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El abogado culpable de petero

Luciano es un tipo serio, de los que el trabajo es sumamente importante. Siempre lo veía acarreando expedientes , de saco y corbata, dibujando un aire de responsabilidad y excelencia en su trabajo. Sabia que era abogado pero de ahí nada mas, yo trabajaba de seguridad privada en el ministerio donde el cumplía sus funciones así que siempre cruzábamos algunas charlas y una que otra broma.
Un buen día cualquiera lo veo entrar para su oficina con un pibe que yo conocía, que conocía de manera furtiva, un buen putito discreto que chupaba verga como solo los tocados por el talento lo hacen y sin mencionar que traía una buena cola de las mas golosas. Mateo, el pibe en cuestión tenia unos 22 años y al llegar al puesto de guardia me saluda muy discretamente y junto con Luciano parten para su oficina. Al irse algunas horas después Luciano me dice: “ tengo que hablar con vos, te toca este turno mañana?”, a lo que respondo afirmativamente. Pase todo el día pensando de lo que podía llegar a hablarme, así que imaginaba que haría alusión a la terrible garchada que le había pegado a Mateo algunos meses antes o algo en relación a eso.
Llego el otro día y no vi entrar a Luciano, después de entrar la mayoría de empleados del ministerio siento el teléfono de la guardia que sonaba: era Luciano, había llegado un rato antes que yo y ya estaba en su oficina, me pregunta si podía ir hasta allá a lo que le dije que si y encare.
- Mira te llamo porque te tengo confianza y quería hacerte una pregunta- me dijo – vos contéstamela si queres pero nesecito hacértela.
- Dale decime, no hay drama, si puedo ayudarte con gusto te ayudo – le conteste, esperando la pregunta
- El muchacho de ayer, vos lo conoces verdad? A Mateo. – me pregunto. Me miraba fijamente esperando mi respuesta
- Si, lo conozco, tenemos una amiga en común – le obvie la verdad, que lo había conocido por el Chat de arnet y que me había tirado la goma un par de veces.
- Pero entre nosotros, no es ningún misterio que es homosexual, vos no tuviste nada con el?- indago directamente
- No – le conteste riéndome un poco – si lo decís por la forma en que me saludo, soy así con todo el mundo, preguntale a cualquiera aca, por que lo decís?
- Es que tengo un caso de el y como vi que lo conocías pensé que me podías decir algunas cosas que el no me dice – decía esto con un poco de ansiedad note, pero no le di importancia. – viste que hay que tener un cuidado bárbaro. Bueno disculpa que te haya molestado. Gracias
- De nada Luciano, cualquier cosa avísame.
Me fui conforme, igual de todas maneras jamás se me ocurriría decir algo, siempre pedí discreción y si yo no era discreto seria una burla, así que deje el tema ahí y todo volvió a la normalidad.
Hasta que cambie de turno
La noche en el ministerio era muy tranquila , no iba nadie, así que siempre aprovechaba para arreglar algún que otro encuentro con alguna de mis amigas o algún loco sediento de leche calentita. Eran como las 00.30, mi supervisor ya había pasado y yo me disponía a hacer alguna llamada telefónica cuando escucho el timbre. Supuse que mi supervisor había vuelto pero al abrir la puerta veo a Luciano, vestido como normalmente lo hacia, con su pulcritud característica.
- Hola, buenas noches, que sorpresa Luciano
- Como andas, me olvide de terminar unas cosas que son para mañana, hay algún drama en que termine ahora? Es media hora nomás.
- Para nada, a mi no me jode en absoluto, si te puedo ayudar en algo avisame – le dije
- Gracias, media hora nomás no mucho.
Subió hasta su oficina y estuvo unos 15 minutos hasta que sonó mi teléfono, obviamente era Luciano preguntándome si podía ayudarle a mover un armario así que fui.
- No es un armario grande, pero esta lleno de expedientes y necesito encontrar uno así termino mi trabajo pero para eso tengo que hacer lugar, Dana me hizo un lio de todo esto.- Dana era quien con el trabajaba, no es importante, al menos en este relato.
Movimos el dichoso armario, en un momento dado Luciano paso por delante mío rozándome con su cola mi pija. No le di importancia, me pareció casual
- Sabes en que me podes ayudar si queres, en buscar un expediente que tiene que estar por aca - y señalo un pequeño fichero – tiene que decir el expediente “ concepto: reconocimiento de subrogancia … “
- Dale – le dije y arrime un pequeño banquito que se encontraba ahí para estar mas cómodo.
No había pasado ni tres minutos de búsqueda cuando veo como se ubicaba delante mío dejándome su cola a menos de 50 cm. de la cara. Se me encendieron todas las luces de alarma y mas cuando veo sacar colita al mejor estilo querendón. Ya me cuestionaba todo después de eso y hasta tenia la certeza de que dicho expediente ni existía.
- Fijate vos aca arriba que sos mas alto- me dijo – yo voy a buscar aca.
Era la posición ideal, yo me encontraba buscando una carpetita que no existía y el a la altura de mi chota a escasos centímetro también buscando. Ya me había calentado tanto preámbulo así que una vez que vi que o dejaba de mirármela avance un paso dándole un chotazo en la cara.
- Perdón, no te vi – le dije
Pero antes de que terminara esa pequeña frase ya me estaba mordiendo el pantalón como si se hubiese estado aguantando desde hace mucho. Con mi pantalón entre los dientes me dijo:
- yo se que te lo coges a Mateo y que te gusta que te coman la poronga entera- me dijo son ningún miramiento
Me sorprendió un poco, pero me calentó muchísimo, casi instantáneamente estaba al palo. Me bajo el cierre del pantalón, me desprendió y mi pija salto como en un golpe hacia su boca. Me agarre del armario como pude atrapado por esa boca furiosa que iba en contraste con todo lo que pensaba de ese tipo. Me lamía, jugaba con la cabeza en gemidos cautivantes, parecía ahogarse, me agarro de la cintura y se metía todo en la boca, nunca se olvido de los huevos que al chuparlos jugaba pegándose en la cara con mi falo. Un desesperado por el pete. Seguía chupando como si fuera su ultima vez
- Te calienta esto macho no? – decía cuando podía hablar – que rica chota que tenes men. Sacudime la jeta con tu chota.
A esta altura se me había borrado la sorpresa y la incredulidad, así que lo tome de la nunca y comencé a metérsela cada vez mas adentro, gritaba, me miraba, veía que con su mirada me pedía mas, lagrimeaba.
- Que bueno que resultaste para los petes Luciano, que lengua juguetona – le dije y
pareció encenderlo aun mas
- Esto no es nada – me dijo, y enredo su corbata en mi pija, había quedado una punta por donde el la agarraba y así enrollada se la llevaba toda a la boca
- Como te gusta jugar, tu cola también es juguetona? – no se me ocurrían palabras, esto lo dije tan tímidamente como quien no quiere arruinar el momento
Se paro delante mío, y comenzó a pajearme de una manera placentera en extremo, como si tuviera los grandes manuales de la paja tantrica, era una locura.
- decime que te parece esto – me dijo y se dio vuelta, mientras se sacaba su pantalón. Casi me desmayo
Su cola aparecía deslumbrante delante mío, casi perfecta, un lunar en su nalga derecha, una forma excepcional que muchas mujeres envidiarían. Adore esa cola, quise llenarla de leche en ese momento. Me agache, y comencé a pasar mi lengua casi como pinceladas en semejante cola, sentía como temblaba, como gozaba
- Meteme la lengua por favor te pido – dijo esto casi en un grito, yo accedí
La forma en que se agarraba de los muebles me hacían ver que tenia prohibido dejar de lamerle semejante bombón de nalgas, se abría la cola exigiéndome mas lengua, yo sentía que podía gastarla en ese agujero.
Se saco los pantalones y me pidió ir hasta su escritorio, corrió algunas cosas y se puso boca arriba, el estaba excitadísimo, por lo que comenzó a pajearse.
- Haceme patitas al hombro, quiero que me entre toda, quiero sentirte llenarme el culo de tu chota – su cara era otra, me lo suplicaba.
- Tremendos chotazos te voy a dar – le dije y el solo se agarro de los bordes del escritorio
Entro con una suavidad envidiable, y el gemía de placer, en cada estocada gritaba “ rómpeme, rompeme, rompeme, ssiiii rompeme “. Me dio la punta de su corbata que aun tenia puesta y se dio vuelta sin sacarse mi pija de la cola, “cogeme así”, “tironeame y cogeme” “ aaahhhh, que duro ufff” “ llename de leche, ayy, bien guaso “.
Yo sucumbía ante la fogosidad de su cola
- Voy a llenarte de leche esta cola espectacular – le dije y solté un chorro monumental que casi no me deja sacarme el forro y pinte de blanco toda su cola.
El se limpio la cola con su corbata y, mientras se agachaba para chuparme la pija un rato mas , también saboreaba la corbata enbardunada de leche.

Me vestí en silencio, el también
- Voy abajo – le dije – esto muere aca – le recordé
- Quédate tranquilo, confié en vos cuando negaste haberle hecho algo a Mateo, ahí me di cuenta que eras discreto, yo ya te venia junando.
Lo vi irse, eran casi las 02.00, tenia un expediente en la mano. “voy a terminar de trabajar en casa, este expediente tiene semen en la carátula “ me dijo.

11 comentarios - El abogado culpable de petero

hoabril
terrible conta el de mateo +10
KaluraCD
El abogado culpable de petero


Excelente!!!

Gracias por compartir 👍
Yo comenté tu post, la mejor manera de agradecer es comentando alguno de los míos...
josegroso
muy caliente...exelente
van p
ramiro-1
Genial! Que calentura lpm!
Luca000
MUY BUENAS TUS HISTORIAS!!!