Sexo en la playa 1
Estábamos de de vacaciones en Villa Gesell, a mi me volaba la cabeza la idea de enfiestar a mi mujer nuevamente y no sabía cómo, la cosa que estábamos parando en un complejo donde en uno de los departamentos había tres amigos los cuales venían todas las noches tarde y se escuchaba en el silencio de la noche el gemido de las chicas que los acompañaban, cosa que a mi mujer y a mí nos calentaba muchísimo.
Con el correr de los días entablamos cierta amistad y confianza con estos chicos, obviamente que yo tenía toda la intención de algo más.
Un día decidimos que sería bueno ir a la playa a la zona del Faro Querandí, hay que hacer 20 kilómetros por la playa y como ellos tenían una 4x4 era ideal que fuéramos con ellos.
Llegó el día, fuimos tipo 3 de la tarde, pasamos unos dos kilómetros el Faro, no había nadie más que nosotros en esa playa, armamos una carpa que llevaron los chicos, era bastante grande.
Llego la tarde-noche y decidimos quedarnos un rato más, entre chistes, risa, y más chistes, pasaban las cervezas bien heladas y se hicieron como las 9 de la noche, es ahí cuando me di cuenta que era mi oportunidad, nos metimos en la carpa con mi mujer y la empecé a franelear y a calentar, ella se mojó rápidamente y la calentaba la situación, los chicos nos miraban disimuladamente, y nosotros cada vez zafados, le saqué la parte de debajo de la bikini y empecé a lamerle su concha y ella gemía bastante fuerte, entonces la puse boca abajo y mirando hacía donde estaban los chicos mientras la penetraba lentamente por su concha toda mojada, los pibes se quedaron mirándonos fijamente, yo les hice un guiño para que se acercaran, uno de ellos se acercó lentamente se arrodilló frente a mi mujer y ella le bajo el short y se metió toda su pija en la boca, el tenía una cara mezcla de placer y sorpresa, al instante
Se acercaron los otros dos, entonces le dejé mi lugar a uno de ellos para que la penetre, el flaco tenía una pija verdaderamente grande y se la metió hasta el fondo y empezó a bombearla como un animal, ella paró de chupársela al otro y dijo, “como me cojés, me estás rompiendo toda”, eso nos calentó muchísimo a todos, en eso. el flaco al que le estaba chupando la pija, dice, “voy a acabar”, mi mujer le dice “dame toda tu lechita papito” con una cara de puta terrible, el flaco le acaba unos choros impresionantes en la boca y parte de la cara, ella trata de tragarse toda su leche pero no lo consigue ya que le lanzó bastante en la cara, mientras el otro la seguía bombeando como una bestia.
Se acercó el último de los pibes entre los tres la pusimos boca arriba y le metimos dos pijas en la boca mientras el otro la cogía salvajemente y acabó dentro de su concha llenándola toda de leche.
Nosotros que estábamos súper calientes nos pajeamos en su boca mientras ella chupaba nuestras pijas y acabamos casi a la vez llenándola de leche aún más su cara y su boca, la muy puta se desesperaba por tragarse todo, pero no pudo con todo lo que le echamos encima.
Nos vestimos y volvimos al complejo, en la próxima les cuento como siguieron nuestras vacaciones.
Estábamos de de vacaciones en Villa Gesell, a mi me volaba la cabeza la idea de enfiestar a mi mujer nuevamente y no sabía cómo, la cosa que estábamos parando en un complejo donde en uno de los departamentos había tres amigos los cuales venían todas las noches tarde y se escuchaba en el silencio de la noche el gemido de las chicas que los acompañaban, cosa que a mi mujer y a mí nos calentaba muchísimo.
Con el correr de los días entablamos cierta amistad y confianza con estos chicos, obviamente que yo tenía toda la intención de algo más.
Un día decidimos que sería bueno ir a la playa a la zona del Faro Querandí, hay que hacer 20 kilómetros por la playa y como ellos tenían una 4x4 era ideal que fuéramos con ellos.
Llegó el día, fuimos tipo 3 de la tarde, pasamos unos dos kilómetros el Faro, no había nadie más que nosotros en esa playa, armamos una carpa que llevaron los chicos, era bastante grande.
Llego la tarde-noche y decidimos quedarnos un rato más, entre chistes, risa, y más chistes, pasaban las cervezas bien heladas y se hicieron como las 9 de la noche, es ahí cuando me di cuenta que era mi oportunidad, nos metimos en la carpa con mi mujer y la empecé a franelear y a calentar, ella se mojó rápidamente y la calentaba la situación, los chicos nos miraban disimuladamente, y nosotros cada vez zafados, le saqué la parte de debajo de la bikini y empecé a lamerle su concha y ella gemía bastante fuerte, entonces la puse boca abajo y mirando hacía donde estaban los chicos mientras la penetraba lentamente por su concha toda mojada, los pibes se quedaron mirándonos fijamente, yo les hice un guiño para que se acercaran, uno de ellos se acercó lentamente se arrodilló frente a mi mujer y ella le bajo el short y se metió toda su pija en la boca, el tenía una cara mezcla de placer y sorpresa, al instante
Se acercaron los otros dos, entonces le dejé mi lugar a uno de ellos para que la penetre, el flaco tenía una pija verdaderamente grande y se la metió hasta el fondo y empezó a bombearla como un animal, ella paró de chupársela al otro y dijo, “como me cojés, me estás rompiendo toda”, eso nos calentó muchísimo a todos, en eso. el flaco al que le estaba chupando la pija, dice, “voy a acabar”, mi mujer le dice “dame toda tu lechita papito” con una cara de puta terrible, el flaco le acaba unos choros impresionantes en la boca y parte de la cara, ella trata de tragarse toda su leche pero no lo consigue ya que le lanzó bastante en la cara, mientras el otro la seguía bombeando como una bestia.
Se acercó el último de los pibes entre los tres la pusimos boca arriba y le metimos dos pijas en la boca mientras el otro la cogía salvajemente y acabó dentro de su concha llenándola toda de leche.
Nosotros que estábamos súper calientes nos pajeamos en su boca mientras ella chupaba nuestras pijas y acabamos casi a la vez llenándola de leche aún más su cara y su boca, la muy puta se desesperaba por tragarse todo, pero no pudo con todo lo que le echamos encima.
Nos vestimos y volvimos al complejo, en la próxima les cuento como siguieron nuestras vacaciones.
1 comentarios - Sexo en la playa 1
saludos