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La misteriosa bolsa de papel

1era parte http://www.poringa.net/posts/relatos/2231821/_Fantasia-o-realidad_.html
2da parte http://www.poringa.net/posts/relatos/2261492/Se-me-hizo-el-milagro_.html


Hoy les voy a contar qué contenía es misteriosa bolsa de papel, se me hace muy difícil seguir a la par con lo que les cuento y lo que me pasa ahorita, sólo puedo adelantarles que estuve dos semanas en Los Roques disfrutando de lo lindo.

En el relato anterior me quedé en la maravillosa noche que pasé gracias a mi amado Paulo. Bien, pasamos toda la noche como los propios conejos, tuvimos sexo como hasta aproximadamente las 5 de la mañana, todos sudados. Me desperté a las 10 de la mañana porque insistentemente tocaban el timbre, se me hizo muy extraño no conseguir a mi amante junto a mí en la cama. Rápidamente me desperté y abrí la puerta cuando es un mensajero que me trae un gran ramo de rosas blancas y una tarjetita que decía:


"La sorpresa que la vida nos dará pronto se queda corta para el regalo que me diste anoche. Gracias por esperar por mí. Paulo"


Al principio estuve como una adolescente enamorada corriendo por toda la casa, feliz hasta que leí con detenimiento la primera parte de la inscripción: La sorpresa que la vida nos dará... No le presté mayor importancia y salí a comprar al supermercado. Sentí que todas las miradas de mis vecinos estaban sobre mí, sentí como si hubiera hecho una travesura, no podía evitar reírme. Ya en el auto, camino al super, pensé una y otra vez que lo que hacía era una completa locura, el hombre de mi vida, por quien tanto esperé estuvo en mi cama hace horas, haciéndo y deshaciendo mi cuerpo a cada embestida suya. Me temblaban las piernas de tan sólo recordar.

Tomé mi carrito y compré ingredientes para hacer una comida especial, quería invitarlo para que pasara la noche conmigo otra vez, quería que se repitiera el momento, ida en mis pensamientos me conseguí a mi enemiga interior, Mónica. Quise que no me viera, pero fue inútil.

- Hola Jenny, tanto tiempo sin verte gorda, ¿cómo estás?

- Hola Moni, ¿que más?

- Excelente gorda. Mira, qué harás este fin de semana.

- No sé. ¿Por qué lo preguntas?

- Tengo 4 entradas para ir al cine a ver "Azul y No tan Rosa" (una película venezolana, todavía en cartelera)

- Ah que bien, no he visto esa película todavía... (en realidad la vi, pero me dio un poco de lástima desairarla aunque sé cuáles eran sus intenciones)

- Marica, ¿enserio? Bueno, son para el sábado. Vas con tu novio, porque me imagino que tienes, ¿verdad?

Aquí no sabía que responder, no sabía si confesarle que le "quité" a su posible empate o inventarme algo para salir del apuro.

- Bueno... yo...

En ese momento sentí que me salvó la campana, su actual pareja la llamó para que se acercara a la caja a pagar.
Respiré hondo, no se los niego pero aún no sabía qué decir para cuando se me presentara una situación como esa de nuevo.

- Hablamos después, mira que el gordo me llama. Chau gorda, anota mi número nuevo.

Lo anoté casi sin ver.

- Andamos por texto... Chau

En ese momento me di cuenta que me caía más mal de lo que pensaba.

Fui al trabajo a buscar unas cosas pendientes que tenía, regresé a mi casa y me pareció muy extraña la tensa calma que había, fui al cuarto y casi al toque llegó mi amante, mi Paulo, elegantemente trajeado.

-¿Dónde vamos amor?

-Voy a llevarte a las estrellas

-Estás bien soñador... ¡Pasa!


Nos besamos y entró directo al cuarto. Paulo se caracteriza por ser muy paciente, tranquilo, pero esta vez estaba muy inquieto, como obsesionado por tener sexo conmigo. Cuando voy a buscar mi teléfono en el cuarto y dedicarme a preparar la receta que tenía pensada, me encuentro con Paulo desnudo esperándome para continuar con la acción, pero esta vez la misteriosa bolsa de papel no estaba donde la dejó hace horas atrás. La colocó frente a la cama, en un lugar visible, frente al espejo que está en la peinadora del que se convirtió en nuestro nido de amor y perversión.

Pregunté por la bolsa y me dijo que cuando casi empecemos con el "Blowjob" sacaría un gran regalo.

Emocionada fui, me abalancé sobre él y ya en menos de 3 minutos continuamos con el episodio de la noche anterior.

-Jenny, sabes que yo te amo mucho, cierto?

*Claro amor, (glup) lo sé (glup)

- Voy a darte un regalo que te hará sentir en las nubes, regreso enseguida.

* Te espero cielo

Fue hacia la misteriosa bolsa y sacó un envase, como unas gotas rosadas que colocó en mi clítoris y en la entrada de mi cosita, no lo entendí muy bien al principio, pero luego, con pocas gotitas toqué el cielo y regresé, no hubo nada mejor y excitante que eso.

-Sólo algunas gotitas...

*Oye, ¿qué haces? Que estás poniendo en mi coñ... AAAYYYYY

-Siente el poder dentro de tí (glup)

*¿¡QUÉ PODER!? ESO ARDE MUCHO

-Perdona, déjame ayudarte. ¿Te gustaría si te pongo mi lengua... AQUÍ?

*Mmmmh, no, sigue... Ahhhhh...

-¿Y si meto uno de mis deditos... AQUÍ?

*Ay papi, sigue.. ayyy... mmmm...

-¿Mejor? ¿Quieres que siga? (schhhuck)

*Dame más papi, sigue.. Mételo, dá... me... Ahhhhhh... mmmm...


Señoras, señores, esas gotitas son MARAVILLOSAS. Dios, qué sensación... Estuvo divirtiéndose comiendo mi coñito recién desvirgado, lamiendo y chupando por doquier. Le supliqué que por favor me cogiera ya, necesitaba sentir su verga dentro de mí otra vez.

Tuve una noche de sueño desenfrenado, tuve una noche extenuante. ¿Pensar en comer? Por Dios, cómo pensar en eso si tengo un palo rico a mi alcance durante toda la noche, durante todo el día, la semana y mi vida.

Aproximadamente nos detuvimos a las 4 de la mañana, ya cansados. Luego, al notarlo medio dormido, me intrigó lo que seguía habiendo en la misteriosa bolsa de papel. A leguas, en medio de la obscuridad, veía como unos papeles, y algo pesado al fondo. Revisé mi teléfono y vi un mensaje de Mónica que decía:

"Mrk, no me dejes mal, ve conmigo el sábado al cine, tengo q contarte varias cosas y algo q me inquieta. Chau"

Recordé que no le confirmé si iba. Ya a esa hora me dio pena contestarle, me lo envió a las 8:36 pm, recuerdo la hora perfectamente, a esa hora Paulo y yo comenzábamos nuestra faena y escuché vibrar el teléfono encima de la mesita de noche o de luz (como le quieran llamar). Me desentendí, literalmente del mundo. Fui al baño a ducharme y al regresar, busqué una crema en la peinadora y pude sentir cuánto pesaba la dichosa bolsa, no era tan pesada, pues tenía miedo que fuera una cámara o algo así.

Escuché uno de sus ronquidos, me asusté y fui a echarme la crema en mi cuerpo, notablemente diferente, ya con las secuelas de un cambio interno y externo. *Ya soy una mujer... Me siento una verdadera mujer... pensé.

La salida al cine se cayó porque Mónica se enfermó, otra vez me salvé, de más está decir que Paulo nunca supo nada.

Así, la retahíla sexual duró alrededor de 2 semanas, sin saber qué tenía esa dichosa bolsita. Me enfrenté a Paulo hace 3 semanas:

*Mi gran amante, ¿qué guardas ahí en esa bolsa?

-¿Realmente quieres saberlo ahora?

*Sí mi amor, tú sabes que soy muy curiosa, jijiji...

-Si tú lo quieres...

Cuando sacó lo que estaba ahí dentro era un pendrive y una caja de perfume.

*¿Tanto misterio para eso? Nooo chico, ¿qué me quieres decir con esto?

- En el pendrive está toda mi verdad, está todo lo que me ocurrió en esos dolorosos 3 meses. Prométeme que vas a abrir la caja de perfume luego de haber leído todo lo que está en el pendrive.

* Okey, está bien...- dije con un tono escéptico.

Para hacer más corto el cuento, en el pendrive él estuvo escribiendo cosas para mí, todos sus sentimientos reprimidos, día por día, lo que sucedía en su trabajo, cosas personales, y la falta que le hacía. No me atreví a abrir la caja de perfume, aunque esa misma noche leí todo lo que él me escribió.

-¿Vas a abrir la caja de perfume ahorita?

*No, me da cosita...

-¿Cómo que te da cosita? Ven que te hago el trabajo más fácil.

* no, deja, yo lo hago.

-Cuándo, ¿mañana en la mañana?

*Fíjate que me gustaría así, como a las 8 antes de irme a trabajar.

- Está bien... me voy a dormir.

Desde que nos encontramos, esa fue la única noche que no tuvimos intimidad.
La mañana siguiente, como todas no lo encontré en mi cama, pero aún estaba en la casa, dejó su celular al lado de la dichosa y bendita bolsa, además de que su traje aún estaba en el suelo.

No aguanté más y abrí la caja de perfume. Como una aparición salió del baño, sin toalla, todo desnudo pero sin una erección, con una apariencia más relajada. Dentro de la caja de perfume encontré unas hojas de papel donde decía esto:

"Eres tú la única que existe y existirá en mi vida, sólo contigo puedo sentir la locura y pasión, amor y ternura, lujuria y cuidado, deseo y respeto, todo lo que antes imaginé, tú lo tienes.

Así que quiero hacerte una pregunta decisiva: ¿Querrías casarte con este imbécil que dejó pasar tanto tiempo para darse cuenta que no hay más mujer tan fogosa, amorosa y hermosa que tú?"


Mientras yo lo leía, él lo iba recitando de memoria, arrodillándose y quitando de mis manos la caja y enseñándome un gran anillo de compromiso. Desde mi ángulo de visibilidad veía sus manos, y veía su gran pene al mismo tiempo. Me tardé en responderle, pensé en todo. ¡TODO! Cómo haríamos con nuestras familias, organizar la boda, invitados, tarjetas de invitación, iglesia, recepción, salón de fiestas, luna de miel, etc, etc, etc...

Pero me venció el amor y la posibilidad de tener siempre que quiera mi súper amante cada noche.

Y en este preciso instante estamos en Los Roques, de luna de miel haciendo "guarradillas" por doquier, y pronto zarparemos a un crucero por todo el Caribe. Debo ordenar las ideas para contarles lo que sucedió luego de esta propuesta matrimonial inusual (creo) y más interesante, antes de la boda.

¡CASADA CON EL HOMBRE QUE TIENE EL PALO MÁS GRANDE DEL MUNDO! -para mí lo es-

1 comentarios - La misteriosa bolsa de papel

ines22ramirez
un relato precioso, te felicito
David12Freak
Muchas gracias, aún me falta por contar. Besos!
-Jenny