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Dulce Erika (Relato)

Dulce Erika (Relato)

Aqui les traigo este relato que me gusto mucho, no es mio pero se que les va a gustar mucho

Última hora de clase, cansado ya de todo el dia intento escuchar atento a mi profesor de física hablar de las leyes de Kepler... "Kepler enunció estas tres formulas empíricamente, darse cuenta, descubrir que el cuadrado de los periodos es proporcional al cubo de las distancias medias al Sol es algo increible, pues (...)"
Voy tomando nota en el margen de mi libro cuando mi mirada se descuida por un momento hacia mi derecha, mi compañera, Érika, tiene las piernas cruzadas y un chupachups en la boca que relame una y otra vez de una manera tan sensual que parece hacerlo a camara lenta. Se me escapa una risita al verla y digo bromeando: Deja de hacer eso Eri, me estás poniendo burrisimo, jaja. Me mira por un momento a los ojos muy seriamente, y me dice en voz baja: ¿te gusta?. Me quedo un tanto perplejo y noto como mi pene se pone firme en un instante. Se lo disimulo y sigo copiando, pasan unos segundos y sin desviar mi vista de la pizarra, noto su presencia cerca de mi cara, y me susurra al oido: estás... caliente? ...
me rio sin mirarla y le advierto sin poder evitar una risa: si sigues le voy a tener que pedir al profesor que nos deje ir al baño jajaja. - No... pero esta tarde mi madre no está en casa... -dice ella
En ese momento me quedé pensando un rato y concluí: voy a seguirle el rollo a ver que pasa.
- Así que esta tarde podemos estar solitos en tu casa no? ... - totalmente solos -dice con una sonrisa. -Pero tienes condones? -claro.
Los dos sonrientes no decimos nada más, ahí queda la conversación hasta que por fin suena el timbre, cojo mi chaqueta y salgo por la puerta, cuando casi habia llegado al final del pasillo, me agarra del brazo y me dice al oido: a las 4. Y se me adelanta lanzandome una mirada casi indescriptible.

Llegué a casa, comí viendo, como siempre, los Simpsons y a continuación Padre de familia en la sexta... cuando terminó, estaba yo en el sillón casi dormido y con una de las cordoneras desatadas, me incorporo y me la ato, miro el reloj y son las 3:45, no habia podido quitarme de la cabeza aquello de que Érika podria estar hablando en serio, no sabia si ir, porque si iba quizás se enfadaria conmigo por habermelo creido, pero en caso contrario, podria haber perdido una oportunidad que no se tiene todos los dias: una chica dulce, guapa, ingeniosa... y además estaba buenisima, para qué engañarnos. Tras un instante llegué a la conclusión de que debia ir: una chica que habia cortado con su novio hacia unas semanas podria estar realmente hablando en serio ¿no?. Así que se me ocurrió que si no se esperaba que fuera, al menos deberia llevar una excusa para haber ido: un libro, un libro que me prestó hace tiempo y que aun no se lo habia devuelto, seria, al menos, una excusa... aunque no vendria muy a cuento llevarle el libro a las 4 de la tarde pudiendo incluso darselo al dia siguiente en clase, pero en fin, no me repliqueis que no se me ocurriera otra cosa, era una situación un tanto delicada.

Estuve mirando todo el camino la portada del libro, abriendolo, cerrandolo, todo con la intención de evitar los nervios que tenia, pero fue inutil porque justo antes de llegar me entró un fuerte cosquilleo en el estómago, respiré hondo un par de vece, llegué hasta su portal y llamé al 7ºA, esperé varios segundos y sin que nadie respondiera se abrió la puerta, en ese momento me entró la duda, pues aquel era el momento para echarse atrás, pero no, entré y dejé sonar el portazo ya subiendo las escaleras de la entrada, cogí el ascensor y llegué a su piso: llamo a su puerta, me tiemblan las piernas, no me aguanto más, no se si irme, pues tarda mucho en abrir, quizás no esté, quizás sea su madre... pienso muchas cosas, muchas tonterias... finalmente abre la puerta: Era ella, descalza, con un pantaloncito muy corto, fino y ajustado, color rosado, con una camiseta de manga cota que le llegaba por el ombligo y con un chupachups en la boca, relamiendolo con una risita muy excitante.... yo, de nuevo paralizado y con una cara desconcertante.... extiendo el brazo y le doy el libro. Lo coje, lo mira y se parte de risa, lo deja encima de un mueble, y acontinuación me agarra de la camiseta y me tira hacia dentro.e.. se pone muy seria, muy salvaje, muy mala lla, se aproxima y deja que note su aliento en mi cara... entonces me besó, me besó apasionadamente, como si estuviera deseandolo desde hace tiempo, y yo, que lo deseaba desde hace mucho más... la abracé por la cintura, bajando hasta su culo, la subí en peso y la llevé hasta su habitación, la dejé caer sobre la cama y me empecé a desnudar. Ella mientras tanto, sin su inolvidable sonrisa, continuaba relamiendo su chupachups mientras jugaba con sus pies descalzos.
Me quedé en calzoncillos y me eché en la cama con ella, metí mis manos por dentro de su camiseta, no llevaba sujetador asi que pude sobarle bien los pechos... juntamos nuestras caras toncandonos con la punta de nustra nariz... dandonos besitos por todo el rostro.

Se levantó y empezó a palpar mi pene con el calzoncillo aun puesto, metió sus manos frias a través de él y manoseó mis testiculos.... relamió todo mi miembro como antes lo hacia con su chupachupus, ahora sí que me estaba poniendo burrisimo. Después de aquello se levantó, y ví como se alejaba hacia el armario su silueta desnuda, rebuscando encontró los preservativos, se dio la vuelta, fue a cerrar un poco la persiana y de nuevo a la cama. Ella misma me puso el condón con total delicadeza, y ella misma se introdujo mi pene en su vagina: comenzó a saltar agarrandose su melena y mordiensose un poquito el labio inferior.
Le dije que se tumbara, que cerrara los ojos, queria hacerle sentir lo que ella me habia hecho sentir a mí antes. Recorrí todo su cuerpo, su pecho, su vientre, a besos.

Aquella noche dormí bastante bien, tal vez Kepler descubriera el movimiento de los planetas empiricamente, yo también descubrí a Érika de la misma manera.
A partir de entonces, cuando veo que en clase tiene un chupachups en la boca, sabrá que a las cuatro en punto estaré en su puerta con un libro cualquiera en la mano.

1 comentarios - Dulce Erika (Relato)

BigWomanNQN +1
Vos no escribis??? me gustó mucho este relato...
DFCubillos
Ami tambien me encanta ese relato, voy a ver si escrino uno de mi autoria 🙂