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Cosas de chicos, 50 años despues IV

Este relato, dividido en varios capitulos es real, se inició hace mas de 50 años, hoy tengo 62, saquen cuentas. Algo que empezó siendo "cosa de chicos" y años, muchos años después tuvo su continuación. Mi bisexualidad hoy da para ponerme a mamar una pija si me gusta, el sexo anal me encanta practicarlo como activo. De chico me cogieron suave, fuerte, me lenaron el culo de leche y no me llamó para nada la atención, no puse reparos y quien leyó mis relatos habrá leído que en ocasiones tuve la actitud del putito mas sumiso, lo que hoy diriamos una sissy y, repito, no me llamó la atención, no me gustó. Distinto es el tener una pija en la boca y comerla, chuparla, jugar con la lengua hasta sentir los lechazos y entonces jugar con la lengua en el hoyo de la cabeza y chupar hasta secar los huevos. Eso es todo lo puto que se puede esperar de mí en el sexo gay. Volviendo al relato, reencontrar a Francisco, Francesca o Fran no solo fue  tremendo y caliente para dos ya no tan pendejos, y con mas de medio siglo disfrutando del sexo, cuando repaso lo que pasó ese fin de semana me doy cuenta que hace 30, 40 o 50 años, sin la tecnología de hoy, sin redes ni nada, ser gay, puto, marica o como quieran llamarlo era formar parte de una red invisible, solo que al no formar parte activa de esa comunidad, no tuve idea de que lo que yo creía era clandestino o anonimo. No era tan así de a poco contaré el por qué.
Fran me contó la historia de su matrimonio, me puso la pija a mil y terminó chupándomela. Me encantó y al mismo tiempo me puso mal, la imagen de él en lencería abotonado a una poronga es excitante, salvo por el hecho de tener a la esposa, que era flor de turra descubriendo que su marido es tremenda puta, el quilombo que armó y el disgusto de los padres de el. Despues de contarme todo eso, se tranquilizó, puso su cabeza en mi pecho y lo acaricié hasta que se durmió un rato. Lo vi tranquilo y estaba muy cogible, todavía tenía el portaligas, la tanguita y un corpiño que sostenía una pequeñas pero marcadas tetas. Empecé a besarlo suavemente en el cuello, bajé al pecho, le subí el corpiño y le chupé y mordí los pezones, entonces empezó a despertarse y gemir como una mina en celo, bajé por la panza y me dediqué a meterle lengua en el ombligo.
Fran: que pretende usted de mí?
Yo: Me toca jugar un rato. Al mismo tiempo la / lo ponía boca abajo y le iba mordiendo las nalgas hasta
llegar a ese magico agujero, que mostraba que por allí había entrado de todo. Y lo besé, lo chupé, todavía quedaban rastros de mi leche. Fran ya estaba en trance. Otra vez me vas a coger?
Yo: Nop ! tengo ganas de jugar, le dije mientras le iba metiendo pirmero uno y despues dos dedos, ninguna dificultad, como cuando le chupo la concha a mi esposa.
Fran: Ya veo donde queres ir, este culo te va a ser mas facil que el de Antonio...
Me quedé con tres dedos metidos y la cara que puse debó ser comica para que se entrara a reir como loca, se movia por las carcajadas y con mis tres dedos adentro.
Fran: Me gusta lo que estás haciendo, seguí y depues te cuento. Te vas a sorprender chiquito!!!
Yo segui con mi faena, ponía un poco de lubricante y ya los dedos entraban comodamente, la puse boca arriba y le saqué la jaula de castidad. 
Fran: Guille, con todas las hormonas que tomé casi no se me para, casi que no existe. 
Esa habia sido la primer pija que me llevé a la boca, la primera leche que me tragué salió de ahí. no me iba a dar por vencido. Cuatro dedos entrando facil y después oponer el pulgar y meter suavemente hasta que la escarapela de cuero se cerró sobre la muñeca. Fran debió coger co pijas importantes pero se notó que mi mano le causaba efecto, entonces me dediqué a lo mio. me comí esa pija que parecía mas chica que hace decadas, la comí toda, la saqué, le corrí la capucha (siempre tuve predilección por las pijas con prepucio), la erección era debil, pero esa pija era mi preferida, me comí algunas muy grandes otras finas, pero esta es única. Diez minutos habran pasado , mi mano entraba y salía muy comodamente, cuando probé de meter el puño, Fran se tensó y la pija me inundó la boca, yo chupé como un ternero, seguia siendo igual de rica, cuando ya no salió mas nada, saqué mi mano muy despacio del culo, el agujero era impresionante. 
Yo: Explicame de donde sacaste lo de Antonio...
Fran: Que hiciste con la leche? Era mucha?
Yo: Me la tragué, era mucha y estaba muy rica, como antes. No me cambies de tema..
Fran: Vení chiquito, vení con mamá que te va a contar como sabía de lo que vos hacias y creias que era secreto, no solo lo de Antonio..
Me levante, me fui a lavar las manos y docilmente me fuí a la cama, Ahora era yo el que estaba recostado en el pecho de Fran, que me acariciaba el pelo.
Fran: Yo era, soy y voy a ser puto, vos con suerte sos bi sexual. Sabés la de machos, pero machos en serio que en la calentura se comen una pija? O se sientan en una? Cuando eramos mas pendejos no había Tinder, Badoo, Contactossex.. No habia Internet ni celulares, gracias si alguien dejaba un telefono en una tetera, todo a mano, no solo la paja, Ja!!. Esto era un pueblo con veleidades de ciudad y todos nos conociamos.
Yo: Y que sabías vos de mi?  ver?
Fran: La casa de Antonio era uno de los lugares donde nos juntabamos, una vuelta iba para la casa de el y te ví entrar, y seguí de largo. Cuando te fuiste volví al rato y al entrar le pregunté si tenía nuevo integrante de la banda. Y me dijo que no, que vos ibas, te lo cojías y punto, y traté de evitarte siempre, vos no eras como yo, aunque quisiste probar de puto, no solo con Antonio..
Yo: Como sabés?
Como si leyera un expediente me contesta: Porque en la tornería donde fuiste dos veces a que te cogiera Jorge, ese de la pija fina, yo trabajé un tiempo. El me cojió un par de veces pero yo ya tenía el culo muy abierto. Decí que fuiste dos veces, me acuerdo que me dijo que la ultima fuiste en modo puta y te puso en bolas, acostado en un banco y con un almohadon para sacar culo. O no?
Yo: Es cierto
Fran: Si hubieses vuelto otra vez te hubieras encontrado en la misma situación pero con cuatro o cinco amigos de Jorge. Y no de pija fina para principiantes, te lo digo por experiencia, a mi no me sorprendieron, yo violé esa manada. Y sé que te encontraste algo en la tetera de la estación...
Yo: Bueno, sí. Hubo varias. Una vuelta había un pendejo muy tierno y eramos dos para cogerlo, el pendejo tenía lugar pero primero quería ver las pijas, vos viste la mia, pero la otra era gigante. De repente el pendejo se asustó, se fue y yo me metí en un cubiculo con el tipo y me puse a chuparsela, pero nos tuvimos que ir de golpe, parecía que venía alguien.
Fran: Miralo vos al catador de pijas!!! Esa no la tenía! No me refería a esa. Mamá te sacó la confesión, me dijo riendose.
A esta altura ya mi pija reclamaba atención y Fran se puso manos a la obra literalmente.
Fran: Amor, yo decía de un chico que encontraste en el baño y te llevó a su departamento en Barrio Envión, tambien lo conocía, el tenía un despacho de pan a la vuelta de la casa de tus padres. Me dijo que te hizo debutar y se quedó con ganas de acostumbrarte.
Yo: Eso pasó despues de la tornería, el tipo me violó, me rompió el culo, no por pija grande si no por pelotudo. fue la ultima vez.
Fran: Como estaban las hormonas!!! No cogías con tu novia?
Yo: A lo bestia, le desvirgué el culo.
Fran: Ese era un culo de pelicula, hasta me daban ganas a mi... amore la pija esta durita. Nos vamos a bañar ?
CONTINUARA...

2 comentarios - Cosas de chicos, 50 años despues IV

Lukevenga
Demasiadas similitudes con mi vida .. jajaja
.. y también voy a cumplir 62 y empecé a los 12 con mi primo, que fue y es mi mujer hasta el día de hoy
eltato57
Nosotros tres años antes que vos. Por lo visto, era más común de lo que parece.
soybastantegay
Conozco varones heterosexuales que de pendejos se juntaban en la casa de alguno de ellos, miraban revistas porno (porque en esa época no había Internet ni videocaseteras siquiera) y terminaban pajeándose, concursando a ver quién acababa más lejos.
Parece que no era una práctica tan fuera de lo común porque conozco varios que lo hacían en ciudades separadas y sin conocerse entre ellos.
Y más de uno terminaba esas sesiones de pajas comiéndose la pija de uno o varios de sus amigos.