Después de haber terminado mi abstinencia auto-impuesta, por el hastío de la vida sexual y de relación de pareja que llevaba, donde tenía y a la vez no tenía nada, ni a nadie, y también estaba cansado de salir en busca de comprar sexo cuando algunas de mís amigas no querian enredarse en un momento de solo sexo sin amor, ni mucho menos compromisos, decidí que era momento de disfrutar un poco de placer, pero quería que fuese algo especial por lo cual había planeado buscar algunas de mis "amigas" con las cuales tuviera una relación más allá de simple amistad, o por si acaso no cuadraba con ninguna de ellas, entonces buscar a una profesional del sexo experta en dar placer, conocida de las cuales tenía algunas, o una extraña para experimentar algo nuevo, fué así como opté por los anuncios clasificados de la prensa diaria, en busca de la sesión de "masajistas", llamé cómo a 5 sitios y terminé por decidirme por un sitio que se encontraba en un lugar conocido por mí y de fácil ubicación.
Llegué al cabo de hora y media de trayecto entre mí casa y el sitio, más por el tráfico que por la distancia que había entre ellos, subí al ascensor que me llevaria al piso 4, "oficina" # 48, al bajar del ascensor ubiqué la puerta de dicha "oficina" y me percaté que se encontraban 2 hombres delante de mí, los cuales habían llegado antes, en la puerta se encontraba recibiéndolos y atendiéndolos una chica de mediana estatura y de cuerpo bien formado, tenía una cara bella y un cuerpo muy bien definido, sobresalian a parte de su lindo rostro y agradable sonrisa, unos grandes senos, operados pero no por eso dejaban de ser hermosos, al llegar cerca de ella noté que me seguia sonriendo y me invitaba a pasar adelante, al cruzar mí mirada con la de ella, descubrí los ojos más bellos que hubiese visto en mí vida, llegué hasta una especíe de sala donde se encontraban unas 3 chicas más, que se levantaron de sus asientos al vernos entrar a los 2 caballeros que me antecedian y mí persona, para mostrarse en una especíe de desfile para nuestra escogencia para contratar el servicio, la última en llegar a la sala fué la chica que nos atendió en la entrada, al pasar a mí lado me brindó nuevamente su bella sonrisa y al ubicarse delante de nosotros continuó haciendo contacto visual en mayor proporción conmigo que con los otros 2 caballeros, sin pensarlo mucho y sin titubeo me decidí por ella, quien al ver que la había elegido no ocultó su satisfacción, es más juraria que hizo en ese momento como una especie de baile o danza de victoria sobre las demás chicas.
Una vez que pasamos a la habitación, fijamos el monto del servicio y lo que se ofrecia en el mismo, mientras conversabamos al respecto ella no dejaba de sonreirme y Yo de mirarle sus bellos ojos, me desvestí y me acosté en la cama, pero aún llevaba la ropa interior puesta, por lo que ella me dijo que me la quitara para poder inspeccionar o examinar mi miembro para descartar anormalidades o signos de posibles enfermedades, mientras me lo revisaba atiné a preguntarle su nombre antes que me pusiera a volar de placer con la sesión de sexo oral que seguramente estaba por proporcionarme, paró por un instante y con una sonrisa un poco maliciosa en su rostro, me contestó:
_Evelyn, ¿y Tú cómo te llamas?
_Jose luis.
Para ese entonces ella se había quitado su ropa y fué donde pude ver su cuerpo desnudo, tenía como les dije unos senos voluptuosos y muy apetecibles, su cuerpo era bastante definido, quizás con algunos detallitos, pero a quien le importa, tampoco estaba en busca de una modelo de portada o una miss, y en lo que a mi respecta tampoco es que soy un Brad Pit, entonces no había porque ponerse exigente, comenzó a limpíarme mí miembro con unas toallitas húmedas de esas que se utilizan para asear a los bebes y fué alli donde tuvimos el primer contacto entre nuestros cuerpos, luego hizo una pausa y comenzó a untarse el cuerpo de crema que usan las mujeres para darle tersura a su piel, y eso fué un espectaculo muy sensual, verle cómo recorría todo su cuerpo con sus manos y sobre todo cuando las pasaba por sus senos y su entrepiernas, luego se dirigió a darme sexo oral y sentí la sensación más placentera cuando su cálida boca, que por cierto la tiene muy bonita, una boca pequeña con unos labios que insitan a besarlos, tocó mí miembro y me estaba proporcionando el sexo oral más placentero que había experimentado en mí vida.
Me daba los mejores lengüetazos y succionadas con su bella boca en mí grueso pene, mientras ella me hacia volar comenzé a acariciarle el cabello y a agarrarle la cabeza como señal de agradecimiento por todo lo bien que me estaba haciendo sentir, luego comencé a agarrarle sus grandes senos, con mis manos les daba delicados masajes y por instante pellizcaba sus pezones que comenzaron a turgirse porque sin darme cuenta y sin querer yo también estaba procurando que ella recibiera placer a pesar que le estaba pagando para que me diera el mayor placer posible a mi, pero esta chica tenía algo especial que me llevaba a tratarla de una manera distinta, por momentos sentía que no sólo estaba teniendo sexo con una desconocida, sino que le estaba haciendo el amor a una mujer a lo cual amaba, de repente de una manera un poco brusca paró y me colocó el preservativo y se ubicó en la cama de una vez en la posición de estilo perrito, la cual es mí preferida cuando estoy con una mujer, y según dicen en esa posición los hombres acaban más rápido, pero ese no es mí caso porque igual puedo durar poco o mucho tiempo, dependiendo de lo excitado que esté o de la concentración que ponga en el acto sexual, cuando la penetré sentí como una serie de espasmo y contracciones en su vagina, como que si fuese que ella y su conejita le daban la bienvenida a mí grueso pene, comenzó a realizar unos candentes y acelerados movimientos de cadera como para precipitar mí eyaculación, pero parece que ella también estaba consiguiendo con esa actitud era sentir más placer en su cuerpo porque empezó a gemir y a emitir sonidos de placer, hasta llegué a pensar que terminaría teniendo un orgasmo, sentía su respiración acelerada y como que en su cuerpo se estuviera produciendo un recorrido de placer en todas sus extensiones, pero gracias a que yo tenía tiempo sin haber estado con una mujer, se salvó de que la hiciera venirse en un placentero orgasmo, y no aguanté más y me vine dentro de ella, antes de que la hubiese hecho perder el control de la situación, y hacerle parecer una mujer de la más puta de todas, que se goza y disfruta de lo que hace.
Luego que terminamos el primer round de nuestro encuentro, se levantó de la cama y fué a lavarse sus partes intimas, al regresar a la habitación la noté un poco fria y distante y pensé que no le había gustado que la hubiese hecho sentir todas esas sensaciones durante nuestro acto sexual, o tal vez se sentí un poco apenada porque mostró que estaba disfrutando tanto como Yo el acto sexual, por lo cual para romper un poco el hielo comencé a hacer una serie de preguntas triviales como para conocernos un poco, mientras ella sólo se limitaba a revisar los correos en el buzón de mensaje de su celular, mientras esperabamos a que me recuperara ya que había contratado sus servicios por más de 1 hora, normalmente me toma de 10 a 15 minutos para lograr tener una nueva erección y entrar al segundo round, ella seguia callada pero finalmente accedió a contestarme mis preguntas, y hablar de trivialidades conmigo, y después me sorprendió enormemente que sin saber cómo ni por qué, me pidió que si podia acostarse a mí lado y terminó acostada con su cabeza apoyada entre mí hombro izquierdo y mí pecho, y al mismo tiempo comenzó acariciarme el vello de mí pecho, mientras Yo hacía lo mismo con su cabello, y en ese instante se veia como una niña indefensa que se sentía protegida entre mis brazos y escuchando los latidos de mí corazón, mientras yo sentiá su delicado y suave cuerpo, y a pesar que tenía sus senos al alcance de mís manos, no busqué de hacerles caricias eróticas sino más bien tiernas y delicadas, y al cabo de un rato noté que comenzó a ponerse melancólica y sus ojos se humedecieron, y quizás para romper con esa sensación comenzó a manipular mí miembro con unas de sus manos como para acelerar mi erección, y al estar nuevamente empalmado y viril, arrancó de manera inmediata a darme una nueva sesión de sexo oral, aunque yo hubiese preferido quedarnos un tiempo más acostados juntos el uno al otro sintiendo esa agradable sensación de relax y ternura, mientras me hacia nuevamnete un placentero sexo oral empecé de nuevo a acariciarle su cabeza y a jugar con su cabello, pero por una extraña razón me pidió: que por favor no lo hiciera, que nos concentraramos en lo que veníamos a hacer y así acabar de una vez por toda con todo esto, luego de mamarmelo se puso nuevamente en la posición del estilo perrito, pero al poco instante de penetrarla decidí agregarle un poco de sabor a este segundo round y paré porque me percaté que dentro de la habitación se encontraba un banquito de sentarse y le dije que si podíamos hacerlo con ella montada sobre el taburete que se encontraba dentro de la habitación, a lo cual accedió sin más, en esa posición el ángulo de penetración sería mejor y me haría sentir más placer , y efectivamente, al estar haciéndolo de esa manera no tardé en eyacular nuevamente y en menos tiempo del que había tardado la primera vez.
Al acabar con la faena, se dirigió al baño a lavarse su cuerpo, cuando regresó Yo ya me había vestido y esperaba por ella para la despedida, y por una extraña sensación me provocó darle un beso de despedida en la mejilla, al cual al contrario de lo que Yo pensaba no opuso resistencia, ní rechazó, y le dije:
_Gracias por todo, muy bueno el servicio, regresaré.
Al día siguiente me encontraba en la oficina del lugar donde trabajo y sin saber porque sentí la necesidad de contactarla nuevamente y decidí mandarle un mensaje de texto a su celular, del cual me había dado el número cuando al despedirme le pregunté: Qúé diás podía encontrarla para un nuevo encuentro, en el mensaje le decía: Gracias por todo, por la tarde de placer y las sensaciones que me hiciste sentir ayer, pero al ver que no repondía pensé que eso era lo más probable que iba a pasar, y que ¿Qué hacía yo mandándole mensajes a una persona que quizás ni se acordará de mí, y de la cual sólo fuí un cliente más?, fué allí donde parece cayó en cuenta de quien se trataba y me contestó: "Pero es que si no me dices quien eres", y al pregúntarle si ya sabía que de quien se trataba, me sorprendió enviándome otro numero de teléfono en el cual podía contactarla, luego pasaron un par de días y nuevamente decidí enviarle un nuevo mensaje de texto, ya que pensé sí me dió sus números de teléfonos es porque no le molesta que la llame y es más debe de estar esperando a que lo haga, y también porque sentía que esta chica se estaba metiendo de a poco en mí vida, no sé porque no dejaba de pensarla, al principio creía que era sólo por el buén sexo que me brindó, pero no era sólo eso, yo sentía esta mujer me estaba interesando más de lo común y sentía la necesidad de volverla a ver, en esta oportunidad le mandé el mensaje a través de otro número de célular que también poseo, en el cual le indicaba que ese era otro número mio de contacto, y al contestarme sentí un poco de verguenza porque la había molestado mientras dormia, porque me contestó: "ok yo lo anoto, ahora estoy durmiendo porque ayer estaba de rumba con Karol una de mís amigas", pero a la vez me sorprendió que me diera explicaciones de lo que hacía, pensé ¿Y Quién es Karol?.
Así transcurrieron los días, y al cabo de 2 semanas, donde hubieron mensajes expóradicos, una tarde que estaba todo atribulado por el trabajo en la oficina me sorprendí gratamante, al ver que en esta ocasión fue ella quien hizo el contacto esta vez, y entre saludaros y preguntarnos cómo estabamos, también nuevamente sin saber por qué, y sin yo pedirselo estaba dándome información de lo que hacía, me contó que estaba asistiendo en esos días a los actos culturales del colegio de sus hijos, lo que en cierto modo me extraño que se refiriera a sus hijos en plural, porque recuerdo que en nuestro primer encuentro aquella tarde del 1° de Julio, al preguntarle si tenía hijos me mostró solo una foto de un bebe, el cual pensé era un varón, y al preguntarle en esta ocasión ¿Qué edad tenía su bebé?, me contestó:
_5 la nena y 11 el varón.
Luego me sorprendí que me preguntara "¿Qué cuando nos veriamos nuevamente?", porque precisamente estaba por decirle para vernos al día siguiente, pero lamentablemente me dijo que era imposible, porque precisamente era ese día el acto de fin de curso de los niños, pero que si quería nos podíamos ver al día siguiente de ese, a lo cual ahora era yo quien respondia que me era un poco imposible vernos ese otro día, que entonces ni modo que sería en otra oportunidad, y extrañamente quizás por ese efecto y sentimiento desconocido que parece había entre los dos, recibí un nuevo mensaje donde me insistía que porqué no hacía todo lo posible por vernos al día siguiente al acto del colegio, que lo pensara bien y le avisara.
Le dije que no me tentara, y que estaba un poco triste y molesto porque no era justo que después que tenía días planeando este encuentro, no se me fuese a dar, y sin pensarlo mucho decidí aceptar su invitación y postergar nuestra cita un día más, y pués tal cual, ahí estaba yo al día siguiente buscándola en el estudio, pero debo contarles que antes de llegar a verla me encargué de comprarle el almuerzo, ya que en unas de nuestras conversaciones por vía mensajes de texto en el celular, me había dado cuenta que ella no comía a la debida hora, porque me dijo que por motivo de su trabajo no lo hacía a la hora, porque cuando estaba atendiendo a un cliente prefería dejar para comer después, así que me tomé la delicadeza y tuve esa atención para con ella, y me agradó mucho que me permitiera preocuparme por ella y cuidarla, aunque me preocupé un poco porque en realidad no sabía, porque me estaba involucrando tanto con esta chica y estaba yendo más alla de nuestro contrato carnal, pero es que ésta mujer tenía algo en especial, y sentía que me estaba invadiendo de a poco mí vida y derrumbando mis barreras y esquemas en cuanto a mis relaciones con las mujeres.
Cuando llegué y pregunté por ella, sentía una alegria como de adolescente enamorado, revolotearon en mí estomago miles de mariposas y los latidos de mí corazón se aceleraron, al saber que la vería nuevamente y quizás esa era la impresión que le dí a la chica que me abrió la puerta en esa oportunidad, cuando me vió una vez más me recibió con una bella sonrisa y un beso en la mejilla, lo cual me agradó bastante, al entrar a la habitación noté que ella tenía como prisa para que tuvieramos sexo, pero le dije que se calmara y en una actitud de atención hacía ella, le preguntaba ¿cómo había estado?, ¿cómo estaban sus hijos?, y estuve pendiente que comiera su almuerzo, una vez terminado de almorzar, fué al baño a cepillarse los dientes y a prepararse para la sesión de sexo que estaba por venir, y que en el fondo esta vez yo estaba deseando más por el deseo sexual, era por sentirla a mí lado, volvió a donde estaba yo y luego de brindarme una nueva sonrisa comenzó a darme sexo oral, y en esta oportunidad sentí que no trataba de hacerlo lo mejor posible como para hacerme terminar rápido, sino como para darme el mayor placer posible, y creo que lo estaba logrando porque realmente estaba disfrutando a plenitud lo que me hacía, luego vino la penetración y sentí que se me estaba entregando a conciencia, ya no actuaba como de forma mecánica, estaba en procura de brindarme el mayor goce y placer, sentía mí pene entrar y salir de su cálida y humeda intimidad con mucha pasión, parecía que en esta oportunidad hubiese una conexión más alla de lo meramente sexual, es más creo que se trataba de lo que llaman "hacer el amor" , que es muy distinto a "tener sexo" , o "intimar sexualmente". Después de estar por un tiempo en la posición del misionero, y de cabalgarme frenéticamente, cambiamos a la estilo perrito, en la cual se montó en el mismo taburete de la vez anterior, y estando en esa posición sucedió algo inesperado y que jamás le había sucedido con un cliente, se rompió el preservativo, lo cual no advertimos ninguno de los dos y al venirme al no poder contenerme más, y llenar por completo el interior de su vagina con un cálido torrente de virilidad, al retirarme de su cuerpo, los dos al percatarnos de lo sucedido pusimos cara de asombro y de preocupación.
Su reacción al momento fué ponerse a llorar, lo cual me afectó a mí también porque si hay algo que no me gusta es ver llorar a una mujer hermosa, pienso que lo hacía por miedo a un embarazo no deseado, más que por un posible contagio de alguna enfermedad, porque como les dije ella siempre inspeccionaba y revisaba a uno antes de tener sexo para descartar cualquier anormalidad o indicio de enfermedades, y por mí parte no tenía miedo de nada porque era tanto el afecto y el sentimiento que tenía hacia ella y la confianza que me producia, que en cierto modo me sentía seguro que nada malo pasaría. Al verle llorar la consolé y le dije unas palabras para que se tranquilizara un poco y porque sentía la necesidad y el deber de hacerle ver y entender que estaba con todo un caballero u hombre en todo el sentido de la palabra, por lo cual asumiendo mí obligación le dije:"tranquila no tengas miedo, yo respondo por lo que pueda pasar", pero con todo y el susto decidimos embarcarnos en una segunda oleada de placer, y al finalizar me pidió que la acompañara a la farmacia más cercana, para adquirir la "pildora del día después", y una ducha intima con espermaticida, a lo cual accedí sin mayor reparo y le dije nuevamente: "Puedes contar conmigo para lo que sea". luego hubo un tercer encuentro, es más fue precisamente a la semana siguiente, es decir que estaba rompiendo totalmente con mis estrategias en cuanto a mujeres se refería, ya que esta era nuestra tercera ocasión juntos, y les que cuento ese día en realidad no iba en busca de sexo, sino sólo de estar con ella y de tenerla a mí lado, y se sorprendió cuando le dije que no venía en busca de placer, pero de cierta manera hubo un motivo para que terminaramos teniendo sexo,, pero como en realidad no era esa mí intención ese día fué diferente, porque en el primer intento duramos más de lo común, aunque yo sé controlar bastante el momento de eyacular, pero ese día parece que rebasé el límite de tiempo, hasta el punto que después de haberlo hecho en todas las posiciones experimentadas en las veces anterior, en el momento que me cabalgaba por segunda vez, le pedí parar y le dije sosteniéndole la cara: "Chiquita dejémos esa vaina así", y luego sólo estuvimos abrazados acostados en la cama, y en ningún momento sentí la necesidad ni mostré interés de volver a intentar una segunda oportunidad, se acabó el tiempo por el cual había contratado sus servicios y al despedirme cuadramos otro encuentro pero fuera del estudio, acordamos vernos la semana entrante pero esta vez en un hotel, así el dinero que le pagase, le quedaría sólo a ella en su totalidad, ya que no tendría que compartirlo con la administradora del estudio.
y ahí estamos nuevamente aquella tarde de un miércoles como ya se nos estaba haciendo costumbre, encontrándonos para un momento de placer, al encontrarnos la sorprendí recibiéndola con un pequeño ramo de flores, pero flores al fin, un detalle que le agrada a la mayoría de las mujeres, y del cual pienso ella no sería la excepción y no iba a ser indiferente. ese día como de costumbre la traté con mucha atención y estuve pendiente de hacerle sentir bien hasta con el más minimo detalle, primeramente fuimos a almorzar unos sandwiches en una cadena de comida rápida que me dijo le encantan muchisimo, una vez en el hotel nos sumergimos en una oleada de caricias y momentos de pasión, y nuevamente hice gala de mí autocontrol al momento de prolongar el acto sexual, de hecho les cuento que en el primer intento nisiquiera llegué a correrme, mientras creo haber logrado que ella se viniese en dos largos y placenteros orgasmos, pero lo más importante de ese día no era el sexo, sino lo bien que me sentía a su lado, y que seguiamos conociéndonos un poco más, y que quizás ya sabiá un poco de que se trataba todo esto que estaba sintiendo por esta bella mujer, al final cuando nos disponiamos a regresar cada quien a su casa, le entregué un sobre con una carta que le había escrito la noche anterior, y el cual le pedí que leyese una vez que estuviese en su casa, lo cual creo que la llenó de mucha curiosidad e incertidumbre por lo que se pudiese tratar. Una vez que la dejé en la parada de transporte que van hacia su lugar de residencia, me fuí a tomar unas cervezas para despejar mí mente y pensar y análizar todo lo que había pasado hasta el momento, lo que estaba sintiendo por ella y lo que había decidido hacer ese día, y estando en el sitio tomándome las cervezas, decidí enviarle un mensaje en el cual le decía: "Gracias por este mes maravilloso, nunca lo olvidaré", al cabo de un rato al ver que no respondía, le envié otro: "Por lo visto no te gustó la carta, pero prefiero perderte y sufrir que engañarte, y peor aún tratar de engañarme a mí", a lo cual me contestó: "Que, qué me pasaba, que ella no había tenido tiempo de leer nada, porque se encontraba ocupada dándole de comer a su hija, pero que no le gustaba que pensaran por ella", le pedí disculpa y decidí esperar su respuesta o reacción, al hecho de todo lo que le decía en la carta, que no era otra cosa que ya sabía porque ella me interesaba tanto y lo que estaba sintiendo por ella, le decía que había comenzado a sentir algo por ella, que iba más allá de una simple atracción sexual, que quizás empezaba a amarla, quizás su primera reacción ante esto fué pensar que estaba loco, que cómo era posible que sintiera todo eso en tan poco tiempo, si apenas teníamos 1 mes de conocernos, y esta tarde era la cuarta vez que nos veiamos.
Al día siguiente me envió un mensaje diciéndome: "Que le gustaba estar conmigo, que era una persona muy amable y especial, pero que deberiamos dejar que el tiempo pasase y asi conocernos más, y dejar que sea el tiempo el que hablase y dijera que es lo que tenía que pasar", luego seguimos viéndonos incluso en citas que nada tenían que ver con la parte sexual, en las cuales en una de ellas tuve el honor, el privilegio y la suerte de conocer a su nena, la cual es un angelito y una niña bella, que al igual a su mamá, es un ser que te roba el corazón desde prácticamente el mismo instante en que la conoces, ya han pasado varios meses (3 o 4), y aunque aún no tenemos una relación formal o definida, seguimos viéndonos y compartiendo, y cada día que pasa me convenzo más que siento algo muy bello e importante por ella, y que estoy realmente enamorado y que amo a esta bella mujer, porque es una persona muy especial y bella en todo el sentido de la palabra.
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LA VIDA ES TAN CORTA Y EL OFICIO DE VIVIRLA ES TAN DIFICIL.
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Llegué al cabo de hora y media de trayecto entre mí casa y el sitio, más por el tráfico que por la distancia que había entre ellos, subí al ascensor que me llevaria al piso 4, "oficina" # 48, al bajar del ascensor ubiqué la puerta de dicha "oficina" y me percaté que se encontraban 2 hombres delante de mí, los cuales habían llegado antes, en la puerta se encontraba recibiéndolos y atendiéndolos una chica de mediana estatura y de cuerpo bien formado, tenía una cara bella y un cuerpo muy bien definido, sobresalian a parte de su lindo rostro y agradable sonrisa, unos grandes senos, operados pero no por eso dejaban de ser hermosos, al llegar cerca de ella noté que me seguia sonriendo y me invitaba a pasar adelante, al cruzar mí mirada con la de ella, descubrí los ojos más bellos que hubiese visto en mí vida, llegué hasta una especíe de sala donde se encontraban unas 3 chicas más, que se levantaron de sus asientos al vernos entrar a los 2 caballeros que me antecedian y mí persona, para mostrarse en una especíe de desfile para nuestra escogencia para contratar el servicio, la última en llegar a la sala fué la chica que nos atendió en la entrada, al pasar a mí lado me brindó nuevamente su bella sonrisa y al ubicarse delante de nosotros continuó haciendo contacto visual en mayor proporción conmigo que con los otros 2 caballeros, sin pensarlo mucho y sin titubeo me decidí por ella, quien al ver que la había elegido no ocultó su satisfacción, es más juraria que hizo en ese momento como una especie de baile o danza de victoria sobre las demás chicas.
Una vez que pasamos a la habitación, fijamos el monto del servicio y lo que se ofrecia en el mismo, mientras conversabamos al respecto ella no dejaba de sonreirme y Yo de mirarle sus bellos ojos, me desvestí y me acosté en la cama, pero aún llevaba la ropa interior puesta, por lo que ella me dijo que me la quitara para poder inspeccionar o examinar mi miembro para descartar anormalidades o signos de posibles enfermedades, mientras me lo revisaba atiné a preguntarle su nombre antes que me pusiera a volar de placer con la sesión de sexo oral que seguramente estaba por proporcionarme, paró por un instante y con una sonrisa un poco maliciosa en su rostro, me contestó:
_Evelyn, ¿y Tú cómo te llamas?
_Jose luis.
Para ese entonces ella se había quitado su ropa y fué donde pude ver su cuerpo desnudo, tenía como les dije unos senos voluptuosos y muy apetecibles, su cuerpo era bastante definido, quizás con algunos detallitos, pero a quien le importa, tampoco estaba en busca de una modelo de portada o una miss, y en lo que a mi respecta tampoco es que soy un Brad Pit, entonces no había porque ponerse exigente, comenzó a limpíarme mí miembro con unas toallitas húmedas de esas que se utilizan para asear a los bebes y fué alli donde tuvimos el primer contacto entre nuestros cuerpos, luego hizo una pausa y comenzó a untarse el cuerpo de crema que usan las mujeres para darle tersura a su piel, y eso fué un espectaculo muy sensual, verle cómo recorría todo su cuerpo con sus manos y sobre todo cuando las pasaba por sus senos y su entrepiernas, luego se dirigió a darme sexo oral y sentí la sensación más placentera cuando su cálida boca, que por cierto la tiene muy bonita, una boca pequeña con unos labios que insitan a besarlos, tocó mí miembro y me estaba proporcionando el sexo oral más placentero que había experimentado en mí vida.
Me daba los mejores lengüetazos y succionadas con su bella boca en mí grueso pene, mientras ella me hacia volar comenzé a acariciarle el cabello y a agarrarle la cabeza como señal de agradecimiento por todo lo bien que me estaba haciendo sentir, luego comencé a agarrarle sus grandes senos, con mis manos les daba delicados masajes y por instante pellizcaba sus pezones que comenzaron a turgirse porque sin darme cuenta y sin querer yo también estaba procurando que ella recibiera placer a pesar que le estaba pagando para que me diera el mayor placer posible a mi, pero esta chica tenía algo especial que me llevaba a tratarla de una manera distinta, por momentos sentía que no sólo estaba teniendo sexo con una desconocida, sino que le estaba haciendo el amor a una mujer a lo cual amaba, de repente de una manera un poco brusca paró y me colocó el preservativo y se ubicó en la cama de una vez en la posición de estilo perrito, la cual es mí preferida cuando estoy con una mujer, y según dicen en esa posición los hombres acaban más rápido, pero ese no es mí caso porque igual puedo durar poco o mucho tiempo, dependiendo de lo excitado que esté o de la concentración que ponga en el acto sexual, cuando la penetré sentí como una serie de espasmo y contracciones en su vagina, como que si fuese que ella y su conejita le daban la bienvenida a mí grueso pene, comenzó a realizar unos candentes y acelerados movimientos de cadera como para precipitar mí eyaculación, pero parece que ella también estaba consiguiendo con esa actitud era sentir más placer en su cuerpo porque empezó a gemir y a emitir sonidos de placer, hasta llegué a pensar que terminaría teniendo un orgasmo, sentía su respiración acelerada y como que en su cuerpo se estuviera produciendo un recorrido de placer en todas sus extensiones, pero gracias a que yo tenía tiempo sin haber estado con una mujer, se salvó de que la hiciera venirse en un placentero orgasmo, y no aguanté más y me vine dentro de ella, antes de que la hubiese hecho perder el control de la situación, y hacerle parecer una mujer de la más puta de todas, que se goza y disfruta de lo que hace.
Luego que terminamos el primer round de nuestro encuentro, se levantó de la cama y fué a lavarse sus partes intimas, al regresar a la habitación la noté un poco fria y distante y pensé que no le había gustado que la hubiese hecho sentir todas esas sensaciones durante nuestro acto sexual, o tal vez se sentí un poco apenada porque mostró que estaba disfrutando tanto como Yo el acto sexual, por lo cual para romper un poco el hielo comencé a hacer una serie de preguntas triviales como para conocernos un poco, mientras ella sólo se limitaba a revisar los correos en el buzón de mensaje de su celular, mientras esperabamos a que me recuperara ya que había contratado sus servicios por más de 1 hora, normalmente me toma de 10 a 15 minutos para lograr tener una nueva erección y entrar al segundo round, ella seguia callada pero finalmente accedió a contestarme mis preguntas, y hablar de trivialidades conmigo, y después me sorprendió enormemente que sin saber cómo ni por qué, me pidió que si podia acostarse a mí lado y terminó acostada con su cabeza apoyada entre mí hombro izquierdo y mí pecho, y al mismo tiempo comenzó acariciarme el vello de mí pecho, mientras Yo hacía lo mismo con su cabello, y en ese instante se veia como una niña indefensa que se sentía protegida entre mis brazos y escuchando los latidos de mí corazón, mientras yo sentiá su delicado y suave cuerpo, y a pesar que tenía sus senos al alcance de mís manos, no busqué de hacerles caricias eróticas sino más bien tiernas y delicadas, y al cabo de un rato noté que comenzó a ponerse melancólica y sus ojos se humedecieron, y quizás para romper con esa sensación comenzó a manipular mí miembro con unas de sus manos como para acelerar mi erección, y al estar nuevamente empalmado y viril, arrancó de manera inmediata a darme una nueva sesión de sexo oral, aunque yo hubiese preferido quedarnos un tiempo más acostados juntos el uno al otro sintiendo esa agradable sensación de relax y ternura, mientras me hacia nuevamnete un placentero sexo oral empecé de nuevo a acariciarle su cabeza y a jugar con su cabello, pero por una extraña razón me pidió: que por favor no lo hiciera, que nos concentraramos en lo que veníamos a hacer y así acabar de una vez por toda con todo esto, luego de mamarmelo se puso nuevamente en la posición del estilo perrito, pero al poco instante de penetrarla decidí agregarle un poco de sabor a este segundo round y paré porque me percaté que dentro de la habitación se encontraba un banquito de sentarse y le dije que si podíamos hacerlo con ella montada sobre el taburete que se encontraba dentro de la habitación, a lo cual accedió sin más, en esa posición el ángulo de penetración sería mejor y me haría sentir más placer , y efectivamente, al estar haciéndolo de esa manera no tardé en eyacular nuevamente y en menos tiempo del que había tardado la primera vez.
Al acabar con la faena, se dirigió al baño a lavarse su cuerpo, cuando regresó Yo ya me había vestido y esperaba por ella para la despedida, y por una extraña sensación me provocó darle un beso de despedida en la mejilla, al cual al contrario de lo que Yo pensaba no opuso resistencia, ní rechazó, y le dije:
_Gracias por todo, muy bueno el servicio, regresaré.
Al día siguiente me encontraba en la oficina del lugar donde trabajo y sin saber porque sentí la necesidad de contactarla nuevamente y decidí mandarle un mensaje de texto a su celular, del cual me había dado el número cuando al despedirme le pregunté: Qúé diás podía encontrarla para un nuevo encuentro, en el mensaje le decía: Gracias por todo, por la tarde de placer y las sensaciones que me hiciste sentir ayer, pero al ver que no repondía pensé que eso era lo más probable que iba a pasar, y que ¿Qué hacía yo mandándole mensajes a una persona que quizás ni se acordará de mí, y de la cual sólo fuí un cliente más?, fué allí donde parece cayó en cuenta de quien se trataba y me contestó: "Pero es que si no me dices quien eres", y al pregúntarle si ya sabía que de quien se trataba, me sorprendió enviándome otro numero de teléfono en el cual podía contactarla, luego pasaron un par de días y nuevamente decidí enviarle un nuevo mensaje de texto, ya que pensé sí me dió sus números de teléfonos es porque no le molesta que la llame y es más debe de estar esperando a que lo haga, y también porque sentía que esta chica se estaba metiendo de a poco en mí vida, no sé porque no dejaba de pensarla, al principio creía que era sólo por el buén sexo que me brindó, pero no era sólo eso, yo sentía esta mujer me estaba interesando más de lo común y sentía la necesidad de volverla a ver, en esta oportunidad le mandé el mensaje a través de otro número de célular que también poseo, en el cual le indicaba que ese era otro número mio de contacto, y al contestarme sentí un poco de verguenza porque la había molestado mientras dormia, porque me contestó: "ok yo lo anoto, ahora estoy durmiendo porque ayer estaba de rumba con Karol una de mís amigas", pero a la vez me sorprendió que me diera explicaciones de lo que hacía, pensé ¿Y Quién es Karol?.
Así transcurrieron los días, y al cabo de 2 semanas, donde hubieron mensajes expóradicos, una tarde que estaba todo atribulado por el trabajo en la oficina me sorprendí gratamante, al ver que en esta ocasión fue ella quien hizo el contacto esta vez, y entre saludaros y preguntarnos cómo estabamos, también nuevamente sin saber por qué, y sin yo pedirselo estaba dándome información de lo que hacía, me contó que estaba asistiendo en esos días a los actos culturales del colegio de sus hijos, lo que en cierto modo me extraño que se refiriera a sus hijos en plural, porque recuerdo que en nuestro primer encuentro aquella tarde del 1° de Julio, al preguntarle si tenía hijos me mostró solo una foto de un bebe, el cual pensé era un varón, y al preguntarle en esta ocasión ¿Qué edad tenía su bebé?, me contestó:
_5 la nena y 11 el varón.
Luego me sorprendí que me preguntara "¿Qué cuando nos veriamos nuevamente?", porque precisamente estaba por decirle para vernos al día siguiente, pero lamentablemente me dijo que era imposible, porque precisamente era ese día el acto de fin de curso de los niños, pero que si quería nos podíamos ver al día siguiente de ese, a lo cual ahora era yo quien respondia que me era un poco imposible vernos ese otro día, que entonces ni modo que sería en otra oportunidad, y extrañamente quizás por ese efecto y sentimiento desconocido que parece había entre los dos, recibí un nuevo mensaje donde me insistía que porqué no hacía todo lo posible por vernos al día siguiente al acto del colegio, que lo pensara bien y le avisara.
Le dije que no me tentara, y que estaba un poco triste y molesto porque no era justo que después que tenía días planeando este encuentro, no se me fuese a dar, y sin pensarlo mucho decidí aceptar su invitación y postergar nuestra cita un día más, y pués tal cual, ahí estaba yo al día siguiente buscándola en el estudio, pero debo contarles que antes de llegar a verla me encargué de comprarle el almuerzo, ya que en unas de nuestras conversaciones por vía mensajes de texto en el celular, me había dado cuenta que ella no comía a la debida hora, porque me dijo que por motivo de su trabajo no lo hacía a la hora, porque cuando estaba atendiendo a un cliente prefería dejar para comer después, así que me tomé la delicadeza y tuve esa atención para con ella, y me agradó mucho que me permitiera preocuparme por ella y cuidarla, aunque me preocupé un poco porque en realidad no sabía, porque me estaba involucrando tanto con esta chica y estaba yendo más alla de nuestro contrato carnal, pero es que ésta mujer tenía algo en especial, y sentía que me estaba invadiendo de a poco mí vida y derrumbando mis barreras y esquemas en cuanto a mis relaciones con las mujeres.
Cuando llegué y pregunté por ella, sentía una alegria como de adolescente enamorado, revolotearon en mí estomago miles de mariposas y los latidos de mí corazón se aceleraron, al saber que la vería nuevamente y quizás esa era la impresión que le dí a la chica que me abrió la puerta en esa oportunidad, cuando me vió una vez más me recibió con una bella sonrisa y un beso en la mejilla, lo cual me agradó bastante, al entrar a la habitación noté que ella tenía como prisa para que tuvieramos sexo, pero le dije que se calmara y en una actitud de atención hacía ella, le preguntaba ¿cómo había estado?, ¿cómo estaban sus hijos?, y estuve pendiente que comiera su almuerzo, una vez terminado de almorzar, fué al baño a cepillarse los dientes y a prepararse para la sesión de sexo que estaba por venir, y que en el fondo esta vez yo estaba deseando más por el deseo sexual, era por sentirla a mí lado, volvió a donde estaba yo y luego de brindarme una nueva sonrisa comenzó a darme sexo oral, y en esta oportunidad sentí que no trataba de hacerlo lo mejor posible como para hacerme terminar rápido, sino como para darme el mayor placer posible, y creo que lo estaba logrando porque realmente estaba disfrutando a plenitud lo que me hacía, luego vino la penetración y sentí que se me estaba entregando a conciencia, ya no actuaba como de forma mecánica, estaba en procura de brindarme el mayor goce y placer, sentía mí pene entrar y salir de su cálida y humeda intimidad con mucha pasión, parecía que en esta oportunidad hubiese una conexión más alla de lo meramente sexual, es más creo que se trataba de lo que llaman "hacer el amor" , que es muy distinto a "tener sexo" , o "intimar sexualmente". Después de estar por un tiempo en la posición del misionero, y de cabalgarme frenéticamente, cambiamos a la estilo perrito, en la cual se montó en el mismo taburete de la vez anterior, y estando en esa posición sucedió algo inesperado y que jamás le había sucedido con un cliente, se rompió el preservativo, lo cual no advertimos ninguno de los dos y al venirme al no poder contenerme más, y llenar por completo el interior de su vagina con un cálido torrente de virilidad, al retirarme de su cuerpo, los dos al percatarnos de lo sucedido pusimos cara de asombro y de preocupación.
Su reacción al momento fué ponerse a llorar, lo cual me afectó a mí también porque si hay algo que no me gusta es ver llorar a una mujer hermosa, pienso que lo hacía por miedo a un embarazo no deseado, más que por un posible contagio de alguna enfermedad, porque como les dije ella siempre inspeccionaba y revisaba a uno antes de tener sexo para descartar cualquier anormalidad o indicio de enfermedades, y por mí parte no tenía miedo de nada porque era tanto el afecto y el sentimiento que tenía hacia ella y la confianza que me producia, que en cierto modo me sentía seguro que nada malo pasaría. Al verle llorar la consolé y le dije unas palabras para que se tranquilizara un poco y porque sentía la necesidad y el deber de hacerle ver y entender que estaba con todo un caballero u hombre en todo el sentido de la palabra, por lo cual asumiendo mí obligación le dije:"tranquila no tengas miedo, yo respondo por lo que pueda pasar", pero con todo y el susto decidimos embarcarnos en una segunda oleada de placer, y al finalizar me pidió que la acompañara a la farmacia más cercana, para adquirir la "pildora del día después", y una ducha intima con espermaticida, a lo cual accedí sin mayor reparo y le dije nuevamente: "Puedes contar conmigo para lo que sea". luego hubo un tercer encuentro, es más fue precisamente a la semana siguiente, es decir que estaba rompiendo totalmente con mis estrategias en cuanto a mujeres se refería, ya que esta era nuestra tercera ocasión juntos, y les que cuento ese día en realidad no iba en busca de sexo, sino sólo de estar con ella y de tenerla a mí lado, y se sorprendió cuando le dije que no venía en busca de placer, pero de cierta manera hubo un motivo para que terminaramos teniendo sexo,, pero como en realidad no era esa mí intención ese día fué diferente, porque en el primer intento duramos más de lo común, aunque yo sé controlar bastante el momento de eyacular, pero ese día parece que rebasé el límite de tiempo, hasta el punto que después de haberlo hecho en todas las posiciones experimentadas en las veces anterior, en el momento que me cabalgaba por segunda vez, le pedí parar y le dije sosteniéndole la cara: "Chiquita dejémos esa vaina así", y luego sólo estuvimos abrazados acostados en la cama, y en ningún momento sentí la necesidad ni mostré interés de volver a intentar una segunda oportunidad, se acabó el tiempo por el cual había contratado sus servicios y al despedirme cuadramos otro encuentro pero fuera del estudio, acordamos vernos la semana entrante pero esta vez en un hotel, así el dinero que le pagase, le quedaría sólo a ella en su totalidad, ya que no tendría que compartirlo con la administradora del estudio.
y ahí estamos nuevamente aquella tarde de un miércoles como ya se nos estaba haciendo costumbre, encontrándonos para un momento de placer, al encontrarnos la sorprendí recibiéndola con un pequeño ramo de flores, pero flores al fin, un detalle que le agrada a la mayoría de las mujeres, y del cual pienso ella no sería la excepción y no iba a ser indiferente. ese día como de costumbre la traté con mucha atención y estuve pendiente de hacerle sentir bien hasta con el más minimo detalle, primeramente fuimos a almorzar unos sandwiches en una cadena de comida rápida que me dijo le encantan muchisimo, una vez en el hotel nos sumergimos en una oleada de caricias y momentos de pasión, y nuevamente hice gala de mí autocontrol al momento de prolongar el acto sexual, de hecho les cuento que en el primer intento nisiquiera llegué a correrme, mientras creo haber logrado que ella se viniese en dos largos y placenteros orgasmos, pero lo más importante de ese día no era el sexo, sino lo bien que me sentía a su lado, y que seguiamos conociéndonos un poco más, y que quizás ya sabiá un poco de que se trataba todo esto que estaba sintiendo por esta bella mujer, al final cuando nos disponiamos a regresar cada quien a su casa, le entregué un sobre con una carta que le había escrito la noche anterior, y el cual le pedí que leyese una vez que estuviese en su casa, lo cual creo que la llenó de mucha curiosidad e incertidumbre por lo que se pudiese tratar. Una vez que la dejé en la parada de transporte que van hacia su lugar de residencia, me fuí a tomar unas cervezas para despejar mí mente y pensar y análizar todo lo que había pasado hasta el momento, lo que estaba sintiendo por ella y lo que había decidido hacer ese día, y estando en el sitio tomándome las cervezas, decidí enviarle un mensaje en el cual le decía: "Gracias por este mes maravilloso, nunca lo olvidaré", al cabo de un rato al ver que no respondía, le envié otro: "Por lo visto no te gustó la carta, pero prefiero perderte y sufrir que engañarte, y peor aún tratar de engañarme a mí", a lo cual me contestó: "Que, qué me pasaba, que ella no había tenido tiempo de leer nada, porque se encontraba ocupada dándole de comer a su hija, pero que no le gustaba que pensaran por ella", le pedí disculpa y decidí esperar su respuesta o reacción, al hecho de todo lo que le decía en la carta, que no era otra cosa que ya sabía porque ella me interesaba tanto y lo que estaba sintiendo por ella, le decía que había comenzado a sentir algo por ella, que iba más allá de una simple atracción sexual, que quizás empezaba a amarla, quizás su primera reacción ante esto fué pensar que estaba loco, que cómo era posible que sintiera todo eso en tan poco tiempo, si apenas teníamos 1 mes de conocernos, y esta tarde era la cuarta vez que nos veiamos.
Al día siguiente me envió un mensaje diciéndome: "Que le gustaba estar conmigo, que era una persona muy amable y especial, pero que deberiamos dejar que el tiempo pasase y asi conocernos más, y dejar que sea el tiempo el que hablase y dijera que es lo que tenía que pasar", luego seguimos viéndonos incluso en citas que nada tenían que ver con la parte sexual, en las cuales en una de ellas tuve el honor, el privilegio y la suerte de conocer a su nena, la cual es un angelito y una niña bella, que al igual a su mamá, es un ser que te roba el corazón desde prácticamente el mismo instante en que la conoces, ya han pasado varios meses (3 o 4), y aunque aún no tenemos una relación formal o definida, seguimos viéndonos y compartiendo, y cada día que pasa me convenzo más que siento algo muy bello e importante por ella, y que estoy realmente enamorado y que amo a esta bella mujer, porque es una persona muy especial y bella en todo el sentido de la palabra.
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LA VIDA ES TAN CORTA Y EL OFICIO DE VIVIRLA ES TAN DIFICIL.
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1 comentarios - Ella y Él (She and He) "La Versión de Él"
bueno bueno +10 :limon::limon::limon::limon::limon::limon::limon::limon::limon::limon: