",Buena fama" 2, pijones de barrio

El tío Cachito le contó "en confianza" a Don Javier que yo era un chupapija de la puta madre! .
- Mejor que una mina!!! , Hasta se traga la leche!!!, Pero no sé tiene que enterar nadie! Confío en vos!-, le dijo al veterano pajero y degenerado que "no le hacía asco a nada"...









Don Javier, un viejo jubilado ferroviario, ejemplo de padre, marido y vecino; era en su intimidad un cogedor activo y discreto que no dejaba escapar la oportunidad de coger ; como los tipos de ésa época, no era gay, tampoco bisexual; solo era un macho calentón y curioso con ganas de experimentar el placer que no tenía en su casa; Yo era una oportunidad de coger y gozar.




De vista, jamás hubiera imaginado que ése tipo que parecía "homofóbico" me compartiera su sexo y su intimidad. Sin embargo, después de la "confesión" de mi tío Cachito pude notar el cambio de actitud, sus muestras de simpatía y sus invitaciones a "visitar la cantina del club" de noche.





A pesar de las"advertencias " de mi tío, el tipo no daba crédito a mi habilidad de chupapija, y Yo; haciendo "el tonto ", le hacía creér que entraba en su juego.






Hasta el exacto momento donde le tragué la cabeza de la verga como un ternero con hambre, sintiendo como se estremecía cuando mí lengua hambrienta le frotaba el frenillo de la pija al mismo tiempo que con la boca le succionaba la verga hasta la mitad del tronco y lo pajeaba firme y suave; logrando que el tipo en la exitacion se desvistiera por completo.
















Ése hombre que apenas había sacado la pija por un lado del calzoncillo, se desnudaba para mí y mi placer; podía sentir como se deleitaba envenenado por mis caricias íntimas