Zorrita de San Isidro me muestra la alta conchita apretada

Nada me gusta más en la vida que ver cómo esas zorritas que se la dan de chicas bien terminan siendo unas flores de yeguas en celo que lo único que quieren es tener un cacho de carne bien metido hasta el fondo de la concha. Ese es el caso de Camila, esta trola de San Isidro que se la da de cheta cuando en realidad es una atorranta regalada que al toque de conocerme se me tiró encima para que me la cogiera. Tan borracha estaba esa noche la minita que no me costó nada empomármela por todos los agujeros. Así de pasada de copas y todo, Camila se acuerda de lo bien que la pasó y por eso ahora se la pasa mandándome fotos de ella para que podamos repetir esa noche de sexo bien salvaje lo antes posible.

















otras amigas