Hay tantas fantasías sexuales como personas en el mundo. Bueno, quizás no tantas, pero lo que sí es verdad es que cada uno se ratonea con diferentes situaciones. Muchos dicen que las fantasías funcionan cuando se las deja en ese estado: sólo como fantasías, nunca llevándolas a cabo. Pero, ¿qué pasa cuando decidimos hacer realidad nuestros sueños eróticos?
La experta en relaciones Trcey Cox explica en el diario inglés Daily Mail: "Si estás planeando llevar a cabo algo que funciona perfectamente en tu imaginación, tenés que tener en cuenta que el resultado puede no ser el esperado. Hay algunas fantasías que pueden causar grandes problemas en la pareja".
Cuatro fantasías que funcionan en la vida real
Juegos de ataduras: siempre y cuando se charle con la pareja hasta qué punto están dispuestos a llegar, atar alguna parte del cuerpo (manos, por ejemplo) o atarse a la cama puede ser una experiencia excitante. La premisa es atar suavemente, sin causar dolor.
Sexo en público: si bien es ilegal, podés hacerlo siempre y cuando sean discretos y no se saquen toda la ropa. Una buena idea es hacerlo en un auto estacionado, y si no se animan a hacerlo completo, al menos pueden mimarse (léase, sexo oral).
Nalgadas: ésta sería la versión suave del sadomasoquismo. Las nalgadas son lo suficientemente atrevidas como para sacudir la rutina sexual. Otra vez, si el dolor aparece y no te gusta, comunicalo. Podés usar los látigos que se consiguen en los sex shops o simplemente golpear con la mano.
Juegos de roles: si vos y tu hombre soportan las risas, los juegos de roles son muy excitantes. Hay muchísimas posibilidades: de colegiala y profesor, de policía y ladrón, de comehombres y él de inexperto... Dejá volar tu imaginación.
Las fantasías que pueden salir mal
Tríos: cualquier fantasía que involucre a un tercero tiende a funcionar terrible. Uno suele pensar que el sexo se puede separar del amor, pero en la práctica esto no sucede. Los celos pueden destruir a la pareja. Una opción más segura, si es que les gusta pensar en un tercero en la cama, es que mientras lo hacen miren porno. De esta manera, pensarán que alguien los está mirando. Otra es que se vayan diciendo cómo se imaginan a la mujer/hombre que está con ustedes en la cama, qué les hace, qué le hacen.
Videos sexuales: tenemos incontables ejemplos en la farándula argentina que prueban que esto puede ser un desastre. Solemos pensar que el video será íntimo, y de repente, sin saber cómo, se filtra. Además, nuestros cuerpos no se verán tan sexies como en las películas, por lo que puede ser un gran golpe a nuestro ego.
Tener sexo con un hombre 'prohibido': acostarte con tu jefe o con el novio de tu mejor amiga puede sonar excitante, pero usualmente estos encuentros terminan con separaciones y una sensación de culpa insoportable. Mejor seguir fantaseando.
Sexo con un extraño: irte del boliche con ese bombonazo que hace cinco minutos conociste puede no salir de la mejor manera. Con grandes cantidades de alcohol encima (lo que te desinhibe), lo más compun que pase es que él no tenga una erección y que vos no llegues al orgasmo. Ni hablar del malestar del día siguiente, y peor si se olvidaron de usar preservativo.
La experta en relaciones Trcey Cox explica en el diario inglés Daily Mail: "Si estás planeando llevar a cabo algo que funciona perfectamente en tu imaginación, tenés que tener en cuenta que el resultado puede no ser el esperado. Hay algunas fantasías que pueden causar grandes problemas en la pareja".
Cuatro fantasías que funcionan en la vida real
Juegos de ataduras: siempre y cuando se charle con la pareja hasta qué punto están dispuestos a llegar, atar alguna parte del cuerpo (manos, por ejemplo) o atarse a la cama puede ser una experiencia excitante. La premisa es atar suavemente, sin causar dolor.
Sexo en público: si bien es ilegal, podés hacerlo siempre y cuando sean discretos y no se saquen toda la ropa. Una buena idea es hacerlo en un auto estacionado, y si no se animan a hacerlo completo, al menos pueden mimarse (léase, sexo oral).
Nalgadas: ésta sería la versión suave del sadomasoquismo. Las nalgadas son lo suficientemente atrevidas como para sacudir la rutina sexual. Otra vez, si el dolor aparece y no te gusta, comunicalo. Podés usar los látigos que se consiguen en los sex shops o simplemente golpear con la mano.
Juegos de roles: si vos y tu hombre soportan las risas, los juegos de roles son muy excitantes. Hay muchísimas posibilidades: de colegiala y profesor, de policía y ladrón, de comehombres y él de inexperto... Dejá volar tu imaginación.
Las fantasías que pueden salir mal
Tríos: cualquier fantasía que involucre a un tercero tiende a funcionar terrible. Uno suele pensar que el sexo se puede separar del amor, pero en la práctica esto no sucede. Los celos pueden destruir a la pareja. Una opción más segura, si es que les gusta pensar en un tercero en la cama, es que mientras lo hacen miren porno. De esta manera, pensarán que alguien los está mirando. Otra es que se vayan diciendo cómo se imaginan a la mujer/hombre que está con ustedes en la cama, qué les hace, qué le hacen.
Videos sexuales: tenemos incontables ejemplos en la farándula argentina que prueban que esto puede ser un desastre. Solemos pensar que el video será íntimo, y de repente, sin saber cómo, se filtra. Además, nuestros cuerpos no se verán tan sexies como en las películas, por lo que puede ser un gran golpe a nuestro ego.
Tener sexo con un hombre 'prohibido': acostarte con tu jefe o con el novio de tu mejor amiga puede sonar excitante, pero usualmente estos encuentros terminan con separaciones y una sensación de culpa insoportable. Mejor seguir fantaseando.
Sexo con un extraño: irte del boliche con ese bombonazo que hace cinco minutos conociste puede no salir de la mejor manera. Con grandes cantidades de alcohol encima (lo que te desinhibe), lo más compun que pase es que él no tenga una erección y que vos no llegues al orgasmo. Ni hablar del malestar del día siguiente, y peor si se olvidaron de usar preservativo.
2 comentarios - Fantasías que funcionan en la vida real
Gracias por compartir
Y hace unos años, viviamos en un piso 10 y enfrente habia pintores, que primero vieron a mi sra.en bola....al darme cuenta sin que ella sepa de eso, me lo coji en el living, cerca del balcon....les juro que los tipos estaban duros y yo al palo como nunca....
Ahora lo hacemos frente a la cam en un chat swinger....
ahora quiseramos experimentar con dogging en baires, pero no sabemos con quienes contactarnos..
abrazo y buenas las recomendaciones