El boom de los videos eróticos

La olla se destapó con el video hot de Florencia Peña, pero ella no fue la primera. Antes vimos a Cinthia Fernández, Silvina Luna, Chachi Telesco y hasta internacionales como Pamela Anderson, Kim Kardashian y Paris Hilton. Pero esta tendencia no es exclusiva de los famosos, también los desconocidos se suman a esta nueva moda de filmar su intimidad. ¿Morbo, ganas de experimentar cosas nuevas o simple exposición desmedida?

"Grabarse con la pareja teniendo relaciones sexuales y luego ver ese video juntos, para algunas personas es una experiencia sumamente sensual y excitante", dice la sexóloga Alessandra Rampolla en su sitio web, UniversoAlessandra.com. "Grabarnos en la intimidad y ver cómo es nuestro propio desempeño, puede ser una muy buena manera de conocernos y aprender", agrega.

Rampolla explica que la mayor parte de los que se filman durante algún encuentro sexual lo hacen por pura curiosidad. "El deseo de cumplir una fantasía sexual o de complacer a la pareja son dos de las razones primordiales para decidir filmar o dejarse filmar", dice. Hasta aquí, todo indica que esta práctica no tiene aspectos negativos. Pero siempre hay que mirar más de cerca.


"Hay que tener mucho cuidado porque filmarse encierra muchos peligros, que no son para nada placenteros. Hoy la intimidad cobra un significado diferente, y son pocas las cosas que permanecen en el plano puramente “íntimo”, debido a la proliferación de los sitios para subir videos y las páginas sociales", aclara la reconocida sexóloga, y advierte: "Para grabar un video sexual hay tener muchísima confianza en la pareja, si no queremos que nuestras imágenes estén al alcance, literalmente, de todo el mundo".


¿Te imaginás ver tu propio video en la web? Horror.



En definitiva, como explica Alessandra, los riesgos de esta práctica, de hecho, no se deprenden de la práctica en sí misma, que es grabarse en un acto íntimo, sino en la huella imborrable de este material. "También hay que tener en cuenta la amenaza que representa ese vídeo si se rompe la relación de pareja, ya que podría terminar en cualquier página de Internet", cuenta.

Si ya estás convencida de que querés filmarte, entonces da rienda suelta a tu imaginación. Pero, si por el contrario, lo estás charlando con tu pareja, es importante que tomes ciertos recaudos:

Si no están convencidos de hacerlo, entonces no lo hagan.
Hablen sobre los riesgos con sus parejas.
Asegúrense de conservar el original y de que no haya copias.