:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Recuerdo mi primera vez, fué algo que se podría llegar a considerar tradicional de algunas culturas o tal vez tradicional de los tímidos...
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Tenía unos 15 años y estaba en lo que se podría llamar, la fiebre de la adolescencia. Todavía no había tecnología como ahora, por lo que el material de uso para la "auto satisfacción" eran revistas porno, las que costaba mucho conseguir. Recuerdo por mi parte que las conseguía de un amigo que tenia aspecto de ser mayor y además tenia una mirada muy seria por lo que era perfecto para el trabajo.
Mi problema era que, con la cabeza tan alborotada, solía dejar mis revistas en lugares no muy difíciles de encontrar, por lo que, con frecuencia terminaban en manos de mi madre, seguido de una charla sobre el tema, muy incomodas por cierto.
Un par de días luego de uno de estos incidentes, mi padre, después de una charla, me preguntó si quería tener un encuentro con un chica en un lugar que el tenía. Yo mas avergonzado que otra cosa, le respondí "si".
Pasaron un par de semanas y el tema parecía haber quedado en el olvido, cuando de repente mi madre me comenta que mi padre me quería ver en un lugar, "no dijo para que, seguro necesita algo" y de repente recordé la charla que había tenido, me arreglé un poco y un tanto nervioso, me dirigí al lugar.
Mi padre me llevó a un departamento y sólo dijo, "espera acá" y salió por la puerta. Me puse cómodo porque pensé que estaba solo y de pronto se abrio la puerta del baño. Me encontré con una chica. Al verla, mi primera reacción fué mirar al piso. Todo tipo de pensamientos me pasaron por la cabeza y luego de un momento junté valor para levantar la mirada.
Pelo castaño, bastante largo, lacio. Ojos marrones, grandes y brillantes, una mirada cálida. Una boca chica, con labios carnosos. 1,70m de altura mas o menos y un cuerpo delgado y, con pechos y cola del tamaño perfecto para su cuerpo. No se donde la habían sacado, pero para mi, era perfecta.
Se acercó a mi y me dijo su nombre. Es curioso, pero es lo único que no recuerdo de ella. Me dijo "Ponete comodo" asi que me senté y ella se sentó a mi lado. Se acercó a mi y nos besamos un momento y comencé a acariciar su cuerpo. Se sentia firme y suave al tacto. No usaba perfume por lo que podía sentir su aroma.
No hace falta decir que para este momento ya tenía una erección durisima. Ella la notó y me pidió que me recostara. Con mucha destresa desabotono mi pantalon y sacó mi pene. Comenzó a moverlo lentamente de arriba a abajo. Lo llevó a su boca y difruté de mi primer "mamada", aunque debo decir que la tenía tan dura que casi no sentía nada, hasta que comenzo a chupar mi glande como si fuera un chupete y casi quedo en blanco.
Se quitó la ropa y subió arriba mio, tomó mi pene con la mano y me coloco un preservativo. De inmediato se coloco en posición y se sentó lentamente sobre mi pene, que no tuvo problemas para entrar por completo. Luego de un par de subidas y bajadas se empezó a escuchar por la habitación el sonido de mi pene penetrando su vagina, que estaba muy mojada y hacia ese peculiar sonido que no se compara con nada. Arriba y abajo, arriba y abajo. Con mis manos libres para hacer lo que quisiera me dediqué a acariciar su cuerpo.
Luego me senté, sin sacar mi pene de ella y comencé a besarla con fuerza. Ella mientras tanto se movia de atras hacia adelante sin perder el ritmo. Asi estubimos por un tiempo, y entonces ella salió de la posición y se puso en cuatro, como perrito.
Me acerqué por detras y sin necesidad de usar mis manos metí mi pene en su vagina con mucha facilidad y comencé a hacerlo con fuerza. Me sentí muy cómodo, creo que es una posición muy natural. Ella comenzó a gemir y yo no podía creer lo bien que se sentía. Ella me pidió un descanso. Asumí que había acabado.
Un minuto después ya estaba encima de ella otra vez. Se alejó de mi y se puso de pie. Se acercó a la pared y se inclino con las manos apoyadas en esta. Me acerqué y froté mi pene contra su vagina. Ya me sentía bastante mas confiado asi que la froté un poco mas. Luego comencé a frotarle el ano. Hice un poco de presión y fué como un "pop" (no es que halla hecho ese sonido, pero creo que es lo que mejor lo describe). Mi glande estaba dentro de su culo y ella abrió los ojos bien grandes, no creo que de dolor, era mas una expresión de sorpresa, luego me sonrió y bajó la cabeza. Yo seguí presionando hasta que mi pene estuvo dentro por completo. Ahora se que uno debe usar lubricación, pero creo que por lo mojada que estaba, no hizo falta.
Bombee cada vez con un poco mas de fuerza hasta que sentí que podía arremeter a gusto. Ella bajó una mano y empezó a frotarse rápido. Bombeaba cada vez mas fuerte y mas rápido, mas fuerte y mas rápido, comencé a jadear y ella a gemir. Acabé con mucha fuerza y creo que entre la presión del preservativo y la presión que hizo ella tuve el orgasmo mas largo de mi vida.
Luego nos recostamos unos minutos y ya estaba pensando en comenzar otra vez cuando sentí unos golpecitos en la puerta. Era mi padre que me iba a buscar.
La verdad es que nunca voy a saber lo que se siente tener una primera vez por merito propio, pero no me arrepiento porque fué una de las mejores hasta hoy en día.
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Bueno, con eso concluye el relato, espero que les haya gustado y que comenten lo que opinan. Tal vez puedan comentar si tuvieron una experiencia similar. Como sea, dejen algo para poder saber que piensan.
Saludos y gracias por pasar!
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Recuerdo mi primera vez, fué algo que se podría llegar a considerar tradicional de algunas culturas o tal vez tradicional de los tímidos...
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Tenía unos 15 años y estaba en lo que se podría llamar, la fiebre de la adolescencia. Todavía no había tecnología como ahora, por lo que el material de uso para la "auto satisfacción" eran revistas porno, las que costaba mucho conseguir. Recuerdo por mi parte que las conseguía de un amigo que tenia aspecto de ser mayor y además tenia una mirada muy seria por lo que era perfecto para el trabajo.
Mi problema era que, con la cabeza tan alborotada, solía dejar mis revistas en lugares no muy difíciles de encontrar, por lo que, con frecuencia terminaban en manos de mi madre, seguido de una charla sobre el tema, muy incomodas por cierto.
Un par de días luego de uno de estos incidentes, mi padre, después de una charla, me preguntó si quería tener un encuentro con un chica en un lugar que el tenía. Yo mas avergonzado que otra cosa, le respondí "si".
Pasaron un par de semanas y el tema parecía haber quedado en el olvido, cuando de repente mi madre me comenta que mi padre me quería ver en un lugar, "no dijo para que, seguro necesita algo" y de repente recordé la charla que había tenido, me arreglé un poco y un tanto nervioso, me dirigí al lugar.
Mi padre me llevó a un departamento y sólo dijo, "espera acá" y salió por la puerta. Me puse cómodo porque pensé que estaba solo y de pronto se abrio la puerta del baño. Me encontré con una chica. Al verla, mi primera reacción fué mirar al piso. Todo tipo de pensamientos me pasaron por la cabeza y luego de un momento junté valor para levantar la mirada.
Pelo castaño, bastante largo, lacio. Ojos marrones, grandes y brillantes, una mirada cálida. Una boca chica, con labios carnosos. 1,70m de altura mas o menos y un cuerpo delgado y, con pechos y cola del tamaño perfecto para su cuerpo. No se donde la habían sacado, pero para mi, era perfecta.
Se acercó a mi y me dijo su nombre. Es curioso, pero es lo único que no recuerdo de ella. Me dijo "Ponete comodo" asi que me senté y ella se sentó a mi lado. Se acercó a mi y nos besamos un momento y comencé a acariciar su cuerpo. Se sentia firme y suave al tacto. No usaba perfume por lo que podía sentir su aroma.
No hace falta decir que para este momento ya tenía una erección durisima. Ella la notó y me pidió que me recostara. Con mucha destresa desabotono mi pantalon y sacó mi pene. Comenzó a moverlo lentamente de arriba a abajo. Lo llevó a su boca y difruté de mi primer "mamada", aunque debo decir que la tenía tan dura que casi no sentía nada, hasta que comenzo a chupar mi glande como si fuera un chupete y casi quedo en blanco.
Se quitó la ropa y subió arriba mio, tomó mi pene con la mano y me coloco un preservativo. De inmediato se coloco en posición y se sentó lentamente sobre mi pene, que no tuvo problemas para entrar por completo. Luego de un par de subidas y bajadas se empezó a escuchar por la habitación el sonido de mi pene penetrando su vagina, que estaba muy mojada y hacia ese peculiar sonido que no se compara con nada. Arriba y abajo, arriba y abajo. Con mis manos libres para hacer lo que quisiera me dediqué a acariciar su cuerpo.
Luego me senté, sin sacar mi pene de ella y comencé a besarla con fuerza. Ella mientras tanto se movia de atras hacia adelante sin perder el ritmo. Asi estubimos por un tiempo, y entonces ella salió de la posición y se puso en cuatro, como perrito.
Me acerqué por detras y sin necesidad de usar mis manos metí mi pene en su vagina con mucha facilidad y comencé a hacerlo con fuerza. Me sentí muy cómodo, creo que es una posición muy natural. Ella comenzó a gemir y yo no podía creer lo bien que se sentía. Ella me pidió un descanso. Asumí que había acabado.
Un minuto después ya estaba encima de ella otra vez. Se alejó de mi y se puso de pie. Se acercó a la pared y se inclino con las manos apoyadas en esta. Me acerqué y froté mi pene contra su vagina. Ya me sentía bastante mas confiado asi que la froté un poco mas. Luego comencé a frotarle el ano. Hice un poco de presión y fué como un "pop" (no es que halla hecho ese sonido, pero creo que es lo que mejor lo describe). Mi glande estaba dentro de su culo y ella abrió los ojos bien grandes, no creo que de dolor, era mas una expresión de sorpresa, luego me sonrió y bajó la cabeza. Yo seguí presionando hasta que mi pene estuvo dentro por completo. Ahora se que uno debe usar lubricación, pero creo que por lo mojada que estaba, no hizo falta.
Bombee cada vez con un poco mas de fuerza hasta que sentí que podía arremeter a gusto. Ella bajó una mano y empezó a frotarse rápido. Bombeaba cada vez mas fuerte y mas rápido, mas fuerte y mas rápido, comencé a jadear y ella a gemir. Acabé con mucha fuerza y creo que entre la presión del preservativo y la presión que hizo ella tuve el orgasmo mas largo de mi vida.
Luego nos recostamos unos minutos y ya estaba pensando en comenzar otra vez cuando sentí unos golpecitos en la puerta. Era mi padre que me iba a buscar.
La verdad es que nunca voy a saber lo que se siente tener una primera vez por merito propio, pero no me arrepiento porque fué una de las mejores hasta hoy en día.
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
Bueno, con eso concluye el relato, espero que les haya gustado y que comenten lo que opinan. Tal vez puedan comentar si tuvieron una experiencia similar. Como sea, dejen algo para poder saber que piensan.
Saludos y gracias por pasar!
:verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde::verde:
7 comentarios - El dia que me llevaron a debutar
Yo pase por tu post..vos.pasaste por el mio?
🙄 Eh... porque gay?
Por el protagonista masculino?