Definitivamente voy a seguir cogiéndote!

Bueno amigos porigueros...les dejo mi nuevo relato. Es corto, pero seguro les va a gustar!

Definitivamente voy a seguir cogiéndote

De la risa a la atracción hay un solo paso…
No sé cómo ni en que momento la conversación se desvirtúo, pero me encantó.
A esa primera conversación le siguieron otras, alternando chistes y relatos sexuales que calentaron mis tardes, mis noches, mis guardias…robándome horas de sueño.
El deseo comenzó a tomar forma rápidamente, la urgencia de encontrarnos nos invadió…
Hasta que luego de una sucesión de juego de palabras surgió la pregunta esperada:
- ¿Cuándo?
El viernes fue el día pactado, el lugar ¨Mi casa¨ y así comenzamos a contar las horas.

Por algún extraño motivo los nervios no me invadieron, durante todo el día estuvimos en contacto hasta que llegó la hora indicada y me llegó un mensaje ¨ring¨, sonreí, ya estaba en la puerta.
Lo vi parado esperándome…me saludo con uno de sus chistes, yo atiné a darle un beso en la mejilla, pero él se dirigió directamente a mi boca, tomándome por sorpresa.
Las ganas se hicieron presentes apenas cruzamos la puerta, me pidió un beso y no lo dude…me entregué a su boca. Sus manos me exploraban y podía sentir a través de la ropa como crecía su erección..
Con su cuerpo apretado contra el mío, el deseo empezó a hacerse real. Ya estaba húmeda y deseosa de tocarlo, besarlo, lamerlo y sentirlo.
Me condujo hacía la cama…
- ¿Así querías tenerme?
- Si, exactamente así – respondí
- Quiero chupártela – me dijo al oído
- Hacelo entonces

Su lengua se deslizó por mi cuerpo, jugo con mi clítoris haciéndome estremecer, entraba y salía de mí…me cogía, me lamía, me mojaba. Cuando introdujo su dedo exploté y el clímax llegó entre gemidos y temblores.
Recuperada del primer orgasmo…mi boca estaba ansiaba retribuirlo y su pija deseaba desesperadamente que lo hiciera…
Besé su boca, su pecho, su abdomen hasta apoderarme del objeto de mi deseo. La lamí y la chupé con ganas, mientras me tomaba del pelo. Ante los movimientos de mi lengua y mis labios comenzó a moverse…a cogerme la boca.
Cuando ya estaba en el punto que yo quería, repté colocándome encima suyo, tomé su pija y la introduje bien profundo en mí. Con mis pezones en su boca y sus manos en mi cintura empecé a moverme. La intensidad del movimiento y de los gemidos aumentaba, los cuerpos vibraban…en la inconsciencia provocada por la pronta llegada del éxtasis, siento su mano rebotar contra una de mis nalgas y escuchando ese hermoso sonido…acabo por fin.
Boca arriba en la cama lo recibo y lo abrazo con mis piernas mientras me coge fuerte, bien hondo, su pulso se acelera al igual que su respiración, siento como su cuerpo convulsiona dentro mío, entregándome su orgasmo.
La noche se prolongo entre risas, caricias, besos y orgasmos…
Definitivamente voy a seguir cogiéndote