Como les va? Acá vengo con otro relato, esto le pasó a un amigo y me lo contó el otro día, el sabe de mis relatos acá y quería saber que opinaba la gente de Poringa de lo que le había pasado.
Trataré de que el relato sea lo mas fiel a lo que me contó, a mi me resultó gracioso (por que no me pasó a mi) pero el la sufrió bastante, al punto de hacerme sentir culpable de haberme reído de él, pero bueno vamos al relato sin mas vueltas.
Mi amigo Rubén (pongamosle ese nombre) está casado con Rosita (también cambiado), una muy hermosa mujer como 10 años menor. Rosita era muy demandante de sexo, quería cojer todo el tiempo y si bien eso fue lo que mas le atraía de ella, lo bien que la pasaban en la cama, y que siempre estaba predispuesta para cojer en cualquier momento y en cualquier lado, con el tiempo empezó a cansarlo, el decía, una cosa es estar predispuesto a cojer en cualquier momento y otra cosa es tener que hacerlo.
Les digo que a mi, la historia había comenzado a divertirme y quería saber en que iba a terminar.
Rubén me siguió contando que desde hace un tiempito su mujer lo molestaba menos con el sexo y si bien al principio sintió un alivio, después comenzó a sospechar de que le estuviera metiendo los cuernos.
Por un lado se enojó, su machismo herido dolía y mucho, pero por otro lado pensaba que él también le había sido infiel y que si la mantenía mas tranquila dejaría que pase. Pero sentía una gran curiosidad de confirmar sus sospechas y saber quien era el tercero en cuestión.
Pronto lo descubrió, Pedro, un amigo de la familia, esposo de una amiga de Rosita, mucho más joven y atlético que él. Encontró un mensaje en el celu de Rosita y sabía que se encontrarían al otro día por la mañana en su casa.
El se fue a trabajar como de costumbre, dejó el coche a pocas cuadras y volvió caminando, al llegar a su casa vio por la ventana del baño que ella se estaba bañando así que entró sigilosamente sin ser sentido y se escondió en el lavadero.
Al rato salió Rosita del baño con esa bata tan sexy que el le regalara, muy corta, y a los 5 minutos llamaron a la puerta, era Pedro, le abrió rápido y cuando se cerró la puerta se echó a sus brazos besándolo mientras él la recorría con las manos levantando la bata y dejando ver su cuerpo desnudo.
Rubén agachado detrás de la puerta de la cocina, podía ver todo el espectáculo y rogaba no ser visto.
Rosita con la bata abierta dejaba toda la hermosura de su cuerpo para Pedro, que ya había metido una mano en su entrepierna y jugaba con su concha que ya estaba muy mojada.
Y ella que bajando y poniéndose de rodillas desabrochaba su pantalón y comenzaba a chuparle esa tremenda pija que tenía. Lo hacía con la maestría que Rubén conocía y esto lo empezaba a calentar, su enojo se iba convirtiendo en calentura y esto lo perturbaba bastante.
Después de un rato de tal descomunal peteada Pedro la levantó la alzó mientras ella lo abrazaba con sus piernas y así nomas, de una le mandó toda la pija adentro de su concha, Rosita pegó un grito de placer y así ensartada se la llevó para la cama matrimonial.
Rubén los siguió sin ser visto y cuando se asomó por la puerta del cuarto, Pedro ya había sacado la pija y con la cabeza entre las piernas de Rosita se la chupaba de manera brutal, Rosita gritaba de placer y su espalda se arqueaba hasta que explotó en un orgasmo lleno de pasión. Pedro la agarró de la cintura, subió hasta esos hermosos pechos que Rubén había pagado para su regocijo y mientras que se los lamía comenzaba a meterle otra vez su gran poronga, esta vez más lentamente.
Rubén los miraba embelesado y casi sin darse cuenta había pelado su pija y se empezaba a pajear mirando a su mujer cojida por otro.
Después de bombearla un rato y sacarle otro jugoso orgasmo, la puso en cuatro y le empezó a dar por atrás primero lento y luego cada vez mas fuerte y cuando estaba por acabar ella lo paró y dándose vuelta le empezó a chupar la pija hasta que la gran acabada de Pedro le llenó la boca.
ese espectáculo hizo que Rubén llegara a su clímax y acabara también y sin darse cuenta manchó la pared y la alfombra del piso. Siguió mirando a su mujer que le lamía la pija a Pedro hasta dejarla limpita y como Pedro se volvió a poner al palo siguió con su tarea lamiendole la pija y los huevos y yendo para su culo y lamerle su agugerito con mucha pasión.
Que hija de puta!!! pensó Rubén, a mi nunca me lo quiso hacer!!!!
Ella volvió para los huevos, se los lamia y mordisqueaba y luego volvió para su pija, comenzó a chupar su cabezota para luego comenzar a tragarla lentamente, mientras hacía esto le metía un dedito en el culo y le hacia un masaje prostatico, Pedro se retorcía de placer mientras Rosita se giraba hasta ponerle la concha en su cara para que se haga cargo, el la empezó a lamer y a meter sus dedos dentro, primero uno, después dos, luego tres, Rosita gritaba de placer para luego atragantarse con la terrible poronga de Pedro y seguía jugando con el dedito dentro de su culo, Ella no aguantó mas y explotó con un gran orgasmo, llenandole la boca a Pedro de sus jugos y él hizo lo mismo con la boca de ella, explotando con una gran acabada, llenandole la boca nuevamente de leche.
Rubén se fue otra vez para el lavadero y se puso a escuchar. Después de un rato de silencio se oyó ruido de ropas y a Pedro diciéndole que el jueves a la mañana volvería.
Ella lo despidió y se fue hacia el baño, Rubén aprovechó para irse justo cuando escuchaba el ruido de la ducha nuevamente. Algo tenía que hacer y ya se le estaba ocurriendo.
Esa tarde volvió a la casa como si nada y viendo el manchón de leche que el mismo había dejado le dijo a su mujer: -huy mirá...se te volcó algo?
ella sorprendida miro y pasando el dedo sintió el inconfundible olor a leche pero en un lugar donde no se lo sospechaba....y no pudo saber que había pasado, mientras Rubén reía por lo bajo.
El jueves hizo lo mismo que la otra vez, se escondió en el lavadero a esperar , Pedro llegó puntual y ella lo llevó al cuarto de una, cuando Rubén se acercó hasta la puerta ya estaban desnudos haciendo un espectacular 69 que lo dejó con la pija dura, tenía que reconocer que ver a su mujer cojiendo con otro lo calentaba mucho. La guacha le chupaba la pija como nunca y otra vez jugaba con su dedito bien metido en su culo. Rubén se sacó la ropa y despacio comenzaba a pajearse, Pedro se paró, puso a Rosita en cuatro y agarró del bolsillo de su pantalón un lubricante que había traído, se embadurnó la verga y se la plantó en la entrada del culo, pegó una embestida y le entró la cabeza, otra más y el grito de dolor de Rosita le dijo que tenía que ir mas despacio, fue bombeando lento hasta que ya tenía tres cuartos de pija metida, Rosita gemía, gritaba y pedía por favor que no pare.
Rubén fue´hasta la cocina y se embadurnó la poronga con aceite de cocina y se dirigió a la habitación.
Cuando lo vieron entrar se sorprendieron, Rosita se quedó muda y Pedro dijo: -Mirá el cornudo de tu marido se quiere sumar a la fiesta...lo dejamos?
Rubén dijo: -Permiiiissssoooo!! y le ensartó la pija en el culo dilatado de Pedro, gracias a la acción de su mujer, El atlético Pedro intentó zafarse pero Rubén era muy fornido y no lo dejó, le dijo a Pedro, seguí cojiendotela!!! dale puto!!!! y mientras Pedro se culeaba a Rosita era ensartado por Rubén.
Les digo que me hubiera gustado ver ese trencito!!!
En poco tiempo Pedro acabó en el culo de Rosita mientras que Rubén hacia lo propio en el culo de Pedro.
Pedro se vistió y se fue medio rengueando y Rubén le dijo: -Quedate tranquilo que no te voy a mandar en cana con tu mujer!!
Cuando quedaron solos le dijo a Rosita, te tendría que matar pero me calentó mucho verte cojer con otro.
Te propongo una cosa, si realmente estas insatisfecha y queres cojer con otros, Porque no me avisas y nos enfiestamos los tres o los cuatro o los que sean?
Ella lo abrazó y lo beso...y bueno....terminaron cojiendo.
Les cuento que me costó creer esta historia, pero Rubén, como buen amigo me invitó unos de estos días a compartir a Rosita. Y como se están imaginando le dije que si, pero con la única condición de que mi culo no se toca!!! jajaja!!!!
Trataré de que el relato sea lo mas fiel a lo que me contó, a mi me resultó gracioso (por que no me pasó a mi) pero el la sufrió bastante, al punto de hacerme sentir culpable de haberme reído de él, pero bueno vamos al relato sin mas vueltas.
Mi amigo Rubén (pongamosle ese nombre) está casado con Rosita (también cambiado), una muy hermosa mujer como 10 años menor. Rosita era muy demandante de sexo, quería cojer todo el tiempo y si bien eso fue lo que mas le atraía de ella, lo bien que la pasaban en la cama, y que siempre estaba predispuesta para cojer en cualquier momento y en cualquier lado, con el tiempo empezó a cansarlo, el decía, una cosa es estar predispuesto a cojer en cualquier momento y otra cosa es tener que hacerlo.
Les digo que a mi, la historia había comenzado a divertirme y quería saber en que iba a terminar.
Rubén me siguió contando que desde hace un tiempito su mujer lo molestaba menos con el sexo y si bien al principio sintió un alivio, después comenzó a sospechar de que le estuviera metiendo los cuernos.
Por un lado se enojó, su machismo herido dolía y mucho, pero por otro lado pensaba que él también le había sido infiel y que si la mantenía mas tranquila dejaría que pase. Pero sentía una gran curiosidad de confirmar sus sospechas y saber quien era el tercero en cuestión.
Pronto lo descubrió, Pedro, un amigo de la familia, esposo de una amiga de Rosita, mucho más joven y atlético que él. Encontró un mensaje en el celu de Rosita y sabía que se encontrarían al otro día por la mañana en su casa.
El se fue a trabajar como de costumbre, dejó el coche a pocas cuadras y volvió caminando, al llegar a su casa vio por la ventana del baño que ella se estaba bañando así que entró sigilosamente sin ser sentido y se escondió en el lavadero.
Al rato salió Rosita del baño con esa bata tan sexy que el le regalara, muy corta, y a los 5 minutos llamaron a la puerta, era Pedro, le abrió rápido y cuando se cerró la puerta se echó a sus brazos besándolo mientras él la recorría con las manos levantando la bata y dejando ver su cuerpo desnudo.
Rubén agachado detrás de la puerta de la cocina, podía ver todo el espectáculo y rogaba no ser visto.
Rosita con la bata abierta dejaba toda la hermosura de su cuerpo para Pedro, que ya había metido una mano en su entrepierna y jugaba con su concha que ya estaba muy mojada.
Y ella que bajando y poniéndose de rodillas desabrochaba su pantalón y comenzaba a chuparle esa tremenda pija que tenía. Lo hacía con la maestría que Rubén conocía y esto lo empezaba a calentar, su enojo se iba convirtiendo en calentura y esto lo perturbaba bastante.
Después de un rato de tal descomunal peteada Pedro la levantó la alzó mientras ella lo abrazaba con sus piernas y así nomas, de una le mandó toda la pija adentro de su concha, Rosita pegó un grito de placer y así ensartada se la llevó para la cama matrimonial.
Rubén los siguió sin ser visto y cuando se asomó por la puerta del cuarto, Pedro ya había sacado la pija y con la cabeza entre las piernas de Rosita se la chupaba de manera brutal, Rosita gritaba de placer y su espalda se arqueaba hasta que explotó en un orgasmo lleno de pasión. Pedro la agarró de la cintura, subió hasta esos hermosos pechos que Rubén había pagado para su regocijo y mientras que se los lamía comenzaba a meterle otra vez su gran poronga, esta vez más lentamente.
Rubén los miraba embelesado y casi sin darse cuenta había pelado su pija y se empezaba a pajear mirando a su mujer cojida por otro.
Después de bombearla un rato y sacarle otro jugoso orgasmo, la puso en cuatro y le empezó a dar por atrás primero lento y luego cada vez mas fuerte y cuando estaba por acabar ella lo paró y dándose vuelta le empezó a chupar la pija hasta que la gran acabada de Pedro le llenó la boca.
ese espectáculo hizo que Rubén llegara a su clímax y acabara también y sin darse cuenta manchó la pared y la alfombra del piso. Siguió mirando a su mujer que le lamía la pija a Pedro hasta dejarla limpita y como Pedro se volvió a poner al palo siguió con su tarea lamiendole la pija y los huevos y yendo para su culo y lamerle su agugerito con mucha pasión.
Que hija de puta!!! pensó Rubén, a mi nunca me lo quiso hacer!!!!
Ella volvió para los huevos, se los lamia y mordisqueaba y luego volvió para su pija, comenzó a chupar su cabezota para luego comenzar a tragarla lentamente, mientras hacía esto le metía un dedito en el culo y le hacia un masaje prostatico, Pedro se retorcía de placer mientras Rosita se giraba hasta ponerle la concha en su cara para que se haga cargo, el la empezó a lamer y a meter sus dedos dentro, primero uno, después dos, luego tres, Rosita gritaba de placer para luego atragantarse con la terrible poronga de Pedro y seguía jugando con el dedito dentro de su culo, Ella no aguantó mas y explotó con un gran orgasmo, llenandole la boca a Pedro de sus jugos y él hizo lo mismo con la boca de ella, explotando con una gran acabada, llenandole la boca nuevamente de leche.
Rubén se fue otra vez para el lavadero y se puso a escuchar. Después de un rato de silencio se oyó ruido de ropas y a Pedro diciéndole que el jueves a la mañana volvería.
Ella lo despidió y se fue hacia el baño, Rubén aprovechó para irse justo cuando escuchaba el ruido de la ducha nuevamente. Algo tenía que hacer y ya se le estaba ocurriendo.
Esa tarde volvió a la casa como si nada y viendo el manchón de leche que el mismo había dejado le dijo a su mujer: -huy mirá...se te volcó algo?
ella sorprendida miro y pasando el dedo sintió el inconfundible olor a leche pero en un lugar donde no se lo sospechaba....y no pudo saber que había pasado, mientras Rubén reía por lo bajo.
El jueves hizo lo mismo que la otra vez, se escondió en el lavadero a esperar , Pedro llegó puntual y ella lo llevó al cuarto de una, cuando Rubén se acercó hasta la puerta ya estaban desnudos haciendo un espectacular 69 que lo dejó con la pija dura, tenía que reconocer que ver a su mujer cojiendo con otro lo calentaba mucho. La guacha le chupaba la pija como nunca y otra vez jugaba con su dedito bien metido en su culo. Rubén se sacó la ropa y despacio comenzaba a pajearse, Pedro se paró, puso a Rosita en cuatro y agarró del bolsillo de su pantalón un lubricante que había traído, se embadurnó la verga y se la plantó en la entrada del culo, pegó una embestida y le entró la cabeza, otra más y el grito de dolor de Rosita le dijo que tenía que ir mas despacio, fue bombeando lento hasta que ya tenía tres cuartos de pija metida, Rosita gemía, gritaba y pedía por favor que no pare.
Rubén fue´hasta la cocina y se embadurnó la poronga con aceite de cocina y se dirigió a la habitación.
Cuando lo vieron entrar se sorprendieron, Rosita se quedó muda y Pedro dijo: -Mirá el cornudo de tu marido se quiere sumar a la fiesta...lo dejamos?
Rubén dijo: -Permiiiissssoooo!! y le ensartó la pija en el culo dilatado de Pedro, gracias a la acción de su mujer, El atlético Pedro intentó zafarse pero Rubén era muy fornido y no lo dejó, le dijo a Pedro, seguí cojiendotela!!! dale puto!!!! y mientras Pedro se culeaba a Rosita era ensartado por Rubén.
Les digo que me hubiera gustado ver ese trencito!!!
En poco tiempo Pedro acabó en el culo de Rosita mientras que Rubén hacia lo propio en el culo de Pedro.
Pedro se vistió y se fue medio rengueando y Rubén le dijo: -Quedate tranquilo que no te voy a mandar en cana con tu mujer!!
Cuando quedaron solos le dijo a Rosita, te tendría que matar pero me calentó mucho verte cojer con otro.
Te propongo una cosa, si realmente estas insatisfecha y queres cojer con otros, Porque no me avisas y nos enfiestamos los tres o los cuatro o los que sean?
Ella lo abrazó y lo beso...y bueno....terminaron cojiendo.
Les cuento que me costó creer esta historia, pero Rubén, como buen amigo me invitó unos de estos días a compartir a Rosita. Y como se están imaginando le dije que si, pero con la única condición de que mi culo no se toca!!! jajaja!!!!
8 comentarios - La venganza del cornudo.
saludos Misko
Cuentanos cuando Rosita les haga el trio...
Genial!! Muchas gracias...