La veterana y el virgen

Amigos Poringueros... Les dejo una confesión de una página en facebook que me puso full y me calentó...
Muy rica 😉 GOCENLA 😃 🤤 :F

Un estudiante cuenta:

Resulta que hace aproximadamente tres meses conocí a través de la red social badoo a una señora veterana, al principio solo buscaba charlar con ella ya que pensaba que las mujeres mayores solo buscan hombres de su edad para el sexo, ella aproximadamente de 36 años y yo con tan solo 19 y peor aun sin ningun tipo de experiencia sexual. despues de mucho conversar y luego de intercambiar algunas fotografías que por cierto eran bastante insinuantes y provocativas, decidí invitarla a salir y ella acepto. Nos encontramos en el éxito de la 68, debo decir que ese día estaba realmente hermosa, llevaba un jean licrado que se ajustaba perfectamente a su cola redonda, y a sus piernas grandes y bien proporcionadas, tenia una blusa escotada que dejaba al descubierto gran parte de sus senos. La verdad no estaba para nada mal, me saludo de beso en la mejilla y me dijo -hola mi pollo ¿como estas?, yo le salude también, sin tanta efusividad por mi nerviosismo, y tratando de disimular la erección que había tenido en ese momento. Decidí invitarla a tomar algo en una cafetería cercana, aunque ya habíamos charlado bastante por Internet y por teléfono sentí que la idiotez que caracteriza a los hombres cuando le están cayendo a una chica se apoderaba de mi, no obstante, despues de mucho conversar me atreví a decirle que me resultaba bastante atractiva y que daría lo que fuera por darle un beso, luego de oírme ella se quedo callada, de allí en adelante tuve que adornar mi parlamento con sentimentalismos y sobresaltando cualidades que ella supuestamente solía tener, no se si el viejo truco funciono, el hecho fue que ella sonrió, me miro con algo de picardía y finalmente terminamos besándonos. la gente nos miraba y se reía pues supongo que era notorio la diferencia de edad, así le propuse comprar algo de trago e ir a un lugar donde no hubiese tanta gente. Al caminar por la calle vi que muchos hombres se quedaban mirándola, atravesamos la 68 caminando, y uno que otro conductor le echaba pito, definitivamente la vieja estaba muy buena y no quería desaprovechar ninguna oportunidad. El único lugar que encontramos para tomarnos el trago fue un parque que queda detrás del centro comercial metrópolis nos acomodamos, repartí algo de trago y comencé a besarla y ella no me rechazo, el grado de excitación aumento, empece a besar su cuello y a tocar sus piernas, de repente ella se erizo, tensiono sus músculos y me dijo que el cuello esa su punto débil, ya que ella no me reprocho mi atrevimiento seguí besando su cuello y puse una de mis manos en sus senos, ella parecía disfrutarlo, estábamos demasiado calientes. Me subí encima de ella, esta vez tenia una erección mas prominente y empece a masajearlo y a restregarlo sobre sus piernas, seguí besando sus cuello, sus senos prácticamente quedaron al aire libre, a ninguno de los dos nos importo nada, ella abrió sus piernas, puso sus manos en mis caderas y me jalo con fuerza, como invitándome a que le hiciera cuanta cosa se me ocurriera. juro que de tanto mover mi pelvis casi tengo un orgasmo a no ser por unos muchachos de colegio que nos estaban observando (malditos mocosos), dejamos un poco la manoseadera, pero las ganas seguían vivas, le comente que yo aun era virgen, luego ella me dijo: -yo ya se lo dije todo si no las cojío muy de malas. Yo interprete que si no se lo pedía en ese instante ella no me lo iba a pedir, así que nuevamente salimos hacia la la 68 esta vez cogidos de la mano y dándonos uno que otro beso durante el camino, para disimular mi erección hice que ella caminara enfrente mio, a abrase por la espalda y tuve la oportunidad de restregárselo nuevamente esta vez en su cola. abordamos un taxi y le dijimos que nos llevara a un motel cercano, durante el viaje las caricias no faltaron, ella desajusto un poco mi cinturón, metió su mano buscando mi pene y comenzó a masturbarme, yo metí mis manos dentro su pantalón buscando su cola, la agarre con fuerza y nos besamos con muchas ganas, era inevitable que el taxista nos mirara, supongo que lo disfrutaba y no nos dijo nada. llegamos al barrio las ferias, alquilamos un cuarto y esperamos a que una camarera nos entregara los condones, las toalla y el jabón chiquito. era mi primera vez así que no sabia como debía ser mi comportamiento, pero de algo tenían que servir todas películas porno que vi durante mi vida, me acosté encima de ella, quería sentirla lo mas cerca posible, enlace mis piernas con las suyas, baje su blusa hasta el borde de sus senos y los empece a chupar, mientras lo hacia mi pelvis se movía y se que ella sentía todo lo que le iba a meter, ella desabotono mi camisa mi pecho ahora podia sentir sus suaves pechos, me arrodille sobre la cama para empezar a quitar su pantalón, mientras lo quitaba mis manos sintieron sus suaves piernas y me emocione aun mas, quite su ropa interior, acaricie un poco sus piernas e incline mi cabeza para hacerle un buen sexo oral, sus piernas me apretaban fuertemente enlazamos nuestras manos con fuerza. posteriormente me levante de la cama me quite el pantalón y mi ropa interior, la agarre de sus piernas y la moví, junte sus dos piernas y las ubique en uno de mis hombros, me puse el condón y comencé a buscar a tientas su vagina, en realidad no pude, así que ella lo cojio con una de sus manos y lo encamino al lugar correcto, se sentía algo tibio y apretadito podía mover mis caderas con fuerza, y a la vez palpar sus suaves y lindas piernas, ella emitia gemidos de placer, decidí abrir sus piernas recostarme y buscar sus labios, sentir todo su cuerpo en mi, y a si fue, sus piernas se enlazaron con las mías, los dedos se entrelazaron mutuamente, sus dulces y suaves labios me besaban sin tregua, ella tubo un primer orgasmo, luego de eso ahora ella quería el control, asi que se poso sobre mi, nuevamente metió mi pene con sus manos puso sus manos sobre mi pecho y comenzó a moverse violentamente, mis manos rodearon su cintura le ayudaba a que se impulsara, era muy excitante ver como sus senos se movían cuando brincaba encima mio, pasaron varios minutos hasta que por fin eyacule, aunque estaba muy sensible mi pene no perdió erección ella se recosto sobre mi y finalmente descansamos un rato y repetimos nuevamente la faena.