experiencia swinger

Dias atras, fuimos con mi pareja, a unos de esos antros que se concen
por su fama de gente que va a buscar aventuras de tipo sexual,
boliche swinger que le dicen.

Fue nuestra primera vez y estabamos un poco nerviosos dado que no
sabiamos con que nos ibamos a encontrar ni como podiamos reaccionar.

Al llegar nos preguntan si era nuestra primera vez y nos muestran las
instalaciones, indicandonos las caracteristicas de cada lugar. Un
salon como de un bar con mesas, pero a media luz, un salon de baile,
el vestuario, otro salon con reservados que tenian un sofa y una
cortina que “separaba” el reservado del resto y una sala enorme, todo
el piso acolchado donde se daban las fiestas mas “calientes”.

Como era temprano, apenas las diez de la noche, habia poca gente asi
que nos sentamos a una mesa a observar. Poco a poco el local se fue
llenando y observamos que algunos se conocían por el modo en que se
saludaban. Algunas parejas habian salido a bailar y se veia en la
pista que habia discretos toqueteos, algunos de los cuales eran
retribuidos y otros rechazados.

Dos parejas desaparecieron en uno de los reservados y al rato
reaparecieron con cara de “yo no fui”, muestra evidente de que algo
habia pasado. Comenzo asi un movimiento de ida y vuelta mas o menos
regular.

Una pareja pidio de sentarse con nosotros, nos preguntaron si era la
primera vez, que que era lo que buscabamos y cosas por el estilo,
hasta que preguntaron directamente si queriamos tener algo con ellos.
Nos miramos con mi pareja y dijimos que no.

Una pareja salio desnuda de la sala acolchada, fue a la barra y se
volvio a meter.

Bailamos un par de piezas y hubo algunas caricias discretas a Sonia y
un no tan discreto manoton a mi, pero no paso nada mas. Aca vale una
descripción: Sonia es delgada y alta 1,78 pelirroja cobriza natural, y
lo que tiene no es exuberante, pero esta muy pero muy bien puesto y
ella se ocupa de que se note. Yo mido 1,88 y soy flaco de barba y
bigotes, pero la musculatura marcada por ejercicio.

Cuando volvimos a la mesa, notamos que una mesa cercana se habia
ocupado por un hombre mayor, semicalvo, canoso, barba y bigotes igual
que yo, buenas pilchas y parecia alto. Miro un poco y nada mas. Al
rato fuimos a dar una vuelta a ver que pasaba y al pasar por el salon
acolchado vimos que habia una cierta cantidad de parejas teniendo sexo
de cualquier manera e incluso de varios contra uno. Cosa que a Sonia
la excito algo y a mi me puso tan al palo, que le meti mano al culo de
Sonia la que me la saco, no muy convencida, diciendo “aca no”.

El ambiente se habia caldeado un poco, y ya la division de areas no
era tan notoria. Algunos reservados tenian la cortina abierta y se
veia lo que pasaba y alguna personas andaban en ropa interior o
directamente desnudas.

De vuelta a la mesa, ni bien nos sentamos, la mesera nos trajo las
bebidas que estabamos tomando sin haberlas pedido. Sonia se extraño y
pregunto de donde habian salido y la mesera indico la mesa del hombre
mayor. El comentario fue “¡Miramelo al jovato!”
Como no estaba en la mesa, no se lo agradecimos en ese momento.

Al rato vuelve, acompañando a una mujer a una mesa y se sienta en la
suya. El tipo habra tenido 55 a 60 años (66 nos enteramos después)
bien plantado, derecho como una vara, las pilchas le quedaban
pintadas, en fin, hasta a mi me parecio atractivo y cuando se sento,
le agradecimos con una inclinación de cabeza.

Le pregunto a Sonia si le gustaba y me contesta “El viejo no me dura
ni cinco minutos” pero que estaba interesante. Al sugerirle de
invitarlo a la mesa, me dice que ahora no, después. Paso un mono y la
saco a bailar a Sonia, la que volvio a los cinco minutos puteando

¿Qué paso?
Que el muy pelotudo penso que podia hacer lo que se le cante –me contesta
¿Qué hizo?
Me metio la mano en la….
¿Concha? –pregunto.
Aja, y encima se enojo cuando le pare el carro…
Si te parece, voy y lo cago a palos…
Dejalo, que lo unico que va a conseguir es hacerse una paja…

Lo miro de reojo al jovato y veo que se sonrie. Evidentemente, a pesar
de la musica, habia escuchado y se lo comento a Sonia, la que se da
vuelta a mirar. Se encontro con una cara de piedra que no se como
habra hecho para cambiarla tan rapido.

Me dice de invitarlo a la mesa, cosa que hago con una inclinación de
cabeza.El jovato se levanta y se sienta en nuestra mesa presentandose
como Alfredo y disculpandose por haber escuchado y comentando que “aca
te tenes que acostumbrar a los desubicados”

Invito a Sonia a bailar, muy caballeroso. Yo miraba a ver que pasaba y
el jovato la agarraba bien agarrada y muy discreto al tocar. La
apretaba contra el, apoyandole el bulto y Sonia ni decia nada. Al
volver a la mesa, me agradece que le haya permitido bailar y elogia lo
bien que baila.

Es una de sus virtudes –le digo
Es un placer bailar con ella, se deja llevar…
Lo que pasa que usted baila bien –dice Sonia.
No es para tanto…-y pide permiso para levantarse.

Sonia me comenta que el jovato es un caballero y que le gusta y que
parece bien provisto. Cuando vuelve, seguimos la conversación, ya mas
orientada a lo que veniamos a buscar cuando Alfredo dice
Miren chicos, yo vivo cerca, si quieren vamos al departamento…

Sonia dijo que si mas rapido que yo…

Al llegar nos encontramos con un departamento muy bien puesto,
confortable, como si Alfredo lo tuviera preparado para este tipo de
reuniones. Sillones comodos, moquette muy mullida y una calefaccion
que invitaba a sacarse la ropa. Sirvio café y whisky y seguimos con la
charla, ya bastante mas caliente, sobre que es lo que habiamos ido a
buscar.

En realidad-dice Sonia- fuimos a ver que pasaba
Y ya viste que pasaba…
Y pensabamos en un intercambio de parejas…
Ahhh! –dice Alfredo- ese no es ningun problema…
¿Por que? –pregunto yo
En unos 10 minutos llega mi esposa
¿Cómo? – se sorprendio Sonia.
Si, nos vio salir y dentro un ratito llega.
¿Qué? ¿Estaba tu esposa alla?
Por supuesto, solo que separados y el primero que establece un
contacto, que resulte razonable, se viene para aca.

No termina de decir esto que se abre la puerta y entra una mujer, de
edad pareja de Alfredo, no muy alta y atractiva. Bonita de cara y un
cuerpo rellenito, pero al parecer firme. Saluds a Alfredo con un beso
y a nosotros con una sonrisa, diciendo:

Ponganse comodos, como si estuvieran en casa- sacandose el saquito y
los zapatos.

Charla informal, que nada que ver con la de hacia 5 minutos con
Alfredo, cuando este aparece con una bata y descalzo. Elena le dice a
Sonia que la acompañe y se van para adentro cuando Alfredo me alcanza
una bata y me dice que me ponga comodo y como quien no quiere la cosa,
me muestra que bajo la bata no hay nada.

Vuelvo, ya cambiado, y me encuentro a Elena y Alfredo, ocupados en
atender a Sonia la que estaba roja hasta la raiz del pelo…

¿Que te pasa, Sonia?-le pregunto.
No, nada, solo que no se muy bien que va a pasar…
Por lo que vi- suelta Elena- la vamos a pasar muy bien…

Charla va, caricia viene, con Elena empezamos a bailar suave y ella se
mostro enseguida interesada por el “amigo” porque lo manoteo sin dudar
y relamiendose. Yo meti mano por debajo de la bata y toque una piel
suave y firme y me gusto. Miro para el costado y veo que Alfredo y
Sonia estaban franeleando en el sofa, Alfredo muy ocupado con las
tetas de Sonia, cuando noto que Elena me saca la bata y me lleva para
un sillon. Alfredo, cuando ve esto, la desnuda a Sonia, que ya estaba
mas que caliente y se saca la bata. Cuando vimos lo que calzaba
Alfredo, tanto Sonia como yo no lo podiamos creer. Si bien tengo una
dotacion interesante (19×4) me sacaba varios cuerpos de ventaja,
porque comodamente debia tener 25×5 (26×5,5 nos enterariamos después).

A Sonia lo unico que se le ocurrio fue:

Se amable, por favor…
No te preocupes – dice Elena- es muy amable, pero te la va a mandar toda

Yo me acerque para mirar como podia entrar eso, mientras Alfredo le
arrimaba la cabeza. Cuando Sonia la sintio, se abrio de piernas lo mas
que podia y aspiro profundo. Alfredo aprovecho eso y le metio la
cabeza sola. Sonia gimio fuerte y Alfredo empezo con un mete saca
cortito, solo la cabezota, ida y vuelta rapidito, pero nada mas. Yo
tenia un garrote bestial que hizo que Elena dijera:

Vos no te quedas muy atrás querido….

Y se agachara para hacerme una mamada que casi me hace acabar. Se
acuesta en el sofa. Al lado de Sonia y abriendo las piernas, me pide
que se la meta. Cuando le arrimo la cabeza, me abraza con las piernas
y se la mete de un saque. En ese momento Alfredo, que habia ido
metiendosela de apoco, empujo con todo.

¡¡¡¡AAaaaayyyyy, aaahhhhhhh, hijo de puta como me dejas!!!! ¡¡¡uffff,
dale suave!!!! ¡¡¡¡Ayyy Edu, no sabes lo que es esto!!!! Ayyyy, para
que duele!!!! Sonia no sabia si queria mas, si queria que se la
sacaran o que, pero estaba disfrutando de esa pija con todo. Alfredo
se levanta, con Sonia ensartada y se sienta en el sofa. Sonia quedo
arriba y moviendose despacio tragandose toda esa poronga en cada
bajada. Elena se sale y se acerca a Sonia y se larga a lamerle lo que
pueda de la concha y el culo, ensalivandoselo bien y metiendole dos y
tres dedos y Sonia gritaba por mas. Yo veia eso y me ponia cada vez
peor, me parecia quela pija me iba a estallar, cuando Elena me la
agarra y la arrima al culo de Sonia. Ni lo pense, y asi como venia se
la meti.

El grito que pego se debe haber escuchado en todo el edificio, pero ni
Elena ni Alfredo se preocuparon. Yo estaba enloquecido, era la primera
vez que le hacia el culo a Sonia y al mismo tiempo se estaba comiendo
una poronga impresionante. Notaba que a Sonia no le quedaba lugar
libre enel vientre, mi pija chocaba con la de Alfredo y era una
sensación super excitante. Alfredo me mira como preguntando si acabo y
le hago seña de que si.

Nos empezamos a mover los dos mas rapido y de golpe, casi juntos le
decargamos todo lo que teniamos, adentro. Sonia hacia ya rato que
tenia un orgasmo tras otro y habia largado una cantidad de fluido
impresionante.

Elena se le fue al humo instantáneamente, y antes de que se pudiera
relajar, ya le estaba comiendo el clítoris. Alfredo no perdio el
tiempo en boludeces y cuando la vio a Elena en posicion, se la mando
de un saque hasta el fondo. Sonia estaba mas que pasada de vueltas y
pedia mas y mas. Le acerque la pija a la boca y no vacilo en chuparla
como si fuera un helado. La muy turra de Elena trataba de meterme un
dedo en el culo. Alfredo bombeaba sin parar y con cada embestida Elena
se clavaba en la concha de Sonia, que cada vez me metia una chupada
mas profunda. Noto que Alfredo intenta metersela en el orto a Elena,
la que se acomoda como para recibir ese tremendo pedazo de carne. Para
acomodarse, dejo de chuparla a Sonia, por lo que yo aproveche y se la
meti a fondo. Me abrazo fuerte y me empezo a cabalgar como nunca. En
eso escuchamos un ¡¡¡¡Aaaaaggggghhhhh, hijo de puta!!!! ¡¡¡¡¡Como me
estas dejando el orto!!!!!

¡A Elena parecia que se le iban a saltar los ojos! ¡Habia abierto la
boca como si le faltara el aire y estaba jadeando y gimiendo sin
parar! Mientras tanto Alfredo le bombeaba sin parar sacando casi toda
la pija en cada movimiento y clavandola a fondo en cada embestida.
Elena habia apoyado la cara en el sofa y con las manos se separaba los
cachetes como para que le entre todo y algo mas. Al ver esa escena,
Sonia y yo acabamos casi al mismo tiempo. Al escucharnos, Alfredo
empezo como a gruñir y a moverse mas despacio, acabandole en el culo a
Elena. Cuando se la saca, el orto de Elena parecia una flor de
enrojecido que estaba y parecia no querer cerrarse, cosa que hizo de a
poquito, latiendo como si tuviera contracciones. Elena habia quedado
tendida en el sofa, boca abajo y culo para arriba, jadeando como si
hubiera corrido la maraton.

Quedamos los cuatro rendidos y callados, enchastrados de semen y
fluidos por todos lados. Elena se intenta levantar y cuando lo logra,
le empieza a gotear semen por las piernas. Caminando con las piernas
medio abiertas se metio en la cocina y Sonia fue para alla.

Alfredo comenta

Ahora, dentro de un rato, le toca a Sonia.
No creo que lo logres. –le digo.
Ya vas a ver como se la come…
Va a gritar como una loca…
No importa, el departamento esta aislado acusticamente.

Cuando vuelven las dos mujeres con café calentito, estaban normales y
Sonia larga un:

Despues quiero probar…
¿Qué queres probar? – pregunta Alfredo
La quiero probar en el culo –le contesta- pero si duele no quiero seguir…
Doler, te va a doler –le dice Elena- Pero cuando la tenes adentro, es
fascinante…
Me encanto la de Edu y la acabada…Pero la de Alfredo es realmente grande.

Yo no entendia nada, Sonia nunca fue mojigata pero tampoco una mina de
hablar mucho de sus preferencia sexuales y ahora en un grupito de
cuatro, todos desnudos, comentaba que queria probar una monstruosidad
por el orto. La cosa siguió asi, charlando como lo ibamos a hacer y de
quien se cojeria a quien cuando Elena se acerca a Sonia y la empieza a
acariciar. Instantaneamente la otra le responde con caricias en la
concha y el culo. No pasaron ni diez segundos que se enroscaron en un
69 brutal. Alfredo, no se de donde, habia sacado un consolador que le
alcanzo a Elena y esta se lo pasaba por la concha y el culo a Sonia.
Yo me acerque y le arrime la poronga y como estaba cerca, Elena me
pegaba una que otra lamida. Alfredo miraba y se sobaba la poronga,
medio muerta y se la arrimaba a Sonia para que se la chupe. Eramos un
manojo de manos piernas y brazos que se cruzaban, tocandose,
acariciando y pellizcando sin saber muy bien quien tocaba a quien. En
eso siento un ¡¡¡ouughhhhh!!! Y era Elena que le habia metido el
consolador de golpe a Sonia, la que se empezó a mover y a sacudirse,
presagio de un orgasmo que no trdo mucho en llegar entre gemidos y
jadeos. En eso siento atrás mio a Alfredo que me arrima la poronga al
culo. ¡La puta madre!¡La sola sensación de sentir ese porongo cerca
era impresionante! ¡Yo, muy macho, aflojaba el orto! Alfredo me
alcanza un lubricante mientras me sigue puerteando con esa tremenda
pija y yo le encremo bien el orto a Sonia

Me corro, dejandole a Alfredo el culo de Sonia a tiro. No espero ni
medio segundo y como la zona estaba lubricada, le mando la cabeza
adentro y se quedo ahí.

¡El grito que pego Sonia, mas que grito fue un alarido!
¡¡¡¡¡Aaaaaayyyyyyyyy!!!!!¡¡¡¡Para que duele!!!!!¡¡¡¡¡ouuuggghhhh!!!!!
Alfredo ni se inmuto y se quedo quieto. Yo me habia agachado y miraba
como se abria ese orto y como Elena se desesperaba chupandole la
concha. Sonia se habia quedado dura y quieta, jadeando y diciendo
¡ay!¡ay!¡ay! bajito, pero no hacia amague de que se la saquen. Cuando
Alfredo se empezo a mover, Sonia volvio a gritar un ¡¡¡¡Aaayyy!!!!
pero mas bajo, al que Alfredo no le dio bola y siguió con el
adentro-afuera. Elena se habia salido de debajo de modo que Sonia pudo
apoyar la cabeza y dejar el culo bien para arriba, cosa que Alfredo
aprovecho para metersela toda adentro de un saque. Sonia no dijo nada
y se acomodo como para que le entrara cualquier cosa mas. Asi Alfredo
empezo a moverse cada vez mas rapido y mas fuerte y Sonia a pedir
¡¡mas, mas, mas!! ¡¡¡Dame, dame!!! Yo no lo podia creer, ¡Sonia tenia
clavados 26 centimetros de carne en el orto y pedia mas! En eso
Alfredo le acaba en el culo y Sonia al sentir los espasmos del otro le
grita ¡¡No la saques!!¡¡Toda, toda!! y se empieza a retorcer en un
orgasmo que no le terminaba nunca. La acabada de Alfredo le salia del
culo y se mezclaba con sus fluidos, de modo que todo el movimiento se
hacia mas facil. Sonia lo unico que hacia era jadear y moverse de modo
que la pija le entrara hasta las bolas y queria mas. Cuando se la
saca, igual que a Elena, el culo le habia quefdado dilatado y se
cerraba muy despacio. Uno podia ver las palpitaciones a medida que se
cerraba.

Yo andaba con un palo impresionante cuando Sonia, casi sin cambiar de
posición, me dice “Edu, dame vos” y yo se la meti por segunda vez. La
sensación de entrar tan fácilmente, todo humedo y lubricado por la
leche de Alfredo, los jugos de Sonia y la crema fue indescriptible.
Cuando la tuvo adentro, cerro el culo y me apreto la pija como si lo
hiciera con la mano y se volvio a mover desesperada, de modo que en
diez bombeadas me hizo acabar una cantidad de leche que no crei
posible. Se la deje adentro hasta que me dijo que se la saque, que
ardia.

Un rato después Elena dice:

A mi me dejaron en banda…
No te preocupes –le contesta Alfredo- En un rato te atiendo el kiosco del fondo…
Estas en pedo, solo una vez por noche…
¿Y porque solo una vez?
Si vos lo dejas a Edu que te lo haga, te lo doy…

Pero esa es otra historia…


fuente:gemidos