Sabía que hoy lunes llegaba un nuevo compañero de trabajo, según había escuchado era muy guapo, quería impresionarlo, aunque no estaba segura de que le gustaran las chicas travestis como yo, pero quise probar, me vestí algo provocativa, un vestido negro entallado, algo corto, pantimedias negras y tacones negros altos de clarol, un maquillaje natural pero con labial muy rojo, eso me encantaba, a muchos hombres les encanta ese color.
El teléfono sonó y atendí la llamada
Mientras estaba hablando por teléfono, alguien de pronto por detrás de mí, me tomo por los hombros y me susurro algo que me calentó “que linda te vez” me quede sin habla, esa voz tan masculina me llego muy profundamente, me enchino la piel.
Colgué el teléfono, lo mire y le agradecí por el cumplido, nos miramos fijamente un momento, y nos acercamos y me dio un beso muy cachondo, fue a cerrar la puerta de la oficina y regreso a mi lado “se que eres travesti, me encantan las chicas como tú, además te ves hermosa”. Se puso de rodillas frente a mí, que me encontraba sentada, me subió un poco el vestido (mis pantimedias eran de esas que tienen la parte genital descubierta, me encantaban, y me sentí de suerte por haberlos usado en esa ocasión) y me abrió las piernas y comenzó a acariciarme la colita con un dedo, metiéndolo poco a poco y moviéndolo, que rico era eso, después saco su dedo de mí, me dio un pequeño besito en mi colita y me puso de pie, me abrazo por la espalda y me beso el cuello, yo solo gemía de placer, sus manos me recorrían todo el cuerpo desde las piernas hasta los brazos, después me incline con la colita viendo hacia él, me abrió las nalguitas, sentía su suave aliento acercándose y su tibia lengua tocando la entrada de mi colita, me dio un rico y largo beso negro que me llevo al cielo.
Ahora era mi turno, mi turno para abrir ese pantalón y bajar su ropa interior y descubrir ese miembro que era para mí desconocido aun, me agache ante él, su miembro duro y firme se levantaba ante mí, lo tome y lo acaricie, le di un pequeño beso en la puntita, eso hizo que se pusiera aun más firme, pase mi lengua por todo su pene hasta llegas a sus bolas que mi lengua tenía la intención de jugar con ellas, y así lo hice; miraba hacia arriba y veía sus gestos de placer. Tenía que tener ese pene dentro de mi boca, y lo succione, le di una rica mamada.
“Arriba hermosa, quiero metértelo” lo obedecí, me subí a la silla del escritorio y pare la colita, se coloco el condón y me la metió sin avisar, me dolió horrible y por un momento quería que lo sacara de mi, grite, pero no me importo y al poco tiempo tampoco a mi me importaba, me encontraba moviéndome a su ritmo, le pedía mas y así lo hizo, me la metió hasta que termino dentro de mi, notaba los espasmos de su pene dentro de mí y lo apreté con mi culito para sacarle toda la lechita que le pudo haber quedado.
La hora de la comida en la oficina había terminado, los compañeros entraban nos vestimos rápido y me dio un beso, “espero volver a hacer el amor” me dijo con un susurro “claro que si amor” le respondí…
El teléfono sonó y atendí la llamada
Mientras estaba hablando por teléfono, alguien de pronto por detrás de mí, me tomo por los hombros y me susurro algo que me calentó “que linda te vez” me quede sin habla, esa voz tan masculina me llego muy profundamente, me enchino la piel.
Colgué el teléfono, lo mire y le agradecí por el cumplido, nos miramos fijamente un momento, y nos acercamos y me dio un beso muy cachondo, fue a cerrar la puerta de la oficina y regreso a mi lado “se que eres travesti, me encantan las chicas como tú, además te ves hermosa”. Se puso de rodillas frente a mí, que me encontraba sentada, me subió un poco el vestido (mis pantimedias eran de esas que tienen la parte genital descubierta, me encantaban, y me sentí de suerte por haberlos usado en esa ocasión) y me abrió las piernas y comenzó a acariciarme la colita con un dedo, metiéndolo poco a poco y moviéndolo, que rico era eso, después saco su dedo de mí, me dio un pequeño besito en mi colita y me puso de pie, me abrazo por la espalda y me beso el cuello, yo solo gemía de placer, sus manos me recorrían todo el cuerpo desde las piernas hasta los brazos, después me incline con la colita viendo hacia él, me abrió las nalguitas, sentía su suave aliento acercándose y su tibia lengua tocando la entrada de mi colita, me dio un rico y largo beso negro que me llevo al cielo.
Ahora era mi turno, mi turno para abrir ese pantalón y bajar su ropa interior y descubrir ese miembro que era para mí desconocido aun, me agache ante él, su miembro duro y firme se levantaba ante mí, lo tome y lo acaricie, le di un pequeño beso en la puntita, eso hizo que se pusiera aun más firme, pase mi lengua por todo su pene hasta llegas a sus bolas que mi lengua tenía la intención de jugar con ellas, y así lo hice; miraba hacia arriba y veía sus gestos de placer. Tenía que tener ese pene dentro de mi boca, y lo succione, le di una rica mamada.
“Arriba hermosa, quiero metértelo” lo obedecí, me subí a la silla del escritorio y pare la colita, se coloco el condón y me la metió sin avisar, me dolió horrible y por un momento quería que lo sacara de mi, grite, pero no me importo y al poco tiempo tampoco a mi me importaba, me encontraba moviéndome a su ritmo, le pedía mas y así lo hizo, me la metió hasta que termino dentro de mi, notaba los espasmos de su pene dentro de mí y lo apreté con mi culito para sacarle toda la lechita que le pudo haber quedado.
La hora de la comida en la oficina había terminado, los compañeros entraban nos vestimos rápido y me dio un beso, “espero volver a hacer el amor” me dijo con un susurro “claro que si amor” le respondí…
4 comentarios - Nuevo compañero de trabajo (relato travesti)