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Alicia, acomodando muebles (relato)

Hola, mi nombre es Alicia y les quiero contar algo que me sucedió el mes pasado. Pero antes me describiré un poco, soy una divorciada de 42 años, mido 1.70 cm. Y mis senos son como 2 toronjas y un trasero no muy grande pero si paradito y llamativo, me encanta usar shorts sin nada debajo y tops o simplemente la parte de arriba de un bikini, claro cuando estoy sola en casa, para salir uso pantalones ajustaditos, tangas y blusas ajustadas.
El mes pasado recibí un dinero extra y decidí regalarme el cambio de los muebles de mi casa, así que compre una salita, una tv y una cama nueva, también decidí pintar la sala así que empaquete todo y lo saque a un cuarto que uso de bodega, para hacer toda esta titánica tarea me ayudo mi hermano menor pero al momento de acomodar todo su esposa lo llamo y tuvo que irse, así que me quede sola con todo el desorden, claro como estaba mi hermano estaba con un pantalón y una blusa, así que cuando se fue me fui a cambiar por mis shorts preferidos y me quite mi tanga, empecé a reacomodar todo y me di cuenta de que sería imposible para mi sola, así que me asome por la ventana y vi a mi vecino un muchachito que la verdad no se su edad pero se ve jovencito.
-hey, Néstor, quieres ganar algo de dinero?-le grite desde mi puerta.
-claro señora, quiere algún mandado?- me pregunto, ya que siempre lo mando al súper a conseguirme cosas.
-no, necesito que me ayudes a mover los muebles de mi sala-le dije para que se preparara.
Entro a mi casa algo nervioso porque nunca lo dejaba pasar más adentro de el recibidor, empezamos a mover los sillones, hasta ese momento no me había dado cuenta de lo musculoso que era y que aparte parecía no traer nada debajo de sus pantaloncillos ya que se le empezaba a notar una semi erección, decidí que estaría bien darle al muchacho algo más que dinero por su ayuda y de paso terminar con la sequia de sexo que sufría desde mi divorcio, así que me fui a mi recamara y subí mis shorts de manera que se notara mi puchita y se viera mas carne de mis nalgas, al regresar a la sala él me vio y se puso nervioso, yo hice como si nada pasara pero empecé a provocarlo con mis movimientos, así note como su palo estaba a más no poder.
-Me ayudas a subir estos jarrones a la repisa?-le pregunte.
-si señora Alicia-me dijo
-Alicia, llámame Alicia, estamos en confianza, jajá- le dije para que se tranquilizara un poco.
Subí en la pequeña escalera con un jarrón en las manos dejando mi puchita a su altura para que pudiera verla de cerca y notar lo hinchado de mis labios vaginales, el trago en seco al verlos, al acomodar el jarrón hice un movimiento para que pareciera que me caía y me gire para ponerle mis nalgas en la cara.
-discúlpame perdí el equilibrio- le dije fingiendo que estaba apenada, el se puso rojísimo.
-ahora sube tu a la escalera, tú tienes más equilibrio que yo- le dije
Al subirse yo me quede sosteniendo la escalera el quedo de frente a mí con su erección.
-que te pasa?-le pregunte
-nada, yo, este, nada Alicia- me dijo nervioso
-te subiste a la escalera sin nada en las manos, jajaja-le dije, sabiendo que él pensaba que me refería a su erección, bajo de la escalera y tomo el jarrón, al subir de nuevo quedo frente a mí, me asegure de que su verga quedara cerca de mis tetas y le empecé a decir donde quería el jarrón, me paraba de puntitas para señalarle el lugar donde lo quería y con esto hacia que su pene quedara justo entre mis senos, esto lo calentó mucho y a mi mucho mas, después de varios rozones sentí como se estaba vaciando en su pantaloncillo así que me apure a bajárselo y gran parte de su venia me baño la cara y las tetas.
-discúlpeme Alicia, no era mi intención- se deshacía en disculpas.
-no, tranquilo, no pasa nada- le decía yo mientras tomaba su vegra entre mis manos y se la empezaba a menear.
-esto te lo provoque yo?-pregunte
-si, es que sus pechos estaba en mi pene y no resistí-me dijo mientras yo se la lamia despacito.
-me deseas?, desde cuando me deseas?-pregunte morbosa.
-si Alicia te deseo como un loco, todas las noches me masturbo pensando en ti, desde que tu esposo se fue no podía dejar de pensar que te podría coger- me confesó el muy sinvergüenza.
Yo por mi parte ya no dije nada, me dedique a lamer y chupar esa verga que si bien no era la más grande de mi vida si era de las mejores que había visto, gruesa algo larga y lo mejo suave, parecía que nunca la había usado, cosa que me encanto y calentó el pensar que podría ser yo su primer mujer, ya que en mi vida solo había tenido hombres con experiencia.
-dime, eres virgen?-pregunte
-solo algunas veces he tenido sexo oral, con mi chica-me respondió sacándome una sonrisa, ósea yo sería su primer conchita, me sentí feliz y caliente, lo lleve a mi recamara él se dedicaba a manosearme desde atrás tocaba mis tetas y trataba de acariciar mi concha, al llegar lo tire a la cama y me desnude frete a él dejándolo ver mi concha y mis tetas, el dijo
-que buena estas Alicia, tanto tiempo espiándote esperando a que salieras con tus pantalones ajustados y ahora te veo así desnuda- yo me tire frente a él y le chupe la verga un rato mas, el me detuvo y me pidió lamerme la pucha así que me senté en su cara, el metía y sacaba su lengua.
-esta rica? Esta rica mi conchita?-le preguntaba aunque él no contestaba ya que tenia la boca ocupada lamiendo. De pronto le dije.
-déjame sentarme en tu verga, quiero ser la primer concha en la que la metes- me senté y comencé a cabalgar él empezó a gemir y decir
-si muévete, yo quería que fueras la primera- decía entre gemidos
Yo gritaba de placer él se vino en mi concha bañándome el interior, yo por mi parte seguí moviéndome, porque no me había venido, de pronto me sorprendí mucho porque en ningún momento se puso flácido seguía duro aunque se hubiera venido ya 3 veces, que cosa tan maravillosa, momentos después me vine.
-AHHHHHHH, me vengo cabron!!!!-grite
Caí rendida a su lado, el por su parte aun mostraba una gran erección, decidí ayudarle con eso así que le pedí que se sentara en la cama me puse de rodillas frete a él y me dispuse a mamar, el ponía sus manos en mi cabeza y me marcaba el ritmo.
-así Alicia hazme venir en tu boca-decía
-quieres que me la trague? Quieres que me trague tu lechita?-le preguntaba para calentarlo
-si trágatela, Alicia-decía el punto de explotar
-dime puta, papi dime putita, anda- le rogaba yo
-si, putita, trágate mi leche-decía mientras explotaba en mi boca, casi me ahoga con la cantidad de semen que dejo en mi boca, me trague lo que pude y me fui a el baño a limpiar mi boca, mientras el se vestía.
-te vas?-le pregunte
-si, Alicia, mi madre debe estar preocupada ya es noche-dijo.al ver por la ventana me di cuenta de que estaba oscuro.
-puedo venir y pasar la noche aquí?- me pregunto el pequeño con un tono que me enterneció
-tu madre te dará permiso?-le dije, no quería que por mi culpa
-no importa, saldré por la ventana- me dijo el travieso
-mejor no, mañana puedes venir a ayudarme otro rato, pero no te salgas así de tu casa, te puede causar problemas-le dije en tono maternal
-entonces mañana estaré aquí temprano-me dijo, yo lo tome y le di un beso apasionado, se fue a su casa tranquilo y me quede a esperar al día siguiente.


Esta historia salió de mi imaginación, para mí fue algo difícil contarla desde la perspectiva de una mujer pero creo que quedo bien, me encantaría leer su opinión sobre este relato, igual también me gustaría seguir con las historias de Alicia ya que es una persona real, con ella tuve mi primera vez, aunque no fue igual que en esta historia, ya les contare eso, de antemano gracias por sus comentarios. 😉

4 comentarios - Alicia, acomodando muebles (relato)

jdhades
muy buen trabajo con la narrativa, te falta ahondar en detalles, pero para eso deberias de preguntarle a una mujer para que te asesore
mexicano_al_100
Buen relato ... aunque pienso lo mismo que jdhades, pero se te agradece