En el sur se acampa y se coge II (Relato)

La segunda parte del relato que comenzó acá: http://www.poringa.net/posts/gay/2837403/En-el-sur-se-acampa-y-se-coge-Relato.html



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Esa noche, salió fogón de nuevo. Charlando ya medio escabiamos, Marti me dijo que se iba a la carpa de nuevo con el Tripa, que le había caido piola y que encima, me le hacía honor al apodo y que tenía un pedazo muy considerable. Eso me calentó. Primero pensar en el bombom de mi amiga gritando como loca y segundo el pedazote de ese pibe.

De los futbolistas quedaba él y Matias, que estaba medio escabio y bardeaba.

En un corte, salgo de la ronda hacia el bosque a mear y me sigue.

-Tincho, aguantame- Me dice

Lo espere y fuimos juntos. Íbamos charlando de boludeces. Meamos tranqui y cuando volvíamos, quise pasar a buscar un buzo por la carpa que estaba medio fresco y Matias me pide si no le presto uno.

-Si, obvio. Pasamos por la carpa y te lo doy.

Camino a mi carpa, pasamos por la de Marti. Cuando estabamos cerca se escuchaban unos gemidos de histérica, increíbles. Y ya más cerca, escuchamos un:

-Tragatela toda- que le decía el Tripa a Marti. Y el inconfundible sonido de la pija dentro de una boca golosa. Y para más, escuchamos que Martina le dice:

-Acabame en las tetas- Yo ahí la estaba re calienta. Supongo que Matías también, pero ninguno dijo nada.

Llegamos a mi carpa, yo entro y el se sienta adentro, con las piernas afuera.
Busco un buzo para mi y cuando le voy a dar uno a él me dice:

-Boludo tenés el short amarillo del Barsa (que efectivamente estaba arriba de mi mochila)

-Si-Le digo- Tengo dos, porque me los trajo mi viejo cuando anduvo por Europa. El labura para Nike, asique le salen nada. Te regalo uno si querés.

-Posta? - Me dice.

-Si, obvio, Tomá.

Automáticamente se mete en mi carpa y me pregunta:

-Te jode si me lo pongo ya.

-Obvio que no. Le dije. Enseguida quedo en slip! SI, slip! Pero bien ajustadito, blanco, con un elastico grueso. Tenía mucho bulto y un or-ta-zo. Creo que no hice mucho esfuerzo en que no se note. Lo miré sin disimulo. Y se dio cuenta. Se terminó de poner el short y escuchamos que Martina y Tripa salían de su carpa y se iba como para la playa.

-Que garchada le estaba pegando- Le digo. Yo ya estaba jugado. Quería cojer.

-Si, tremendo. Encima no sabés lo que es la verga de Juani (el tripa). Lo he visto bañandose en bolas, cuando la tiene dormida, y es un cañon- Fue la descripcion de Maty.

Cuando lo contaba, se notaba que se moria de ganas de comerle la verga al amigo. Y me la jugué:

-Muy grande? Mmmm. Suena bien- Largue. Cuando vi que no se sorprendio del comentario, avance.

Le puse la mano en la rodilla, y fui subiendo despacio. El se acomodó para atrás y abrió las piernas. Fui subiendo despacio, pase la mano debajo del short y empecé a manosearle el bulto. Se notaba todo muy suave, bien depiladoo, una hermosura. Cuando sentí como se hincho el pijón de ese pibito, me calenté muchísimo! Cerré la carpa y avance a full, le saque la remera y le empecé a chupar el cuerpo celestial que tenía.

Bajé, le saque el short y jugue un buen rato con su bulto. Y en un momento me dice, entre gemidos:

-Chupamela- Obedecí. Le baje el slip y tenía una pija de aquellas. Grande y gorda. Debía medir 19x6. Era la más grande que había tocado alguna vez. La cabeza bien roja, recta y un tronco durísimo. Todo depilado, era una belleza para chupar. Le comía el tronco, la cabeza, la hacía llegar a la garganta. Le chupé la entrepiera y se dio vuelta, como para comerle la cola. Estaba muy dilatado, se notaba caliente. Le chupe el culito parado que tenía, le colé un dedo, dos.

Me dio vuelta, se abalanzó sobre mi, y me comio la verga de varios bocados. Estaba desesperado, chupaba desenfrenado. Me pidió que lo coja.

Se acostó, boca arriba. Le veía el tronco. Me lo comí un par de veces más. Me repertía:

Cojeme, cojeme.

Pero no aguante. Nunca me había pasado, quería esa pija. Agarré un forro, se lo puse.

-Qué haces?-Me dice.

-Mi carpa, yo decido- Le dije.

Fue la primera vez que sentí deseos de ser pasivo. Si bien ya lo había sido, fue la primera vez que quería una pija adentro.

Estaba muuuy dilatado. Me puse gel en la cola, y me fui metiendo su pija mientras el seguía acostado. Era grande, muy. Pero yo estaba más dilatado que nunca y no tardo en entrar.

Lo galopé un buen rato, gemía muy suave. Era muy calenton, una fiera.

Me dio vuelta, me puso en cuatro, me bombeó fuerte, bien fuerte. Tenía aguante. Me puso boca rriba, me levanto las piernas, me hizo de todo.

Y en un momento, cuando empezó a gemir más fuerte. Sacó la pija, se saco el forro, agarro la cabeza, y me baño en leche. Caliente, espesa y muy abundante. Pego unos geminos mortales. Yo acabe al toque y creia que me iba a desmayar. Se fue volando a tragarse mi leche. La limpió toda.

Cuando termino, me miró y me dijo:

-Mañana, en mi carpa, mando yo.