Mi amiga, cási una hermana..

Conocía a Sonia desde hacía 11 años, nos hicimos muy amigos desde el primer día, es dos años mayor que yo, una mina muy recatada, nunca la escuché decir ni una sola mala palabra.
Un día me peleé con mi novia y me quedé muy deprimido, me costaba salir, la única persona a la que veía seguido era a ella.
Sonia siempre me aconsejaba bien, siempre me animaba, siempre estaba conmigo.. era una amiga de verdad, jamas se me hubiese ocurrido que pasara algo mas.
Un día ella me propuso una especie de juego, me dijo que era para que me sintiese mejor, para que me sintiese vivo.. la única condición era que no iba a haber sexo, algo frustrante, pensé pero bueno, al menos tendría algo de contacto físico con una mujer.
Nos encontramos en una plaza, fue algo muy extraño cuando la besé, porque por los primeros dos segundos sentí como culpa, como si besara a una hermana, pero esa sensación duró poco, la calentura pudo mas, aunque no me duró mucho la calentura porque cuando le quise tocar la concha me quitó la mano, me dijo que no iba a haber sexo.. una noche frustrante pero bueno, peor era nada.
Pasó el tiempo, volvimos a la normalidad, me pareció una huevada, ambos teniamos mas de 20 años y eso de andar besandose sin tener sexo me parecia una etapa que ya habia pasado a los 14 años..
Pasó el tiempo, dejamos de vernos, volvimos a vernos a los tres años, como si nada, como si el tiempo no hubiese pasado.
Un día hablabamos de sexo, terminamos besandonos de nuevo pero como ocurrió antes.. no hubo sexo, me fui frustrado, sintiendome un pelotudo, asi que no volví a verla durante un año, cuando volvimos a vernos, en su casa, solos, le dije que no entendía por qué se negaba a tener sexo, me dijo que era porque tenia miedo de perder la amistad.. le dije que la amistad no tenia nada que ver, que yo no iba a dejar de quererla como amiga por tener sexo. La conversación quedó ahí, seguimos charlando de otras cosas, hasta que ella me dijo que pensandolo bien, podíamos tener sexo, porque ella hacia mucho que no cogía y que prefería coger con alguien cercano y no con algun desconocido.
En principio me dijo que no iba a ser ese día, que necesitaba un tiempo, le dije que me parecía bien.. entonces ella se acercó y me dijo que igual podíamos "jugar" un ratito, me abrazó por el cuello y empezamos a besarnos.
No sé como terminamos dentro de su baño, yo la puse contra la pared, le levanté la ropa, le dejé las tetas al aire y empecé a chuparselas ( jamas me dejó chuparle las tetas) Tenía unos pezones enormes, rosados.. durisimos... Con una mano busqué desabrocharle el pantalon, mientras con la otra me desabrochaba el mío.. en un segundo estabamos los dos con los pantalones bajos y ella manoteandome la pija, que ya estaba dura como un palo.
Ella me dijo que fueramos a la cama pero que no iba a pasar nada, solo ibamos a tocarnos.. cuando fuimos a la cama me hizo prometerle que no iba a pasar nada, yo le dije que no ibamos a hacer nada que ella no quisiera.
Me hizo acostar, pero la muy viva, se sacó los pantalones pero se dejó puesta la ropa interior, se la subió y se puso encima mío, con la idea de frotarse contra mi pija, pero con la ropa interior puesta para que no pasara mas nada, segun ella.
Empezamos a besarnos, ella encima mío, Sonia estaba muy caliente, se notaba en su piel, su aroma era tremendo.. Me mordía el cuello, con la concha apoyada sobre mi pija,dura, moviendose hacia atrás y hacia adelante, podía sentir su calor, era una tortura tremenda pero habia prometido que no iba a pasar nada.
Pase mi mano por encima de su culo y empecé a tocarle la concha por detras, meti la mano por dentro de su ropa interior, Sonia estaba empapada, empecé a tocarla, eso la hizo gemir y su gemido hizo que mi pija palpitara.
No podía mas de calentura, no sabía que hacer, metersela a traición? .. puto sentido del honor, le prometí que no iba a pasar nada, mi cabeza era un quilombo, Sonia se movía como si estuviesemos cogiendo, podía sentir su ropa interior humeda, maldita ropa interior,era lo único que separaba mi pija de su concha.
Realmente no sabía que hacer, asi que me moví y la tumbé en la cama poniendome encima, apoyandole la pija en la concha, moviendome como si estuviesemos cogiendo, empecé a morderle el cuello y eso la hizo calentar mas todavía.. entonces me metió la lengua en el oído.. y susurrando me dijo "Haceme mierda".. metió su mano en la entrepierna y se corrió la bombacha, agarró mi pija y la apuntó, instintivamente empujé y mi pija entró en su concha mojada, Sonia largó un gemido hermoso, que dio paso a un jadeo desesperado cuando empecé a bombear.
Por favor, no me acabes adentro, me dijo y ya ninguno de los dos dijo nada, empezamos a comernos a besos mientras yo bombeaba, mi pija estaba mas dura que nunca, su concha estaba empapada, caliente.. tensa.
Cambiamos de posición, ella volvió a ponerse encima mío y empezó a moverse como una serpiente, no sé como lo hacía pero se levantaba hasta que mi pija casi quedaba fuera, solo quedaba la cabeza dentro y ella se movía de una forma que parecía que su concha era una boca chupandome la cabeza de la pija. Era muy dificil aguantar eso, pero me concentré para no acabar y logré aguantar mucho mas de lo normal. En un momento Sonia puso los ojos en blanco y acabó, con espasmos en todo el cuerpo, podia sentir como se contraía su concha, se quedó quieta, mientras acababa yo le pellizcaba los pezones, eso la hizo gritar de placer.. Cayó sobre mi y me dijo que la dejara descansar un minuto, que hacia mucho que no acababa asi, tan fuerte, yo la dejé reposar sobre mi, con la pija todavía dentro, podía sentir su flujo mojandome los huevos, me tocaba acabar a mi, no sabia como ibamos a hacer, asi que le dije que nos pusieramos en cucharita, le metí la pija y me empecé a mover rapido.. le dije que ya faltaba poco, me pidio que le echara la leche encima de la concha pero con cuidado..
Cuando sentí que iba a acabar, saqué la pija y me empecé a pajear, pero toda la leche le cayó en la entrada de la concha, no pareció molestarle..

Cuando solté la ultima gota de leche, ella fue al baño a limpiarse, me dijo que todavía le temblaban las piernas, que era como si hubiera corrido 3 kilometros..

Yo me quedé acostado mientras escuchaba como ella se lavaba en el bidet, vino a la cama con un cigarrillo prendido y nos quedamos asi, acostados, fumando y charlando. Desde ese día, empezamos a coger todos los domingos, de todas las formas imaginadas, siempre repitiendo la misma petición, que le echara la leche encima de la concha, obviamente le dije que alguna vez queria acabarle dentro aunque fuese con un condon, me dijo que iba a tomar pastillas y asi iba a poder acabarle dentro, asi que lo hizo y pude llenarle la concha como habia deseado desde hacia años..