Recuerdo de una tarde santafecina

Recordando al extinto Chat de arnet, se me vino a la cabeza esta persona de la cual se me escapa el nombre, creo que era Ruben, para el caso no importa. Vivía en un departamento de un edificio ubicado en calle Juan del Campillo o Domingo Silva, otro detalle que se me escapa pero no es relevante.
Después de charlar una rato en el Chat, Ruben (llamémosle así) me invita a su departamento con la idea de mirar unas pelis porno los dos desnudos, no estaba claro que era lo que quería en realidad, si solo tomar algo y algunas pajas o si me quería comer la verga inmediatamente. Después de aclararle que yo no iba a tocarle la chota a nadie accedí a ir imaginando que el vago era 100% pasivo.
Llegue luego de un rato, el me esperaba sentado en la vereda, un flaco pinton, de unos 23 años, linda cola que se le marcaba en la bermuda que tenia puesta. Me presente como corresponde dándole la mano y le pregunte si daba para comprar unas cervezas antes de arrancar el jueguito que planeaba. Luego de ir a comprar empezamos el viaje al placer que marcaban los escalones hasta su departamento y sus nalgas paraditas con su cuerpo al estilo twink.
Ya en su departamento, un lugar muy ordenado, abrí la cerveza y el fue a buscar unos vasos, me acerco un cenicero y corrió el primer video porno.
- no tenes que desnudarte si no queres – me dijo. Yo todavía no me sentía tan cómodo
- bueno, y vos? Te vas a sacar la ropa?- le dije. Mi uno objetivo era verle la cola
- yo si, el calor y ahora la cerveza me va a hacer perder la cabeza seguro – me dijo y dirigió su mejor mirada de puta a mi verga que ya estaba poniéndose dura.

Se saco la ropa dejando ver que no estaba equivocado con la categoría twink que me imagine, pero para mi grata sorpresa una colaless de esas infernales ya despertaba abruptamente mis ganas. Me contuve, quería conocer lo que el planeaba.
- ahh bueno, que cola mas preciosa - le dije – no se si mirar el video o mirarte a vos.
- Miremos el video, aunque si no te jode me gustaría que te saques el pantalón – Era un alivio, hacia calor y yo estaba con pantalones de vestir, hacia un rato había salido de trabajar y no había ido a casa a cambiarme, accedí quedándome solo en bóxer, mirando porno, disfrutando de una cerveza, cigarrillos y un putito con ganas a mi lado.
Los videos no duraban mucho y como al tercer video, no aguante mas la calentura y comencé a pajearme despacio, el fumaba un cigarrillo sentado a mi lado en ese sofá grande y cuando tiraba la colilla en el cenicero se aproximaba cada vez mas a mi chota.
Su actitud me calentaba, sentía deseos de meterle la chota de una vez por todas en la boca, pero de alguna manera y sutilmente el tenia el control y mi parte era esperar que el avanzara. De reojo lo miraba y no paraba de mirarme la verga, me miraba a mi, fumaba, mi verga y nuevamente a los videos. Esperaba el momento indicado, lo hizo muy bien.
El momento llego cuando rozo mi verga con la mano al tirar el cigarrillo, me miro a la cara y me dijo: queres que siga yo por vos? Y comenzó a pajearme, el tacto de sus manos aun esta latente en mi verga, su juego había funcionado.
Luego del ritual de caricias se arrodillo, jugaba con mis bolas, ocupaba ambas manos en tocarme. Yo solo podía esperar a su boca. Deliraba.
Sentí el calor de su lengua y me aferre al sofá, la imagen era de una pitita desquiciada, haciéndome notar que su cola sobresalía y pintaba un cuadro sexual entre el pete y sus nalgas, que manera de chuparla, mi cigarrillo se consumía en el cenicero, no me atrevía a hacer otra cosa que disfrutar.
- te gusta así? que rica verga, y los huevos? Me los das también? – me decía y se los metió a la boca
- huyy si, que puta mas golosa sos, como te gusta calentarme – le dije
- es que me gusta la lechita bien caliente, mi amor – me dijo, el tono de voz había cambiado
Veinte minutos aproximadamente estuvo comiéndome la verga, yo le tomaba la nuca y lo acariciaba, el parecía sentirse a gusto, por eso intentaba llegar hasta su cola con las manos pero no podía, no quería ni arruinar un solo movimiento de esa boca y esa posición. Queres que vayamos a la camita? Asentí con la cabeza, no me atrevía ni a hablar.
La pieza estaba oscura, solo la luz de la tarde muriéndose entraba en la ventana, el la cerro mientras yo me desvestía, decía que no quería que espiaran los vecinos, a mi me gustaba verlo de espaldas, su cola me pareció aun mas majestuosa.
Se puso a al lado, pero estaba vez reactivando sus caricias delirantes y yo con mis manos puestas en el culo que tanto deseaba, me parecía vivir un sueño.
- como queres que siga?- me pregunto
- seguí con el pete que es una locura- le indique, y muy obediente se lanzo hacia mi chota aun mas recargado, su cola a escasos centímetros de mi boca, el aroma a sexo me drogaba
Primero trate de ser delicado, pero en poco segundo y motivado por la chupada de verga que me estaba dando, comencé a comerle la cola de manera incontrolable, el gemía con mi pija en la boca y yo lamía ese ojete en un 69 alucinante.
- te quiero coger, no aguanto mas – le dije, era verdad
- dale papito, pero no me des tan fuerte porque hace rato no me entra una verga, empeza despacio – al decir esto pensé que si su objetivo era calentarme, entonces lo había logrado, como toda la tarde
Me puse el forro, mirando fijamente a su cola en 4, no aguante y volví a comérsela al tiempo que le sacaba la colaless, el gemía, como me calentaba su gemido. Y empecé a cogerlo, sus gemidos me hacían empujar aun más.
- que lindo… cogeme, cogeme dale – decía
- te gusta? Te la voy a llenar de leche.
- Siii, como me gusta coger, ponemela toda, asiiii, ahhhh, ahhhh.
Luego de un rato, comenzamos intercambiando posiciones, verle la cara de placer con sus pies en mi hombro me llenaba de calentura, cogerlo de costado le daban el ángulo perfecto para agarrarme las bolas y cuando se puso encima mío, con sus manos en mi pecho, con su culo comiéndome la totalidad de la verga, sentí que iba a explotar literalmente.
- ahí viene tu lechita, donde la queres?
- Acábame en el orto, llénamelo de leche
Lo hice. Se pasaba el dedo por el largo de la raya, tratando de no dejar un lugar sin embadurnar, y metiéndose el dedo en el hoyo para no perderse la lechita. Todo esto mirándome a la cara.
Salí del departamento, lo salude y me dijo que la había pasado re bien, yo le conteste que también que cualquier cosa nos encontrábamos en el Chat y veíamos si pintaba algo. Eso jamás volvió a suceder.

Pensando, se me ocurrió que tal vez sea poringuero y que tal vez leas esto, si es así dejame decirte que todavía me late la verga cuando me acuerdo de vos.
Ya sabes donde encontrarme.