado, no obstante la esencia se mantuvo 😃
Puntos y a favoritos! besoo
Magnífico Belona...!!! Me encantó el relato a dos voces... y super hot!!! 🔥 🔥 🔥
Volveré
ud siempre un deudor.. jajajaj
Muy bueno !!!!
Gracias por compartir.
Angie te deja Besos y Lamiditas !!!
La mejor forma de agradecer la buena onda que se recibe es comentando, al menos al que te comenta. Yo comenté tu post, vos comentaste el mío?
Compartamos, comentemos, apoyemos, hagamos cada vez mejor esta maravillosa Comunidad !!!
Te zarpas Belooo! Gracias por hacer que mi semana empiece un poquito mas dura... 😉
Beso hermosa!
Firma: LA histe:p
tu especialidad belo 😉
Como me gusta como escribis!!
Me encanta!!
Gracias por compartir
Excelente!! Poesía pura sin dejar de hacerme cosquillear la entrepierna... te fuiste al carajo!! jajja
Muchas gracias por compartir!
Besos
Mimilau[/b] 💕
Gracias! 🙂
Te deje los puntos que me quedaban en tus ultimas historias.