Nena de mis maduritos(relato)

Hace varios meses que vengo siendo la nenita de Jorge, un macho cordobés que vive por Palermo, 64 años, musculoso, gran cojedor, todo un adonis. Los encuentros que tenemos en su casa son de mucho morbo y sexo (Es bastante turro el señor y yo, desde luego, lo complazco). Estamos muy satisfechos. Una noche, mientras el estaba en su sofa viendo algun partido y yo de rodillas haciendole un regio pete, Jorge me suelta sin vueltas: "¿Te va otra pija en la boca?". Sin dejar de chuparsela lo miré y noté que hablaba en serio. Mi corazón latió a full pensando en semejante experiencia a lo que le dije: "Obvio", y seguí comiendo su pija con toda la furia. Luego empezó a contarme. Jorge tenía un amigo de muchos años, casado, hetero, nada que ver con el ambiente. Hacía poco tiempo le había contado de mi, y la verdad que le había gustado la idea. Quería probar por primera vez como sería con un pas. Luego de dar mi obvia aprobación, Jorge le comió aún más la cabeza a su amigo mandandole fotos mias y de las cosas que haciamos. El sábado de esa semana quedamos los 3 en el departamento de Jorge.
Ese día llegué antes y con Jorge esperamos por su amigo, el señor Norberto. Estaba nervioso, ansioso, con muchísimas ganas de concretar lo que iba a ser mi primer trío. A la hora señalada llegó. Desde el primer momento tuve una gran impresión. Un sesenton canoso, bien arreglado y bien de cuerpo, de esos dandys de barrio norte, con leve bronceado, muy pinton la verdad, me gusto de entrada, un poco panzón pero armado. Nos dimos un beso y note enseguida una sonrisa picara, como que le había gustado. Yo que soy bastante atrevido tantee su bulto quedando con una buena impresión por lo que los 3 nos reimos enseguida.
Al rato pasamos al living y Jorge inició la primera ronda de whiskies. Comenzamos a relajarnos y sentados en el sofá empezamos a hablar de trivialidades. Hasta que tomé la inicitativa. Era obvio que estabamos para "eso". Sentado entre medio de los 2 comencé a tantear sus bultos, tomando especial cuidado en el de Norberto. El señor comenzó a emitir gemidos cerrados de placer, y con los ojos cerrados comenzaba a disfrutar. No lo noté incomodo para nada, todo lo contrario, le gustaba. De inmediato me arrodillé y como todo un nene aplicado lo miré a Jorge y pregunté: ¿Puedo? A lo que Jorge contestó: "Atienda bien a mi amigo". Y así fue. Saqué el cinto y le baje rápido el pantalón. La pija ya estaba dura. La misma era no muy larga pero increiblemente gruesa y con un hongo por cabeza descomunal. Me la devoré con hambre y Norberto pegó un grito de placer. Allí empecé a hacerle un pete frenético. Jorge deambulaba por la casa mientras se iba desnudando y se reía a más no poder.
Jorge le decía a Norberto: "Y te gusta el puto que te presenté?", eso más me enloquecía.
Yo seguí succionando la de Norber tomando la precaución de no hacerlo acabar. Los tipos grandes tienen la costumbre de acabar en cualquier momento y de ninguna manera quería eso. Por lo tanto, me paré y sin aviso me escapé hasta la habitación de Jorge.
Me saqué toda la ropa y los esperé arrodillados. Enseguida me siguieron, vinieron con ambas pijas ya sueltas, paradas, riéndose y relajados. Sin mediar palabras se pusieron cada uno al lado mío y dejaron sus pijas a la altura de la boca. Así fue como debute con un oral a 2 manos. ¡¡¡¡Qué placer!!! Ambas pijas re duras en mi boca. Hasta cumplí la fantasía de las pornos de poner las 2 cabezas en mi boca, aunque claro, no me entraban! Tenía la sensación de estar borracho, mareado de tanto placer por la experiencia, estas cosas no suceden todos los días. Ellos deliraban de placer, en especial Norberto. Seguí así unos 10 minutos aprox. Una pija en la boca y con la otra pajeaba. No soltaba ninguna. Estuve así hasta que Jorge se calzó un forro y me puso con la cola para arriba en la punta de la cama. Jorge le dijo a Norberto: "Ahora yo le ablando el ojete así vos le podés dar sin dramas". Jorge me la puso sin problemas. Ya estaba acostumbrado a su pija, de unos 17cm y también gruesa. Me embistió salvajemente como solo él sabe hacerlo. Norberto ya estaba completamente desnudo esperando su turno. El mismo le decía a Jorge: "Como se come la pija tu putito". Yo miraba picarón mientras era culeado. Luego Jorge la sacó sin acabar dándole el turno a Norber. Sin moverme esperaba su hongo. Se calzó el forro y me puerteó. Ya agrandado, el ano no tuvo problemas en comerse su pija. Así fue como Norber se iniciaba con un putito Pas. Las embestidas eran fuertes, de gran pasión. Yo estaba en otra galaxia con mi segunda pija de la noche. Inevitablemente no aguantó y tras 10 min de darme fuerte acabó, abalanzándose sobre mi espalda. Luego de sacarmela quedo tendido muerto en la cama. 
La verdad es que el culo me dolía mucho, pero Jorge quería más (¡¡¡Es insaciable el guacho!!!)
Por lo que se calzó otro forrito y me empezó a dar. Esta vez patitas al hombro. Esa pose me gusta pero me hace mierda, la siente en la punta del estomago. Es como si tuviera un palo de escoba. Pero Jorge me daba como si fuera el último día. Quería demostrarle a Norberto lo bien que me culeaba. Yo ya no daba más. Era un maniquí a esa altura. Luego Jorge me puso en cuatro, viendo como Norberto nos miraba. Lo que siguió fue puro placer. Boca abajo Jorge me culeaba y de costado comenzaba a besar la pija de mi otro vete. Luego lo mismo, pero en 4, Norberto me la daba en la boca mientras yo en cuatro tenía a Jorge atrás. Pensaba para mi: "Estos veteranos se la re bancan, ¿Cuándo se cansan?. Luego inviertieron los roles y siguieron con el toma y daca. Norberto acabó otra vez y Jorge siguió. Estaba enviagrado por lo que fue 1 hora más de pura culeada. Norberto ya no pudo arrancar para el tercero, pero habia hecho y mucho. Jorge, que es un toroo, siguio. En un momento vi la hora y eran las 5!!!! Me habían dado como durante 4 horas y media. Estaba dolido porque nunca me habían cojido así, pero era la sensación de dolor con placer. ¡Una sensación única! Los tres terminamos muertos en el King Size después de una noche de puro placer y goce como nunca antes había tenido. Cuando estaban medio dormidos, aproveché para ir al baño y darme una sesión larga de bidet. Jorge vino atrás mio y aunque no lo crean, la tenia parada el hijo de puta! Mientras estaba en el bidet me la hizo comer y acabar, y como siempre hago, me tomé hasta la ultima gotita.
A la mañana siguiente nos despedimos con el grato momento y con el hecho, aun más grato, de que habíamos iniciado un trio espectacular. Desde ya no hace falta decir que seguimos con las juntadas, ambos machos haciendo lo que querían conmigo, incluso, incorporando a más gente. Pero esas experiencias estarán en otros capítulos.
Espero te haya gustado mi relato y quedo a la espera de tu comentario. ¡Saludos! (Los nombres son ficticios para no comprometer a nadie)