Despues de la fiesta

Si, fue despues de la fiesta de reencuentro de la promo.
Habían pasado varios años y había algunos que no teníamos ni idea de la vida que llevábamos, así que fue muy emotivo, intenso e interesante encontrarme nuevamente con mis ex compañeros... y ex compañeras.
Pude saber que Liliana, a la que había deseado durante toda la secundaria, se había casado y no estaba bien con su marido y eso fue como un click que despertó nuevemente mi deseo de cogermela.
Porque no había podido hacer nada con ella en la secundaria? porque era la novia de mi mejor amigo, pero esa era historia pasada y me lo hizo saber cuando pude quedar cara a cara con ella en uno de los momentos de baile.
Imaginarán que esa noche finalmente terminó entre recuerdos y varias borracheras, pero yo me llevé el número de celular y la promesa de tomar un cafe prontamente en la capital, adonde ella vivia ahora.
Creo que fui contando el tiempo hasta que un par de meses despues tuve que viajar a la capital por un tema laboral. Llamé a Liliana y se lo comenté, a la vez que le dije que a la tarde estaría libre y quería tomar ese café con ella. Me contestó que era complicado por su propio trabajo, además era el cumple del marido, con quien estaba tratando de arreglar su situación matrimonial...
Volví a llamarla cerca de terminar la capacitación a la que había concurrido. Insistí en encontrarnos un rato al menos. Finalmente aceptó. Nos encontramos en un café de puerto madero donde charlamos por una hora aproximadamente. Ella tenía que partir. Fue frustrante porque ahí confirmé que tenía que cogerla cueste lo que cueste!
A la semana de ese encuentro la llamé y le dije que me hubiera gustado pasar mucho mas tiempo con ella, ella a su vez me dijo que había sentido lo mismo; pues bién le dije: voy de nuevo en un par de semanas solo para verte..., dudando apenas un poquito me dijo que le parecía bien. Entonces dije: pero que sea a un lugar privado, te parece?; si, me parece adecuado... Corte
A los 5 minutos vuelvo a llamarla y le dije: es claro que te estoy invitando a encontrarnos los dos solos en un hotel. Si, es lo que quiero me contestó...
No podía creerlo..., esa piba, ahora ya mas grande de carita angelical, culo extraordinario y pocas gomas, pero de una piel blanca radiante quería finalmente encontrarse... y coger conmigo!
Pasaron los días lentamente hasta que finalmente llegué a la capital, esperé un rato antes de llamarla y fuí a tomar el hotel que había reservado por un día: una suite con vista al rio sobre calle Alem, en el bajo.
Nos encontramos a las 10 de la mañana, nos dimos un beso en la mejilla ante la indiferencia de un montón de gente que transitaba el palier del hotel y fuimos al ascensor. Por suerte subimos solos, así que apenas comenzó a subir le dí un beso en los labios tan deseados, que ella respondió con mucho nerviosismo pero tambien con pasión.
Y fue entrar en la habitación cuanto nos fundimos en un abrazo largamente esperado mientras nuestras bocas se fusionaban extraordinariamente. Mis manos mientras tanto, comenzaban a pasar sobre sus prominente culo y tocando tambien sus tetas cuyos pezones amenazaban a la gravedad.
Asi nos fuimos hasta la cama donde en un frenesí le fui casi arrancando la ropa..., ella tambien hacía los suyo con mi remera... me saque zapatos y al quedar parado frente a ella, desprendió mi pantalón, sacando mi verga que latía con una erección como hacía tiempo no tenía. Se avalanzó sobre ella, me la mamó de todas las maneras que podía, se la tragó hasta atragantarse en su garganta..., me la cogió casi con desesperación.
A duras penas pude terminar de quitarme el pantalón, la terminé de desvestir y besandola nuevamente fuí bajando hasta llegar hasta su concha que latía desparramando un gran volumen de líquidos que comencé a saborear...., mmmm, delicia como esa no hay...., mi lengua en su clítoris, mis dedos comenzando a penetrar esa concha que literalmente ardía de deseo y pasión. Le ensarté la lengua en la concha sin dejar de tocarla..., metiendo otro dedo apenas en el orto....
Liliana solo atinaba a emitir quejidos de pasión y lujuria hasta que me dijo la frase que desde entonces utilizaríamos en nuestros encuentros: "lo primero es lo primero"..., por favor: cojemeeeee
Quien iba a dudar de ponérsela entonces? La penetré lentamente sintiendo un calor nuevo, una pasión desconocida... Esa mujer, mi compañera de secundaria estaba finalmente conmigo compartiendo lo que sería nuestro secreto mayor, recién ahora develado... estábamos cogiendo con las ganas del atraso y la necesidad de recuperar el tiempo.... La cabalgué fuertemente hasta que sentí como sus paredes vaginales latían tratando de aferrar mi verga, como su carita se ponía de un color rojo intenso y sus ojos revoleaban hacia atrás en un extasis fenomenal... ahhh, ahhhh, ahhh, diosssss, pudo decir..., yo a la par descargué por primera vez mi leche dentro de ella.
Apenas había pasado una hora desde que nos encontramos y tenía reserva hasta el otro día...
Así que luego continuaré con el resto...