Reflexiones de un hombre infiel

La pregunta del millón, ¿existe el amor?, más allá de lo que pueda contarles o no sobre mis historias, quiero abarcar ese concepto que todos intentamos descifrar, el amor, aclaro que de igual manera esto es una relato erótico y real.
Para los que no leyeron mis relatos anteriores, que aprovecho para recomendárselos, mi nombre es Juan (no real), soy casado y tengo dos hijos.
Con mi esposa nos conocimos a los 14 años, para ese entonces los dos cursábamos el secundario, entre miradas, y el clásico mi amiga gusta de vos, y mensajitos a través de nuestros amigos, hablamos y nos pusimos de novio. Al principio era todo muy de niños, hablamos un ratito en los recreos, apenas un piquito a la salida, y hasta el otro día. Pero con el tiempo, la relación fue creciendo, nos fuimos enganchando y no pasaba un minuto en que no quisiéramos estar juntos. Al cabo de 8 meses de noviazgo, decidimos tener nuestra primera vez, y fue algo soñado, lo preparamos, cena de por medio, me anime a cantarle por primera vez (soy músico-letrista), y le pedí a mí papá que me comprara un vino para esa noche tan especial (nunca tuve secretos con mi papa, y gracias a él aprendí muchas cosas, tuve la suerte de tener siempre un amigo en mi viejo), así que fue la noche perfecta, velas, vino, música, y nuestro primer gran encuentro sexual.
Al cabo de los años, al terminar el secundario, ella se tuvo que venir a vivir a bs as, y yo por mi parte había empezado mi carrera y decidimos que lo mejor era darnos un tiempo para ver nuestras prioridades e intentar con otras personas.
De ahí a que me recibí pasaron dos años, y por mi cama pasaron más mujeres que días en la semana, me desate, hice de todo, orgias, tríos, madre e hija aun que no lo crean, hice de todo pero nunca pude olvidarme de Andrea (no real) mi ex novia.
Cuando terminé mi carrera, y ante la imposibilidad de conseguir trabajo en mi provincia, surgió la posibilidad de venir a probar suerte en Bs As, al poco tiempo de venir ya estaba trabajando no justamente de administrador de empresas, pero era mejor que nada. Al poco tiempo recibo un mensaje en un red social, era Andrea, nos volvimos a encontrar, volvimos a estar juntos, nos mudamos juntos y hoy tenemos dos hijos.
Esto que voy a decir a continuación, sin ofender a la más preciada creación de dios LA MUJER, es en defensa de nosotros, el sexo masculino. Muchas veces, las mujeres son las primeras en quejarse por que con la convivencia, el sexo se vuelve monótono, parte de una rutina aburrida, y empezamos a escuchar frases como “¿ya no me amas, ya no te excitas conmigo, tenes otra no? Por eso no te gusta más hacerme el amor”, la verdad es que en todas estas acusaciones, puede haber algo de verdad y algo de mentira, muchos se van a sentir identificados con esto, te acostas te preparas para tener sexo del mejor con la mujer que amas, la empiezas a besar, le sacas la ropa , le pedís que te haga un oral y te dice “no hoy no amor hoy quiero que vos hagas todo” tampoco digo que este mal pero sigamos, se niega al oral entonces el que se pone entre las piernas a chupar es el hombre, pero cuando estas por empezar te dice “no amor quiero que me penetres , no quiero que me chupes”, tampoco eso está mal, así que bueno, clásica posición del misionero a ponerla y actuar como una maquina programada, cuando quieres chuparle los senos te dice “no, no que me voy a venir muy rápido” madre se supone que cuantos más orgasmos más rico es, cuando quieres aumentar la velocidad te dice “no más despacio”, y hasta que al final termina ella encima tuyo, como una maquina programada hasta llegar al orgasmo, y vos tenes que ir al baño a masturbarte hasta poder acabar, y cuando volves a la pieza escuchar el reproche “no acabaste, ¿Qué no te gustó?” y uno siempre caballero solo responde “si amor me encanto, pero estaba un poco cansado eso es todo” cuando ya la explicación se las di anteriormente.
Llega un momento en que todo hombre y mujer también se cansan de la monotonía sexual del matrimonio, y a veces hasta sin quererlo caen en el hermoso pecado de la infidelidad, como yo con Lorena y Susana, y en estos pocos meses en los que empecé con mis encuentros, he llegado tarde y a veces con una copita de mas, y ni siquiera escuchaba el llanto de mi esposa pidiéndome explicaciones.
Pero hace unas semanas me paso algo que nunca voy a olvidar, conocí una chica, de 19 años de una familia muy poderosa y de muchísimo dinero, una pendeja caprichosa que quiere todo lo que pide sin importarle lo que pueda causar esto en los demás. Paso a contarle lo que paso.
Llega Silvana a mi trabajo (así se llama esta chica) y me dice.
_ Tengo una propuesta que te a cambiar la vida, mis papas me pidieron que me haga cargo de los bienes familiares, y para eso me tengo que casar, así que junta tus cosas que te venís a vivir conmigo, no te va a faltar nada, y no vas a tener que trabajar más acá.
Mi cabeza dio un giro de 360 grados tratando de entender la locura que me estaba proponiendo esta chica.
_ Silvana, las cosas no funcionan así, yo tengo una familia, tengo mujer y tengo dos hijos.
_ En serio te importan, es tu oportunidad de cambiar tu vida nene, la vas a dejar pasar.
_ Como no me van a importar son mis hijos, yo no soy así, puede que con mi mujer no estemos pasando un buen momento pero de ahí a dejarla tirada, es algo que no voy a hacer.
_ Por tu mujer no te preocupes, yo me voy a encargar de que a ellos no le falte nada, y a tus hijos los vas a poder ver cuando quieras.
_ Les voy a faltar yo, a parte decime de que telenovela saliste, que tu papa te pide que te cases para manejar sus bienes, búscate otro, por más plata que haya de por medio conmigo no cuentes, o mejor pensalo bien tenes 19 años enamórate y después cásate, LA VIDA NO ES ASI NO PODES MANEJAR LA VIDA DE TODOS.
Le abri la puerta y la invite a retirarse. Al dia siguiente escuche el timbre de mi casa, salió a atender mi esposa, que vuelve en llantos diciéndome que afuera estaba una chica que le dijo que preparara mis cosas porque me vino a buscar, no podía creer lo que estaba pasando, salí a enfrentar a Silvana, le dije de todo, la insulte y la amenace con denunciarla si no me dejaba en paz, después de esto se fue sin antes decirme “te perdiste la posibilidad de cambiar tu vida”. Ya me había sacado de encima a la loca de Silvana, pero todavía me quedaba lo más difícil enfrentar a mi mujer, en mis adentros pensaba, esto me pasa por infiel, por no respetar en profundo amor que me tiene mi esposa.
Entre y trate de calmar de mil maneras el llanto de Andrea, le explique lo que sucedió con Silvana, lloro muchísimo, me abrazo como si no me quisiera soltar nunca, y me pidió que no lo dejara, que si ella tenía algo que cambiar lo haría, me sentí una basura, el desgraciado era yo y ella echándose la culpa de mis errores. Después de calmarla, la empecé a besar con más pasión de lo que pudieran imaginar, sentía en mis adentros todo el amor que le debía a mi esposa, la desnude e hicimos el amor como si fuéramos dos amantes en un encuentro clandestino, me hizo el mejor sexo oral de su vida conmigo, hicimos un 69, y la penetre en al menos 5 posiciones diferentes consiguiendo un orgasmo en cada una de ellas, por primera vez en toda nuestra relación me pidió que le hiciera sexo anal, por primera vez pude disfrutar del hermoso culo de mi esposa que siempre me lo había negado, y por primera vez me dejo acabarle en la boca y en las tetas, tragándose gran parte de mi semen, pase de ser el peor ser humano en la tierra a ser el mejor amante en la cama, y es que en verdad eso no solo fue sexo, le hice el amor a mi esposa, y como siempre les digo en todos mis relatos AMO a mi mujer y ningún ser humano en la tierra va a poder cambiar eso, por mas plata que tenga, por mas buen polvo que me haga disfrutar, como ya lo dijo una vez Borges “enamorarse, es crear una religión cuyo dios es falible”, voy a seguir cometiendo mil errores, y seguramente Andrea también, pero eso no va a cambiar nuestros sentimientos, y el hecho de que en la cama con la única persona que no tengo sexo es con ella, con Andrea hago el amor.
Muchos se sentirán identificados, quizás a muchos no les interese, pero quería sacarnos por un momento de nuestra mente todo el morbo que nos da el sexo, y comentarles que sí creo en el amor.
Respecto a mis encuentros con Lorena, a partir de lo que sucedió mi mujer me dijo que si sentía la necesidad de estar con alguien más que lo hiciera, pero que simplemente siempre llegue a casa, por mi parte le dije lo mismo a mi mujer, los dos sabemos que la rutina cansa, por eso decimos ser más liberales, pero sin afectar nuestra relación, amo a mi esposa, y eso no cambiar por acostarme con otras chicas.
Este relato es mi realidad, espero les haya gustado, y se hayan sentido identificados, es una manera de reflejar de cierta forma la cultura del amor, y la costumbre del sexo. Elmesias88.