"Al Descubierto", el tio Cacho y Elisa...

El "Tio Cacho Barroso" era un primo de mi viéjo que venía de Salta a cubrir guardias en Bs As y al que mi abuéla le daba alojamiento en ese caserón enorne donde vivíamos.

El chabón era un morocho soltéro de 28 añitos bien dotádo y cojedor como un tóro... en la enormidad de la casóna el tenía la última piéza de esa casa "chorízo" grandiosa que me ofrecía la posibilidad de espiar de muchas formas sin ser descubierto.






Al tio "Cachíto" lo tenía bien estudiádo, sabía que cada viernes el hacía venir a sus amiguitas y se las cojía durante toda la noche casi sin parar... me trepaba al techo del placard y esperaba con deleite ese espectáculo tremendo de ver como el tipo iba calentando a su amiguita de a poco hasta lograr que la hembra complaciente y sumísa lo dejára hacer hasta que finalmente se la cojía en tres polvos feróces e inténsos de un ráto largo











Elisa, la espósa de su mejor amigo era la preferida, podía ver como el tió le ponía el mayor empeño en cojerla con esa pija terrible y dura que la bombeába feróz hasta que se chorreaba de flújo y sémen









Un buen dia, el milíco entrenado en los detalles se dió cuenta de mi "vigilancia" sin que me diéra cuenta, pero no paró...siguió con lo suyo toda la noche...


Con mas gánas, me dejó ver y sentir todo el placer que le dába con esa verga grandiósa la mujer de su amigo.

Cuando terminó de cojer a la hembra la despachó y se metió al baño como de costumbre, y esperó a que pusiéra mi ojo en la cerradura... y de repénte abrió la puerta dejandomé al descubierto tratando de mirar como se bañaba...

"Vos y Yo tenémos que hablar..."- dijo el Tio Cachíto en tóno sério...
Asi desnúdo como estába me llevó del brázo y a la fuerza a su habitación que todavía olía a sexo fuerte y me exitaba tanto como el miedo a que mi tio me castigára y le contára a mi abuela el "atrevimiento" de espiarlo, pero nó;al contrário... él se cojía a la mujer de su " mejor amigo" y estaba en falta y yó era el único testígo de su "pecádo" asi que el tio era tecnicamente mi rehén y éso le preocupába...

-No le digas a tu abuéla por favor- , Me rogába ese hombre desnudo cuya pija colgando frente a mi me hipnotizába.
-Pedíme lo que quiéras, pero no le dígas a nadie por favor!-... me lo decía dejandome ver que ese "secréto" valía lo que pidiéra...


Cuando entendí que "lo tenía en mis manos" le propúse "un tráto", Yo guardába silencio si él accedía a dejarme ver como cojía a cualquiéra de sus amantes...

A partir de ese dia, con 14 añitos convertí a mi "Tio Cachito" en mi esclávo sexual y objéto de deséo