¡Diablo diabólico! (Power x Lector)
Autor: Renocral
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https://archiveofourown.org/users/Renocral/pseuds/Renocral
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Sentado en el suelo, estabas demasiado cansado como para intentar siquiera arrastrarte hasta tu silla. Aunque te las arreglaste para doblar tu uniforme cuidadosamente a tu lado. Pasaban una película a la que no le prestaste ni la mitad de atención, dormitando cada segundo.
De repente, sonó tu teléfono fijo. Nadie te llamaba nunca, esto sólo podía significar una cosa...
―Mierda... ¡Justo me acabo de sentar!
(...)
Miraste el hotel en el que residía el demonio. Debe ser bastante fuerte si siete miembros de la División 4 fueron convocados para acabar con él. Mirando hacia allí, viste a Hayakawa y sus dos nuevos compañeros de habitación. Ese día parecía especialmente irritado con ellos. Te preguntaste por qué, pero conociendo a Denji y Power... Podría ser cualquier cosa.
―¿Hmm? ¿Has dormido lo suficiente, T/N? ―Miraste a tu izquierda a Himeno.
―¿Tengo bolsas debajo de los ojos o algo así? ―No te sorprendería.
―Tú lo has dicho, no yo―. Ella se encogió de hombros.
Pusiste los ojos en blanco
―No, no lo he hecho. Es un poco difícil cuando me llaman constantemente para ataques de demonios.
―Oh, pobrecito... ―Ella arrulló―. Siempre puedes dormir conmigo, ¿sabes~?"
Volviste a poner los los ojos en blanco, riéndote del humor sucio de Himeno
Aki empezó a gritar. ¿Algo sobre una broma? Himeno se acercó a calmarlo antes de proponer una apuesta. Quien matara al primero al demonio se ganaría un beso de la mujer, dijo que era una forma de "subir la moral". Te reíste entre dientes por la reacción de Denji y Arai a esto antes de que se te escapara un bostezo.
―Mejor me aguanto y pongo a trabajar, supongo... tengo demonios que matar ―Resolviste.
[...]Dentro del hotel, Denji corrió hacia adelante para encontrar al demonio más rápido y Arai lo persiguió. Decidiste quedarte atrás con el resto del escuadrón.
―¿Así que, Aki? ―Empezaste―.. ¿Qué te tiene tan molestos hoy?
Aki miró a Power, y dicha demonio que tenía los brazos detrás de la cabeza rápidamente apartó la mirada. Podías ver la vena abultada en la cabeza de Aki.
―Preferiría... no hablar de eso ―gruñó.―Claro... ―Decidiste mejor no molestar a ese oso por mucho tiempo, no vaya a ser que fuera a abalanzarse sobre Power y tratara de matarla.
Miraste a tus otros compañeros de equipo. Himeno parecía estar bien, pero, ¿Kobeni? La pobre chica parecía que ya estaba al borde de su paciencia. Estabas a punto de consolarla cuando un alboroto te distrajo. Denji y Arai discutían mientras forcejeaban entre si. Power corrió primero, emocionada ante la perspectiva de una pelea, Kobeni corrió detrás de ella.
Suspiraste profundamente antes de mirar a Aki y Himeno.
―Yo me encargaré de ellos...
Lograste alejar a Arai de Denji con bastante facilidad.
«Supongo que la presencia de su superior suavizó esa actitud suya», pensaste:
―¿Pueden ustedes dos, idiotas, dejar las olimpiadas de ego que tienen ahora mismo? Tenemos que luchar contra un demonio, no entre nosotros.
Denji argumentó su inocencia por un segundo antes de que Power lo interrumpiera.
―Je, técnicamente ¡ESTÁ luchando contra un demonio! ¡Denji es un híbrido después de todo!
Te masajeaste la cabeza, ya sentías que se acercaba una migraña.
―Sabes a qué me refiero, dejen de actuar como idiotas para que podamos hacer este trabajo y yo pueda descansar un poco.
Power chasqueó la lengua.
―¡Como si me importaran las penurias de un humano!
Tu ojo se crispó.
―Excepto que soy tu superior (Ella inmediatamente argumentó en contra de esto) lo que significa que tengo voz y voto en si eres o no útil para este escuadrón. Y en caso de que no lo seas... ―Hiciste el gesto de cortar el cuello. Power se quedó en silencio ante esto―. ¿Qué? ¿No más comentarios? ¡Genial! Ahora cállate, sé un buen demonio y encuentra al otro demonio para que podamos matarlo y yo pueda dormir un poco. ―La fulminaste con la mirada para que quedara claro el punto.
Power se marchó con fuertes pisadas, murmurando lo estrictos y molestos que tú y Aki estaban siendo hoy.
―La ironía está completamente perdida en eso ―comentó Aki
―¿Crees que fui un poco estricto con ella? ―Normalmente no eras tan imbécil, ¡es solo que la falta de sueño cambia a un hombre!
―No te preocupes por eso, volverá a ser la misma de siempre después de unos treinta segundos.
Gruñiste en respuesta.
[...]
Tras unos minutos más de exploración, y un demonio muerto (una cabeza con manos ), Power se regodeó sobre cómo el demonio le tenía tanto miedo que se quedó congelado en el aire o lo que fuera, no estabas escuchando mucho. Himeno rechazó esta idea y le dijo que era su habilidad de demonio.
―Hmm. ¿Estás segura de que es una buena idea estar parloteando sobre tu poder en mi presencia, humana? ―cuestionó Power.
―No veo por qué no, hace que el trabajo en equipo sea mejor, ¿no? Además, tengo algunos trucos bajo la manga, ¡así que no me preocupa.
―¿De verdad? ―Power sonrió antes de crear una espada de sangre y apuntarla a Kobeni, que dio un saltó hacia atrás en estado de shock―. ¿Y qué harías si intentara matarla entonces?
Himeno la detuvo de inmediato activando su habilidad para agarrar a Power por el cuello.
―Guarda el arma, si empiezas a portarte mal tengo todo el derecho de matarte ―afirmó.
Power intentó agarrar lo que fuera que la sujetaba, pero era el brazo del demonio fantasma, así que acabó agitando los brazos.
Himeno la bajó un segundo después.
―No quiero tener que hacer algo así otra vez, así que llevémonos bien, ¿de acuerdo? ―La mujer sonrió.
Mientras todos los demás continuaban adelante escaleras arriba, Denji sonreía al no estar en problemas. Por una vez, decisdiste se mezquino.
―¿Ahora qué aprendimos? ―Sonreíste.
Power te fulminó con la mirada.
―¡Cállate, humana! ¡No quiero escuchar tu voz ahora mismo!
Ella se marchó pisando fuerte de nuevo, murmurando sobre cómo te devoraría a ti y a Himeno en algún momento.
―¡Escuché eso! ―gritaste, y Power se puso rígida antes de apretar los dientes y continuar escaleras arriba.
Te reíste antes de darte cuenta de algo. Power subía las escaleras, lo que significaba que incluso con su camisa desabrochada, todavía tenías una buena vista de su apretado trasero. Ella sabía cómo lucir pantalones, tenías que admitirlo.
«Espera un minuto, ¡¿en qué diablos estoy pensando?! ¡Es un maldito demonio que posee un cadáver humano! ¿Me estoy volviendo loco?»
Tomaste aire para calmarte, perturbado por tus pensamientos de hace un segundo. De ninguna manera estabas pensando en Power de esa manera.
Un segundo después, Arai pasó corriendo a toda prisa. Con una mirada de confusión, alcanzaste al grupo.
―Uh, ¿qué pasa con Arai?
―¿Eh?―
Miraste detrás de ti, el que había hecho el ruido era Arai, en lo alto del tramo de las escaleras...
Todos se quedaron boquiabiertos, Himeno fue la primera en hablar después de un minuto de tenso silencio.
―Arai... ibas a bajar las escaleras... ¿verdad?"
Volviste a masajearte la cabeza mientras te quejabas. Fue solo tu mala suerte brindándote una situación como esta. Ya estabas irritado, y parecía que el destino quería enojarte aún más hoy.
―Mierda...
[...]
Habían pasado unas horas y no encontraban forma de escapar del octavo piso. Los ascensores no funcionaban, las escaleras estaban en bucle, ¡y ni siquiera atravesar el maldito techo funcionaba!
Kobeni intentó beber agua del inodoro, Arai estaba teniendo un ataque de pánico en otra habitación y Denji dormía profundamente en una cómoda cama de hotel. No perdiste tiempo en seguir sus pasos. Aki intentó detenerte, afirmando que el demonio podía atacar en cualquier momento, pero le aseguraste que estarías bien.
Y ahora estabas durmiendo un poco, algo que necesitabas, en una habitación lejos de todos los demás. Por supuesto, el peligro de hacer esto era alto, ya que había un demonio rondando por todo el edificio, pero si decidía atacarte en cualquier momento, ¡te las arreglarías!
Estabas en paz, descansando con una sonrisa de satisfacción. Pero claro, nada bueno puede durar para siempre...
Tu puerta se abrió de golpe y chocó contra la pared. Te levantaste de un salto sobresaltado y tus instintos de lucha o huida te hicieron estar a punto de atacar al intruso antes de ver quién era.
―¡¿Power?!
El demonio miró a su alrededor y te vio medio despierto antes de buscar alrededor de la habitación. No te prestó atención.
―¡O-Oye! ¿Qué diablos estás haciendo aquí? ¡Estoy tratando de dormir! ―gritaste
―¡Oh, ¿quieres callarte, humano?! ¡Estoy buscando comida!
¿Comida? ¿Estaban abasteciéndose de recursos ahí fuera? En cualquier caso, ya habías revisado este lugar cuando entraste por primera vez, así que sabías a ciencia cierta que no había nada aquí.
―¡No hay nada aquí, ya lo revisé! ¡Así que puedes salir de aquí, ―Presionaste.
―¡Si crees que voy a creerme eso, entonces eres más tonto de lo que pareces! ¡Probablemente solo estás tratando de ocultarlo todo para ti! ―argumentó el demonio.
Gruñiste, harto de esta chica y su actitud. No estabas de humor para esta mierda.
—Escucha, si hubiera algo útil aquí, ¡se lo habría dado a los demás mucho antes! ¡El hecho de que tu egoísta culo solo se preocupe por sí mismo no significa que yo también sea ese tipo de persona! ¡Ahora vete de una vez!
Power continuó gritándote, su voz era chirriante, empeorando tu dolor de cabeza a cada segundo. Estabas cansado de esto, cansado de ella, ya era hora de que alguien le bajara los humos...
La habitación se oscureció, una presencia opresiva llenó todos los rincones. Power se quedó en silencio al instante, pero esto no te satisfizo en absoluto. Ella fue empujada hacia atrás, inmovilizada contra la pared por una fuerza invisible y sin aliento, y mientras trataba de recuperar el aliento, te acercaste con una mirada dura.
—No deberías haber dado por sentada mi paciencia. Ahora me has cabreado...
—¡Ngh...! ¿Qué estás haciendo, humano? ¡¡Libérame!! —Power gritó, luchando por escapar de su captor invisible.
—Nah... creo que tengo algo más planeado para ti... —Power palideció, ¿de qué diablos podrías estar hablando?
—¡¿Q-Qué...?! ¡¿Qué quieres decir con eso?!"
Le acariciaste la cara, llevando tu mano por su mejilla y debajo de su barbilla para levantar su cabeza. Miraste el símbolo en forma de cruz de sus pupilas y tomaste una decisión.
—Oye, he estado bastante estresado hoy, y tú y tus hábitos no han sido de mucha ayuda para aliviarlo... —La envolviste con el brazo y tiraste de sus caderas hacia adelante, ella jadeó cuando sus cuerpos inferiores se tocaron, y sintió la manifestación de tus recientes sentimientos hacia ella presionando su muslo. Pudo sentir como aquello palpitaba bajo tus pantalones y un rubor gigante estalló en su rostro en medio segundo.
—H-Humano, ¿qué diablos crees que estás haciendo? ¡¡¡C-Cómo te atreves a presionar tu asqueroso pene contra mí!!! ¡Te mataré! ¡¡Déjame ir ahora mismo!! —gritó. Te reíste, encontrando esta reacción suya bastante linda y, curiosamente, ¿caliente?
«¿Qué demonios estoy haciendo?»
Pasaste la mano que estaba detrás de ella por debajo de su camisa, dándole lentos roces circulares en la espalda. Ella soltó un ruidito de sorpresa al principio de este gesto y luego trató de apartarse de ti de nuevo, sin conseguirlo.
«Podría meterme en un montón de problemas por esto...»
Presionaste tus labios contra los suyos, silenciando efectivamente sus protestas y gritos y haciéndola jadear y gemir en tu boca. Tu mano se deslizó debajo de sus pantalones, explorando su culo apretado y ella se sacudió bruscamente antes de que molieras tu bulto en su propia entrepierna, lo que te hizo gemir.
«Esto... esto es violación, ¿verdad? ¡Y también es una demonio! ¡Lo que significa que técnicamente estoy atacando a un cadáver! ¡¿Qué diablos estoy haciendo?!»
Power dejó escapar un pequeño suspiro cuando te frotaste contra ella, haciéndola sonrojar aún más. No podía creer que fuera a ser degradada por un maldito humano de todas las cosas. ¡Él debería haber estado adorando el suelo que ella pisaba, actuando como su esclavo! ¡Esto va en contra de las leyes de la naturaleza misma!
«¡Maldito sea! ¡No puedo liberarme sin importar lo que haga! ¡¿Cuál es siquiera su habilidad diabólica?!»
Power empezó a respirar con dificultad, gruñendo y haciendo todo lo que podía para al menos detener los besos. Se las arregló para apartar la cabeza de la tuya, dándole así tiempo para respirar.
—Tú... cómo te atreves... —Ella recuperó el aliento—. ¿¡Por qué eliges atacarme de esta manera!?
Te reíste de nuevo, su rostro enojado te excitó aún más.
—Porque eres linda y necesito un calmante para el estrés.
—¡¿Qué?!
—En las escaleras, le eché un vistazo a tu culo... —Apretaste dicha cosa debajo de sus pantalones, emitiendo un lindo ruido de ella—. Pensé que verte con esta luz era una locura, después de todo, eres un demonio, pero seguiste presionando mis botones, y eso me hizo querer ponerte en tu lugar aún más...
Power correspondió a tu mirada de desprecio con una mirada fulminante, no lo admitiría, pero el aura que emitías, le daba escalofríos...
—¡Puede que me tengas atrapada por ahora humano, pero cuando me liberes, estarás muerto!"
—¿Es así? Porque creo que estarás demasiado cansada para atacar en ese momento... —respondiste.
Le tomó un segundo registrar eso. ¿Cuánto tiempo planeabas hacerla pasar por esto?
—B-bueno, entonces solo gritaré y alertaré a los o- —La interrumpiste
—Esa es la cosa, no te daré la oportunidad...
Power sintió que se le estrechaba la garganta, entró en pánico y trató de mover los brazos, las piernas, ¡cualquier cosa! Se apretó con más fuerza hasta el punto de que apenas podía respirar, no lo suficiente como para dejarla inconsciente, afortunadamente. Aunque había un problema, no podía hablar.
T/N le robó la voz.
Ella tampoco sería capaz de gritar lo suficientemente fuerte para llamar la atención de los demás, las piernas le temblaban, apenas podía respirar y era muy consciente de tu mano frotando contra su trasero todavía, así como del bulto gigante presionando su propia entrepierna.
—No te preocupes, te soltaré. Justo en el momento en que estés a punto de correrte... —Sonreíste—. Quiero escuchar el sonido que haces.
En el segundo que terminaste tu oración, hundiste un dedo profundamente en su trasero. Todo el cuerpo de Power se estremeció y dejó escapar un grito estrangulado. Su agujero estaba húmedo, perfecto para lo que le ibas a hacer, se apretaba y aflojaba tanto a tu alrededor, y el sonido amortiguado de tu mano golpeándole el culo por debajo de sus pantalones solo te ponía más duro...
Se le llenaron los ojos de lágrimas, no porque estuviera angustiada, sino por el dolor que sentía en el culo. Nadie lo sabía, pero Power era muy sensible ahí abajo, ¡y que su cuerpo fuera tratado con rudeza de esa manera no era una experiencia divertida en absoluto!
Volviste a besarla, ahogando sus jadeos al hacerlo. Ella sintió calor, se notaba por la cantidad de sudor que se acumulaba en sus pantalones, su culo empezó estar especialmente húmedo.
Querías ver.
Rápidamente sacaste la mano de sus pantalones, dándole un segundo de alivio antes de ser sometida nuevamente a tu cruel asalto. Le bajaste los pantalones y la ropa interior a toda prisa, le diste la vuelta y sacaste su trasero, extendiendo sus suaves mejillas. Power te gruñó tanto como pudo.
—Je, para ser una chica que no se cuida, tienes un culazo bastante bonito~ —Bromeaste, Power respondió con un gruñido enojado, su trasero todavía le dolía por tu toqueteo anterior.
«Maldita sea T/N... ¡Solo espera a que me libere! ¡Jugaste con mi trasero y ahora vas a lamerlo?! ¡Ustedes los humanos realmente son animales repugnantes!»
Tenía tantas ganas de hablar, ¡pero lo que fuera que le agarraba el cuello no aflojaba! Pero cuando sumergiste tu cara en su culo sudoroso, todos y cada uno de los pensamientos se fueron por el desagüe.
Power dejó escapar un gemido inusual, que te impulsó a liberar tu polla y acariciarla. Los sonidos que hacías cuando tu lengua entraba y salía de su ojete, junto con sus gemidos estrangulados llenaron la habitación por completo. Esperabas por Dios que nadie entrara en ese momento, porque sinceramente estabas en el cielo.
«¡Mierda! ¡Este maldito humano! ¡Saca tu asquerosa lengua de mí!» Power se sintió mortificada. En ningún momento de la historia habría dejado que un humano, y mucho menos él, la lamiera así. Pero por más que lo intentó, no pudo escapar. No podía defenderse. Lo único que podía hacer era soportar la humillación de que su sensible ano fuera destrozado por tu lengua. Odiaba esto...
Ella realmente emitía gemidos constantes, no como los gruñidos de antes, lo que te sorprendió.
«¡Parece que está cediendo más rápido de lo que pensaba!»
Te inclinaste hacia atrás para echar un vistazo a tu descuidado trabajo. Tu lengua se hundió profundamente en ella, tanto que su agujero estaba listo para ser llenado por algo más grande en este punto. Sonreíste antes de ponerte de pie y frotar tu polla entre sus mejillas. Inclinándote cerca de su oído para susurrar algo.
—Veo que estás bastante mojada. Supongo que disfrutaste que un humano te limpiara el culo, ¿eh? ¿Qué pasó con toda esa charla de antes?
Trató de ahogar una respuesta, pero la silenciaste empujando lentamente tu punta dentro de ella. Todo el cuerpo de Power se sentía en llamas, ¡y su ritmo cardíaco estaba por las nubes! Estaba a punto de ser cogida por el culo y no había nada que pudiera hacer al respecto. Era vergonzoso, ¡maldita sea! Ella era la demonio de la sangre, ¿verdad? ¡La fuerte y hermosa Power! Entonces, ¿por qué se sentía tan malditamente indefensa aquí? Sentía lástima.
Esto era una pesadilla, nada más.
—¿Qué tal, Power? ¿Tienes algo que decirme antes de que me ponga a trabajar? —Soltaste un poco el agarre en su cuello, permitiéndole hablar de nuevo.
Power tomó grandes bocanadas de aire, su visión parecía mejorar un poco. Se giró hacia ti con una mirada extrañamente triste..
—No seas brusco...
¿Eh? ¿Escuchaste bien? ¿No gritó, no te insultó de ninguna manera? ¿Qué fue esto?
—¿Disculpa? —le preguntaste.
—No seas demasiado brusco... me duele mucho el culo... —dijo con la voz más tranquila que jamás habías escuchado de ella.
No podías creerlo, ¿estaba aceptando su destino así como así?
—¿Qué pasó con toda esa pelea de antes? ¿Ya te estás rindiendo? —Te miró mordiéndose el labio. Una sola lágrima rodó por su rostro y te dejó sin aliento—. Mierda... no estabas mintiendo, ¿eh? No sabía que eras muy sensible allí... —Te sentías como una mierda, lo cual era irónico considerando lo que acababas de hacer.
Power resopló.
—¿Al menos puedes permitirme mover mi cuerpo? Si tengo que ser sometida a esta tortura, debería tener derecho a moverme como quiera. ¡Odio estar atrapada contra esta pared! —despotricó.
Te tomaste mucho tiempo para pensarlo, era arriesgado. Ella podría abalanzarse sobre ti en cuanto la soltaras, todo dependería de quién fuera más rápido, ¿no?
—¿Cómo puedo confiar en que no me atacarás? —Ella sonrió ante el comentario.
—¡No deberías confiarle nada a un demonio, y aún así eres el estúpido idiota que quiere aparearse conmigo!
Ella tenía un punto
—Al diablo.
Liberaste tu habilidad y la sensación opresiva desapareció al instante. Power suspiró aliviado y se volvió hacia ti, que adoptaste una postura cautelosa.
—Tranquilízate, estúpido, no te mataré. ¡Por ahora, claro! —dijo, caminando hacia la cama y sentándose en ella, teniendo en cuenta su dolorido trasero.
La miraste, desconcertado.
—¿Por qué no?
—¡Porque todavía me duele el culo de tanto lamérmelo! ¡No puedo pelear en estas condiciones! —Ella te fulminó con la mirada, tú en cambio, le devolviste una sonrisa.
. —Pensé que te gustaría que te besaran el trasero, yo disfruté haciéndolo.
—Claro que te gustó. —Puso los ojos en blanco—. ¡Todos los humanos son unos depravados pervertidos! Además, ¡hiciste más que solo 'besarlo'!
—¡Y lo disfrutaste! ¡Puedo decirlo solo por lo mojada que estás! —dijiste.
Power miró su entrepierna, en efecto, estaba empapada.
—Como sea, besador de culos...
Sonreíste antes de acercarte y volver a entrelazar los labios, esta vez, con una nueva energía tras de ellos.
Power te agarró la camiseta que tenías puesta y enseguida te la arrancó, tú hiciste lo mismo con la suya. Esto continuó hasta que ambos estuvieron desnudos, acostados besándose en la cama, el mundo entero era una distracción en ese momento.
Eran solo ustedes dos. Y la deseabas con todas tus fuerzas.
—Power, por favor, yo... —Ella te cortó.
—No ese agujero. ¡Permitiré cualquier otra cosa menos eso!—dijo ella.
«¡Bien por mí!»
—Eso no será un problema. —Levantaste sus piernas. Tenía un poco de vello, pero nada de otro mundo. Sus pliegues se veían tan tentadores que sentiste que tu boca se humedecía solo de verlos.
—¿Te diviertes, humano? —Power intervino.
—Tal vez un poco... —Ella sonrió ahora.
Deslizaste tu polla hacia arriba y hacia abajo por su raja, pequeñas hebras de su sexo se aferraron a la punta como una señal de cuánto realmente esperaba esto. La miraste a los ojos mientras te introducías dentro de ella, convirtiéndote en uno. Power ya tenía una mano aferrada a las sábanas mientras apretaba los dientes y su respiración se entrecortaba. Una vez que estuviste completamente dentro, frotaste tus caderas contra las de suyas y la chica emitió un suave gemido
—T-T/N... hahh... ve... auh... ¡más rápido...!
Accediste a su petición agarrándola por las caderas y embistiéndola con fuerza. Esto hizo que sus gemidos aumentaran en volumen y cantidad, además de provocar que el sudor y el jugo del coño se acumularan debajo de ambos a un ritmo más rápido.
—H-Hah... ¡Joder! ¡T-T/N! ¡M-Mierda! —Power no podía articular ni una una palabra, lo único que escapaba de su boca era tu propio nombre, te enorgullecías inmensamente de este hecho. Y querías más, querías que ella gritara tu nombre por ti. Tus embestidas aumentaron en velocidad, los de aplausos y los gemidos de Power con alguna palabrota ocasional llenaron la habitación.
—¡Maldita sea! ¡Será mejor que no bajes la velocidad, T/N! ¡Guhh! —Ella gimió más, bajó una mano y se pellizcó el clítoris. Los sonidos húmedos que producía al frotarlo con la mano contribuían a llevarla al límite; ahora comprendía por qué los humanos amaban tanto el sexo ahora, y cómo podían volverse adictos a él, ¡esto se sentía absolutamente increíble!
Lo sintió subir, subir en su interior. Sus ojos rodaron hacia atrás de placer, su visión se volvía borrosa, el mareo la invadió.
Power se corrió.
Su cuerpo se sacudió como loco, sus piernas espasmódicas se cerraron a tu alrededor, forzando a tu entrepierna a soportar la sensación de sus jugos saliendo a chorros y pegándose a lo largo de ella. Tu verga se cubrió de los fluidos y esto te hizo empujar aún más fuerte, enloquecido por el sexo en este punto.
Un líquido blanco se pegando a tu eje. Te tomaste un momento para acariciarte usando el material como lubricante.
—Je, parece que lo disfrutaste, ¿eh? —dijiste, mirando hacia abajo al cansado demonio.
—S-Shu... Cállate... —Jadeó, con un brazo sobre la cara.
Sonreíste antes de darle la vuelta y empujar sus caderas hacia arriba. Power intentó protestar, pero estaba demasiado cansada para hacerlo.
—¿Supongo que entonces puedo salirme con la mía? —Probaste .
—Como quieras... —dijo, arrastrando las palabras.
Le diste un buen golpe en el trasero que la obligó a soltar un gritito, y poco después volviste a sumergirte dentro de ella.
—¡Joder, no puedo tener suficiente de esto...! —Tus embestidas eran salvajes, disfrutabas completamente de la visión del culo de Power elevado hasta tus caderas, la espalda arqueada y la cara enterrada en la cama. ¡Lo conseguiste! Si esto no era bajarle los humos, ¡entonces no sabías lo qué era!
Te pusiste un poco valiente y le metiste el pulgar en el culo guiñando un ojo, era solo instinto, pero Power no lo vio de esa manera. Levantó la cabeza de golpe de la cama y te fulminó con la mirada. Antes de que pudiera decir una palabra, la hiciste callar con un beso y te separaste para calmarla.
—No te preocupes, es lo más lejos que voy a llegar con respecto a esto, ¿de acuerdo? ¿Te parece bien? —Le dedicaste una cálida sonrisa, ella suspiró con dureza y cedió.
—¡Bien, ¡pero no más que eso!
—Sí, señora~ —La besaste de nuevo y volviste a embestir. Usaste tu mano libre para agarrar y manosear su pecho, sus pequeñas tetas eran una característica a la que no le habías mostrado mucha atención y era hora de cambiar eso. Pellizcaste sus pezones, provocando un suspiro. Música para tus oídos en lo que a ti respectaba.
Sentiste que tu polla se agitaba locamente, Power definitivamente también lo sintió. Estabas cerca...
No sabías si las demonios podían quedar embarazadas o no, ¡pero seguro que no eras lo bastante valiente para averiguarlo! La penetraste un par de segundos más antes de disminuir la velocidad, sacarla y correrte por todo su pequeño cuerpo. Pintaste su culo con cálidas hileras de semen, asegurándote de no dejar ni una sola gota en tu sexy lienzo. Le rociaste las mejillas, el coño y el culo con tu semilla.
Una vez que terminaste, tomaste una instantánea mental de la vista antes de que ella se diera la vuelta y te arrastrara con ella, estrellando sus labios contra los tuyos.
Si pudieras, te casarías con ella en ese mismo momento.
*TOC TOC*
Por supuesto, te tuvieron que interrumpir.
«¡Mierda! ¿Quién es es? ¡¿Y por qué tiene que venir justo ahora?!» Miraste a Power, dicha chica tenía las manos cubriéndose la boca, y los ojos bien abiertos. Maldita sea, si alguien los atrapara a los dos en esa posición...
—¿Q-Quién es? Llamaste
—Hola, soy Himeno. ¿Está Power en esa habitación contigo? Aki dice que no la ha visto por ninguna parte y ¡hemos revisado todo el piso!
¿En qué demonios te habías metido ahora? ¡Esto era una locura! Poco sabía, ¡que esa chica estaba abrazada a ti desnuda! ¡A sólo unos metros de la puerta!
«¡Maldita sea! ¡Tienes un timing impecable, Himeno!»
Aunque en realidad no podías estar enojado con ella, después de todo tú te metiste en esta situación. Pero, ¿y si ella se hubiera corrido unos minutos antes? ¿Y si hubiera oído todos los gemidos? ¿Qué habría dicho entonces?
Te sacudiste esos pensamientos de la cabeza inmediatamente, ahora no era el momento de volverse loco. ¡Tenías que jugar bien con esto!
—Ah... ¡Sí! ¡Vino aquí antes en busca bocadillos y se desmayó justo después de comerlos! —«¡Por favor, cómprate eso!»
—Hm. ¡Está bien entonces! Me sorprende que todavía te quedaras allí, pensé que la odiabas.
—No, no la odio. —Power te miró con curiosidad—. Solo necesito algo de tiempo para entenderla, eso es todo.
—Je, te escucho... bueno, de todos modos, ¡avísanos si la ves, ¿está bien?!"
—Seguro —respondiste.
Himeno se marchó y dejaste escapar un gran suspiro que ni siquiera sabías que estabas conteniendo.
—Joder, qué nervios, eso fue estresante... —suspiraste
—Así que... ¿no me odias, ¿eh?
La miraste, una sonrisa adornando tus facciones.
"Nah, no realmente."
—Entonces, ¿Qué fue todo eso al principio? ¿Cuándo me empujaste contra la pared?
Sin duda sentiste vergüenza por tus acciones anteriores, debe haberse notado en tu rostro porque Power enarcó una ceja.
—Yo... yo pensé que la única manera de llegar a ustedes, demonios, era a través de la fuerza. Lo admito, quería bajarte los humos, mostrarte tu lugar o lo que sea. Pero cuando me dijiste que te lastimé, supongo que descarté ese objetivo, entonces solo quería hacerte sentir bien en su lugar. —La respuesta de Power fue besarte—. Eres extrañamente cariñosa ahora ¿sabes? Supongo que el sexo puede calmar incluso a los demonios ¿eh?"
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Gracias por leer. Regalos de mi parte:
Autor: Renocral
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Sentado en el suelo, estabas demasiado cansado como para intentar siquiera arrastrarte hasta tu silla. Aunque te las arreglaste para doblar tu uniforme cuidadosamente a tu lado. Pasaban una película a la que no le prestaste ni la mitad de atención, dormitando cada segundo.
De repente, sonó tu teléfono fijo. Nadie te llamaba nunca, esto sólo podía significar una cosa...
―Mierda... ¡Justo me acabo de sentar!
(...)
Miraste el hotel en el que residía el demonio. Debe ser bastante fuerte si siete miembros de la División 4 fueron convocados para acabar con él. Mirando hacia allí, viste a Hayakawa y sus dos nuevos compañeros de habitación. Ese día parecía especialmente irritado con ellos. Te preguntaste por qué, pero conociendo a Denji y Power... Podría ser cualquier cosa.
―¿Hmm? ¿Has dormido lo suficiente, T/N? ―Miraste a tu izquierda a Himeno.
―¿Tengo bolsas debajo de los ojos o algo así? ―No te sorprendería.
―Tú lo has dicho, no yo―. Ella se encogió de hombros.
Pusiste los ojos en blanco
―No, no lo he hecho. Es un poco difícil cuando me llaman constantemente para ataques de demonios.
―Oh, pobrecito... ―Ella arrulló―. Siempre puedes dormir conmigo, ¿sabes~?"
Volviste a poner los los ojos en blanco, riéndote del humor sucio de Himeno
Aki empezó a gritar. ¿Algo sobre una broma? Himeno se acercó a calmarlo antes de proponer una apuesta. Quien matara al primero al demonio se ganaría un beso de la mujer, dijo que era una forma de "subir la moral". Te reíste entre dientes por la reacción de Denji y Arai a esto antes de que se te escapara un bostezo.
―Mejor me aguanto y pongo a trabajar, supongo... tengo demonios que matar ―Resolviste.
[...]Dentro del hotel, Denji corrió hacia adelante para encontrar al demonio más rápido y Arai lo persiguió. Decidiste quedarte atrás con el resto del escuadrón.
―¿Así que, Aki? ―Empezaste―.. ¿Qué te tiene tan molestos hoy?
Aki miró a Power, y dicha demonio que tenía los brazos detrás de la cabeza rápidamente apartó la mirada. Podías ver la vena abultada en la cabeza de Aki.
―Preferiría... no hablar de eso ―gruñó.―Claro... ―Decidiste mejor no molestar a ese oso por mucho tiempo, no vaya a ser que fuera a abalanzarse sobre Power y tratara de matarla.
Miraste a tus otros compañeros de equipo. Himeno parecía estar bien, pero, ¿Kobeni? La pobre chica parecía que ya estaba al borde de su paciencia. Estabas a punto de consolarla cuando un alboroto te distrajo. Denji y Arai discutían mientras forcejeaban entre si. Power corrió primero, emocionada ante la perspectiva de una pelea, Kobeni corrió detrás de ella.
Suspiraste profundamente antes de mirar a Aki y Himeno.
―Yo me encargaré de ellos...
Lograste alejar a Arai de Denji con bastante facilidad.
«Supongo que la presencia de su superior suavizó esa actitud suya», pensaste:
―¿Pueden ustedes dos, idiotas, dejar las olimpiadas de ego que tienen ahora mismo? Tenemos que luchar contra un demonio, no entre nosotros.
Denji argumentó su inocencia por un segundo antes de que Power lo interrumpiera.
―Je, técnicamente ¡ESTÁ luchando contra un demonio! ¡Denji es un híbrido después de todo!
Te masajeaste la cabeza, ya sentías que se acercaba una migraña.
―Sabes a qué me refiero, dejen de actuar como idiotas para que podamos hacer este trabajo y yo pueda descansar un poco.
Power chasqueó la lengua.
―¡Como si me importaran las penurias de un humano!
Tu ojo se crispó.
―Excepto que soy tu superior (Ella inmediatamente argumentó en contra de esto) lo que significa que tengo voz y voto en si eres o no útil para este escuadrón. Y en caso de que no lo seas... ―Hiciste el gesto de cortar el cuello. Power se quedó en silencio ante esto―. ¿Qué? ¿No más comentarios? ¡Genial! Ahora cállate, sé un buen demonio y encuentra al otro demonio para que podamos matarlo y yo pueda dormir un poco. ―La fulminaste con la mirada para que quedara claro el punto.
Power se marchó con fuertes pisadas, murmurando lo estrictos y molestos que tú y Aki estaban siendo hoy.
―La ironía está completamente perdida en eso ―comentó Aki
―¿Crees que fui un poco estricto con ella? ―Normalmente no eras tan imbécil, ¡es solo que la falta de sueño cambia a un hombre!
―No te preocupes por eso, volverá a ser la misma de siempre después de unos treinta segundos.
Gruñiste en respuesta.
[...]
Tras unos minutos más de exploración, y un demonio muerto (una cabeza con manos ), Power se regodeó sobre cómo el demonio le tenía tanto miedo que se quedó congelado en el aire o lo que fuera, no estabas escuchando mucho. Himeno rechazó esta idea y le dijo que era su habilidad de demonio.
―Hmm. ¿Estás segura de que es una buena idea estar parloteando sobre tu poder en mi presencia, humana? ―cuestionó Power.
―No veo por qué no, hace que el trabajo en equipo sea mejor, ¿no? Además, tengo algunos trucos bajo la manga, ¡así que no me preocupa.
―¿De verdad? ―Power sonrió antes de crear una espada de sangre y apuntarla a Kobeni, que dio un saltó hacia atrás en estado de shock―. ¿Y qué harías si intentara matarla entonces?
Himeno la detuvo de inmediato activando su habilidad para agarrar a Power por el cuello.
―Guarda el arma, si empiezas a portarte mal tengo todo el derecho de matarte ―afirmó.
Power intentó agarrar lo que fuera que la sujetaba, pero era el brazo del demonio fantasma, así que acabó agitando los brazos.
Himeno la bajó un segundo después.
―No quiero tener que hacer algo así otra vez, así que llevémonos bien, ¿de acuerdo? ―La mujer sonrió.
Mientras todos los demás continuaban adelante escaleras arriba, Denji sonreía al no estar en problemas. Por una vez, decisdiste se mezquino.
―¿Ahora qué aprendimos? ―Sonreíste.
Power te fulminó con la mirada.
―¡Cállate, humana! ¡No quiero escuchar tu voz ahora mismo!
Ella se marchó pisando fuerte de nuevo, murmurando sobre cómo te devoraría a ti y a Himeno en algún momento.
―¡Escuché eso! ―gritaste, y Power se puso rígida antes de apretar los dientes y continuar escaleras arriba.
Te reíste antes de darte cuenta de algo. Power subía las escaleras, lo que significaba que incluso con su camisa desabrochada, todavía tenías una buena vista de su apretado trasero. Ella sabía cómo lucir pantalones, tenías que admitirlo.
«Espera un minuto, ¡¿en qué diablos estoy pensando?! ¡Es un maldito demonio que posee un cadáver humano! ¿Me estoy volviendo loco?»
Tomaste aire para calmarte, perturbado por tus pensamientos de hace un segundo. De ninguna manera estabas pensando en Power de esa manera.
Un segundo después, Arai pasó corriendo a toda prisa. Con una mirada de confusión, alcanzaste al grupo.
―Uh, ¿qué pasa con Arai?
―¿Eh?―
Miraste detrás de ti, el que había hecho el ruido era Arai, en lo alto del tramo de las escaleras...
Todos se quedaron boquiabiertos, Himeno fue la primera en hablar después de un minuto de tenso silencio.
―Arai... ibas a bajar las escaleras... ¿verdad?"
Volviste a masajearte la cabeza mientras te quejabas. Fue solo tu mala suerte brindándote una situación como esta. Ya estabas irritado, y parecía que el destino quería enojarte aún más hoy.
―Mierda...
[...]
Habían pasado unas horas y no encontraban forma de escapar del octavo piso. Los ascensores no funcionaban, las escaleras estaban en bucle, ¡y ni siquiera atravesar el maldito techo funcionaba!
Kobeni intentó beber agua del inodoro, Arai estaba teniendo un ataque de pánico en otra habitación y Denji dormía profundamente en una cómoda cama de hotel. No perdiste tiempo en seguir sus pasos. Aki intentó detenerte, afirmando que el demonio podía atacar en cualquier momento, pero le aseguraste que estarías bien.
Y ahora estabas durmiendo un poco, algo que necesitabas, en una habitación lejos de todos los demás. Por supuesto, el peligro de hacer esto era alto, ya que había un demonio rondando por todo el edificio, pero si decidía atacarte en cualquier momento, ¡te las arreglarías!
Estabas en paz, descansando con una sonrisa de satisfacción. Pero claro, nada bueno puede durar para siempre...
Tu puerta se abrió de golpe y chocó contra la pared. Te levantaste de un salto sobresaltado y tus instintos de lucha o huida te hicieron estar a punto de atacar al intruso antes de ver quién era.
―¡¿Power?!
El demonio miró a su alrededor y te vio medio despierto antes de buscar alrededor de la habitación. No te prestó atención.
―¡O-Oye! ¿Qué diablos estás haciendo aquí? ¡Estoy tratando de dormir! ―gritaste
―¡Oh, ¿quieres callarte, humano?! ¡Estoy buscando comida!
¿Comida? ¿Estaban abasteciéndose de recursos ahí fuera? En cualquier caso, ya habías revisado este lugar cuando entraste por primera vez, así que sabías a ciencia cierta que no había nada aquí.
―¡No hay nada aquí, ya lo revisé! ¡Así que puedes salir de aquí, ―Presionaste.
―¡Si crees que voy a creerme eso, entonces eres más tonto de lo que pareces! ¡Probablemente solo estás tratando de ocultarlo todo para ti! ―argumentó el demonio.
Gruñiste, harto de esta chica y su actitud. No estabas de humor para esta mierda.
—Escucha, si hubiera algo útil aquí, ¡se lo habría dado a los demás mucho antes! ¡El hecho de que tu egoísta culo solo se preocupe por sí mismo no significa que yo también sea ese tipo de persona! ¡Ahora vete de una vez!
Power continuó gritándote, su voz era chirriante, empeorando tu dolor de cabeza a cada segundo. Estabas cansado de esto, cansado de ella, ya era hora de que alguien le bajara los humos...
La habitación se oscureció, una presencia opresiva llenó todos los rincones. Power se quedó en silencio al instante, pero esto no te satisfizo en absoluto. Ella fue empujada hacia atrás, inmovilizada contra la pared por una fuerza invisible y sin aliento, y mientras trataba de recuperar el aliento, te acercaste con una mirada dura.
—No deberías haber dado por sentada mi paciencia. Ahora me has cabreado...
—¡Ngh...! ¿Qué estás haciendo, humano? ¡¡Libérame!! —Power gritó, luchando por escapar de su captor invisible.
—Nah... creo que tengo algo más planeado para ti... —Power palideció, ¿de qué diablos podrías estar hablando?
—¡¿Q-Qué...?! ¡¿Qué quieres decir con eso?!"
Le acariciaste la cara, llevando tu mano por su mejilla y debajo de su barbilla para levantar su cabeza. Miraste el símbolo en forma de cruz de sus pupilas y tomaste una decisión.
—Oye, he estado bastante estresado hoy, y tú y tus hábitos no han sido de mucha ayuda para aliviarlo... —La envolviste con el brazo y tiraste de sus caderas hacia adelante, ella jadeó cuando sus cuerpos inferiores se tocaron, y sintió la manifestación de tus recientes sentimientos hacia ella presionando su muslo. Pudo sentir como aquello palpitaba bajo tus pantalones y un rubor gigante estalló en su rostro en medio segundo.
—H-Humano, ¿qué diablos crees que estás haciendo? ¡¡¡C-Cómo te atreves a presionar tu asqueroso pene contra mí!!! ¡Te mataré! ¡¡Déjame ir ahora mismo!! —gritó. Te reíste, encontrando esta reacción suya bastante linda y, curiosamente, ¿caliente?
«¿Qué demonios estoy haciendo?»
Pasaste la mano que estaba detrás de ella por debajo de su camisa, dándole lentos roces circulares en la espalda. Ella soltó un ruidito de sorpresa al principio de este gesto y luego trató de apartarse de ti de nuevo, sin conseguirlo.
«Podría meterme en un montón de problemas por esto...»
Presionaste tus labios contra los suyos, silenciando efectivamente sus protestas y gritos y haciéndola jadear y gemir en tu boca. Tu mano se deslizó debajo de sus pantalones, explorando su culo apretado y ella se sacudió bruscamente antes de que molieras tu bulto en su propia entrepierna, lo que te hizo gemir.
«Esto... esto es violación, ¿verdad? ¡Y también es una demonio! ¡Lo que significa que técnicamente estoy atacando a un cadáver! ¡¿Qué diablos estoy haciendo?!»
Power dejó escapar un pequeño suspiro cuando te frotaste contra ella, haciéndola sonrojar aún más. No podía creer que fuera a ser degradada por un maldito humano de todas las cosas. ¡Él debería haber estado adorando el suelo que ella pisaba, actuando como su esclavo! ¡Esto va en contra de las leyes de la naturaleza misma!
«¡Maldito sea! ¡No puedo liberarme sin importar lo que haga! ¡¿Cuál es siquiera su habilidad diabólica?!»
Power empezó a respirar con dificultad, gruñendo y haciendo todo lo que podía para al menos detener los besos. Se las arregló para apartar la cabeza de la tuya, dándole así tiempo para respirar.
—Tú... cómo te atreves... —Ella recuperó el aliento—. ¿¡Por qué eliges atacarme de esta manera!?
Te reíste de nuevo, su rostro enojado te excitó aún más.
—Porque eres linda y necesito un calmante para el estrés.
—¡¿Qué?!
—En las escaleras, le eché un vistazo a tu culo... —Apretaste dicha cosa debajo de sus pantalones, emitiendo un lindo ruido de ella—. Pensé que verte con esta luz era una locura, después de todo, eres un demonio, pero seguiste presionando mis botones, y eso me hizo querer ponerte en tu lugar aún más...
Power correspondió a tu mirada de desprecio con una mirada fulminante, no lo admitiría, pero el aura que emitías, le daba escalofríos...
—¡Puede que me tengas atrapada por ahora humano, pero cuando me liberes, estarás muerto!"
—¿Es así? Porque creo que estarás demasiado cansada para atacar en ese momento... —respondiste.
Le tomó un segundo registrar eso. ¿Cuánto tiempo planeabas hacerla pasar por esto?
—B-bueno, entonces solo gritaré y alertaré a los o- —La interrumpiste
—Esa es la cosa, no te daré la oportunidad...
Power sintió que se le estrechaba la garganta, entró en pánico y trató de mover los brazos, las piernas, ¡cualquier cosa! Se apretó con más fuerza hasta el punto de que apenas podía respirar, no lo suficiente como para dejarla inconsciente, afortunadamente. Aunque había un problema, no podía hablar.
T/N le robó la voz.
Ella tampoco sería capaz de gritar lo suficientemente fuerte para llamar la atención de los demás, las piernas le temblaban, apenas podía respirar y era muy consciente de tu mano frotando contra su trasero todavía, así como del bulto gigante presionando su propia entrepierna.
—No te preocupes, te soltaré. Justo en el momento en que estés a punto de correrte... —Sonreíste—. Quiero escuchar el sonido que haces.
En el segundo que terminaste tu oración, hundiste un dedo profundamente en su trasero. Todo el cuerpo de Power se estremeció y dejó escapar un grito estrangulado. Su agujero estaba húmedo, perfecto para lo que le ibas a hacer, se apretaba y aflojaba tanto a tu alrededor, y el sonido amortiguado de tu mano golpeándole el culo por debajo de sus pantalones solo te ponía más duro...
Se le llenaron los ojos de lágrimas, no porque estuviera angustiada, sino por el dolor que sentía en el culo. Nadie lo sabía, pero Power era muy sensible ahí abajo, ¡y que su cuerpo fuera tratado con rudeza de esa manera no era una experiencia divertida en absoluto!
Volviste a besarla, ahogando sus jadeos al hacerlo. Ella sintió calor, se notaba por la cantidad de sudor que se acumulaba en sus pantalones, su culo empezó estar especialmente húmedo.
Querías ver.
Rápidamente sacaste la mano de sus pantalones, dándole un segundo de alivio antes de ser sometida nuevamente a tu cruel asalto. Le bajaste los pantalones y la ropa interior a toda prisa, le diste la vuelta y sacaste su trasero, extendiendo sus suaves mejillas. Power te gruñó tanto como pudo.
—Je, para ser una chica que no se cuida, tienes un culazo bastante bonito~ —Bromeaste, Power respondió con un gruñido enojado, su trasero todavía le dolía por tu toqueteo anterior.
«Maldita sea T/N... ¡Solo espera a que me libere! ¡Jugaste con mi trasero y ahora vas a lamerlo?! ¡Ustedes los humanos realmente son animales repugnantes!»
Tenía tantas ganas de hablar, ¡pero lo que fuera que le agarraba el cuello no aflojaba! Pero cuando sumergiste tu cara en su culo sudoroso, todos y cada uno de los pensamientos se fueron por el desagüe.
Power dejó escapar un gemido inusual, que te impulsó a liberar tu polla y acariciarla. Los sonidos que hacías cuando tu lengua entraba y salía de su ojete, junto con sus gemidos estrangulados llenaron la habitación por completo. Esperabas por Dios que nadie entrara en ese momento, porque sinceramente estabas en el cielo.
«¡Mierda! ¡Este maldito humano! ¡Saca tu asquerosa lengua de mí!» Power se sintió mortificada. En ningún momento de la historia habría dejado que un humano, y mucho menos él, la lamiera así. Pero por más que lo intentó, no pudo escapar. No podía defenderse. Lo único que podía hacer era soportar la humillación de que su sensible ano fuera destrozado por tu lengua. Odiaba esto...
Ella realmente emitía gemidos constantes, no como los gruñidos de antes, lo que te sorprendió.
«¡Parece que está cediendo más rápido de lo que pensaba!»
Te inclinaste hacia atrás para echar un vistazo a tu descuidado trabajo. Tu lengua se hundió profundamente en ella, tanto que su agujero estaba listo para ser llenado por algo más grande en este punto. Sonreíste antes de ponerte de pie y frotar tu polla entre sus mejillas. Inclinándote cerca de su oído para susurrar algo.
—Veo que estás bastante mojada. Supongo que disfrutaste que un humano te limpiara el culo, ¿eh? ¿Qué pasó con toda esa charla de antes?
Trató de ahogar una respuesta, pero la silenciaste empujando lentamente tu punta dentro de ella. Todo el cuerpo de Power se sentía en llamas, ¡y su ritmo cardíaco estaba por las nubes! Estaba a punto de ser cogida por el culo y no había nada que pudiera hacer al respecto. Era vergonzoso, ¡maldita sea! Ella era la demonio de la sangre, ¿verdad? ¡La fuerte y hermosa Power! Entonces, ¿por qué se sentía tan malditamente indefensa aquí? Sentía lástima.
Esto era una pesadilla, nada más.
—¿Qué tal, Power? ¿Tienes algo que decirme antes de que me ponga a trabajar? —Soltaste un poco el agarre en su cuello, permitiéndole hablar de nuevo.
Power tomó grandes bocanadas de aire, su visión parecía mejorar un poco. Se giró hacia ti con una mirada extrañamente triste..
—No seas brusco...
¿Eh? ¿Escuchaste bien? ¿No gritó, no te insultó de ninguna manera? ¿Qué fue esto?
—¿Disculpa? —le preguntaste.
—No seas demasiado brusco... me duele mucho el culo... —dijo con la voz más tranquila que jamás habías escuchado de ella.
No podías creerlo, ¿estaba aceptando su destino así como así?
—¿Qué pasó con toda esa pelea de antes? ¿Ya te estás rindiendo? —Te miró mordiéndose el labio. Una sola lágrima rodó por su rostro y te dejó sin aliento—. Mierda... no estabas mintiendo, ¿eh? No sabía que eras muy sensible allí... —Te sentías como una mierda, lo cual era irónico considerando lo que acababas de hacer.
Power resopló.
—¿Al menos puedes permitirme mover mi cuerpo? Si tengo que ser sometida a esta tortura, debería tener derecho a moverme como quiera. ¡Odio estar atrapada contra esta pared! —despotricó.
Te tomaste mucho tiempo para pensarlo, era arriesgado. Ella podría abalanzarse sobre ti en cuanto la soltaras, todo dependería de quién fuera más rápido, ¿no?
—¿Cómo puedo confiar en que no me atacarás? —Ella sonrió ante el comentario.
—¡No deberías confiarle nada a un demonio, y aún así eres el estúpido idiota que quiere aparearse conmigo!
Ella tenía un punto
—Al diablo.
Liberaste tu habilidad y la sensación opresiva desapareció al instante. Power suspiró aliviado y se volvió hacia ti, que adoptaste una postura cautelosa.
—Tranquilízate, estúpido, no te mataré. ¡Por ahora, claro! —dijo, caminando hacia la cama y sentándose en ella, teniendo en cuenta su dolorido trasero.
La miraste, desconcertado.
—¿Por qué no?
—¡Porque todavía me duele el culo de tanto lamérmelo! ¡No puedo pelear en estas condiciones! —Ella te fulminó con la mirada, tú en cambio, le devolviste una sonrisa.
. —Pensé que te gustaría que te besaran el trasero, yo disfruté haciéndolo.
—Claro que te gustó. —Puso los ojos en blanco—. ¡Todos los humanos son unos depravados pervertidos! Además, ¡hiciste más que solo 'besarlo'!
—¡Y lo disfrutaste! ¡Puedo decirlo solo por lo mojada que estás! —dijiste.
Power miró su entrepierna, en efecto, estaba empapada.
—Como sea, besador de culos...
Sonreíste antes de acercarte y volver a entrelazar los labios, esta vez, con una nueva energía tras de ellos.
Power te agarró la camiseta que tenías puesta y enseguida te la arrancó, tú hiciste lo mismo con la suya. Esto continuó hasta que ambos estuvieron desnudos, acostados besándose en la cama, el mundo entero era una distracción en ese momento.
Eran solo ustedes dos. Y la deseabas con todas tus fuerzas.
—Power, por favor, yo... —Ella te cortó.
—No ese agujero. ¡Permitiré cualquier otra cosa menos eso!—dijo ella.
«¡Bien por mí!»
—Eso no será un problema. —Levantaste sus piernas. Tenía un poco de vello, pero nada de otro mundo. Sus pliegues se veían tan tentadores que sentiste que tu boca se humedecía solo de verlos.
—¿Te diviertes, humano? —Power intervino.
—Tal vez un poco... —Ella sonrió ahora.
Deslizaste tu polla hacia arriba y hacia abajo por su raja, pequeñas hebras de su sexo se aferraron a la punta como una señal de cuánto realmente esperaba esto. La miraste a los ojos mientras te introducías dentro de ella, convirtiéndote en uno. Power ya tenía una mano aferrada a las sábanas mientras apretaba los dientes y su respiración se entrecortaba. Una vez que estuviste completamente dentro, frotaste tus caderas contra las de suyas y la chica emitió un suave gemido
—T-T/N... hahh... ve... auh... ¡más rápido...!
Accediste a su petición agarrándola por las caderas y embistiéndola con fuerza. Esto hizo que sus gemidos aumentaran en volumen y cantidad, además de provocar que el sudor y el jugo del coño se acumularan debajo de ambos a un ritmo más rápido.
—H-Hah... ¡Joder! ¡T-T/N! ¡M-Mierda! —Power no podía articular ni una una palabra, lo único que escapaba de su boca era tu propio nombre, te enorgullecías inmensamente de este hecho. Y querías más, querías que ella gritara tu nombre por ti. Tus embestidas aumentaron en velocidad, los de aplausos y los gemidos de Power con alguna palabrota ocasional llenaron la habitación.
—¡Maldita sea! ¡Será mejor que no bajes la velocidad, T/N! ¡Guhh! —Ella gimió más, bajó una mano y se pellizcó el clítoris. Los sonidos húmedos que producía al frotarlo con la mano contribuían a llevarla al límite; ahora comprendía por qué los humanos amaban tanto el sexo ahora, y cómo podían volverse adictos a él, ¡esto se sentía absolutamente increíble!
Lo sintió subir, subir en su interior. Sus ojos rodaron hacia atrás de placer, su visión se volvía borrosa, el mareo la invadió.
Power se corrió.
Su cuerpo se sacudió como loco, sus piernas espasmódicas se cerraron a tu alrededor, forzando a tu entrepierna a soportar la sensación de sus jugos saliendo a chorros y pegándose a lo largo de ella. Tu verga se cubrió de los fluidos y esto te hizo empujar aún más fuerte, enloquecido por el sexo en este punto.
Un líquido blanco se pegando a tu eje. Te tomaste un momento para acariciarte usando el material como lubricante.
—Je, parece que lo disfrutaste, ¿eh? —dijiste, mirando hacia abajo al cansado demonio.
—S-Shu... Cállate... —Jadeó, con un brazo sobre la cara.
Sonreíste antes de darle la vuelta y empujar sus caderas hacia arriba. Power intentó protestar, pero estaba demasiado cansada para hacerlo.
—¿Supongo que entonces puedo salirme con la mía? —Probaste .
—Como quieras... —dijo, arrastrando las palabras.
Le diste un buen golpe en el trasero que la obligó a soltar un gritito, y poco después volviste a sumergirte dentro de ella.
—¡Joder, no puedo tener suficiente de esto...! —Tus embestidas eran salvajes, disfrutabas completamente de la visión del culo de Power elevado hasta tus caderas, la espalda arqueada y la cara enterrada en la cama. ¡Lo conseguiste! Si esto no era bajarle los humos, ¡entonces no sabías lo qué era!
Te pusiste un poco valiente y le metiste el pulgar en el culo guiñando un ojo, era solo instinto, pero Power no lo vio de esa manera. Levantó la cabeza de golpe de la cama y te fulminó con la mirada. Antes de que pudiera decir una palabra, la hiciste callar con un beso y te separaste para calmarla.
—No te preocupes, es lo más lejos que voy a llegar con respecto a esto, ¿de acuerdo? ¿Te parece bien? —Le dedicaste una cálida sonrisa, ella suspiró con dureza y cedió.
—¡Bien, ¡pero no más que eso!
—Sí, señora~ —La besaste de nuevo y volviste a embestir. Usaste tu mano libre para agarrar y manosear su pecho, sus pequeñas tetas eran una característica a la que no le habías mostrado mucha atención y era hora de cambiar eso. Pellizcaste sus pezones, provocando un suspiro. Música para tus oídos en lo que a ti respectaba.
Sentiste que tu polla se agitaba locamente, Power definitivamente también lo sintió. Estabas cerca...
No sabías si las demonios podían quedar embarazadas o no, ¡pero seguro que no eras lo bastante valiente para averiguarlo! La penetraste un par de segundos más antes de disminuir la velocidad, sacarla y correrte por todo su pequeño cuerpo. Pintaste su culo con cálidas hileras de semen, asegurándote de no dejar ni una sola gota en tu sexy lienzo. Le rociaste las mejillas, el coño y el culo con tu semilla.
Una vez que terminaste, tomaste una instantánea mental de la vista antes de que ella se diera la vuelta y te arrastrara con ella, estrellando sus labios contra los tuyos.
Si pudieras, te casarías con ella en ese mismo momento.
*TOC TOC*
Por supuesto, te tuvieron que interrumpir.
«¡Mierda! ¿Quién es es? ¡¿Y por qué tiene que venir justo ahora?!» Miraste a Power, dicha chica tenía las manos cubriéndose la boca, y los ojos bien abiertos. Maldita sea, si alguien los atrapara a los dos en esa posición...
—¿Q-Quién es? Llamaste
—Hola, soy Himeno. ¿Está Power en esa habitación contigo? Aki dice que no la ha visto por ninguna parte y ¡hemos revisado todo el piso!
¿En qué demonios te habías metido ahora? ¡Esto era una locura! Poco sabía, ¡que esa chica estaba abrazada a ti desnuda! ¡A sólo unos metros de la puerta!
«¡Maldita sea! ¡Tienes un timing impecable, Himeno!»
Aunque en realidad no podías estar enojado con ella, después de todo tú te metiste en esta situación. Pero, ¿y si ella se hubiera corrido unos minutos antes? ¿Y si hubiera oído todos los gemidos? ¿Qué habría dicho entonces?
Te sacudiste esos pensamientos de la cabeza inmediatamente, ahora no era el momento de volverse loco. ¡Tenías que jugar bien con esto!
—Ah... ¡Sí! ¡Vino aquí antes en busca bocadillos y se desmayó justo después de comerlos! —«¡Por favor, cómprate eso!»
—Hm. ¡Está bien entonces! Me sorprende que todavía te quedaras allí, pensé que la odiabas.
—No, no la odio. —Power te miró con curiosidad—. Solo necesito algo de tiempo para entenderla, eso es todo.
—Je, te escucho... bueno, de todos modos, ¡avísanos si la ves, ¿está bien?!"
—Seguro —respondiste.
Himeno se marchó y dejaste escapar un gran suspiro que ni siquiera sabías que estabas conteniendo.
—Joder, qué nervios, eso fue estresante... —suspiraste
—Así que... ¿no me odias, ¿eh?
La miraste, una sonrisa adornando tus facciones.
"Nah, no realmente."
—Entonces, ¿Qué fue todo eso al principio? ¿Cuándo me empujaste contra la pared?
Sin duda sentiste vergüenza por tus acciones anteriores, debe haberse notado en tu rostro porque Power enarcó una ceja.
—Yo... yo pensé que la única manera de llegar a ustedes, demonios, era a través de la fuerza. Lo admito, quería bajarte los humos, mostrarte tu lugar o lo que sea. Pero cuando me dijiste que te lastimé, supongo que descarté ese objetivo, entonces solo quería hacerte sentir bien en su lugar. —La respuesta de Power fue besarte—. Eres extrañamente cariñosa ahora ¿sabes? Supongo que el sexo puede calmar incluso a los demonios ¿eh?"
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