El jueves pasado tuve una mañana de sexo, la mas intensa, exquisita, duradera, placentera y lujuriosa que tuve jamás. Fueron algo mas de dos horas de sexo, de jugar con su pija, de que mi macho disfrute de mi culo, de coger en cada rincón de su casa, de mirar en el espejo como me entraba semejante pija.
Para quienes no me conocen soy puto de closet. No cualquier puto. Soy un adulto, casado, con vida social hetero, que come asado y juega futbol con amigos.
Sin embargo tenía la cuenta pendiente desde cuando era apenas un niño y ahora de adulto tengo un amante hombre, macho, super hombre diría yo. Respetuoso, caballero, discreto, fachero y con una hermosa pija.
En su casa me libero, soy la otra yo, la nena que alguna vez de niño me imaginaba parecer. Dicho así parece fácil sin embargo me costó mucho soltarme y en ese sentido fue clave mi hombre. El me supo llevar, me tuvo paciencia. La paciencia que a veces los hombres no tenemos con las mujeres. Me trató (y me trata) como si yo fuera Sol Perez. Me espera, nunca me apura ni mucho menos me obliga a nada.
Los primeros encuentros fueron muy malos (siempre por mi inseguridad, tengo culpas y miedos) sin embargo Eduardo pacientemente me fue guiando.
En esas primeras veces ni siquiera le practicaba sexo oral. Y mi hombre con toda su paciencia me dijo "si queres saber lo que es ser feliz y sentirte plena tenes que probar chuparla". Y por supuesto, hoy no puedo vivir sin tenerla en mi boca y aprendí lo que es la felicidad.
En cada uno de nuestros encuentros Eduardo me deja manejarme a mi antojo. Hago con su pija lo que quiero, literalmente LO QUE QUIERO. La chupo, la beso la toco, me la paso por la cara el cuerpo... Y el aguanta, nunca acaba antes de tiempo, y siempre la tiene durísima.
Siempre soñé con parecer mujer y Eduardo me hace sentir como si fuera la mujer mas sensual del mundo. Y fue en el contexto de nuestro último encuentro, luego de mas de dos horas de sexo, yo me estaba vistiendo de espaldas a él y percibía que Eduardo me miraba desde la cama y se despachó con un piropo que le salió del alma: "con ese tremendo culo no podías no ser puto", dijo. Fue el mejor piropo que me dijeron jamás, me enamoró por completo. Lo amo. Y luego agregó: "Ese culo lo tenía que disfrutar algún hombre. Gracias a Dios que soy yo el que lo coge y lo disfruta". Me fui de su casa sintiéndome muy hembra, sintiéndome una mujer plena.
Ya camino al trabajo miraba otras mujeres y pensaba si alguna de ellas habría tenido tanto sexo como yo, cual de ellas habría dejado a su amante que le haga la cola. Yo estaba plena, mi cola satisfecha, los labios de mi boca hinchados de tanto chupar su miembro... y FELIZ DE SENTIRME MUJER.
Eduardo sos lo mas!! gracias por tanto. Te amo
Para quienes no me conocen soy puto de closet. No cualquier puto. Soy un adulto, casado, con vida social hetero, que come asado y juega futbol con amigos.
Sin embargo tenía la cuenta pendiente desde cuando era apenas un niño y ahora de adulto tengo un amante hombre, macho, super hombre diría yo. Respetuoso, caballero, discreto, fachero y con una hermosa pija.
En su casa me libero, soy la otra yo, la nena que alguna vez de niño me imaginaba parecer. Dicho así parece fácil sin embargo me costó mucho soltarme y en ese sentido fue clave mi hombre. El me supo llevar, me tuvo paciencia. La paciencia que a veces los hombres no tenemos con las mujeres. Me trató (y me trata) como si yo fuera Sol Perez. Me espera, nunca me apura ni mucho menos me obliga a nada.
Los primeros encuentros fueron muy malos (siempre por mi inseguridad, tengo culpas y miedos) sin embargo Eduardo pacientemente me fue guiando.
En esas primeras veces ni siquiera le practicaba sexo oral. Y mi hombre con toda su paciencia me dijo "si queres saber lo que es ser feliz y sentirte plena tenes que probar chuparla". Y por supuesto, hoy no puedo vivir sin tenerla en mi boca y aprendí lo que es la felicidad.
En cada uno de nuestros encuentros Eduardo me deja manejarme a mi antojo. Hago con su pija lo que quiero, literalmente LO QUE QUIERO. La chupo, la beso la toco, me la paso por la cara el cuerpo... Y el aguanta, nunca acaba antes de tiempo, y siempre la tiene durísima.
Siempre soñé con parecer mujer y Eduardo me hace sentir como si fuera la mujer mas sensual del mundo. Y fue en el contexto de nuestro último encuentro, luego de mas de dos horas de sexo, yo me estaba vistiendo de espaldas a él y percibía que Eduardo me miraba desde la cama y se despachó con un piropo que le salió del alma: "con ese tremendo culo no podías no ser puto", dijo. Fue el mejor piropo que me dijeron jamás, me enamoró por completo. Lo amo. Y luego agregó: "Ese culo lo tenía que disfrutar algún hombre. Gracias a Dios que soy yo el que lo coge y lo disfruta". Me fui de su casa sintiéndome muy hembra, sintiéndome una mujer plena.
Ya camino al trabajo miraba otras mujeres y pensaba si alguna de ellas habría tenido tanto sexo como yo, cual de ellas habría dejado a su amante que le haga la cola. Yo estaba plena, mi cola satisfecha, los labios de mi boca hinchados de tanto chupar su miembro... y FELIZ DE SENTIRME MUJER.
Eduardo sos lo mas!! gracias por tanto. Te amo
3 comentarios - el mejor piropo