Hay veces (muy vergonzosas veces) en las que te agarra tal calentura que le das a lo primero que se te cruce, y esto fue lo que le pasó a nuestra dulce Ally Ann, que estaba en uno de esos barrios aburridos, llenos de viejos. Pero Ally tiene mucha imaginación y supo convertir un menos en un más: menos aburrimiento para el viejo, más poronga para su conchita ardiente.
Hay veces (muy vergonzosas veces) en las que te agarra tal calentura que le das a lo primero que se te cruce, y esto fue lo que le pasó a nuestra dulce Ally Ann, que estaba en uno de esos barrios aburridos, llenos de viejos. Pero Ally tiene mucha imaginación y supo convertir un menos en un más: menos aburrimiento para el viejo, más poronga para su conchita ardiente.
2 comentarios - Cuando el calorcito no se aguanta