La historia de amor de Diego y Valeria.

Hola, esta historia me la contó un amigo, le fue narrada por su protagonista, solo puedo decir que los conocí de vista y mas adelante del relato les puedo dar otra pista por la cual me parece verídico.

Diego es un muchacho algo tímido e introvertido pero de buen corazón, no tenía muchos pasatiempos mas que ir a veces al bar del pueblo a tomarse unas cervezas y escuchar buena música. No tenía muchos amigos y varias eran las veces que estaba solo en el bar, pero el la disfrutaba a su manera.
Una de esas tardes la vio sentada en una mesa, sola, su mirada lo cautivó, le resultó muy dulce y se sintió flechado.
Se quedó mirándola embobado hasta que la chica se percató de ello y bajo la vista sonrojándose, al parecer era tan tímida como él. Se preocupó por haberla incomodado y no la miró más. Después, en su casa se arrepintió de haber sido tan tonto: -Soy siempre igual...así nunca voy a conseguir nada!!! se decía protestando contra su actitud.
Juró hablarle la próxima vez que la viera y todas las tardes pasaba por el bar pero la chica se hizo rogar ya que pasaron más de diez días hasta que una tarde volvió. Se miraron y parece que fue flechazo, ella le sonrió y fue lo que necesitaba para animarse a hablarle. Le preguntó si le podía invitar una cerveza y la chica le dijo que si.
No voy a aburrirlos con todo el dialogo de una parejita que se está conociendo etc. etc. solo les digo que el corazón de Diego latía a mil, se sentía enamorado y correspondido por la muchacha que se llamaba Valeria.
La conversación siguió hasta que Valeria se tuvo que ir, Diego se ofreció para acompañarla pero ella no quiso.
Quedaron en verse la tarde siguiente en la plaza del pueblo. Se despidieron con un tierno beso en la boca.
La siguiente tarde los encontró matándose a besos en un banco de la plaza Era amor a primera vista, estaban perdidamente enamorados el uno del otro.
Los días iban pasando y su amor iba creciendo, sus encuentros en la plaza o en el bar estaban coronados de un sinfín de besos y caricias, sin llegar mas allá. Diego la respetaba y Valeria necesitaba primero aclarar un tema con él, al principio no se animaba pero un día en la plaza, dado el amor que le tenía se animó a hablarle.
Luego de un rato de besos Valeria le dijo:
-Diego, no se como fue pero estoy terriblemente enamorada de vos, es inexplicable como me metejonie así pero es lo que siento, pero hay algo que tenes que saber antes de seguir -los ojos de Valeria se llenaron de lagrimas y a Diego se le hizo un nudo en la garganta, no sabía con que le iba a salir- No quiero lastimarte y si después de lo que te voy a decir te queres ir, lo entiendo. Nací siendo una nena en el cuerpo de un varón.
Dicho esto, bajó la vista un instante y luego miró fijamente a los ojos a Diego esperando su reacción.
Diego hizo un minuto de silencio como reacomodando sus pensamientos en su cabeza, a Valeria le pareció eterno y al final la abrazó y le dijo: -Amo a la hermosa chica que vive en ese cuerpo de varón, que por otro lado no me parece tan de varón.
Valeria suspiró y lo besó con pasión, luego de varios besos y caricias le dijo sonriendo
-Mirá que esta nena abajo viene con sorpresa
-Amo las sorpresas ! -dijo Diego y se largaron a reír

Y aquí viene mi aclaración, yo los conocí de vista, pasaban seguido por la puerta de mi casa, jamas sospeché de su origen masculino, era super femenina, es mas, la escuché hablar mas de una vez y su voz era la de una chica, realmente era una chica que nació en el cuerpo de un varón por esas sarcásticas travesuras que tiene la vida.
Por eso creo que es verídica la historia y después de varios años de ocurrida se la cuento ustedes.

Diego la invitó a seguirla en su casa, vivía solo, y allí fueron dando rienda suelta a sus pasiones.
La invitó a tomar algo fresco pero los vasos quedaron casi llenos en la mesa ratona porque la pasión desatada en el sofá era mucha.
Valeria, al sacarse los miedos de encima dio rienda suelta a su locura por Diego y él estaba particularmente interesado en demostrarle que la amaba aunque fuera distinta a las demás chicas.
Besó su cuello pero sus besos no se detuvieron ahí sus manos desabrochaban la blusa para dejar lugar libre para sus labios que llegaron hasta los dulces pechos de Vale y ahí se detuvieron besando y mordisqueando sus pezones.
Ella se dejó besar un rato y después tomó la iniciativa desabrochando su camisa y besar el torso de Diego de una manera lujuriosa hasta llegar a la barrera de su cinturón de la que se liberó en dos movimientos para llegar a la dura pija de Diego y comenzar a besarla con mucha pasión. La dejó un rato pero no quiso acabar tan rápido así que la aparto y se dispuso a terminar de desnudar a Valeria y dejar al descubierto la "diferencia" con las demás chicas.
Valeria tenía un cuerpo muy femenino., excepto por una hermosa pija, tan delicada como ella y bien depiladita.
Estaba tan dura como la de él, Diego sin saber bien que hacer se la acarició y hasta le dio un par de besos y luego se dirigió hacia su hermoso culito, redondito y apetecible que besó y llenó de saliva para después plantarle la pija en la puerta y enterrarsela de a poco . Valeria suspiraba de placer y él la bombeaba muy lentamente como disfrutando con cada arremetida.
Casi instintivamente, acostumbrado a jugar con el clítoris de las chicas cuando las culeaba, tomo la pija de Valeria y empezó a masturbarla, Valeria gritaba de placer y al rato acabó copiosamente, esto calentó al extremo a Diego que estalló llenandole el culo de leche a su amor.
Se quedaron en el sofá abrazados mucho tiempo. Luego el la levanto y la llevó a su cama dispuesto a seguirla.
Ella se acomodó y le empezó a chupar la pija de una manera muy dulce y el comenzó a jugar con la pija de su amada y a darle un beso cada tanto hasta que se sorprendió chupándosela de la misma manera que lo hacia ella con el.
Un majestuoso 69 que terminó con la acabada de ambos en la boca de su amor.
Diego tragó el néctar de Valeria de manera natural, no se preguntó por que lo hizo, solo sabía que la amaba con locura y que el amor ahora para él tenía esa forma. Y estaba dispuesto a hacer cualquier cosa por brindar su amor a Valeria.