Bien, haré qur.mi.imaginación trabaje.um poco. Se me descompuso el cargador de la laptop así que perdonen que no suba las fotos prometidas que ya las tengo y prometo subirlas apenas pueda. Pero hasta entonces estaré escribiendo un poco a ver si les gusta.
Un fin de semana de este mes había estado saliendo mucho a un boliche gay de por acá. Realmente estaba aburrido ya que nadie se me acercaba ni siquiera a hablarme. Cuando ya estaba decidido a no volver a salir ya que rebajaba mi autoestima (después de varias copas había decidido salir y literalmente grité que todos eran unos imbéciles). El tema es que estaba tan ebrio que aún afuera de ese boliche atraía la atención de varios.
Lo único quee acuerdo es quee caí en las plantas del jardín del bar ese y al día siguientee desperté en la casa de una persona desconocida. Lo.primero.que hice fue agarrar mi celular y ver las llamadas pérdidas que tenía de mi viejo. Y lo llamé para que no se calentara tanto. Escuche unos pasos y me asuste (no sabía ni en la casa de quien estaba). Pero vi a una mina infernal, totalmente era casi una top model. Me dijo quee había llevado a su casa cuando me había desmayado la noche anterior en el boliche. Hablamos un rato de varias cosas y al final le pregunté que onda ella... y me dijo que era hetero pero que había ido a buscar alguien para su hermano. Hablamos un poco de él y me dijo que lo iba a despertar (yo no había salido de la habitación).
Al rato vino un tipo bien sensual, de unos 30 años... tenía el cuerpo trabajado pues era entrenador personal, unos hermosos ojos castaños y el pelo corto y negro. Nos quedamos hablando un rato, conociéndonos. Su hermana se tuvo que ir a trabajar al mediodía y nos quedamod sólos... los dos nos teníamos ganas y él, al parecer, no conocía la sutileza.
-Che, ¿me dejas que te la ponga?.- me dijo apenas su hermana se fue. Yo me puse súper nervioso y pude asentir torpemente pero me quedé duro. El chico se me acercó y se bajo el cierre llevandome la cabeza a su verga que todavía ni estaba parada. Empecé a lamerla y masajearla un poco, al rato se puso dura y estaba algo mojada.
-Vamos, date vuelta, culón.- me ordenó, yo obedecí como la puta que soy y sentí como me bajo el pantalón y la tanga que tenía puesta de un sólo tirón, o sea ni miró lo que me había puesto para excitar. Me escupió un poco el agujero y me dilató el ano metiendome primero un dedo de forma lenta pero torpe y después dos que los movía en forma de tijera dentro de mi cola.
Después de asegurarse que estaba bien abierto empezó apoyamdo su pija en mi raja y moverla simulando que me penetraba sin hacerlo. Y cuando yo ya gemía pidiéndole que me la metiera me nalgeo algo fuerte para mi gusto.
-Callate zorra.- me dijo poniendo su glande dentro dei ano. Hace mucho no sentía como alguien se metía dentro mío. Terminó de ponerme la pija entera, tan entera que escuché como sus bolas tocaron mi cola. Empezó a embestirme ya de forma bestial, no podía creer que estaba siendo penetrado en la casa de un extraño ¡En la sala del extraño! No saben como lo putié cuando me agarró del pelo para meterme ese enorme pito más profundo y fuerte (medía como 25 cm y ya saben que se siente más grande). Cuando empezo a decirme más cosas ya casi sin sentido lo pare y le dije que me llenara la cara de leche.
-Ah sos súper perra vos. Vas a tragar mi leche.- asenti y sentí como me agarró de nuevo el.pelo su pene entro en mi boca y no tardo ni dos minutos que me llenó la boca de chorros de semen. Me tiró al piso y me beso los labios y aproveche para escupir su semen en su cara, no podía creer el sexo duro que habían tenido recién.
Desde ese momento empezamos a salir y no había fin de semana en la que no tuviéramos sexo más rudo que ese.
Un fin de semana de este mes había estado saliendo mucho a un boliche gay de por acá. Realmente estaba aburrido ya que nadie se me acercaba ni siquiera a hablarme. Cuando ya estaba decidido a no volver a salir ya que rebajaba mi autoestima (después de varias copas había decidido salir y literalmente grité que todos eran unos imbéciles). El tema es que estaba tan ebrio que aún afuera de ese boliche atraía la atención de varios.
Lo único quee acuerdo es quee caí en las plantas del jardín del bar ese y al día siguientee desperté en la casa de una persona desconocida. Lo.primero.que hice fue agarrar mi celular y ver las llamadas pérdidas que tenía de mi viejo. Y lo llamé para que no se calentara tanto. Escuche unos pasos y me asuste (no sabía ni en la casa de quien estaba). Pero vi a una mina infernal, totalmente era casi una top model. Me dijo quee había llevado a su casa cuando me había desmayado la noche anterior en el boliche. Hablamos un rato de varias cosas y al final le pregunté que onda ella... y me dijo que era hetero pero que había ido a buscar alguien para su hermano. Hablamos un poco de él y me dijo que lo iba a despertar (yo no había salido de la habitación).
Al rato vino un tipo bien sensual, de unos 30 años... tenía el cuerpo trabajado pues era entrenador personal, unos hermosos ojos castaños y el pelo corto y negro. Nos quedamos hablando un rato, conociéndonos. Su hermana se tuvo que ir a trabajar al mediodía y nos quedamod sólos... los dos nos teníamos ganas y él, al parecer, no conocía la sutileza.
-Che, ¿me dejas que te la ponga?.- me dijo apenas su hermana se fue. Yo me puse súper nervioso y pude asentir torpemente pero me quedé duro. El chico se me acercó y se bajo el cierre llevandome la cabeza a su verga que todavía ni estaba parada. Empecé a lamerla y masajearla un poco, al rato se puso dura y estaba algo mojada.
-Vamos, date vuelta, culón.- me ordenó, yo obedecí como la puta que soy y sentí como me bajo el pantalón y la tanga que tenía puesta de un sólo tirón, o sea ni miró lo que me había puesto para excitar. Me escupió un poco el agujero y me dilató el ano metiendome primero un dedo de forma lenta pero torpe y después dos que los movía en forma de tijera dentro de mi cola.
Después de asegurarse que estaba bien abierto empezó apoyamdo su pija en mi raja y moverla simulando que me penetraba sin hacerlo. Y cuando yo ya gemía pidiéndole que me la metiera me nalgeo algo fuerte para mi gusto.
-Callate zorra.- me dijo poniendo su glande dentro dei ano. Hace mucho no sentía como alguien se metía dentro mío. Terminó de ponerme la pija entera, tan entera que escuché como sus bolas tocaron mi cola. Empezó a embestirme ya de forma bestial, no podía creer que estaba siendo penetrado en la casa de un extraño ¡En la sala del extraño! No saben como lo putié cuando me agarró del pelo para meterme ese enorme pito más profundo y fuerte (medía como 25 cm y ya saben que se siente más grande). Cuando empezo a decirme más cosas ya casi sin sentido lo pare y le dije que me llenara la cara de leche.
-Ah sos súper perra vos. Vas a tragar mi leche.- asenti y sentí como me agarró de nuevo el.pelo su pene entro en mi boca y no tardo ni dos minutos que me llenó la boca de chorros de semen. Me tiró al piso y me beso los labios y aproveche para escupir su semen en su cara, no podía creer el sexo duro que habían tenido recién.
Desde ese momento empezamos a salir y no había fin de semana en la que no tuviéramos sexo más rudo que ese.
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