La mujer estaba muy nerviosa, su marido tenía una mirada de perversión, para mí era la primera vez en una situación así, por un lado tenía a mi suegra, a la cual me había cogido durante los últimos días y por el otro estaba este matrimonio extraño, el hombre que gozaba de que algún extraño se cogiera a su mujer y la mujer totalmente asustada. Mi suegra estaba ansiosa y yo también, pero lo que a este hombre le excitaba era dar instrucciones de las cosas que quería que le hicieran a su mujer...
Yo estaba desnudo y dispuesto, lo mismo que mi suegra, pero el hombre con una voz ronca dijo:
“Desnuden a mi mujer, yo les dique lo quiero que le hagan...”
Mi suegra salió de la cama, entre los dos le quitamos la ropa a la mujer, cuando ella estaba desnuda dio su siguiente instrucción:
“Señora, hágale sexo oral a su esposo, y usted señor métale los dedos en la vagina de mi mujer”. Esta pareja que teníamos en la habitación había creído que mi suegra era mi mujer, por esa noche creo que solo bastaba el secreto de ellos en el ambiente. Mi suegra con una sonrisa irónica se puso de rodillas frente a mí; aparentando inexperiencia comenzó a masturbarme y metió solo la punta de mi miembro en la boca, su lengua casi se metía por al agujero de mi verga, me llevaba a un umbral de dolor y placer. Acerque mi mano a la concha de la mujer, tenía abundante bello púbico, empece a separarle los labios y metí mis dedos dentro de su concha, su rostro mostró dolor; tenía la concha poco mojada y bastante estrecha, yo seguí haciéndolo, pero parecía que deseaba contener el llanto. Seguimos así por un buen rato, luego el hombre dijo:
“Señora acuéstese sobre la cama con las piernas abiertas para que su marido la penetre, Elsa; pon tu legua sobre el pene del señor cuando lo saque de la vagina de su mujer” supimos el nombre de la mujer: Elsa. Mi suegra se acostó con las piernas abiertas a la orilla de la cama, yo le metí la verga; nunca había tenido una erección tan estimulante, el juego que había hecho mi suegra con la lengua hizo que la cabeza de mi miembro pareciera que fuera a estallar, las venas estaban muy dilatadas, yo le deje ir la verga hasta el tope, tome a Elsa por el cabello, con delicadeza y la acerque mi miembro, ella sacó la lengua y la puso sobre mi verga mientras entraba y salía, mi suegra y ello estabamos gozando mucho, se escuchaba el roce de nuestros miembros húmedos, pero Elsa empezó a derramar lágrimas, tratando de que su marido no la viera, mi suegra estiro una mano para frotar una de sus nalgas pero el esposo dijo muy enojado:
“No hagan nada que yo no les diga, señor cuando este por acabar, eyacule sobre la cara Elsa, y señora quiero que usted tome el miembro de su marido y lo masturbe sobre la cara de mi mujer”; yo me controle y seguí penetrando a mi suegra las lagrimas de Elsa caían sobre el pubis de mi suegra, los dos seguimos sin darle importancia por un buen rato, pero la mirada de mi suegra me indico que ya no quería seguir con esa situación, saque mi verga y ella acostó a Elsa en la cama, se puso de pie y comenzó a masturbarme fuertemente su mano lastimaba mis bolas, pero yo me aguanté, ella seguía y apretaba fuertemente mi verga hasta que eyacule, mi suegra hizo que el semen cayera sobre la mejilla de Elsa, ella lloraba bastante, el hombre sonreía, se puso de pie y le dijo a Elsa que se vistiera sin limpiarse la cara, salieron de la habitación, mi suegra me dijo:
“Maldito viejo, las cosas se hacen de común acuerdo, que estúpido, no puedo creer que la trate así...”
Nos acostamos abrazados y desnudos, me desperté como a eso de las dos de la madrugada, fui al baño tratando de no hacer ruido; al regresar a la cama escuche algo que parecía un llanto, me acerque a la puerta, la abrí lentamente y el llanto se escuchaba mas fuerte, las luces del pasillo iluminaban la silueta de Elsa, me puse una toalla en la cintura y salí despacio cuando me vio trato de regresar a su habitación, la detuve y en voz baja le dije:
“Elsa, perdona, no sabía que te sentirías así, no creímos que tu esposo te obligaba...” ella respondió:
“Es un maldito, siempre me humilla, yo no tengo la culpa que sea un viejo impotente, siempre me ha tratado como una basura...” le contesté:
“Porque no lo dejas...” ella me interrumpió “No tengo a nadie” y le dije: “No tienes familia o un novio o amante con quien puedas irte” con la cabeza me dijo que no y lloró. Yo la abrace y ella se aferró a mi cuerpo fuertemente, pude sentir sus pechos eran suaves y grandes, mis brazos frotaban su espalda, poco a poco su llanto se fue calmando, podía sentir su respiración en mi pecho y de pronto sus labios se abrieron y comenzó a besarme, yo la tome de la mano y la conduje a nuestra habitación, ella me dijo:
“Tu mujer, no puedo...”; yo la jale un poco más fuerte; entramos a la habitación y encendí una pequeña lampara que estaba al costado de la cama, mi suegra se despertó y vio a Elsa; quito las sábanas dejando al descubierto su cuerpo desnudo, yo le quite a Elsa las prendas de dormir, me metí a la cama detrás de ella.
Elsa estaba en medio de mi suegra y yo, mi suegra besaba esos enormes pechos, yo ya tenía una erección, y puse el miembro entre las nalgas de Elsa, ella se estremeció, mi suegra acomodó mi miembro entre las piernas de esta mujer a la vez que frotaba su concha, empece a besarle el cuello y la espalda. Elsa se puso de pie en la cama y suegra de rodillas frente a ella, le lamía el clítoris y yo abría sus nalgas y le metía la lengua en el culo, ella se estremecía al sentir nuestras caricias y gemía de placer, mi suegra me masturbaba y me tenía la verga dura.
El culo de Elsa era una delicia, mi lengua se metía dentro de él, entraba y salía, movía las nalgas en un suave contoneo, mi suegra metía los dedos en la concha de Elsa; ella a su vez jugaba con sus enormes tetas, retorcía sus pezones, mi suegra sacó los dedos de la concha y me los puso en la mejilla estaban totalmente mojados con el jugo de la concha de Elsa, era un olor embriagante y quería saborear esa concha...
Acosté a Elsa en la cama con las piernas abiertas, mi suegra se coloco sobre la cara de Elsa poniéndole en la boca su concha, la tomo de los tobillos y me dijo: “Saborea esta concha, esta húmeda igual que la mía” Elsa confirmo eso con un gemido, estaba mamando la concha de mi suegra, yo le abrí los labios y comencé a meterle la lengua, su concha estaba totalmente mojada y su jugo salía formado hilos que pasaba por el culo de Elsa, yo estaba como loco, chupaba la concha baja a su culo y regresaba a su concha. Mi suegra gemía por el sexo oral que recibía, se inclino hacia delante y me tomo del cabello presionando mi cara sobre el pubis de Elsa, la cual me apretaba la cabeza con las piernas, casi me ahogo. Me incorpore y las dos reían de mi reacción, era tiempo de darles un sabroso castigo, tome uno dos dildos de la cartera de mi suegra e hice que ambas se pusieran en cuatro, metí los dos dildos en cada concha, se deslizaban con suavidad, ambas vaginas goteaban abundantemente. Hice que se siguieran masturbando con los dildos y me puse de pie frente a ellas, ambas entendieron y comenzaron a mamarme la verga y las bolas.
Me acosté en la cama y Elsa rápidamente se sacó el dildo y salto sobre mi verga, su vagina estaba totalmente mojada, el sonido generado por cada penetración era fuerte, mi suegra puso su concha sobre mi boca, y empezó a lamer mi verga y el clítoris de Elsa; era una sensación deliciosa, mi verga entrando en esa nueva concha y la lengua que acariciaba mi miembro en cada penetración, Elsa comenzó a moverse más aprisa; su pelvis chocaba contra la mía, produciendo un sonido fuerte; la sujete de las caderas y le di una embestida final, soltando toda mi leche dentro de su vagina. Ella se levantó y antes de saborear la combinación de nuestros jugos en mi miembro dijo: “Quiero sentir a que sabemos juntos...”. Metió mi verga dentro de su boca, mi suegra se incorporo y le dijo a Elsa: “Que te lo haga por el culo, después de acabar a este hombre le queda buena energía...” me puse de pie e hice que mi suegra me mamara el miembro justo como ella lo sabe hacer, luego puse a Elsa en cuatro y le deje ir la verga completa dentro de su culo, dio un fuerte grito, pero no me detuve, seguí metiendo y sacando mi
miembro varías veces, hasta que sentía que me estallaba, palpitaba mucho me detuve un momento dentro del cuerpo de Elsa, mi suegra riendo dijo:
“No te detengas, falto yo, me enojo si no recibo ese pedazo de carne...”. Me sentía exhausto, pero le di varias embestidas más a Elsa, me puse de pie y empuje a mi suegra sobre una pequeña mesa, dejando su culo listo para recibirme, la tome de las caderas al momento que la penetraba, ella había apretado su lindo agujero, pero no sirvió de nada, yo me detuve cuando mis bolas toparon en su concha. Nuestras caderas chocaban fuertemente hasta que unas cuantas gotas de semen se liberaron, mi suegra y yo éramos uno solo, Elsa se puso detrás de mí, y sujeto a mi suegra de las caderas diciéndome al oído: “Te ayudaré un poco...” Las embestidas que daba eran más fuertes, el bello púbico de Elsa estaba entre mis nalgas. Al fin pude eyacular dentro de su culo. Me aferre a su cuerpo mientras nuestra invitada se aferraba al mío. Yo temblaba y mi miembro salía poco a poco de ese culo.
Los tres estabamos bañados en sudor, vi la hora, eran casi las cinco de la mañana. Mi suegra me sorprendió al decirle a Elsa: “Nosotros nos vamos, si quieres puedes venir con nosotros y dejar a esa mierda que tienes por marido...”. La respuesta de Elsa fue afirmativa, nos metimos a la ducha y al salir mi suegra le presto ropa, salimos en silencio de la habitación, Elsa estaba muy feliz al entrar al auto y continuamos nuestro viaje con la invitada de la noche...
Otros capítulos de la historia:
1) La señora del servicio...
http://www.poringa.net/posts/relatos/2182060/La-senora-del-servicio___.html
2) La nueva señora de la limpieza...
http://www.poringa.net/posts/relatos/2183567/La-nueva-senora-de-la-limpieza___.html
3) La nueva señora de la limpieza (continuación)...
http://www.poringa.net/posts/relatos/2186516/La-nueva-senora-de-la-limpieza-_continuacion____.html
4) Con la nueva señora de la limpieza un sábado....
http://www.poringa.net/posts/relatos/2187644/Con-la-nueva-senora-de-la-limpieza-un-sabado____.html
5) (Cont.) Con la nueva señora de la limpieza un sábado...
http://www.poringa.net/posts/relatos/2187753/_Cont__-Con-la-nueva-senora-de-la-limpieza-un-sabado___.html
6) Buscando el silencio de Miriam
http://www.poringa.net/posts/relatos/2189670/Buscando-el-silencio-de-Miriam.html#comid-65705
7) El domingo llego mi suegra
http://www.poringa.net/posts/relatos/2190210/El-domingo-llego-mi-suegra___.html
😎 El día con mi suegra
http://www.poringa.net/posts/relatos/2191756/El-dia-con-mi-suegra.html
9) El viaje con mi suegra
http://www.poringa.net/posts/relatos/2194777/El-viaje-con-mi-suegra.html
Yo estaba desnudo y dispuesto, lo mismo que mi suegra, pero el hombre con una voz ronca dijo:
“Desnuden a mi mujer, yo les dique lo quiero que le hagan...”
Mi suegra salió de la cama, entre los dos le quitamos la ropa a la mujer, cuando ella estaba desnuda dio su siguiente instrucción:
“Señora, hágale sexo oral a su esposo, y usted señor métale los dedos en la vagina de mi mujer”. Esta pareja que teníamos en la habitación había creído que mi suegra era mi mujer, por esa noche creo que solo bastaba el secreto de ellos en el ambiente. Mi suegra con una sonrisa irónica se puso de rodillas frente a mí; aparentando inexperiencia comenzó a masturbarme y metió solo la punta de mi miembro en la boca, su lengua casi se metía por al agujero de mi verga, me llevaba a un umbral de dolor y placer. Acerque mi mano a la concha de la mujer, tenía abundante bello púbico, empece a separarle los labios y metí mis dedos dentro de su concha, su rostro mostró dolor; tenía la concha poco mojada y bastante estrecha, yo seguí haciéndolo, pero parecía que deseaba contener el llanto. Seguimos así por un buen rato, luego el hombre dijo:
“Señora acuéstese sobre la cama con las piernas abiertas para que su marido la penetre, Elsa; pon tu legua sobre el pene del señor cuando lo saque de la vagina de su mujer” supimos el nombre de la mujer: Elsa. Mi suegra se acostó con las piernas abiertas a la orilla de la cama, yo le metí la verga; nunca había tenido una erección tan estimulante, el juego que había hecho mi suegra con la lengua hizo que la cabeza de mi miembro pareciera que fuera a estallar, las venas estaban muy dilatadas, yo le deje ir la verga hasta el tope, tome a Elsa por el cabello, con delicadeza y la acerque mi miembro, ella sacó la lengua y la puso sobre mi verga mientras entraba y salía, mi suegra y ello estabamos gozando mucho, se escuchaba el roce de nuestros miembros húmedos, pero Elsa empezó a derramar lágrimas, tratando de que su marido no la viera, mi suegra estiro una mano para frotar una de sus nalgas pero el esposo dijo muy enojado:
“No hagan nada que yo no les diga, señor cuando este por acabar, eyacule sobre la cara Elsa, y señora quiero que usted tome el miembro de su marido y lo masturbe sobre la cara de mi mujer”; yo me controle y seguí penetrando a mi suegra las lagrimas de Elsa caían sobre el pubis de mi suegra, los dos seguimos sin darle importancia por un buen rato, pero la mirada de mi suegra me indico que ya no quería seguir con esa situación, saque mi verga y ella acostó a Elsa en la cama, se puso de pie y comenzó a masturbarme fuertemente su mano lastimaba mis bolas, pero yo me aguanté, ella seguía y apretaba fuertemente mi verga hasta que eyacule, mi suegra hizo que el semen cayera sobre la mejilla de Elsa, ella lloraba bastante, el hombre sonreía, se puso de pie y le dijo a Elsa que se vistiera sin limpiarse la cara, salieron de la habitación, mi suegra me dijo:
“Maldito viejo, las cosas se hacen de común acuerdo, que estúpido, no puedo creer que la trate así...”
Nos acostamos abrazados y desnudos, me desperté como a eso de las dos de la madrugada, fui al baño tratando de no hacer ruido; al regresar a la cama escuche algo que parecía un llanto, me acerque a la puerta, la abrí lentamente y el llanto se escuchaba mas fuerte, las luces del pasillo iluminaban la silueta de Elsa, me puse una toalla en la cintura y salí despacio cuando me vio trato de regresar a su habitación, la detuve y en voz baja le dije:
“Elsa, perdona, no sabía que te sentirías así, no creímos que tu esposo te obligaba...” ella respondió:
“Es un maldito, siempre me humilla, yo no tengo la culpa que sea un viejo impotente, siempre me ha tratado como una basura...” le contesté:
“Porque no lo dejas...” ella me interrumpió “No tengo a nadie” y le dije: “No tienes familia o un novio o amante con quien puedas irte” con la cabeza me dijo que no y lloró. Yo la abrace y ella se aferró a mi cuerpo fuertemente, pude sentir sus pechos eran suaves y grandes, mis brazos frotaban su espalda, poco a poco su llanto se fue calmando, podía sentir su respiración en mi pecho y de pronto sus labios se abrieron y comenzó a besarme, yo la tome de la mano y la conduje a nuestra habitación, ella me dijo:
“Tu mujer, no puedo...”; yo la jale un poco más fuerte; entramos a la habitación y encendí una pequeña lampara que estaba al costado de la cama, mi suegra se despertó y vio a Elsa; quito las sábanas dejando al descubierto su cuerpo desnudo, yo le quite a Elsa las prendas de dormir, me metí a la cama detrás de ella.
Elsa estaba en medio de mi suegra y yo, mi suegra besaba esos enormes pechos, yo ya tenía una erección, y puse el miembro entre las nalgas de Elsa, ella se estremeció, mi suegra acomodó mi miembro entre las piernas de esta mujer a la vez que frotaba su concha, empece a besarle el cuello y la espalda. Elsa se puso de pie en la cama y suegra de rodillas frente a ella, le lamía el clítoris y yo abría sus nalgas y le metía la lengua en el culo, ella se estremecía al sentir nuestras caricias y gemía de placer, mi suegra me masturbaba y me tenía la verga dura.
El culo de Elsa era una delicia, mi lengua se metía dentro de él, entraba y salía, movía las nalgas en un suave contoneo, mi suegra metía los dedos en la concha de Elsa; ella a su vez jugaba con sus enormes tetas, retorcía sus pezones, mi suegra sacó los dedos de la concha y me los puso en la mejilla estaban totalmente mojados con el jugo de la concha de Elsa, era un olor embriagante y quería saborear esa concha...
Acosté a Elsa en la cama con las piernas abiertas, mi suegra se coloco sobre la cara de Elsa poniéndole en la boca su concha, la tomo de los tobillos y me dijo: “Saborea esta concha, esta húmeda igual que la mía” Elsa confirmo eso con un gemido, estaba mamando la concha de mi suegra, yo le abrí los labios y comencé a meterle la lengua, su concha estaba totalmente mojada y su jugo salía formado hilos que pasaba por el culo de Elsa, yo estaba como loco, chupaba la concha baja a su culo y regresaba a su concha. Mi suegra gemía por el sexo oral que recibía, se inclino hacia delante y me tomo del cabello presionando mi cara sobre el pubis de Elsa, la cual me apretaba la cabeza con las piernas, casi me ahogo. Me incorpore y las dos reían de mi reacción, era tiempo de darles un sabroso castigo, tome uno dos dildos de la cartera de mi suegra e hice que ambas se pusieran en cuatro, metí los dos dildos en cada concha, se deslizaban con suavidad, ambas vaginas goteaban abundantemente. Hice que se siguieran masturbando con los dildos y me puse de pie frente a ellas, ambas entendieron y comenzaron a mamarme la verga y las bolas.
Me acosté en la cama y Elsa rápidamente se sacó el dildo y salto sobre mi verga, su vagina estaba totalmente mojada, el sonido generado por cada penetración era fuerte, mi suegra puso su concha sobre mi boca, y empezó a lamer mi verga y el clítoris de Elsa; era una sensación deliciosa, mi verga entrando en esa nueva concha y la lengua que acariciaba mi miembro en cada penetración, Elsa comenzó a moverse más aprisa; su pelvis chocaba contra la mía, produciendo un sonido fuerte; la sujete de las caderas y le di una embestida final, soltando toda mi leche dentro de su vagina. Ella se levantó y antes de saborear la combinación de nuestros jugos en mi miembro dijo: “Quiero sentir a que sabemos juntos...”. Metió mi verga dentro de su boca, mi suegra se incorporo y le dijo a Elsa: “Que te lo haga por el culo, después de acabar a este hombre le queda buena energía...” me puse de pie e hice que mi suegra me mamara el miembro justo como ella lo sabe hacer, luego puse a Elsa en cuatro y le deje ir la verga completa dentro de su culo, dio un fuerte grito, pero no me detuve, seguí metiendo y sacando mi
miembro varías veces, hasta que sentía que me estallaba, palpitaba mucho me detuve un momento dentro del cuerpo de Elsa, mi suegra riendo dijo:
“No te detengas, falto yo, me enojo si no recibo ese pedazo de carne...”. Me sentía exhausto, pero le di varias embestidas más a Elsa, me puse de pie y empuje a mi suegra sobre una pequeña mesa, dejando su culo listo para recibirme, la tome de las caderas al momento que la penetraba, ella había apretado su lindo agujero, pero no sirvió de nada, yo me detuve cuando mis bolas toparon en su concha. Nuestras caderas chocaban fuertemente hasta que unas cuantas gotas de semen se liberaron, mi suegra y yo éramos uno solo, Elsa se puso detrás de mí, y sujeto a mi suegra de las caderas diciéndome al oído: “Te ayudaré un poco...” Las embestidas que daba eran más fuertes, el bello púbico de Elsa estaba entre mis nalgas. Al fin pude eyacular dentro de su culo. Me aferre a su cuerpo mientras nuestra invitada se aferraba al mío. Yo temblaba y mi miembro salía poco a poco de ese culo.
Los tres estabamos bañados en sudor, vi la hora, eran casi las cinco de la mañana. Mi suegra me sorprendió al decirle a Elsa: “Nosotros nos vamos, si quieres puedes venir con nosotros y dejar a esa mierda que tienes por marido...”. La respuesta de Elsa fue afirmativa, nos metimos a la ducha y al salir mi suegra le presto ropa, salimos en silencio de la habitación, Elsa estaba muy feliz al entrar al auto y continuamos nuestro viaje con la invitada de la noche...
Otros capítulos de la historia:
1) La señora del servicio...
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2) La nueva señora de la limpieza...
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3) La nueva señora de la limpieza (continuación)...
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4) Con la nueva señora de la limpieza un sábado....
http://www.poringa.net/posts/relatos/2187644/Con-la-nueva-senora-de-la-limpieza-un-sabado____.html
5) (Cont.) Con la nueva señora de la limpieza un sábado...
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6) Buscando el silencio de Miriam
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7) El domingo llego mi suegra
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😎 El día con mi suegra
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9) El viaje con mi suegra
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3 comentarios - La noche en el hotel
Hahora que sos una makina de culiar o que hermano? te cojiste dos minas en tu casa, todo el día, garchaste a la amiga de tu jermu y después destrozaste a tu suegra en menos de 24hs....!!! como haces la tenes de cemento????? jajajaja, ba con onda loco....!!!