Creo que todos aquellos que se consideran porno adictos, deben conocer el nombre de John Stagliano, ya que su nombre está escrito con letras doradas en la historia de la pornografía.
Buttman como es su apodo, viene de su fijación por los culos, como el mismo lo dice, no es extraño ver en sus películas como se clava de cabeza entre las piernas de las actrices y pide que se sienten en su cara para tener la mejor vista de lo que le apasiona hasta casi asfixiarse. Malo como actor, decide dedicarse a dirigir, pronto crea su propia casa productora, Evil Angel, y nace un nuevo género en las películas porno, el Gonzo, y no vayan a pensar que es el la marioneta muppet, casi todas las escenas de sexo actualmente están rodadas en este estilo, en donde el director es a la vez cámara y se involucra dentro de la acción que llevan a cabo los actores. Ha tenido a grandes directores y actores dentro de sus filas como Rocco Siffredi, Nacho Vidal, Belladona, Joey Silvera, Erik Everhard, Jules Jordan hasta el ya desaparecido John Leslie.
Pero hace poco cuando estaba haciendo mi post “Actores y actrices fallecidos”, incluí la historia de Kristy Lynn y tropecé con una parte de la historia del Buttman que no encontramos en Wikipedia.
En 1994, John Stagliano dirigió a Kristi Lynn en una película y se enamoró de ella. Concertó una cita con la actriz y, un mes después, estaba conviviendo con Kristi en su casa de California. Fue una relación breve, pero no así su amistad. Incluso después que no siguieran unidos sentimentalmente, Kristi siguió compartiendo casa con John durante un año, en una de esa demostraciones de liberalismo extremo que tiene la vida de quienes trabajan en el porno. Kristi Lynn, una chica de 24 años que había soportado una dura infancia y adolescencia, tenía ambiciones de ser cantante. No tenía mala voz y sí muchos contactos. Un día concertó una cita con el actor Marc Wahlberg para producir un vídeo musical que le abriría camino en el mundo de la música. Vestida para la ocasión, Kristi esperó la confirmación de la cita, pero esta nunca llegó. Rabiosa por ver cómo sus esperanzas de un futuro mejor se difuminaban en unas horas, cogió uno de los coches de John y salió a dar una vuelta por la carretera de Los Virgines. Horas después, la policía encontró su cuerpo entre el amasijo de hierros en el que había quedado el vehículo tras salirse de la carretera.
Aquello ocurrió el 7 de diciembre de 1994 y sumió a Stagliano en una profunda depresión. Abrumado por el sentimiento de culpa y todavía prendado de Kristi, John decidió suicidarse. Pero los suicidios en el porno no son como en la vida real. Salvo la opción de volarse la tapa de los sesos, que practicaron varias actrices a lo largo de la historia, la mayoría de los suicidios que han acaecido en la industria de entretenimiento para adultos ha tenido un componente relacionado con el placer, manifestado principalmente en sobredosis de drogas. Stagliano no tomaba drogas, por lo que eligió una muerte más sórdida. Se marchó a Brasil, país al que viajaba una vez al año para rodar películas, y contrató una prostituta travesti para que le penetrara analmente. Cuando volvió a Los Angeles, Stagliano se sometió a las pruebas del Sida. No obtuvo ninguna sorpresa. Estaba infectado por la enfermedad mortal.
Así que decidió morir lentamente, sin dejar de hacer lo que ya hacía: trabajar como director en películas porno. Pocos meses más tarde, estalló en la industria del cine X americana la primera gran epidemia de Sida, provocada por el actor Marc Wallice. El virus que portaba Wallice contagió a media docena de actrices, entre ellas la robusta Tricia Deveraux, una actriz con espléndidos pechos naturales que trabajaba como secundaria en filmes a mediados de los 90. Stagliano llamó a Tricia, con la que había trabajado en filmes anteriores, y le dio una serie de consejos para afrontar la enfermedad. Ambos siguieron quedando y descubrieron que tenían muchas cosas en común: los dos eran de Chicago, tenían gustos musicales parecidos y una personalidad similar. No tardaron en enamorarse. En 1999 se casaron y un par de años después Tricia dio a luz a la primera hija surgida de la unión, una hermosa niña llamada Isabella Joi que, pese a ser hija de padres portadores del virus del Sida, no tiene anticuerpos de la enfermedad.
John "Buttman" Stagliano
Buttman como es su apodo, viene de su fijación por los culos, como el mismo lo dice, no es extraño ver en sus películas como se clava de cabeza entre las piernas de las actrices y pide que se sienten en su cara para tener la mejor vista de lo que le apasiona hasta casi asfixiarse. Malo como actor, decide dedicarse a dirigir, pronto crea su propia casa productora, Evil Angel, y nace un nuevo género en las películas porno, el Gonzo, y no vayan a pensar que es el la marioneta muppet, casi todas las escenas de sexo actualmente están rodadas en este estilo, en donde el director es a la vez cámara y se involucra dentro de la acción que llevan a cabo los actores. Ha tenido a grandes directores y actores dentro de sus filas como Rocco Siffredi, Nacho Vidal, Belladona, Joey Silvera, Erik Everhard, Jules Jordan hasta el ya desaparecido John Leslie.
Pero hace poco cuando estaba haciendo mi post “Actores y actrices fallecidos”, incluí la historia de Kristy Lynn y tropecé con una parte de la historia del Buttman que no encontramos en Wikipedia.
Kristy Lynn
En 1994, John Stagliano dirigió a Kristi Lynn en una película y se enamoró de ella. Concertó una cita con la actriz y, un mes después, estaba conviviendo con Kristi en su casa de California. Fue una relación breve, pero no así su amistad. Incluso después que no siguieran unidos sentimentalmente, Kristi siguió compartiendo casa con John durante un año, en una de esa demostraciones de liberalismo extremo que tiene la vida de quienes trabajan en el porno. Kristi Lynn, una chica de 24 años que había soportado una dura infancia y adolescencia, tenía ambiciones de ser cantante. No tenía mala voz y sí muchos contactos. Un día concertó una cita con el actor Marc Wahlberg para producir un vídeo musical que le abriría camino en el mundo de la música. Vestida para la ocasión, Kristi esperó la confirmación de la cita, pero esta nunca llegó. Rabiosa por ver cómo sus esperanzas de un futuro mejor se difuminaban en unas horas, cogió uno de los coches de John y salió a dar una vuelta por la carretera de Los Virgines. Horas después, la policía encontró su cuerpo entre el amasijo de hierros en el que había quedado el vehículo tras salirse de la carretera.
Películas de Kristy Lynn
Aquello ocurrió el 7 de diciembre de 1994 y sumió a Stagliano en una profunda depresión. Abrumado por el sentimiento de culpa y todavía prendado de Kristi, John decidió suicidarse. Pero los suicidios en el porno no son como en la vida real. Salvo la opción de volarse la tapa de los sesos, que practicaron varias actrices a lo largo de la historia, la mayoría de los suicidios que han acaecido en la industria de entretenimiento para adultos ha tenido un componente relacionado con el placer, manifestado principalmente en sobredosis de drogas. Stagliano no tomaba drogas, por lo que eligió una muerte más sórdida. Se marchó a Brasil, país al que viajaba una vez al año para rodar películas, y contrató una prostituta travesti para que le penetrara analmente. Cuando volvió a Los Angeles, Stagliano se sometió a las pruebas del Sida. No obtuvo ninguna sorpresa. Estaba infectado por la enfermedad mortal.
Tricia Deveraux
Así que decidió morir lentamente, sin dejar de hacer lo que ya hacía: trabajar como director en películas porno. Pocos meses más tarde, estalló en la industria del cine X americana la primera gran epidemia de Sida, provocada por el actor Marc Wallice. El virus que portaba Wallice contagió a media docena de actrices, entre ellas la robusta Tricia Deveraux, una actriz con espléndidos pechos naturales que trabajaba como secundaria en filmes a mediados de los 90. Stagliano llamó a Tricia, con la que había trabajado en filmes anteriores, y le dio una serie de consejos para afrontar la enfermedad. Ambos siguieron quedando y descubrieron que tenían muchas cosas en común: los dos eran de Chicago, tenían gustos musicales parecidos y una personalidad similar. No tardaron en enamorarse. En 1999 se casaron y un par de años después Tricia dio a luz a la primera hija surgida de la unión, una hermosa niña llamada Isabella Joi que, pese a ser hija de padres portadores del virus del Sida, no tiene anticuerpos de la enfermedad.
John y Karen Stagliano (Tricia cambio su nombre al casarse) en la actualidad (2011)
10 comentarios - John "Buttman" Stagliano, el VIH le trajo el amor.
Gracias por comentar...
Gracias
Tienes que ser FULL USER, y diariamente te dan 10 puntos para que los repartas en los posts que mas te gustan. Eso es lo que he leido aqui, pero yo soy novato asi que no se a ciencia cierta como funciona... 🙄 🙄 🙄
me no me hagas perder el tiempo....pense q habia pornooo !!!!
🤤 🤤 🤤 🤤 🤤 🤤
SI TENES LA INFO POSTEALA! 😉
SALUDOS!!!