No sé que es, tampoco sé si quiero saber, pero hay algo en la piel de una mujer que me estremece.
Me hace perder el control. Mis manos cobran vida propia.
Mis labios se humedecen pero tiene sed.
Mí propia piel se eriza y busca el contacto mutuo. Ese contacto que da calor.
Hay un intercambio de energía, no puedo describirlo, es una sensación que va más allá de las palabras.
Es acaso una enfermedad ? Tal vez un vicio ?
Más contacto tengo con la piel de una mujer, más necesidad siento de tocar, palpar, acariciar, besar, lamer, y todo lo que pueda hacer mí cuerpo con ella.
Algo se manifiesta entre las yemas de mis dedos y el contorno de mí ocasional amada.
Me han tocado mujeres poco receptivas, no las culpo, tal vez fui yo, o tal vez fue que faltó la química que encendiera la pasión.
Pero para mí suerte, la gran mayoría de las veces esa pasión cobró vida, cobró forma y despabiló todos mis sentidos.
Yo que transito algunas décadas de existencia, siento que mis fuerzas se renuevan cuando estoy con una mujer.
Seré alguna clase de vampiro que necesita de la energía que transmiten las mujeres ?
Que bueno que no soy dañino como los señores de la noche.
Y creo que no hago daño porque también siento como mí circunstancial compañera disfruta.
A veces puede fallar, pero de vuelta, tengo mucha suerte en que esas sean las menos.
Y esta es otra arista de mí perdición, o tal vez mí bendición.
El verlas gozar, no hay nada más inspirador y excitante que una mujer que se relaja y goza.
Ellas sienten mucho más que nosotros, y cuando lo hacen se nota, y mucho.
Su piel se eriza de una forma que electrifica mis dedos.
Su cuerpo se arquea de una forma sin igual.
Movimientos suaves que pueden volverse bruscos.
Cierran los ojos y gozan. Y ese goce me da fuerzas. Quiero seguir, que nunca acabe ese momento.
Sus manos también se activan, y me quieren dirigir, y yo les hago caso, pero a su tiempo.
Mis manos, pero también mis labios, mi lengua, mis brazos, mis piernas, mí cabello, todo mí ser quiere atrapar esa energía que brota de una dama que goza.
No hay rincón de su cuerpo que se salve, a menos que a ella la incomode.
Desde el extremos de sus cabellos hasta los dedos de sus pies son para mí una atracción que no puedo resistir.......
Cuando estoy con una mujer, no existe el mundo exterior.
Nada me importa, estoy en el mejor de los mundos.
Me hace perder el control. Mis manos cobran vida propia.
Mis labios se humedecen pero tiene sed.
Mí propia piel se eriza y busca el contacto mutuo. Ese contacto que da calor.
Hay un intercambio de energía, no puedo describirlo, es una sensación que va más allá de las palabras.
Es acaso una enfermedad ? Tal vez un vicio ?
Más contacto tengo con la piel de una mujer, más necesidad siento de tocar, palpar, acariciar, besar, lamer, y todo lo que pueda hacer mí cuerpo con ella.
Algo se manifiesta entre las yemas de mis dedos y el contorno de mí ocasional amada.
Me han tocado mujeres poco receptivas, no las culpo, tal vez fui yo, o tal vez fue que faltó la química que encendiera la pasión.
Pero para mí suerte, la gran mayoría de las veces esa pasión cobró vida, cobró forma y despabiló todos mis sentidos.
Yo que transito algunas décadas de existencia, siento que mis fuerzas se renuevan cuando estoy con una mujer.
Seré alguna clase de vampiro que necesita de la energía que transmiten las mujeres ?
Que bueno que no soy dañino como los señores de la noche.
Y creo que no hago daño porque también siento como mí circunstancial compañera disfruta.
A veces puede fallar, pero de vuelta, tengo mucha suerte en que esas sean las menos.
Y esta es otra arista de mí perdición, o tal vez mí bendición.
El verlas gozar, no hay nada más inspirador y excitante que una mujer que se relaja y goza.
Ellas sienten mucho más que nosotros, y cuando lo hacen se nota, y mucho.
Su piel se eriza de una forma que electrifica mis dedos.
Su cuerpo se arquea de una forma sin igual.
Movimientos suaves que pueden volverse bruscos.
Cierran los ojos y gozan. Y ese goce me da fuerzas. Quiero seguir, que nunca acabe ese momento.
Sus manos también se activan, y me quieren dirigir, y yo les hago caso, pero a su tiempo.
Mis manos, pero también mis labios, mi lengua, mis brazos, mis piernas, mí cabello, todo mí ser quiere atrapar esa energía que brota de una dama que goza.
No hay rincón de su cuerpo que se salve, a menos que a ella la incomode.
Desde el extremos de sus cabellos hasta los dedos de sus pies son para mí una atracción que no puedo resistir.......
Cuando estoy con una mujer, no existe el mundo exterior.
Nada me importa, estoy en el mejor de los mundos.
9 comentarios - Oda a la piel de las mujeres
Gracias bonita !!! Por pasar y comentar. Un beso grande 😘
Gracias por pasar hermosa. Me alegro que te haya gustado 😘 😘
Uuuufff las palabras son electrizantes, las imágenes cautivantes.... No quiero imaginar lo que será el contacto piel apiel 🔥 🔥 🔥
😘 😘 😘
+10
MUJER:""LA MUJER ES UN MANGAR DIGNO DE LOS DIOSES CUANDO NO LO COCINA EL DIABLO "" Shakesp (Soy solo un mortal comun por ello le ofresco un poeta)
Ojala le guste Brother y Mil gcias
mis diez, todos tuyos!
😚