Uniforme de empleada -pija dura asegurada-

Esta historia sucedió hace 2 años, en enero de 2010, laburaba por ese entonces como administrativo en un country de la zona sur. El barrio estaba en construcción, no había gente habitando todavía, pero si, mucho movimiento, muchas máquinas laburando y mucha entrada y salida de autos y camiones porque todos estaban apurados por estrenar sus casas.

Yo laburaba en una oficina dentro del country, un lindo lugar, rodeado de naturaleza y lagunas, pero un poco alborotado, era pleno enero, mucho calor afuera y mucho trabajo, y yo como buen laburante quería dejar bien acomodado mi laburo antes de irme de vacaciones.
Va, esa era mi excusa, eso era lo que le decía a mi jefe, cuando me preguntaba por que caía tan temprano a laburar, quería dejar todo acomodado para cuando vuelva de las vacaciones no tener quilombos, que los contratistas no me puteen, y yo irme tranquilo.
Pero la realidad era otra, yo iba temprano porque sabía que la chica que limpiaba iba muy temprano a trabajar, dejaba todo limpio para que cuando lleguemos todo esté en condiciones. Y al llegar las 9 se retiraba. El dato me lo había pasado el de seguridad -son los mas chusmas siempre- todos estábamos al palo con la que limpia, pero este tenia mucha data, como se había venido vestida, quien la pasaba a buscar, que si tenia novio, donde vivía, el tipo se la quería bajar con todas las ganas y yo le sacaba todos los datos que tenia.

Antes yo solo me la cruzaba 5 minutos, cuando ella terminaba su laburo, cruzabamos un par de palabras y se iba.

La chica en cuestión era una petizita, 25 años, en días de verano se venia a laburar en musculosa bien apretada y arriba se ponía el uniforme clásico de empleada de limpieza camisa de color verdecito de tela finita, pero en días de calor no se ponía el pantalón correspondiente, se quedaba en pollerita, mostrando sus cortas pero hermosísimas piernas, bien prolijitas y brillosas, se desprendía los primeros 2 botones de la camisa, marcando un insipiente escote, que enmarcaba ese par de tetas grandes, redondas y bien turgentes. Una carita de nena, que la hacia parecer de mucho menos edad, una voz muy dulce, ojos miel y una sonrisa muy compradora. Al salir de esa menera recibía una artillería de piropos malos proveniente de los camioneros que no paraban de entrar y salir, y del guardia que se la cojía con la vista. Ella nunca hacia muecas de desagrado, aceptaba todo con una de sus sonrisas.

Entonces empecé a caer a desayunar directamente en el laburo, me despertaba con triple alarma, me bañaba y cambiaba, me subía al auto y caía lo mas temprano posible. En vez de caer a las 9, empecé a ir a las 8 y hasta incluso 7.30, sacar tiempo de sueño me requería un esfuerzo grande, pero por verla hacía cualquier cosa.

Arranque a ir temprano en octubre, así que ya para enero nos conocíamos bastante bien. Al principio solo la miraba, pero no sabia como entablar conversación, me inhibía a pesar de los datos que tenia, ella era bastante reservada, hacia su laburo sin hablarme y me esquivaba bastante.
Intenté de varias formas, llevando facturas, corriéndome para que ella limpiara mi lugar, poniendo música, ayudándola a correr muebles, trayéndole la escalera, todo un caballero servicial. La mina notó la onda que le ponía, y que hacía cualquier cosa menos laburar. y así la confianza se fue abriendo.

El punto máximo de charla se daba en torno a la máquina de café. Cuando se acercaba la hora de irse, ella venía para donde estaba yo y nos tomabamos uno. Excusa perfecta para sacarle charla.
Los temas empezaron a ser los clásicos, de pareja, de su novio, de mi novia, de planes, de clima, de familia, de chismes internos, de boliches, del fin de semana, y se fueron poniendo calentitos.
Las charlas derivaron en telos conocidos, habitaciones temáticas, las odiadas esperas de turno, de cuando el turno te queda largo, de cuando el turno te queda corto, de pernoctes, fantasías, posiciones, aventuras, infidelidades, de lencería , jueguetes y fetiches.
Ella empezaba a venir cada vez mas temprano a tomarse el cafecito, sabíamos que a las 9 empezaban a caer todos, y el rato previo era nuestro rato para calentarnos.

A ella le encantaba contar, disfrutaba de ver mi cara de pajero -y es que yo me la imaginaba haciendo todo lo que me contaba- me volvía loco mal. Me especificaba como se cogía al novio y de como lo hacia con los anteriores. De lo que le gustaba y de como le gustaba. Yo sabía todo, era un fichero lleno de información, y leche. Yo también le contaba cosas, pero era ella casi siempre la protagonista y la que tenía las mejores historias. Me dejaba al palo y se iba, contenta, siempre lo lograba.
Con el verano no pude mas, le leche con ella me hervía. La muy perra sabía que estaba buena, se notaba su seguridad al caminar, con ese orto hermoso, sabia que me calentaba como nadie y jugaba con el morbo de la empleada doméstica. Era un combo explosivo.

Hasta que un día estallé, fue decidido a ponérselas, viernes, dia soleado, fui con ropa casual, facherito, con mi mejor perfume y con la pija bien lavadita.
La muy puta parece que también estaba con ganas, días anteriores me había empezado a tirar la onda de que el novio no la estaba atendiendo como quería, y estaba molesta y con cara de fastidio.

Mi oficina era toda vidriada, con vista a una frondoza arboleda y un gran parque, los vidrios eran totalmente traslucidos de adentro hacia afuera, pero desde afuera no se veía para adentro, nada, eran espejados totalmente, y ella aprovechó la situación.
Se había venido mas puta que nunca, las ganas de pija la estaban alterando. Pollerita de jean bien cortita dejando ver cada vez mas sus piernas y marcando bien la colita, pelo suelto, ya no mas rodete, uniforme con 3 botones desabrochados y unos zapatos con taco -por charlas sabía lo que me encantaba cojerme minas en taco altos- asi como estaba se puso a limpiar los vidrios de mi oficina -siempre lo hacia antes de que llegue- desde afuera, yo la veía, pero ella no. Empezó a limpiar uno por uno con delicadeza pero jugando su juego, yo me paré junto al vidrio, al lado de ella, pero ella no me veía, le miraba el uniforme, las piernas, los pies bien arregladitos, sus movimientos hacían vambolear ese par de tetas, y su femeneidad desbordaba. yo estaba en llamas, me sente en la silla de mi jefe y sacando al pibe afuera empecé a pajearme, viendola, y ella disfrutaba haciendose la puta, se agachaba, se ponía de cuclillas dejando ver su tanguita entre la pollerita, se pone en cuatro de costado para limpiar otro de los vidrios, se desabrocha otro botón, se toca el pelo, se acomoda la pollerita, me deja ver todo su corpiño, sabía que yo estaba allí, sino donde iba a estar? y cada tanto subía la mirada mirando para adentro de la oficina, buscando mi mirada, pero obviamente no me veia. los dos estábamos en llamas, y a medio desvestir, pero jugando con que el otro estaba del otro lado.
Hasta que no aguanté mas, abrí la puerta/ventana que separaba con el exterior, al lado de la que ella estaba limpiando, la agarro de la cintura y la entro a la oficina de un empujón. Ella queda contra el escritorio, de frente, sin decir nada, parada de piernas abiertas, esperándome, y de una le clavo un beso furioso, de lengua apurada, en éxtasis total, ella me responde con una lengua bien agitada, recorriendo toda mi lengua, me separo de su boca y apoyándole mi verga entre sus piernas que ya estaban sentada sobre el escritorio de mi jefe, y al mismo tiempo besandole el cuello, sentía el calor de su piel, con cada beso en el cuello una arremetida de pija, su piel latía y estaba riquísima, su perfume se esparcia con el calor, la cabeza de mi pija se frotaba con su bombachita rosa totalmente humedecida.
Le desabrocho totalmente la camisa, solo tenia abajo el corpiño, notando lo caliente que habia venido a laburar, no las saco todavía afuera y las apreto con fuerza y le mando una chupada a la raya entre las tetas, busco sus pezones por debajo del corpiño y los apreto, estan bien erectos como yo, que ya empiezo a largar el preseminal mientras ella me pajea y hace que le acerque la pija a su conchita. Le saco el corpiño y de un segundo al otro tengo terribles tetas frente mio, se las chupo con dedicación por un buen rato, ella gime y se retuerce. Hasta que se deja caer sobre el escritorio, apoya su espalda, ojos cerras y las piernas totalmente abiertas, se entrega totalmente al placer de mis besos. Me pongo de costado, me desvisto totalmente y le apoyo la pija en los labios, esos labios carnosos la besan y lamen con ganas, intenta agarrala con las manos pero no la dejo -me contó que le encanta ser dominada y yo juego ese juego- la agarro de las manos y la inmovilizo. yo manejo la situación, ella juega el rolll de la sumisión, es mi esclava esta mañana. Le paso la verga por todas las tetas, y le ordeno me haga una turca, accede como buena putita, y me amasa la pija con terribles pechos mientras le manda lamiditas a la cabeza, No me mira a los ojos, juega bien su roll y se concentra en la pija, la saca de las tetas y la disfruta con la boca, la lame de arriba abajo, le pido se la meta toda adentro hasta que hace arcada por tocarle la campanilla, la saca toda babeada y vuelve a hacerlo repetidas veces. Mi pija esta ardiendo y su concha empieza a manchar de fluidos el escritorio. Me pide la coja ya mismo, me hago rogar y le digo que la siga chupando por un rato mas. hasta que me dice:
- coje ahora daleeeeee, no aguanto mas, ME COJO ENCIMA -haciendome bebota-
los dos estallamos en risa -de ahi viene mi nick-

Empiezo a chuparle su cadera, le sobresalian unos pequeños salvavidas por sobre la pollerita y eso me calentaba, le hacia cosquillas mis besos y arqueaba su cuerpo, puedo ver la tirita de su tanga y eso me calienta muchísimo, le meto la pija entre la tirita y empiezo a pajearme contra su piel.

El calor de nuestros cuerpos era altísimo, le saco la tanga hasta las rodillas -me encanta dejarla a media altura- le levanto las piernas, le como todos sus jugos, su conchita divina esta empapada, y totalmente depilada, se la chupo con desesperación, mis ganas de comerla toda me sobrepasaban. Le agarro sus delicadas piernas y las apoyo en mi hombro, abriendo todo ese espectáculo para mi, jugueteo con mi verga por sus labios, su conchita está bien hinchada y con el clitoris sobresalido, y se lo empiezo a masajear con la punta de la verga unos minutos, hasta que ella con su mano apunta mi pija en su entrada y muy despasito la mete, mi verga es ancha y eso un poco le duele hasta que los jugos acomodan todo. No puedo creer tener la pija adentro de esa conchita tan hermosa bien calentita y empapada, su cara de placer me enloquece, la bombeo agarrandome de su pollera y de sus piernas, ella no para de gemir, fuerte, total no hay nadie en todo el lugar, muevo la pija en círculos, la saco y la meto, los ruidos de nuestros fluido son sinfonías para mi, ella se acomoda buscando una mejor penetración, yo me quedo sin moverme y ella comienza a moverse, no quiere dejar de sentir ni un segundo, arremeto con todo mientras le beso las piernas en lo alto, junto sus piernas, las levanto aun mas y mi verga entra en toda su extensión, no para de gemir. ella esta a punto de acabar -y yo sabiendo que su posicion favorita es el parrito- rapidamente la saco, la levanto, la doy vuelta, ella apoya su conchita sobre el esctitorio y abre las piernas lo mas que puede.

Me abstraigo unos segundos, y veo terrible hembra con las tetas apoyadas en el escritorio, en cuatro, con los tacos puestos, la bombacha a la altura de las rodillas, un culo redondo, mojadito, de color rosado por la friccion contra el escritorio, bien paradito y con la concha abierta bien dilatada.
La agarro de la cintura y la monto con toda la fuerza, ella no para de gritar, le meto la pija a tope, hasta que no entre mas, le mando unos chirlos de mano abierta, ruidosos y con fuerza, le apreto el culo, la marco toda. la separo del escritorio y le aprieto bien fuerte las tetas, su espalda esta traspirada, ella toda esta transpirada, nuestras respiraciones estan agitadísimas, ella pide que le de con toda la fuerza, mientras hace presión con las paredes internas de su conchita buscando sentir mas el ancho de mi pija, la penetro a mayor velocidad, ella explota en gemidos y acaba largando unas gotas de pis que caen entre sus piernas. Deja de moverse y yo la sigo bombeando con igual intensidad, estoy por acabar, saco la pija, me pajeo viéndola todavía en cuatro, y le dejo el regalito sobre la pollera que ya estaba por arriba de su ombligo. Caigo contra ella. Estamos exhaustos. Me siento en una silla a descanzar, ella se saca la bombacha y se sienta arriba de mis piernas de frente a mi, puedo sentir como su concha todavia late y su respiración busca tranquilizarse. Mi pija sigue latiendo, ella me aprieta los huevos buscando sacar hasta la ultima gota. nos abrazamos y besamos con mucha pasión y cansancio.

Son las 9, ella se viste, y va al baño a arreglarse y limpiarse el lechazo, al salir ella caen los primeros autos de mis compañeros, me tira un beso y sale por la puerta, hasta la garita de seguridad donde la está emperando su novio el taxista, que no tiene ni idea de los bien garchada que se la lleva.

Llegada la tarde, a mi salida, el de seguridad no me abre la barrera, se acerca al auto, y me increpa:
- Hijo de puta vos te bajaste a Victoria no? me vinieron a avisar que en la oficina se escuchaban ruidos, salió tarde, desarreglada y con cara de relajada, asi que ni me habló. y remata con tono de enojado, te acercas de nuevo y te cago de trompadas escuchaste?
Le respondo con una sonrrisa en la cara acompañada de un gesto de aceptación con la cabeza, y subo el vidrio. Tiempo después renuncié por quilombos con este tipo.

El primero fue un polvo antológico, perverso y sucio, pero iban a venir muchas más.

PD. Si se calentaron un poquito, dejan puntos y recomendaciones, que me falta poco para salir de pobre.



LES DEJO EL LINK A MI 1ER RELATO:
UN CUMPLEAÑOS ENTRE PRIMOS
http://www.poringa.net/posts/relatos/2360573/Un-cumpleanos-entre-primos.html