Debes estar temblando de celos, cuando tu esposa te mira así, gozando la pija de otro... pero no hay mayor placer que esa mirada de agradecimiento y placer.
Porque no hay engaño, no hay traición. solo hay confianza y placer. Dos hombres para tu mujer amada, para que goce como una diosa.
Y ella muere de placer al ser penetrada por una pija que no es la de su esposo... pero también -hay que saberlo- tiembla de gozo cuando ve al marido tocándose por ella...
Ella que se convierte en el vértice de un triángulo de sexo y placer... dos hombres concentrados únicamente en darle lo que ella necesita...
Ella goza, sí. Y goza en la pija de otro, también. Pero te está mirando a vos, te mira a vos, su esposo condescendiente, porque este placer te lo debe a vos y a tu generosidad...
Y le encanta montar escenas, porque sabe que estas gozando viéndola cabalgar, escuchando sus gemidos, oliendo su sexo...
Y ya todo el placer es para vos, que los ves gozar como animales...
porque sabes que todo tiene su recompensa...
Verla disfrutar así, es increíble... y sabes que todo será recompensado prontamente...
El vaivén del sexo adentro de tu esposa, gozando sin mirar al hombre que le trajiste, pero tampoco te mira a vos... ella concentrada en su cuerpo... vos de fiesta!
Y ahora sos vos, el marido generoso, el que se exhibe, el que maneja la escena, el que exige que se mueven para hacer más rica la paja que están provocandote...
Y al final... o al principio... dos hombres tocándola, besándola, chupándola, porque después de todo, esta es una partuza de a tres... donde dos hombres están decididos a hacer de la tarde, una tarde inolvidable...
Porque no hay engaño, no hay traición. solo hay confianza y placer. Dos hombres para tu mujer amada, para que goce como una diosa.
Y ella muere de placer al ser penetrada por una pija que no es la de su esposo... pero también -hay que saberlo- tiembla de gozo cuando ve al marido tocándose por ella...
Ella que se convierte en el vértice de un triángulo de sexo y placer... dos hombres concentrados únicamente en darle lo que ella necesita...
Ella goza, sí. Y goza en la pija de otro, también. Pero te está mirando a vos, te mira a vos, su esposo condescendiente, porque este placer te lo debe a vos y a tu generosidad...
Y le encanta montar escenas, porque sabe que estas gozando viéndola cabalgar, escuchando sus gemidos, oliendo su sexo...
Y ya todo el placer es para vos, que los ves gozar como animales...
porque sabes que todo tiene su recompensa...
Verla disfrutar así, es increíble... y sabes que todo será recompensado prontamente...
El vaivén del sexo adentro de tu esposa, gozando sin mirar al hombre que le trajiste, pero tampoco te mira a vos... ella concentrada en su cuerpo... vos de fiesta!
Y ahora sos vos, el marido generoso, el que se exhibe, el que maneja la escena, el que exige que se mueven para hacer más rica la paja que están provocandote...
Y al final... o al principio... dos hombres tocándola, besándola, chupándola, porque después de todo, esta es una partuza de a tres... donde dos hombres están decididos a hacer de la tarde, una tarde inolvidable...
Comentarios Destacados
13 comentarios - Esposas deseantes... maridos condescendientes
Lo mas exitante que hay +10
se atesora en la memoria, no se comparte en gifs... apenas en algun relato..