Aní aún continuaba convulsionándose por el orgasmo, cuando escuchó la voz de otro hombre en la habitación. Pero esa voz era conocida ella conocía el dueño de esa voz. Era una voz que se quedó tatuada en su mente y aún la hacía estremecer.
Pero no podía ver quien era porque estaba detrás de ella, de repente una mano en su nuca la sacó de sus pensamientos, la mano recorrió su nuca y llego a la hebilla de la corre que le impedía hablar.
La bola que le impedía hablar salió de su boca, dejando su mandíbula entumida.
-Wolfen, ¿Eres tú?
Su ex novio, quien fuera su amante, su amigo, su confidente, quien fuera el amor de su vida, pero la distancia los había separado cuando a él le ofrecieron un trabajo lejos y ella no lo acompañó por temor a dejar a su familia.
La mano pasó por sus senos y comenzó a acariciarlos fuertemente.
-Si, veo que no solo tu cuerpo me recuerda, si no que tu mente también lo hace.
-¡Por favor! ¡Te lo suplico! Suéltame, déjame ir.
-Lo siento muñequita, tuviste tu oportunidad y no la tomaste.
-Por favor déjame, estoy comprometida y me casaré.
-Jajajaja, ¿Casarte? No lo creo, ya que tu aún me perteneces, tu cuerpo aún se estremece, aunque tu mente me haya olvidado veo que tu cuerpo no.
Las caricias de Wolfen se volvieron más fuertes provocando que los pezones de Aní se pusieran duros. Aní sentía su cuerpo caliente, aunque trataba de controlarse, su cuerpo no le respondía, no podía evitar que esa voz, que esa mano la excitara. Su respiración comenzó a acelerarse de nuevo y de su boca comenzaron a salir leves gemidos.
-Jajajaja ¿Lo ves puta? Aún me perteneces.
-No es cierto, yo ya te olvide.
-Puta mentirosa, sólo sabes decir mentiras. Pero tu cuerpo siempre dice la verdad, y ¿Sabes? Aún recuerdo cuál es tu punto débil.
Wolfen chasqueó sus dedos, Aní comenzó a sentir la lengua de antes, pero esta vez no la sentía en su vagina, esta vez esa hábil lengua estaba marcando en círculos la entrada de su culo, para después comenzar a cerrar más el circulo y acariciar el centro de su culo, el cuerpo de Aní comenzó a estremecerse, su vagina a emanar jugos sin control.
-¡Por favor! deja mi culo ¡Por favorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!
La respiración de Aní se aceleró aún más, no podía ya controlar sus gemidos los cuales se hacían más fuertes, sus senos se hinchaban de placer sintiendo las caricias de Wolfen.
-Dices que pare puta, pero si lo estas disfrutando como loca.
Wolfen abrió el cierre de su pantalón, para sacar su pene, un pene duro, lleno de venas palpitantes.
-Toma puta, mejor usa esa boca para algo bueno.
Wolfen tomó la nuca de Aní para acercarla a su pene y así ella comenzara a chupársela pero ella cerró fuertemente su boca para impedir que ésta entrara. La lengua que estaba lamiendo su culo se apartó por un momento para darle paso a dos dedos, dos dedos que entraron de un solo golpe en su culo, haciendo que Aní soltara un grito de placer y abriera su boca completamente. Momento que aprovecho Wolfen para meter de un solo golpe todo su pene en la garganta de Aní, lo dejó un momento adentro, para después sacarla lentamente y volverla a meter.
La mente de Aní comenzó a divagar, esa sensación en su garganta, ese sabor, ese sabor que la volvía loca, que la excitaba. Wolfen seguía follando la boca de Aní cuando comenzó a sentir que ella usaba su boca para acariciar su pene, los ojos de Aní comenzaron a desorbitarse por la excitación que sentía, su cuerpo no podía con tanto placer. Wolfen sacó por completo su pene de la boca de Aní, la cual comenzó a lengüetear tratando de que su boca no pierda ese sabor que recordaba, ese sabor que estaba tatuado en su mente.
- ¿Lo ves puta? Aún eres mía, aún te encanta chupar mi verga.
- No es cierto, algo me hiciste, mi cuerpo no responde, me drogaste.
- Si, puta, te drogue.
Sacó dos pastillas blancas de su camisa.
-Mira, estos son unos fuertes afrodisíacos. Te los dimos mientras dormías.
- Por eso no puedo controlar mi cuerpo, es mi deseo de que me rompas el culo.
- No te escuche puta ¿Qué dijiste?
- Que deseo que me rompas el culo. Es por culpa de los afrodisíacos.
- No te escuche, creo que hablas muy bajo
- QUE DESEO QUE ME ROMPAS EL CULO, QUE LO HAGAS TRIZAS COMO SOLO TU SABES HACER!!!!
Wolfen tomó el lugar de la chica que lamía el culo de Aní, y tomándola fuertemente de la cintura metió de un solo golpe su verga en su culo. Estaba como loca gritando de placer por sentir el invasor dentro de ella, el cual sentía como palpitaba, como se movía de afuera hacia adentro. En un frenético mete saca, en el cual hacía que a cada embestida el culo de Aní rebotara mandándola hacia adelante.
-Si, tu eres el único que sabe cómo romperme el culo, si, me encanta ¡Más fuerte!
-Jajajjajaja, sabía que eras toda una puta adicta al sexo anal.
El sonido que emitía el chocar de la entrepierna de Wolfen contra el culo de Aní se escuchaba en toda la habitación, el cuerpo sudoroso de Aní se retorcía de placer, le venía un segundo orgasmo, más fuerte que el primero, su cuerpo sufrió un fuerte espasmo cuando comenzó a correrse como loca, sus gemidos casi dejaron sordo a Wolfen y su panocha no paraba de expulsar liquido, muestra de su gran orgasmo.
Wolfen dejó completamente su pene dentro de ella para así sentir como se contraía su cuerpo. Este desató todos las correas que detenían a Aní para dejar que se mueva, él se sentó en una silla cercana a la camilla donde se encontraba Aní.
-Ven, puta, quiero que me la chupes hasta terminar en tu cara de zorra.
Aní trató de levantarse pero sus piernas no le respondían y cayó sentada en el piso.
- ¿Qué esperas puta? Ven a chuparla, ven a cuatro patas como la perra que eres.
Como pudo, Aní comenzó a ir a cuatro patas meneando a cada paso su hermoso culo, hasta que llego a donde estaba él, para comenzar a meter esa verga dura en su boca, disfrutando de su sabor. Aceleró el ritmo de su mamada tratando de sacar el semen, ese delicioso semen que a ella le fascinaba comer.
De repente, la verga comienzó a hincharse y ponerse más caliente, y un fuerte chorro de semen caliente comenzó a inundar la garganta de Aní, la cual comenzó a tragar como si fuera la bebida más rica del mundo.
-¿Que drogas me diste? Me están volviendo loca.
-¿Drogas? ¿Cuáles drogas puta?
Sacó las pastillas de su camisa y sin medir palabra las metió de un golpe en la boca de Aní.
-No son drogas, solo son pastillas de menta jajajajajajajajajaja. Sólo le di un placebo a tu mente para que te dejaras llevar.
La mente de Aní entró en shock, efectivamente las pastillas solo eran mentas, su mente no daba crédito que ella se hubiera comportado así pensando que estaba drogada, no podía creer que se hubiera dejado llevar, que lo hubiera disfrutado tanto, sus ojos trataron de ver a otro lado para no ver a los ojos a quien le estaba haciendo esto, y por un segundo pudo ver una puerta al otro lado de la habitación, una puerta, solo tenía que llegar a ella.
Reuniendo todas las fuerzas que pudo, tumbó hacia atras a Wolfen, comenzó a correr a la puerta tratando de escapar, ya faltaba poco cuando una fuerte descarga eléctrica sacudió todo su cuerpo haciéndola caer al suelo. Otro hombre que no había visto se acerco a su cuerpo.
-Qué hermoso espécimen me trajiste, Wolfen, lástima que sea tan rebelde.
Ese hombre misterioso que vestía una bata blanca, fue quien le dio la descarga a la pobre de Aní.
-Si, lo sé doctor, que lástima. Como no te podía tener como mi mujer, Aní, te quise tener como mi esclava, que tampoco puedo tener, así que me tendré que conformar con tenerte como mi mascota.
Continuará…….
Bueno ya es el segundo, espero que les guste, y que esperen con ansias la tercera parte donde la historia tendrá su final.
Le agradezco a todos los de radioporinga, por animarme a escribir mi relato y en especial a guasón por ayudarme a editarlos
Pero no podía ver quien era porque estaba detrás de ella, de repente una mano en su nuca la sacó de sus pensamientos, la mano recorrió su nuca y llego a la hebilla de la corre que le impedía hablar.
La bola que le impedía hablar salió de su boca, dejando su mandíbula entumida.
-Wolfen, ¿Eres tú?
Su ex novio, quien fuera su amante, su amigo, su confidente, quien fuera el amor de su vida, pero la distancia los había separado cuando a él le ofrecieron un trabajo lejos y ella no lo acompañó por temor a dejar a su familia.
La mano pasó por sus senos y comenzó a acariciarlos fuertemente.
-Si, veo que no solo tu cuerpo me recuerda, si no que tu mente también lo hace.
-¡Por favor! ¡Te lo suplico! Suéltame, déjame ir.
-Lo siento muñequita, tuviste tu oportunidad y no la tomaste.
-Por favor déjame, estoy comprometida y me casaré.
-Jajajaja, ¿Casarte? No lo creo, ya que tu aún me perteneces, tu cuerpo aún se estremece, aunque tu mente me haya olvidado veo que tu cuerpo no.
Las caricias de Wolfen se volvieron más fuertes provocando que los pezones de Aní se pusieran duros. Aní sentía su cuerpo caliente, aunque trataba de controlarse, su cuerpo no le respondía, no podía evitar que esa voz, que esa mano la excitara. Su respiración comenzó a acelerarse de nuevo y de su boca comenzaron a salir leves gemidos.
-Jajajaja ¿Lo ves puta? Aún me perteneces.
-No es cierto, yo ya te olvide.
-Puta mentirosa, sólo sabes decir mentiras. Pero tu cuerpo siempre dice la verdad, y ¿Sabes? Aún recuerdo cuál es tu punto débil.
Wolfen chasqueó sus dedos, Aní comenzó a sentir la lengua de antes, pero esta vez no la sentía en su vagina, esta vez esa hábil lengua estaba marcando en círculos la entrada de su culo, para después comenzar a cerrar más el circulo y acariciar el centro de su culo, el cuerpo de Aní comenzó a estremecerse, su vagina a emanar jugos sin control.
-¡Por favor! deja mi culo ¡Por favorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!
La respiración de Aní se aceleró aún más, no podía ya controlar sus gemidos los cuales se hacían más fuertes, sus senos se hinchaban de placer sintiendo las caricias de Wolfen.
-Dices que pare puta, pero si lo estas disfrutando como loca.
Wolfen abrió el cierre de su pantalón, para sacar su pene, un pene duro, lleno de venas palpitantes.
-Toma puta, mejor usa esa boca para algo bueno.
Wolfen tomó la nuca de Aní para acercarla a su pene y así ella comenzara a chupársela pero ella cerró fuertemente su boca para impedir que ésta entrara. La lengua que estaba lamiendo su culo se apartó por un momento para darle paso a dos dedos, dos dedos que entraron de un solo golpe en su culo, haciendo que Aní soltara un grito de placer y abriera su boca completamente. Momento que aprovecho Wolfen para meter de un solo golpe todo su pene en la garganta de Aní, lo dejó un momento adentro, para después sacarla lentamente y volverla a meter.
La mente de Aní comenzó a divagar, esa sensación en su garganta, ese sabor, ese sabor que la volvía loca, que la excitaba. Wolfen seguía follando la boca de Aní cuando comenzó a sentir que ella usaba su boca para acariciar su pene, los ojos de Aní comenzaron a desorbitarse por la excitación que sentía, su cuerpo no podía con tanto placer. Wolfen sacó por completo su pene de la boca de Aní, la cual comenzó a lengüetear tratando de que su boca no pierda ese sabor que recordaba, ese sabor que estaba tatuado en su mente.
- ¿Lo ves puta? Aún eres mía, aún te encanta chupar mi verga.
- No es cierto, algo me hiciste, mi cuerpo no responde, me drogaste.
- Si, puta, te drogue.
Sacó dos pastillas blancas de su camisa.
-Mira, estos son unos fuertes afrodisíacos. Te los dimos mientras dormías.
- Por eso no puedo controlar mi cuerpo, es mi deseo de que me rompas el culo.
- No te escuche puta ¿Qué dijiste?
- Que deseo que me rompas el culo. Es por culpa de los afrodisíacos.
- No te escuche, creo que hablas muy bajo
- QUE DESEO QUE ME ROMPAS EL CULO, QUE LO HAGAS TRIZAS COMO SOLO TU SABES HACER!!!!
Wolfen tomó el lugar de la chica que lamía el culo de Aní, y tomándola fuertemente de la cintura metió de un solo golpe su verga en su culo. Estaba como loca gritando de placer por sentir el invasor dentro de ella, el cual sentía como palpitaba, como se movía de afuera hacia adentro. En un frenético mete saca, en el cual hacía que a cada embestida el culo de Aní rebotara mandándola hacia adelante.
-Si, tu eres el único que sabe cómo romperme el culo, si, me encanta ¡Más fuerte!
-Jajajjajaja, sabía que eras toda una puta adicta al sexo anal.
El sonido que emitía el chocar de la entrepierna de Wolfen contra el culo de Aní se escuchaba en toda la habitación, el cuerpo sudoroso de Aní se retorcía de placer, le venía un segundo orgasmo, más fuerte que el primero, su cuerpo sufrió un fuerte espasmo cuando comenzó a correrse como loca, sus gemidos casi dejaron sordo a Wolfen y su panocha no paraba de expulsar liquido, muestra de su gran orgasmo.
Wolfen dejó completamente su pene dentro de ella para así sentir como se contraía su cuerpo. Este desató todos las correas que detenían a Aní para dejar que se mueva, él se sentó en una silla cercana a la camilla donde se encontraba Aní.
-Ven, puta, quiero que me la chupes hasta terminar en tu cara de zorra.
Aní trató de levantarse pero sus piernas no le respondían y cayó sentada en el piso.
- ¿Qué esperas puta? Ven a chuparla, ven a cuatro patas como la perra que eres.
Como pudo, Aní comenzó a ir a cuatro patas meneando a cada paso su hermoso culo, hasta que llego a donde estaba él, para comenzar a meter esa verga dura en su boca, disfrutando de su sabor. Aceleró el ritmo de su mamada tratando de sacar el semen, ese delicioso semen que a ella le fascinaba comer.
De repente, la verga comienzó a hincharse y ponerse más caliente, y un fuerte chorro de semen caliente comenzó a inundar la garganta de Aní, la cual comenzó a tragar como si fuera la bebida más rica del mundo.
-¿Que drogas me diste? Me están volviendo loca.
-¿Drogas? ¿Cuáles drogas puta?
Sacó las pastillas de su camisa y sin medir palabra las metió de un golpe en la boca de Aní.
-No son drogas, solo son pastillas de menta jajajajajajajajajaja. Sólo le di un placebo a tu mente para que te dejaras llevar.
La mente de Aní entró en shock, efectivamente las pastillas solo eran mentas, su mente no daba crédito que ella se hubiera comportado así pensando que estaba drogada, no podía creer que se hubiera dejado llevar, que lo hubiera disfrutado tanto, sus ojos trataron de ver a otro lado para no ver a los ojos a quien le estaba haciendo esto, y por un segundo pudo ver una puerta al otro lado de la habitación, una puerta, solo tenía que llegar a ella.
Reuniendo todas las fuerzas que pudo, tumbó hacia atras a Wolfen, comenzó a correr a la puerta tratando de escapar, ya faltaba poco cuando una fuerte descarga eléctrica sacudió todo su cuerpo haciéndola caer al suelo. Otro hombre que no había visto se acerco a su cuerpo.
-Qué hermoso espécimen me trajiste, Wolfen, lástima que sea tan rebelde.
Ese hombre misterioso que vestía una bata blanca, fue quien le dio la descarga a la pobre de Aní.
-Si, lo sé doctor, que lástima. Como no te podía tener como mi mujer, Aní, te quise tener como mi esclava, que tampoco puedo tener, así que me tendré que conformar con tenerte como mi mascota.
Continuará…….
Bueno ya es el segundo, espero que les guste, y que esperen con ansias la tercera parte donde la historia tendrá su final.
Le agradezco a todos los de radioporinga, por animarme a escribir mi relato y en especial a guasón por ayudarme a editarlos
6 comentarios - el secuestro de la novia 2
pao_ger
http://radioporinga.com.ar/radiochat.php
gracias por el aporte!! besoooosssss,
GodiTICA
yo pase por tu post, vos pasaste por el mio?
los comentarios son el apoyo que necesitamos para seguir adelante!!