Buenas a todo el mundo de esta comunidad tan hermosa. Para empezar una muy breve reseña de mi, bueno mi nombre ya lo ven, soy exxxe, tengo 23 y aunque hace mucho visito esta hermosa comunidad, hace poco me decidí ser parte de ella. Disfruto mucho del sexo, como todos por acá supongo, y no estaba muy seguro de qué hacer para mi primer post, así que opté por un relato de una experiencia que tuve hace un tiempo. Espero les guste.
Hace mucho tiempo, cuando tenia unos 14 años y estudiaba inglés, conocí la que hoy es una buena amiga para mi, su nombre es Mica. No fuimos nunca de juntarnos mucho que digamos, excepto cuando nos veíamos en las clases de inglés o que nos cruzaramos por ahí. Con el tiempo, sin embargo, nuestra amistad creció aunque nos veíamos menos, ella es estudiante de Medicina y es absolutamente aplicada, por lo que nos vemos literalmente una o dos veces al año, en las vacaciones.
Ese día fue su cumple y fui a verla, hizo una reunión a la noche en la casa como siempre y con el pasar de las horas y cuando todos estabamos bastante tomados nos fuimos ella y yo a comprar cigarrillos para todos porque se habían terminado. Eran algo así como las 3 de la mañana. Caminando en "S" por el medio de la calle me dijo:
-Ay boludo, no sabes lo que me pasó!
Yo la miré como preocupado, su tono me decía una cosa y como estaba un poco más sobrio que ella le presté atención y un poco me preocupé.
-Estás bien, te pasó algo, te peleaste con tu novia?- Vale la aclaración que ese día me había enterado que ella era lesbiana, nunca antes lo supe ni me dí cuenta.
-No, estamos bien, pero hoy no pudo venir porque tenía no sé que mierda que hacer con la hermana... No sé si te conté, pero me puse un piercing!!- Me sonrió ante la noticia y yo quedé aliviado, porque todo estaba bien.
-Re copado, pero dónde? en la lengua, en el ombligo, no se te ve.
-No! no me gustan en el ombligo, te acordas que tuve uno y me lo saqué. Me lo hice más abajo.-
No había nada que aclarar, nos conocíamos mucho y además con la seña que me hizo con la mirada, era más que claro. De cualquier forma me sorprendió y mi expresión de incredulidad se lo hizo notar.
-En serio boludo, no me creés, vení toca.- me dijo y me agarró la mano dispuesta a llevarla al interior de su pollerita.
-Te creo, creéme que te creo.- le dije sacando mi mano sin que ella concretara lo que estaba por hacer. Es mi amiga y esta re borracha, pensé. No da que haga esto.
En ese momento las cosas quedaron ahí, compramos lo que teníamos que comprar y volvimos a la casa con los demás... el resto de la noche transcurrió sin nada particular.
Pasó algún tiempo, alrededor de dos semanas desde esa noche y una tarde la llamé a la casa para que nos vieramos y tomaramos una cerveza por ahí. Acordamos en esa misma noche que la pase a buscar por la casa.
Así que esa noche me pegué una ducha y me fui a su casa. Al atenderme me hizo pasar y me sirvió un poco de jugo frío, la noche estaba insoportablemente calurosa, el verano entero estaba transcurriendo así.
Entre charla y charla de cualquier tema y todos a la vez como para ponernos al día, me dijo, vamos a la plaza (que está a la vuelta de la esquina de su casa) y tomamos la cerveza allá. Buscó un par de envases y nos fuimos a comprar.
Nos sentamos en un banco de la plaza con una cerveza bien helada y un freezé en las mismas condiciones. Dejamos el otro envase en el piso. Yo me senté en el banco y ella también solo que sobre el respaldo del mismo. Nos pusimos a charlar casi sin mirarnos mientras la cerveza y el freezzé pasaban en nuestras manos. Cuando terminamos antes el freezé ella siguió y se terminó sola la cerveza.
Mientras seguiamos charlando apoyé mi cabeza sobre su pierna, que estaba a esa altura más o menos a mi lado, y casi sin pensar le dije:
-Como va tu piercing? Ya se te curó?
-Sí hace como dos meses que lo tengo, te conté el otro día porque no nos vemos nunca nomás.- me dijo, -Mira, dame la mano.- me dijo y esta vez no dude en nada... agarró mi mano derecha y se la llevó a su entrepierna en la pollera.. -Ahi, lo sentis?
Cómo no sentirlo, estaba justo en su labio derecho, lo toqué por sobre la tanga, pero se me herizó la piel y al sacar la mano aproveché y se la pasé sin mucho disimulo por toda su concha. Ella me miró y me sonrió.
Pasaron un par de minutos de eso y me dijo:
-Esperá que le mando un mensaje a mi novia que venga así la conoces.
Se lo mandó y a los 5 minutos vino una chica muy hermosa, de pelito atado con una colita atrás, no muy largo, rubia de ojitos claros, no distinguí el color en la noche. Tenía unas tetas hermosas que se dibujaban perfectamente bajo la remerita y una cadera hermosa.
Mica nos presentó y su novia, Rocio, se sentó al lado mio en el banco con su cabeza apoyada entre las piernas de Mica.
Entre lo que hablabamos de cómo se conocieron y demás, empezaron a besarse y toquetearse un poco. Estaban las dos al lado mio y me empezó a hervir la sangre en las venas. Era la primera vez que veía a mi amiga como mujer.
Mica es de mi altura, alrededor de 1.70 mts, de pelo castaño oscuro, lacio hasta apenas por debajo de los hombros, lo tenía suelto y todavía un poco húmedo. Usa anteojos, lo que le da un toque que me encantó ver, tenía una pollerita de jean que apenas pasaba debajo de una cola hermosa y dejaba ver sus piernas talladas de jugadora de jockey. Tiene una boca hermosa, un par de rollitos que apenas se notan y aunque sus tetas son chiquitas, le dan un toque especial. Era obvio que me estaba calentando así que traté de contenerme lo más que pude y fui al kiosco a comprar otra cerveza y otro freezé. Cuando volví ya no estaban tan pegadas y estaban hablando no sé de qué.
Destapé la cerveza y se la ofrecí a Rocio, pero ella no tomó mucho. Destapé el freezé, pero tampoco quería porque dijo que tenía que levantarse temprano a trabajar, a esa altura eran las 3 de la mañana más o menos. Así que se quedó un rato y se despidió de mi y de Mica, tomandola tiernamente de la cara y dándole un jugoso y lento beso que me hizo calentar de nuevo.
Nos quedamos a terminar las bebidas ahí con Mica y le dije que me tenía que ir, así que empezamos a caminar hacía su casa. Cuando llegamos a la puerta contra la reja la iba a saludar y me chantó un pico que no esperaba, al cual respondí sin dudar con un lúbrico beso... la agarré de esa cola hermosa que tiene por sobre la pollera y no me desprendí más... Su lengua y sus labios empezaron a recorrer mi cuello y me clavaba las uñas en la espalda, como sabiendo que eso me enloquecía...
De agarrarla del culo directamente le levanté la pollerita de jean y metí mi mano bajo su tanga. Tenía la conchita bien lubricada, se ve que la novia se encargo de dejarla a punto. Le metí un par de dedos y jugueteaba con su piercing. Eso dibujaba muecas indescriptibles de placer en su cara, se nota que la estimulaba muchísimo estando tan cerca del clítoris.
Mientras me desprendía el pantalón se detuvo en seco y me dijo:
-No! esperá, me muero si me escucha mi vieja garchar en la puerta de casa, vamos a la plaza!
Sin esperar una respuesta, me agarró la mano y salimos casi corriendo de vuelta para la plaza, yo tenía que sostener mi pantalón porque lo tenía desabrochado. Apenas llegamos fuimos contra un tapial de una casa que daba a la plaza... ella se puso de espaldas al tapial y seguimos besándonos sin control, yo le saqué la remerita que tenía y empecé a lamer sus tetas. Estaban calientes y sabrosas, sus pezones estaba ya erectos y calientes. No podía dejar de succionarselos y jugar con mi lengua en ellos. Ella metió la mano en mi boxer y empezó a pajearme con fuerza y ritmo. Estaba totalmente entregado a sus manos, pensé que me haría acabar por el ritmo que aplicaba, pero me demostró su destreza y me masturbó sin parar mientras me besaba y con la otra mano me arañaba la espalda o me acariciaba el pecho.
En un momento le saqué la mano y me arrodillé ante ella, le bajé la tanga casi arrancándosela del cuerpo y me dedique a lamer ese manjar húmedo. Me extasié, estaba tan mojada y tenía un sabor delicioso, sus jugos corrían por las comisuras de mis labios y su piercing se lo mordía y se enganchaba con el de mi boca. De ella solo escuchaba sus gemidos y sentía sus manos sobre mis hombros que me sostenían para que no dejara de hacer lo que hacía. Sus piernas temblaban y la escuche entre gemidos que me pedía que la cogiera.
Sin dudarlo me paré y ella se puso de espaldas a mi, con las manos en la pared y la colita contra mi verga. Entendí por supuesto su mensaje y le metí la verga hasta el fondo, su colita hermosa no estaba ni totalmente cerrada y totalmente dilatada. Apenas me apretaba la verga los anillos de su culo hermoso de jugadora de jockey y puso mis manos en sus tetas. Ella se movía contra mi cuerpo como una serpiente y gritaba y gemía sin parar. Yo cada vez embestía mi verga más rápido y duro contra ella y ella gemía y me pedía más y más. Bajé mis manos y mientras mi verga jugaba en su culo, le metí tres dedos en la concha y oí un quejido zordo, y un instante después estaba totalmente empapado... sus jugos chorreaban entre mis dedos y llegaban hasta mi entrepierna.
Mica detuvo su movimiento y me agarró la mano llevando los dedos a su boca, era lo que evidentemente más disfrutaba, el sabor de una vagina mojada, se le notaba en la expresión. Lamió y limpió lentamente mis dedos saboreando cada uno.
Yo no acabé, pero de cualquier manera le saqué la verga y cuando se dio vuelta me miró a los ojos y me dijo:
-Gracias amigo, lo necesitaba, la Ro me dejó muy caliente cuando te fuiste a comprar. Ahora necesito un cigarrillo.
-No lo esperaba, pero la pasé muy bien igual. Y sí, yo también necesito un cigarrillo.
Se rio a carcajadas y me reí con ella, aunque ninguno de los dos supimos porqué, pero nos dimos cuenta que se nos habían terminado así que empezamos a caminar de la mano por el medio de la calle, riéndo y hablando de cualquier cosa, como si nada hubiera pasado y fuimos a la estación de servicio a comprar cigarrillos...
Bueno gente, eso fue todo por ahora, espero que les guste y espero hacer cosas mejores, entiendan que es "mi primera vez" jaja...
No pido puntos ni comentarios porque supongo que si me los merezco me los dejaran. Por ahora me despido... hasta otro momento a tod@s
Hace mucho tiempo, cuando tenia unos 14 años y estudiaba inglés, conocí la que hoy es una buena amiga para mi, su nombre es Mica. No fuimos nunca de juntarnos mucho que digamos, excepto cuando nos veíamos en las clases de inglés o que nos cruzaramos por ahí. Con el tiempo, sin embargo, nuestra amistad creció aunque nos veíamos menos, ella es estudiante de Medicina y es absolutamente aplicada, por lo que nos vemos literalmente una o dos veces al año, en las vacaciones.
Ese día fue su cumple y fui a verla, hizo una reunión a la noche en la casa como siempre y con el pasar de las horas y cuando todos estabamos bastante tomados nos fuimos ella y yo a comprar cigarrillos para todos porque se habían terminado. Eran algo así como las 3 de la mañana. Caminando en "S" por el medio de la calle me dijo:
-Ay boludo, no sabes lo que me pasó!
Yo la miré como preocupado, su tono me decía una cosa y como estaba un poco más sobrio que ella le presté atención y un poco me preocupé.
-Estás bien, te pasó algo, te peleaste con tu novia?- Vale la aclaración que ese día me había enterado que ella era lesbiana, nunca antes lo supe ni me dí cuenta.
-No, estamos bien, pero hoy no pudo venir porque tenía no sé que mierda que hacer con la hermana... No sé si te conté, pero me puse un piercing!!- Me sonrió ante la noticia y yo quedé aliviado, porque todo estaba bien.
-Re copado, pero dónde? en la lengua, en el ombligo, no se te ve.
-No! no me gustan en el ombligo, te acordas que tuve uno y me lo saqué. Me lo hice más abajo.-
No había nada que aclarar, nos conocíamos mucho y además con la seña que me hizo con la mirada, era más que claro. De cualquier forma me sorprendió y mi expresión de incredulidad se lo hizo notar.
-En serio boludo, no me creés, vení toca.- me dijo y me agarró la mano dispuesta a llevarla al interior de su pollerita.
-Te creo, creéme que te creo.- le dije sacando mi mano sin que ella concretara lo que estaba por hacer. Es mi amiga y esta re borracha, pensé. No da que haga esto.
En ese momento las cosas quedaron ahí, compramos lo que teníamos que comprar y volvimos a la casa con los demás... el resto de la noche transcurrió sin nada particular.
Pasó algún tiempo, alrededor de dos semanas desde esa noche y una tarde la llamé a la casa para que nos vieramos y tomaramos una cerveza por ahí. Acordamos en esa misma noche que la pase a buscar por la casa.
Así que esa noche me pegué una ducha y me fui a su casa. Al atenderme me hizo pasar y me sirvió un poco de jugo frío, la noche estaba insoportablemente calurosa, el verano entero estaba transcurriendo así.
Entre charla y charla de cualquier tema y todos a la vez como para ponernos al día, me dijo, vamos a la plaza (que está a la vuelta de la esquina de su casa) y tomamos la cerveza allá. Buscó un par de envases y nos fuimos a comprar.
Nos sentamos en un banco de la plaza con una cerveza bien helada y un freezé en las mismas condiciones. Dejamos el otro envase en el piso. Yo me senté en el banco y ella también solo que sobre el respaldo del mismo. Nos pusimos a charlar casi sin mirarnos mientras la cerveza y el freezzé pasaban en nuestras manos. Cuando terminamos antes el freezé ella siguió y se terminó sola la cerveza.
Mientras seguiamos charlando apoyé mi cabeza sobre su pierna, que estaba a esa altura más o menos a mi lado, y casi sin pensar le dije:
-Como va tu piercing? Ya se te curó?
-Sí hace como dos meses que lo tengo, te conté el otro día porque no nos vemos nunca nomás.- me dijo, -Mira, dame la mano.- me dijo y esta vez no dude en nada... agarró mi mano derecha y se la llevó a su entrepierna en la pollera.. -Ahi, lo sentis?
Cómo no sentirlo, estaba justo en su labio derecho, lo toqué por sobre la tanga, pero se me herizó la piel y al sacar la mano aproveché y se la pasé sin mucho disimulo por toda su concha. Ella me miró y me sonrió.
Pasaron un par de minutos de eso y me dijo:
-Esperá que le mando un mensaje a mi novia que venga así la conoces.
Se lo mandó y a los 5 minutos vino una chica muy hermosa, de pelito atado con una colita atrás, no muy largo, rubia de ojitos claros, no distinguí el color en la noche. Tenía unas tetas hermosas que se dibujaban perfectamente bajo la remerita y una cadera hermosa.
Mica nos presentó y su novia, Rocio, se sentó al lado mio en el banco con su cabeza apoyada entre las piernas de Mica.
Entre lo que hablabamos de cómo se conocieron y demás, empezaron a besarse y toquetearse un poco. Estaban las dos al lado mio y me empezó a hervir la sangre en las venas. Era la primera vez que veía a mi amiga como mujer.
Mica es de mi altura, alrededor de 1.70 mts, de pelo castaño oscuro, lacio hasta apenas por debajo de los hombros, lo tenía suelto y todavía un poco húmedo. Usa anteojos, lo que le da un toque que me encantó ver, tenía una pollerita de jean que apenas pasaba debajo de una cola hermosa y dejaba ver sus piernas talladas de jugadora de jockey. Tiene una boca hermosa, un par de rollitos que apenas se notan y aunque sus tetas son chiquitas, le dan un toque especial. Era obvio que me estaba calentando así que traté de contenerme lo más que pude y fui al kiosco a comprar otra cerveza y otro freezé. Cuando volví ya no estaban tan pegadas y estaban hablando no sé de qué.
Destapé la cerveza y se la ofrecí a Rocio, pero ella no tomó mucho. Destapé el freezé, pero tampoco quería porque dijo que tenía que levantarse temprano a trabajar, a esa altura eran las 3 de la mañana más o menos. Así que se quedó un rato y se despidió de mi y de Mica, tomandola tiernamente de la cara y dándole un jugoso y lento beso que me hizo calentar de nuevo.
Nos quedamos a terminar las bebidas ahí con Mica y le dije que me tenía que ir, así que empezamos a caminar hacía su casa. Cuando llegamos a la puerta contra la reja la iba a saludar y me chantó un pico que no esperaba, al cual respondí sin dudar con un lúbrico beso... la agarré de esa cola hermosa que tiene por sobre la pollera y no me desprendí más... Su lengua y sus labios empezaron a recorrer mi cuello y me clavaba las uñas en la espalda, como sabiendo que eso me enloquecía...
De agarrarla del culo directamente le levanté la pollerita de jean y metí mi mano bajo su tanga. Tenía la conchita bien lubricada, se ve que la novia se encargo de dejarla a punto. Le metí un par de dedos y jugueteaba con su piercing. Eso dibujaba muecas indescriptibles de placer en su cara, se nota que la estimulaba muchísimo estando tan cerca del clítoris.
Mientras me desprendía el pantalón se detuvo en seco y me dijo:
-No! esperá, me muero si me escucha mi vieja garchar en la puerta de casa, vamos a la plaza!
Sin esperar una respuesta, me agarró la mano y salimos casi corriendo de vuelta para la plaza, yo tenía que sostener mi pantalón porque lo tenía desabrochado. Apenas llegamos fuimos contra un tapial de una casa que daba a la plaza... ella se puso de espaldas al tapial y seguimos besándonos sin control, yo le saqué la remerita que tenía y empecé a lamer sus tetas. Estaban calientes y sabrosas, sus pezones estaba ya erectos y calientes. No podía dejar de succionarselos y jugar con mi lengua en ellos. Ella metió la mano en mi boxer y empezó a pajearme con fuerza y ritmo. Estaba totalmente entregado a sus manos, pensé que me haría acabar por el ritmo que aplicaba, pero me demostró su destreza y me masturbó sin parar mientras me besaba y con la otra mano me arañaba la espalda o me acariciaba el pecho.
En un momento le saqué la mano y me arrodillé ante ella, le bajé la tanga casi arrancándosela del cuerpo y me dedique a lamer ese manjar húmedo. Me extasié, estaba tan mojada y tenía un sabor delicioso, sus jugos corrían por las comisuras de mis labios y su piercing se lo mordía y se enganchaba con el de mi boca. De ella solo escuchaba sus gemidos y sentía sus manos sobre mis hombros que me sostenían para que no dejara de hacer lo que hacía. Sus piernas temblaban y la escuche entre gemidos que me pedía que la cogiera.
Sin dudarlo me paré y ella se puso de espaldas a mi, con las manos en la pared y la colita contra mi verga. Entendí por supuesto su mensaje y le metí la verga hasta el fondo, su colita hermosa no estaba ni totalmente cerrada y totalmente dilatada. Apenas me apretaba la verga los anillos de su culo hermoso de jugadora de jockey y puso mis manos en sus tetas. Ella se movía contra mi cuerpo como una serpiente y gritaba y gemía sin parar. Yo cada vez embestía mi verga más rápido y duro contra ella y ella gemía y me pedía más y más. Bajé mis manos y mientras mi verga jugaba en su culo, le metí tres dedos en la concha y oí un quejido zordo, y un instante después estaba totalmente empapado... sus jugos chorreaban entre mis dedos y llegaban hasta mi entrepierna.
Mica detuvo su movimiento y me agarró la mano llevando los dedos a su boca, era lo que evidentemente más disfrutaba, el sabor de una vagina mojada, se le notaba en la expresión. Lamió y limpió lentamente mis dedos saboreando cada uno.
Yo no acabé, pero de cualquier manera le saqué la verga y cuando se dio vuelta me miró a los ojos y me dijo:
-Gracias amigo, lo necesitaba, la Ro me dejó muy caliente cuando te fuiste a comprar. Ahora necesito un cigarrillo.
-No lo esperaba, pero la pasé muy bien igual. Y sí, yo también necesito un cigarrillo.
Se rio a carcajadas y me reí con ella, aunque ninguno de los dos supimos porqué, pero nos dimos cuenta que se nos habían terminado así que empezamos a caminar de la mano por el medio de la calle, riéndo y hablando de cualquier cosa, como si nada hubiera pasado y fuimos a la estación de servicio a comprar cigarrillos...
Bueno gente, eso fue todo por ahora, espero que les guste y espero hacer cosas mejores, entiendan que es "mi primera vez" jaja...
No pido puntos ni comentarios porque supongo que si me los merezco me los dejaran. Por ahora me despido... hasta otro momento a tod@s
4 comentarios - Mi primer post. Espero lo disfruten!
si queres un buen pete habla con ella