Hola a todos me presento como EscritorP, primeramente iba a ser EscritorP! pero a razón de que es imposible crear un carácter especial en el nick he quedado sin el signo de exclamación.
Hace un tiempo, unos meses, conocí la página y fui viendo de que se trataba, he visto que hay mucha gente con diversas posturas y mucha variedad con todo lo relacionado al sexo, pero sobretodo lo que más me invitó a unirme es que se busca un clima de armonía y respeto que me pareció excelente.
Les cuento que me gusta escribir (como hobbie) y el sexo, por lo que espero hacer un buen papel aquí con mis relatos, que les entretengan y gusten, con textos propios que en su mayoría serán ficticios y quizás en algún momento agregue historias reales.
Ladrón que roba a ladrón (Parte I - Introducción)
Bueno para comenzar con esta historia me parece correcto presentarme, mi nombre es Augusto, hombre de unos 39 años casi cuarentón, de un físico modesto (creo que es inevitable tener esa panza denominada cervecera que es como un hijo más en la vida de un hombre y que a decir verdad la llevo con la frente en alto), por el resto me cuido y hago ocasionalmente deporte en el club o con mis amigos. Siguiendo con las presentaciones debo nombrar a mi esposa Sarah, de unos 35 años, muy atractiva físicamente donde se destacan su bello rostro y su bien marcada cadera junto con su cola, a la cual conocí a mis 28 años y tras estar 2 años noviando decidimos casarnos, sin tener por ahora hijos.
Si bien ella y yo nos amamos, siempre hemos tenido en claro que el sexo es una parte fundamental en la pareja, y a pesar de que ninguno le ha sido infiel al otro hemos experimentado todo lo que nos ha sido posible y hemos querido en este ámbito, exceptuándose tríos o cambios de pareja. Esto es en parte porque yo no podría compatirla (pueden llamarme egoísta) con otro hombre, no soportaría ese rol, y ella simplemente no se ve atraída con la idea de estar con otra mujer a lo cual yo la respeto.
Ahora bien, hará aproximadamente 6 años somos socios de un club barrial donde ambos vamos a ejercitarnos o simplemente a pasar el día, ya que allí conocimos muchos amigos que hemos cosechado a lo largo de los años. La historia comienza aquí mismo en el club, hace unos 2 meses ingreso una pareja de chicos jóvenes Nicolás de 22 años y su novia Laura de 20, ambos se ejercitan como todos y se ve que les gusta mantener bien su cuerpo y ser saludables, cosa que muchos chicos de hoy en día parecen haber olvidado.
Laura, se fue convirtiendo poco a poco en una amiga de Sarah y era habitual encontrarlas a ambas jugando partidos de paddle en pareja o una contra la otra, se llevaban a las mil maravillas pareciendo amigas de toda la vida, en cuanto a Nicolás era habitual encontrarlo en la zona de gimnasio utilizando los aparatos o haciendo algún partido de fútbol, mientras que en mí caso soy más recurrente de la pileta del club pero admito que no le escapo a un fútbol con los amigos.
Si bien Laura que era una chica atractiva no llamaba mi atención, Nicolás que era un poco engreído y agrandado menos, pero Sarah en cambio se iba haciendo más y más amiga de ellos, fue así que nos terminamos presentando todos, y organizando un asado para el fin de semana (aproximadamente 3 semanas atrás). Lo que sería un asado que terminaría cambiando completamente mis últimas semanas hasta la fecha…
CONTINUARA …
PD: Sepan disculpar que falte acción pero no quería aburrirlos tampoco, la segunda parte se pondrá más interesante.
Hace un tiempo, unos meses, conocí la página y fui viendo de que se trataba, he visto que hay mucha gente con diversas posturas y mucha variedad con todo lo relacionado al sexo, pero sobretodo lo que más me invitó a unirme es que se busca un clima de armonía y respeto que me pareció excelente.
Les cuento que me gusta escribir (como hobbie) y el sexo, por lo que espero hacer un buen papel aquí con mis relatos, que les entretengan y gusten, con textos propios que en su mayoría serán ficticios y quizás en algún momento agregue historias reales.
Ladrón que roba a ladrón (Parte I - Introducción)
Bueno para comenzar con esta historia me parece correcto presentarme, mi nombre es Augusto, hombre de unos 39 años casi cuarentón, de un físico modesto (creo que es inevitable tener esa panza denominada cervecera que es como un hijo más en la vida de un hombre y que a decir verdad la llevo con la frente en alto), por el resto me cuido y hago ocasionalmente deporte en el club o con mis amigos. Siguiendo con las presentaciones debo nombrar a mi esposa Sarah, de unos 35 años, muy atractiva físicamente donde se destacan su bello rostro y su bien marcada cadera junto con su cola, a la cual conocí a mis 28 años y tras estar 2 años noviando decidimos casarnos, sin tener por ahora hijos.
Si bien ella y yo nos amamos, siempre hemos tenido en claro que el sexo es una parte fundamental en la pareja, y a pesar de que ninguno le ha sido infiel al otro hemos experimentado todo lo que nos ha sido posible y hemos querido en este ámbito, exceptuándose tríos o cambios de pareja. Esto es en parte porque yo no podría compatirla (pueden llamarme egoísta) con otro hombre, no soportaría ese rol, y ella simplemente no se ve atraída con la idea de estar con otra mujer a lo cual yo la respeto.
Ahora bien, hará aproximadamente 6 años somos socios de un club barrial donde ambos vamos a ejercitarnos o simplemente a pasar el día, ya que allí conocimos muchos amigos que hemos cosechado a lo largo de los años. La historia comienza aquí mismo en el club, hace unos 2 meses ingreso una pareja de chicos jóvenes Nicolás de 22 años y su novia Laura de 20, ambos se ejercitan como todos y se ve que les gusta mantener bien su cuerpo y ser saludables, cosa que muchos chicos de hoy en día parecen haber olvidado.
Laura, se fue convirtiendo poco a poco en una amiga de Sarah y era habitual encontrarlas a ambas jugando partidos de paddle en pareja o una contra la otra, se llevaban a las mil maravillas pareciendo amigas de toda la vida, en cuanto a Nicolás era habitual encontrarlo en la zona de gimnasio utilizando los aparatos o haciendo algún partido de fútbol, mientras que en mí caso soy más recurrente de la pileta del club pero admito que no le escapo a un fútbol con los amigos.
Si bien Laura que era una chica atractiva no llamaba mi atención, Nicolás que era un poco engreído y agrandado menos, pero Sarah en cambio se iba haciendo más y más amiga de ellos, fue así que nos terminamos presentando todos, y organizando un asado para el fin de semana (aproximadamente 3 semanas atrás). Lo que sería un asado que terminaría cambiando completamente mis últimas semanas hasta la fecha…
CONTINUARA …
PD: Sepan disculpar que falte acción pero no quería aburrirlos tampoco, la segunda parte se pondrá más interesante.
3 comentarios - Ladrón que roba a ladrón (Parte I - Introducción)
PD: Gran frase "El que le gusta leer relatos no se aburre".