Les comparto este pequeño relato de lo que estuve haciendo el fin de semana, no me gusta mucho comentar pero queria compartir esta experiencia pues en 5 años de relación es la segunda vez que me le como el culo y le eyaculo dentro.
Era un fin de semana con visita familiares normales, charlando y tomando unas cervecitas, cuando todos nos queríamos ir a dormir y yo con unas cuantas cervezas en la cabeza le pedí a mi esposa que se dejara dar por el ano pues estaba muy arrecho fue cuando aceptó y me dijo que trajera un aceite que tenemos para humectarle el ano y poder penetrarla más fácil entonces procedí a toda carrera y me eche igualmente en el pene, y comencé a introducir mi verga en su culito a ella no le gusta el sexo anal pero esa noche me complació yo penetraba cada vez más ese rico culo y la sentía como tenia dificultad para aguantar mi grueso amigo en su culito, al cabo que penetró empece a moverlo y a sacarlo y meterlo y sentía lo estrecho de su anito y como me hacia calentar aún más, comenzé a darle más duro con mi verga quería partirle ese culo de lo rico que la estaba pasando no aguanté mucho hasta que eyacule dentro. La pobre no le gusta el sexo anal pero yo estaba muy caliente esa noche y con tragos en la cabeza y me antoje de comermele ese rico ano. ese semen calientico se quedó allí dentro de su culo porque no salió, aún recuerdo y me dan ganas de haber estado sobrio y con la luz encendida para ver toda la acción desde atrás.
Era un fin de semana con visita familiares normales, charlando y tomando unas cervecitas, cuando todos nos queríamos ir a dormir y yo con unas cuantas cervezas en la cabeza le pedí a mi esposa que se dejara dar por el ano pues estaba muy arrecho fue cuando aceptó y me dijo que trajera un aceite que tenemos para humectarle el ano y poder penetrarla más fácil entonces procedí a toda carrera y me eche igualmente en el pene, y comencé a introducir mi verga en su culito a ella no le gusta el sexo anal pero esa noche me complació yo penetraba cada vez más ese rico culo y la sentía como tenia dificultad para aguantar mi grueso amigo en su culito, al cabo que penetró empece a moverlo y a sacarlo y meterlo y sentía lo estrecho de su anito y como me hacia calentar aún más, comenzé a darle más duro con mi verga quería partirle ese culo de lo rico que la estaba pasando no aguanté mucho hasta que eyacule dentro. La pobre no le gusta el sexo anal pero yo estaba muy caliente esa noche y con tragos en la cabeza y me antoje de comermele ese rico ano. ese semen calientico se quedó allí dentro de su culo porque no salió, aún recuerdo y me dan ganas de haber estado sobrio y con la luz encendida para ver toda la acción desde atrás.
2 comentarios - El día que me le comí el culo a mi esposa
Saludos