ANTES DE LEER ESTE RECOMIENDO LEER LA PRIMERA PARTE ACÁ
http://www.poringa.net/posts/gay/3027307/Cuento-re-subido-mas-videito-de-yapa-al-final.html?notification#last
Cuando ví que la fiesta seguía me tiré exhausto cobre la cucheta del camarote. Sentía que ya no tenía más fuerza. Miré mi semen esparcido por la puerta del placard y era tanto que pensé que había quedado seco por tres semanas.
El que había acabado adentro mío estaba mirando por la ventanilla y se puso a fumar.
Advertí que los otros dos empezaban a desnudarse y el otro empezó a hacer lo mismo cuando terminó el cigarrillo.
Estábamos los cuatro en silencio, se podía escuchar el rumor de la lluvia afuera. A lo lejos se sentía cada tanto alguna locomotora que tocaba la bocina.
Verme desnudo y ver desnudos a los tres, sentir el olor a sexo, me empezó a excitar un poco. Pero tenía la pija fláccida, parecía que no había forma.
Fue cuando el que me había penetrado primero me dijo “ a ver bebé, que faltan los amigos todavía…”
Entonces los otros dos que permanecían en silencio me tomaron cada uno por debajo de la espalda, a un lado y al otro y con el otro brazo lo pasaron por debajo de cada una de mis piernas y me levantaron en andas,con las piernas abiertas y de frente al tercero que empezó a mojarse el dedo con saliva y dijo: “ vamos a estimularte un poquito…” y con su dedo empezó a mojarme el ano y después me metió el dedo bien adentro de la cola. Ahí me di cuenta lo inflamado que me había quedado el ojete después de la primera cogida. Noté queme estaba acariciando la próstata suavemente con movimientos circulares,ejerciendo una leve presión hacia adentro. Empecé a sentir lo que tenía que sentir y la pija se me empezó a parar.
Uno de los que me sostenían dijo : “ cómo te gusta , eh?Ya sos toda una loquita con el culito caliente”
Yo empecé a jadear suavemente, cerré los ojos y tiré la cabeza para atrás para gozar más ese dedo que me estaba enloqueciendo. Ël me agarró la verga y me la empezó a tirar suavemente subiendo y bajando y después acariciándome los huevitos.
Ahí ya no pude más, hice un movimiento hacia atrás para bajarme y me fui desesperado derecho a la cucheta para ponerme en cuatro, más o menos así ( pero sin sombrero)
Tenía la pija re dura, a punto de explotar y los miraba por sobre mi hombro, como esperando que alguno de ellos me penetrara ya.
Mientras uno se subió a la cucheta y se arrodilló delante de mí para meterme la pija en la boca, otro hizo lo mismo por atrás, me tomó con firmeza de las caderas, volvió a mojarme un poco el ojete con saliva y me empezó a penetrar con suavidad.
Es desesperante no encontrar las palabras que describan la sensación de estar sintiendo una pija que te abre el orto y se te va metiendo en el recto hasta el fondo, pero bueno, si te penetraron alguna vez sabés muy bien qué se siente.
Yo chupaba y chupaba mientras movía la cola en remolino,como queriendo chupar con mi ano esa verga hermosa. Mi cola estaba a setenta y cinco grados centígrados, y empecé a sentir que en cualquier momento se me venía otra vez la leche a la pija. Intenté hacer fuerza para contenerla y durar más, pero me estaba costando, ya estaba por explotar. Cuando sentí la leche caliente del otro que empezaba a escupir adentro mío no pude más y eyaculé yo también.
Faltaba uno más. El que me estaba cogiendo sacó la pija de mi cola y le dio lugar al otro. Yo no podía más, así que me entregué, mi pija había quedado fláccida y yo casi sin aire. Pero había que hacer justicia.Todavía había uno que se había quedad con las ganas. Así que apoyé la cabeza sobre el colchón, y quedé con la colita abierta , parecido a esto:
para dejarlo al tercero que me penetrara cuanto quisiera.Él se puso detrás y me la metió despacio mientras jadeaba. Yo dí vuelta la cabeza hacia los otros y pude ver cómo se sonreían. Yo no pude hacerle el honorde eyacular porque había quedado seco, pero lo dejé hacer.
Había terminado de llover. Cuando sentí el semen de este último chorreandomé por las nalgas comprendí con melancolía que la fiesta había terminado.
Sólo por un tiempo.
Nos vestimos, bajamos del vagón y cada uno se fue por su lado. No nos despedimos porque sentimos que nos volveríamos a ver.
Hasta ese momento podría estimularme a mí mismo recordando aquella tarde, así por ejemplo:
http://www.poringa.net/posts/gay/3027307/Cuento-re-subido-mas-videito-de-yapa-al-final.html?notification#last
Cuando ví que la fiesta seguía me tiré exhausto cobre la cucheta del camarote. Sentía que ya no tenía más fuerza. Miré mi semen esparcido por la puerta del placard y era tanto que pensé que había quedado seco por tres semanas.
El que había acabado adentro mío estaba mirando por la ventanilla y se puso a fumar.
Advertí que los otros dos empezaban a desnudarse y el otro empezó a hacer lo mismo cuando terminó el cigarrillo.
Estábamos los cuatro en silencio, se podía escuchar el rumor de la lluvia afuera. A lo lejos se sentía cada tanto alguna locomotora que tocaba la bocina.
Verme desnudo y ver desnudos a los tres, sentir el olor a sexo, me empezó a excitar un poco. Pero tenía la pija fláccida, parecía que no había forma.
Fue cuando el que me había penetrado primero me dijo “ a ver bebé, que faltan los amigos todavía…”
Entonces los otros dos que permanecían en silencio me tomaron cada uno por debajo de la espalda, a un lado y al otro y con el otro brazo lo pasaron por debajo de cada una de mis piernas y me levantaron en andas,con las piernas abiertas y de frente al tercero que empezó a mojarse el dedo con saliva y dijo: “ vamos a estimularte un poquito…” y con su dedo empezó a mojarme el ano y después me metió el dedo bien adentro de la cola. Ahí me di cuenta lo inflamado que me había quedado el ojete después de la primera cogida. Noté queme estaba acariciando la próstata suavemente con movimientos circulares,ejerciendo una leve presión hacia adentro. Empecé a sentir lo que tenía que sentir y la pija se me empezó a parar.
Uno de los que me sostenían dijo : “ cómo te gusta , eh?Ya sos toda una loquita con el culito caliente”
Yo empecé a jadear suavemente, cerré los ojos y tiré la cabeza para atrás para gozar más ese dedo que me estaba enloqueciendo. Ël me agarró la verga y me la empezó a tirar suavemente subiendo y bajando y después acariciándome los huevitos.
Ahí ya no pude más, hice un movimiento hacia atrás para bajarme y me fui desesperado derecho a la cucheta para ponerme en cuatro, más o menos así ( pero sin sombrero)
Tenía la pija re dura, a punto de explotar y los miraba por sobre mi hombro, como esperando que alguno de ellos me penetrara ya.
Mientras uno se subió a la cucheta y se arrodilló delante de mí para meterme la pija en la boca, otro hizo lo mismo por atrás, me tomó con firmeza de las caderas, volvió a mojarme un poco el ojete con saliva y me empezó a penetrar con suavidad.
Es desesperante no encontrar las palabras que describan la sensación de estar sintiendo una pija que te abre el orto y se te va metiendo en el recto hasta el fondo, pero bueno, si te penetraron alguna vez sabés muy bien qué se siente.
Yo chupaba y chupaba mientras movía la cola en remolino,como queriendo chupar con mi ano esa verga hermosa. Mi cola estaba a setenta y cinco grados centígrados, y empecé a sentir que en cualquier momento se me venía otra vez la leche a la pija. Intenté hacer fuerza para contenerla y durar más, pero me estaba costando, ya estaba por explotar. Cuando sentí la leche caliente del otro que empezaba a escupir adentro mío no pude más y eyaculé yo también.
Faltaba uno más. El que me estaba cogiendo sacó la pija de mi cola y le dio lugar al otro. Yo no podía más, así que me entregué, mi pija había quedado fláccida y yo casi sin aire. Pero había que hacer justicia.Todavía había uno que se había quedad con las ganas. Así que apoyé la cabeza sobre el colchón, y quedé con la colita abierta , parecido a esto:
para dejarlo al tercero que me penetrara cuanto quisiera.Él se puso detrás y me la metió despacio mientras jadeaba. Yo dí vuelta la cabeza hacia los otros y pude ver cómo se sonreían. Yo no pude hacerle el honorde eyacular porque había quedado seco, pero lo dejé hacer.
Había terminado de llover. Cuando sentí el semen de este último chorreandomé por las nalgas comprendí con melancolía que la fiesta había terminado.
Sólo por un tiempo.
Nos vestimos, bajamos del vagón y cada uno se fue por su lado. No nos despedimos porque sentimos que nos volveríamos a ver.
Hasta ese momento podría estimularme a mí mismo recordando aquella tarde, así por ejemplo:
6 comentarios - El Primer Tren (Continuación)
Graciaaaaaasss!!