Así amaneció Gime. Hecha un fuego después de despedir a su Valentín que vino a festejar. Mi colita arde, su sabor quedo en mi boca y en varias partes de mi cuerpo; como si él hubiera querido marcarme para que todos sepan que él me posee.
Pobre iluso...
Pobre iluso...
5 comentarios - Amanecer de una noche de San Valentín agitada
Haceme tuya!
Tngo bastante leche para darte