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25 consejos para que un hombre reciba un buen oral

Se habla mucho del sexo oral que recibimos los hombres, pero no siempre se habla de lo que cuesta el recibirlo y disfrutarlo, ya sea por la falta de información que suelen tener las mujeres como por nuestra propia ignorancia.

Así que para echar un poco de luz en este tema tan importante como delicioso, a continuación siguen 25 conclusiones importantes sobre lo que las mujeres deben saber al respecto. Ideal para que ellas se informen antes de poner manos (y boca) a la obra, y de paso para que nosotros sepamos más de lo que tanto nos gusta:



1. Hay que lavar la poronga siempre... no es por nada, ahí es justamente por donde meamos. Siempre habrá riesgo de infecciones, además de largar mal olor por esa causa y la transpiración de todo el día. Una pija con sabor a meo no es del agrado de las mujeres (excepto, claro, de aquellas que se exciten con algo así. Pero son una minoría).


2. Nunca recurrir a complicados métodos de higiene. Los hay por miles, sobre todo en la web. Hay quienes llegan al extremo de aconsejar sobre utilizar agua oxigenada, jabones líquidos al estilo Espadol, alcohol, vinagre (en especial el de manzana), etc. Todos esos son productos muy peligrosos para el pene, ya que además de provocar una irritación de la gran siete, pueden dar la entrada a infinidad de infecciones, ya que eliminan la flora bacterial presente en nuestras zonas erógenas, que sirve y mucho para mantenerla en buen funcionamiento.

No hay nada mejor como el agua fría o tibia para una buena limpieza, usando los dedos para frotar con cuidado (ojo, no lo hagan demasiado... sino van a tener que limpiar por otras razones, ja).


3. Que la chica lo haga con tranquilidad. Se nota fácilmente cuando no le gusta, y eso tampoco le hará bien al hombre. Si ella accede a hacerlo y no tiene experiencia, o la tiene y no es muy buena, es mejor que se vaya animando poco a poco.


4. Terminada la higiene, no hay olores malos. Tanto en el hombre como en la mujer, hay zonas que emiten un olor particular. Y si en ellas el olor de su vagina bien limpia puede ser llamativo para nosotros, nuestra japi también les puede hacer pensar cosas. Todo es cuestión de que se acostumbren a nuestro cuerpo y sus olores característicos, y que reaccionen positivamente al estar en contacto.


5. Que lo hagan sin miedo. Hay chicas que tienen unas ganas incontrolables de "hacernos un petiso" apenas empieza el acto sexual y tomando por sorpresa al hombre. Es realmente excitante que ellas tomen la iniciativa, así que después hay que dejar bien manifiesta nuestra alegría ante tan auspicioso hecho.


6. Que no usen los dientes. Lo correcto en el sexo oral es que usen solamente la lengua y los labios. Una mordida basta y sobra para lastimarnos y que nos duela mucho.


7. Más que un pete, que nos hagan sexo oral. El porno nos distorsiona mucho la imagen del acto en sí, al mostrarnos mujeres que se la meten y sacan permanentemente mientras dure dicha tarea. En el mundo real, la chica se puede cansar rápidamente de ese esfuerzo, además de que se le puede adormecer las mandíbulas, como si hubiera inflado muchos globos para una fiesta infantil. Si alguna mujer lo quiere intentar, bienvenida sea, pero no se pierde nada si hacen lo que se indica en el siguiente ítem.

8. Lo mejor es que la chica empiece acariciando al pene con ambas manos, suavemente y sin apuro. Y vale aclarar, solo acariciar, no masturbar, ya que con caricias suaves se logra una estimulación que irá creciendo poco a poco.

9. Una vez que las caricias convirtieron nuestra salchichita en un Obelisco de carne, pueden seguir con besos y pequeñas lamidas en la base y el tronco del pene, recorriéndolo poco a poco con movimientos de arriba a abajo o circulares, hasta llegar al frenillo del glande. Ahí pueden empezar a chuparla en el sentido literal de la palabra, al meterse el glande en su boca, despacito pero con muchas ganas.


10. Que domine la lengua en el pete es clave. Todo el placer vine de dicho órgano, así que para guiarla en ese aspecto, siempre vienen bien unos buenos besos de lengua a modo de aprendizaje. También sirve hacerle sexo oral a ella primero, a fin de que se haga una idea general del asunto. Otro consejo: besar, lamer y chupar sus tetas. todo sirve para que tome nota y apruebe el oral.


11. Y las manos vuelven a la acción... al seguir acariciando mientras disfrutan chupando nuestro glande. Y si siguen con su boca y las mano al mismo tiempo, la excitación será aún mayor.


12. Guía a la chica para que te dé placer. Ella por sí misma solo puede intuir lo que te puede gustar, si lo único que haces es gemir y balbucear frases como ocurrentes como "si, si", "dale, no parés" o la clásica y gastadísima "¡¡ahhhh, como la chupás, carajo!!" Si te gusta lo que te va haciendo, decile sobre la velocidad conque te lo hace, si te está gustando lo que te hace, si así está bien, si querés más o menos presión, que vaya más rápido o más lento, porque cada vez que te lo haga será diferente, y así podrás lograr que el pete dure tanto como vos y/o ella quieran. Además, ella sabrá que lo hace bien y se sentirá orgullosa de darte placer.


13. La misma posición siempre, no. Hay posiciones que ayudan a que el hombre vaya más rápido o más lento, ya sea sexo oral, vaginal u anal. Si sentís que vas a acabar pronto y querés retrasarlo cambiá de posición y que ella vaya un poco más despacio. Eso sí, tené en cuenta que el pete no puede ser eterno, ya que tarde o temprano tu chica se cansará de chupar y chupar.


14. La postura más común es cuando uno está acostado boca arriba y ella inclinada sobre el pene, así ella tiene el control y puede terminar cuando lo desee alejar en el momento que quieras. Al cambiar de posición puede sentarse en el borde de la cama o arrodillarse en el piso mientras vos estás parado (en ese caso que tenga un almohadón en el piso), o hacerlo con los dos acostados y enfrentados en la cama, o más bien apelar al clásico 69, así gozan oralmente al mismo tiempo.


15. ¿Qué hacer con el semen? Esa es la gran cuestión de todo el asunto, ya que varía en cantidad y en sabor en cada hombre. Y no solo a muchas mujeres no les gusta tenerlo en su boca; incluso a veces puede resultar contraproducente que lo traguen, ya que es básicamente una gran fuente de proteínas. No es broma, un buen lechazo equivale a una hamburguesa completa, así que si te la chupa seguido, seguramente engordará un par de kilos.


16. Si no lo quieren tragar, pueden dejarlo caer de su boca mientras dure la acabada. Y si les parece un asco, es mejor que tengan a mano un pañuelo desechable para escupirlo en él, o que ella vaya corriendo al baño o hacia un tacho de basura y que escupan ahí tranquilamente.


17. Si lo quiere tragar, en el momento en que vos eyaculás deja la punta del pene metida en tu boca y deja que se vaya hasta el fondo, así lo traga rápido. Mientras más afuera de su boca esté el pene, más se va a quedar el sabor del semen.


18. Ojo con lo que se pone al pene. Un fetiche habitual y que rompe la rutina es que la chica le unte cosas, así se come una poronga bien aderezada. No es mala idea, pero una vez concluido el asunto hay que lavarlo bien, ya sea que haya o no haya penetración después, pues los azúcares pueden provocar severas infecciones vaginales y las grasas pueden romper un forro.


19. No hay ningún riesgo de embarazo. Si ella traga el semen, los ácidos estomacales lo destruirán. De hecho, es un método anticonceptivo muy eficaz, y una fuente de placer que rivaliza seriamente con el sexo vaginal.


20. Una de las sensaciones que más placer le provoca a un hombre es que el pene ingrese en la boca de su amante tan profundamente como sea posible. La famosa "garganta profunda", que es básicamente que se la meta entera, casi incluyendo los huevos, es algo muy difícil de lograr, ya que depende del tamaño del chorizo en cuestión como de las ganas de vomitar que ella pueda sentir... incluso si te la chupa con el estómago vacío. Solo con mucha práctica se puede hacer, y aún así no es garantía de que ella se sienta cómoda al hacerlo.


21. Cuando ella te la chupa, no forcés su cabeza hacia tu pija. Tampoco la agarrés de los pelos o de la nuca... simplemente dejá que haga lo suyo. De última podés hablar con ella sobre hacer esas cosas, y solo así será bien visto con ella.


22. Usar objetos para lograr más excitación en vos puede ser muy beneficioso para ambos. Una pluma para rozar la zona cercana al pene siempre da un gran estimulo para él, aunque puede darte cosquillas. Hielo, sus pezones, bolitas de vidrio, o incluso su voz pueden dar muy buenos resultados.


23. Como parte del placer oral pueden probar con la estimulación anal, llevando sus dedos a la zona, acariciando tu ano y jugando con meter sus dedos. También sirve el "beso negro", que consiste simplemente en llevar el estímulo oral a dicha zona. No es una pérdida de la virilidad el intentarlo, ya que muchos varones lo hacen sin sentirse raros después. Eso sí, tanto antes como después es vital la higiene de la zona, ya que los riesgos de infección pueden existir.


24. La respiración de ella también se debe tomar en cuenta. Como solo podrá contar con su nariz, es mejor que respire con tranquilidad, así puede chupártela mejor y se evita la sensación de náuseas al metérsela más adentro.


25. Los testículos también participan del placer oral. Mientras ella los sostiene o masajea con sus dedos, puede quitar su boca de tu pene y lamerlos suavemente, además de ponerlos en su boca. Es vital que no lo haga rápido ni que use sus dientes, ya que del placer al dolor habrá un solo paso.

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