Mi prima cortó la sequía...

Una etapa de mi vida me encontro en gran sequia. Esperaba el colectivo, aparecia una hermosa chica, deseaba que suba conmigo, pero no, siempre subia al otro. También, cuando estaba viajando, encontraba una rubia espectacular, sentada, con un escote impresionante, era hora de bajar, pero como siempre, nunca descendia una linda mina conmigo, solamente eran mujeres mayores, que en ese entonces no me importaban. Lamenteablemente, eso ocurrió durante unos dos meses, yo no podía más, estaba haciendo la dieta de los caballos, paja y agua, nada más. Imaginense, una gran cantidad de hormonas que solo querían salir, encima, en ese entonces, podía mantener un gran ritmo. Pero para lo único que servia, era simplemente para sacar musculos, haciendo la del mono, a mano cambiada, ya no sabia que hacer.
Era sabado y cumplia años una de mis primas, gran reunión familiar, casualmente ibamos a salir a bailar con mis amigos, acontecimiento que no era habitual por nuestras edades, pero algo teniamos en mente. Discutí con mis viejos, enojos, gritos, en fin, típica pelea familiar de adolescente. Sin embargo, como siempre ganaron ellos, fuí al cumpleaños, despúes me iba a enterar que no salian, asi que me tranquilice un poco. Pasaron unas cuantas horas, comimos, yo ya tomaba algo, mis viejos lo sabían, así que no habia ningún tipo de problema. La fiesta estaba demasiado divertida, así que me quede un rato más, uno de mis tios vivía por la zona, asi que el iba a dejarme en mi casa, para que mis viejos se vayan tranquilos. Empezamos a bailar, seguiamos tomando, yo ya estaba demasiado en pedo y una de mis primas, que ya tenía 18 decidío llevarme afuera para hablar y tomar aire...

Flor: Ey bobo, ¿qué te pasa?
Yo: Nada florchi. No quería venir, iba a salir a bailar con los chicos y estos no me dejaron
Flor: Bueno, pero no la estamos pasando tan mal
Yo: No, la verdad que no. Pasa que ando con un problemon
Flor: Apa, ¿que anda pasando?
(Yo no podía dejar de mirar sus tetas, que por cierto me calentaban mucho)
Yo: Nada, ando con sequia. Es horrible lo que me pasa
Flor: ¿Qué?, primo dejate de joder, sos demasiado chico para andar pensando así
Yo: Flor, quiero ponerla, no doy más, sabes la leche retenida que tengo, el corazón se me pone a mil. Sino mira, te miro las tetas y estoy al palo
Flor: Vos estas re en pedo dejate de joder, te voy a llevar a tu casa. No dejas de decir boludeces
Yo: Si, tenes razón estoy en pedo. Pero eso no quita que diga la verdad. Es más, vos sabes que los borrachos y los chicos, nunca mienten. Yo soy borracho y chico
Flor: Ya prendo el auto, deja de tomar, vamos a dar una vuelta, asi te tranquilizas y te llevo a tu casa por que no podes llegar así...

Yo era conciente de lo que decía, pero no entendia como estaba tan desinhibido, no podía decirle todo eso a Flor, por más fuerte que este, no tenía que hacerlo. Pero en fín, esta boca lo dijo. Subí al auto, puso música, las primeras cuadras no hablamos, ella ni me miraba hasta que empezó a preguntarme cuando había tenido mi primera relación, si me habia cuidado, con quien había sido, yo le contestaba, " Fue en la fiesta de un amigo, la hermana estaba re entregada, me vino a buscar, ella mucho más grande que yo, fuimos a la pieza, cerro la puerta, me dijo que deseaba ser mi primera mina, asi que me bajo rápido los pantalones, yo no me negue. Me chupaba la pija de forma impresionante. No tarde mucho en cabar, tragó la leche, sin tiempo alguno, se subió arriba mío, agarró mi verga, se la metió adentro y empezó a cabalgar, tampoco tarde mucho, pero basto para saber que sensación era", podía notar que mi prima quería saber más y más. Al principio pense que era para asegurarse si me cuide, pero después quería detalles, se los dí, le contaba como era ella, como estaba vestida, en la forma que gritaba. Wauw, todo eso le contaba a Flor, impresionante. De un momento al otro, nos encontramos en frente del río, entre medio de muchos autos, yo voy a salir para tomar un poco de aire, pero ella traba las puertas. Me pregunta si estoy en pedo, si estoy mareado, le digo que un poco, que no sabia bien lo que decía, pero todo bien. Flor pasa casi por encima mio para abrir la ventanilla y pasa sus tetas por mi cara, se me hacia agua la boca, seguimos charlando, seguí contandole lo que me pasaba, palabra va, palabra viene, ella se sube un poquito el vestido y me pregunta, "¿Te gustaría verme la conchita?", yo no dude en afirmar con la cabeza, se corre la tanguita y me empieza a contar que era cada parte de esa hermosa sanja, donde tenía que chupar y donde tocar. La miro y le pregunto, "¿Puedo prácticar con vos?", ella agarró mi cabeza y me la puso en su clítoris, yo metía lengua, Flor parecía que tan mal no la pasaba, así que continué. Sentía como se mojaba poco a poco, se estremecía, con una de sus manos empezaba a bajarme el cierre de mi jeans y me pajeaba mientras con la otra agarraba una de mis manos y me hacia colarle los dedos bien hasta el fondo. Pasaron unos mínutos hasta que me corrió y comenzó a chuparmela, me preguntaba si me gustaba donde me la chiupaba, yo entre gemidos le decía que si, que no quería que pare. No lo hizo, faltaba poco para acabar y le digo, "Flor, no aguanto más, voy a explotar, ¿salís?", por el contrario, ella aumentó el ritmo, haciendome estallar en lo más profundo de su garganta, casi generandole arcadas. En mi cabeza no podía dejar de pensar en lo genial que había sido, es más, me estaba garchando alta perra, sumado a esto, era mi prima.
Paso un rato, subió los vidrios, que por suerte eran polarizados, nos pasamos al asiento trasero, ella se puso en cuatro, con sus dos manos abrió su cola, mientras que decía, "si vos estas dispuesto a aprender, también tenes que chuparme el culo, a la mujer le exita mucho", al principio no estaba muy convencido, era algo nuevo, pero cuando metí la lengua y la movía rápido, empecé a encontrar un vício, que en los años siguientes iba hacer incontrolable. Yo se lo chupaba y Flor decía, "Si nenito, ahí, chupame ahí. ¡AH!, ¡ AY, SI!, ahora meteme un dedo y movelo bien fuerte", mientras que en un momento, entre gemidos, agrega, "Áca poes acabar tranquilo que no queda embarazada, pero tenes que ser suave, si querés otro día te lo explico", por dentro sabía que no iba a ver otro día, así que agarre mi chota inesperta y se la puse en el aujero, ella medio que se negaba, pero no tanto, entonces proseguí. Hacía fuerza para adelante y ella para átras, los dos queríamos que entre. Se da vuelta, me la chupa, me la ensaliva bien y vuelve a su posición, "Ahora si, metela fuerte, pero tene cuidado por que al principio se contrae", dijó, mientras que yo sin prestarle mucha atención se la trataba de meter, pasaron unos segundos, pude sentir que entraba, ella pegó un grito a lo que yo pregunte si estaba bien, Flor no dejaba de moverse y decirme entre pequeños gemidos que siga, que le gustaba, de a poco aumentaba el ritmo, hasta que ya se podía escuchar los golpes de su cuerpo con el mío y de sus gritos exagerados, ya estaba por acabar, entonces sin darme cuenta acelere a fondo, "¡AY, forro!, ¡Me estas matando!, ¡ Acaba YA, por que me estas rompiendo el orto!", gritaba y suplicaba, mientras que yo exitadisimo deseaba llenarle la cola de leche. No paso más de un mínuto que yo la metí hasta donde pude y llene el aujero de leche, era impresionante, no paraba de desagotar, sin embargo, yo continúaba moviendomé, Flor volvía a gritar y me decía que nos teníamos que ir, ya era hora, que salga, ya ibamos a tener otro encuentro, la mire, le creí y salí lentamente. Ella se limpio la leche que le salía de la cola, me chupo un poco la verga para dejarmela bastante limpia, acabé un poquito en su boca, se la tragó, nos acomodamos y nos fuimos hasta mi casa. Me bajo, la saludo con un beso en la boca y me susurra al oído, "primito, se acabó la sequía, muy bien, espero volver a encontrarnos"...

Fin...

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